Dedicado a: stayskzlm

Hace tiempo tuve un sueño, en este sueño yo era feliz, con amigos increíbles, hyung's amables y un novio precioso, adoraba a ese chico con el alma, bueno aún lo quiero tanto, con la misma o incluso más intensidad que hace meses, ese hermoso chico un año menor que yo, al que podía mirar todo el día sin aburrirme, con el que me llenaba la boca de orgullo al llamarle mi novio... ya no está, se fue de mí lado y creo que ha sido por mi culpa, el problema es que no sé cuál fue mi error.

Cuando lo conocí él no era libre, por obra del destino no tan justo, Kim Seungmin era el novio de uno de mis compañeros de clase y un amigo maravilloso, no podía creer que estando en la misma escuela yo nunca haya visto su lindo rostro entre cientos más, es imposible no mirarlo.

El camino que tuve que recorrer para ganarme su corazón fue un poco doloroso, tuve que luchar contra la culpa por un tiempo hasta que finalmente decidí confesar mis sentimientos, primero se lo hice saber a mi amigo, Hwang Hyunjin es un tipo genial, guapo, pertenece al equipo de baile de la escuela y muchos lo desean, yo no podría competir contra él, pero aún con todas mis inseguridades le confesé a Hyunjin que estaba enamorado de su novio.

La sorpresa fue mía al saber que Hyunjin ya lo había notado, me avergoncé mucho y pedí disculpas, Hyunjin no se molestó conmigo, pero me pidió que entendiera que mi lindo ángel ya era su novio, me pidió que no interviniera en su relación y yo respeté sus peticiones. Me limité a mirar a Kim Seungmin desde lejos, convivir con él cuando nos juntábamos todos en la mesa de la cafetería de la escuela o cuando salíamos a jugar o al karaoke, Felix, quien se podría decir es mi mejor amigo de entre todo el grupo, también se dio cuenta de lo que pasaba conmigo y Seungmin, otra vez me avergoncé mucho.

Eso quiere decir que paso demasiado tiempo mirando su lindo rostro.

Felix me contó algunas cosas, me dijo que Hyunjin y Seungmin solían ser buenos novios al principio, pero cuando Hyunjin se volvió más atractivo para los demás comenzaron a discutir. Yo no lo había notado, pero Felix tenía razón, yo realmente fui un tonto al no darme cuenta de que Seungmin a veces parecía muy triste o solo tenía la mirada caída, sus lindos ojos marrones, brillantes cuando sonríe y apagados, casi oscuros cuando hay tristeza en su corazón.

No podía permitir que mi ángel de ojos hermosos y sonrisa encantadora siguiera estando triste, Hyunjin me pidió que no interviniera en su relación y no lo haría, pero eso no quería decir que no podría acercarme a Seungmin para ser más amigos, al menos de esa forma me aseguraría de que no esté triste nunca.

—Hola, —dije un día de otoño que se encontraba solo en el patio trasero de la escuela, —¿Qué tal? —traté de ser muy natural.

—Hola, hyung, —me sonrió. —Estoy bien, -titubeo por unos segundos, como si pensara en decir o no lo que piensa, al final solo sonrío.

—No pareces muy alegre hoy, ¿quisieras decirme por qué? —okey, creo que fui muy directo con eso, pero él me sonrió de nuevo, solo respiré tranquilo.

—Hyunjin... se cambiará de escuela, —soltó con molestia, sus ojos brillando en decepción, —sus padres quieren que estudie un par de años en Estados Unidos, quiere que sea como un empresario o algo parecido.

—Es un poco tonto, ¿no?

—¿Qué cosa?

—Que quieran llevárselo para que se convierta en lo que ellos quieren. —sus ojos me miraron como si temiera que dijera algo que le hiciera daño.

—Hyunjin siempre ha sido muy amable con sus padres, nunca les ha dicho que adora el baile con su vida, —suspiró elevando sus ojos al cielo, una brisa suave nos abrigo por unos segundos, Seungmin le sonrió a la vida, —Changbin hyung, -me llamó y yo asentí. —Podrías irte, necesito pensar, a solas, —realmente no esperaba esas palabras, su voz tan tranquila hizo a mi corazón doler, y me asustaba, su corazón debía estar sintiendo todo menos tranquilidad.

—No me iré Seungmin, —respondí firme, el me miró con si suplicara que le dejara solo, pero no iba a irme cuando sé que está sufriendo.

Seungmin se giró hacia mí, me miró firme, con dolor, con rabia, con irá, como si quiera pedirme algo. Caminó a mi dirección y se lanzó a mis brazos, comenzó a llorar, se rompió en mis brazos y yo solo pude acogerlo y abrigarlo con mi calor, lloró porque le dolía decirle adiós a su novio, lloró por que estaba enamorado y no quería perder lo que amaba.

Desde ese momento nuestra relación empezó a crecer mucho, Hyunjin se fue un mes después y aunque de verdad no lo esperaba, él me pidió que cuidará de Seungmin.

Adoraba nuestra relación, él me hacía bromas y yo siempre trataba de ahogarlo con mis demostraciones de amor, siempre me rechazaba, pero sé bien que adoraba que fuera así con él.

Sabía que sería difícil que Seungmin olvidará a Hyunjin, pero tenía que velar por su felicidad, así que ideé un plan para hacerlo feliz, lo llevé a comer muchas veces, le compraba comida y helados, le regale muchos libros, lo animaba cuando se ponía sentimental y trataba de hacerlo reír, lo logré por mucho tiempo y creo que fue suficiente para que abriera su corazón de nuevo.

—Hyung, ¿qué opina de que invite a salir a Jeongin? —me preguntó de la nada un día por la tarde, era fin de semana, los chicos y yo salimos al cine, Jeongin es uno más de los que integran mi grupo de amigos, desde luego que es un chico maravilloso, pero como podría decir algo cuando era yo quien deseaba invitar a salir a Seungmin.

—N-no lo sé, es tu decisión, —respondí tan estúpido que quise golpearme.

—Entonces, ¿porqué no me invitas a salir tú? —me sonrió y Joder como amo esa sonrisa.

—Yo... no lo sé.

—¿Quieres salir conmigo, hyung? —no creía que de verdad estuviera pasando, me sentía tan imbécil, se supone que debía ser yo quien diera el primer paso, no él.

Debía hacer algo, si no todo mi estúpido enamoramiento por él sería una mentira, debía actuar, debía ser firme, demostrar cuando estaba dispuesto a dar por él. Dirigí mi mirada a su hermoso ojos marrones, aquel día había fuego en ellos, podía sentir como su pecho de levantaba ligeramente más de lo normal, lo sabía por que yo estaba igual, cerré la distancia entre nosotros, fue rápido, fue algo torpe, pero fue la mejor experiencia de mi vida, le tomé por la cintura, me acerqué despacio a su rostro, demonios él es un poco más alto que yo así que tuve que empinarme para poder alcanzar su labios bien, el primer roce fue un delicioso cosquilleó que me adormeció las piernas, sentí mi corazón saltar alegre, cuando por fin uní nuestros labios en un encuentro más largo mi cuerpo ya no sabía como seguir de pie, él se inclinó un poco más hacía mí y yo pude bajar mis talones, me sentía vulnerable por la diferencia de altura, pero el roce de nuestros labios era tan mágico que olvidé hasta mi nombre.

Cuando nos separamos solo pudimos reír algo avergonzados y el rojo se convirtió en un color importante para mí al verlo adornando sus mejillas suaves.

Desde ese día Kim Seungmin se volvió el centro de mi universo, me sentía tan lleno, tan libre y feliz que comencé a escribir canciones, algunas inspiradas en sus lindas mejillas y otras que salía de mi cabeza solo con verlo, Chan hyung y Jisung, otros de mis amigos también escribían así que comenzamos un trío de rap, no nos volvimos super famosos, pero al menos tuve la dicha de escribir una canción para los dos, yo sabía bien que Seungmin tenía una voz preciosa, no podía desaprovechar la oportunidad de grabarla en digital para resguardarla por siempre.

—Hyung, ¿Cómo te enamoraste de mí? —me preguntó una vez, aquella tarde estábamos en mi departamento, acababa de mudarme, terminé mi ciclo en el instituto y aplique para la universidad de artes, aunque lo que buscaba era seguir siendo un compositor.

—Mmm... —lo pensé un poco, la verdad que no tenía respuesta, solo pasó, y no sabía como explicarlo, —no lo sé, solo pasó, —dije para después besar su mejilla, él me sonrió.

Cuando cumplimos un año de novios tuvimos una pequeña fiesta con los chicos, Seungmin acababa de cumplir su mayoría de edad por lo que ya podíamos entrar todos al bar, esa noche estuvo perfecta, bailamos un poco, jugueteamos con las miradas sexys, incluso nos dimos varios besos en los baños, debimos poco, no queríamos arruinar la fiesta, cuando ya casi eran la una de la mañana unas chicas se nos acercaron a mí, a Chan hyung y a Jisung, dijeron que nos seguían como 3Racha, el nombre del trío que formamos y que nos tomáramos fotos con ellas, Seungmin estaba con los chicos, así que no había problema, lo que restó de la madrugada la pasamos entre foto y foto, Seungmin sonriendo como siempre, de verdad amo ver esa sonrisa.

—Hyung, —me llamó y yo asentí, estábamos en mi habitación, —gracias por hacerme feliz, —dijo y yo solo pude sentir el golpeteo de mi corazón, le besé los labios, besé su cuellos, levanté su camisa, quite su pantalón e hice que sonidos hermoso saliera de su boca, me enamore de cuerpo tanto como de su persona, Seungmin se estremecía, lloriqueaba, gemía e incluso grito loco de placer, yo le hice gritar loco de placer, Seungmin me entregó su cuerpo y yo el mío a él, le juré amor bajo la dulce mirada de la luna, resplandeciente, tan hermosa como Seungmin, dormimos como nunca, despertamos entre sonrisas y caricias tiernas, amé a Seungmin una vez más y con mucha más intensidad que el día anterior y lo mejor es que sé que él también me amó.

—Te amo, Seungmin. —dije besando la parte de su espalda baja, el se encuentra de boca abajo sobre mi cama.

—Y yo te amo a ti, Seo Changbin, —me respondió sonriendo como siempre.

Tres meses después de nuestro aniversario, Hwang Hyunjin volvió, dos años en Estados Unidos solo lo volvieron mucho más atractivo, el muy maldito volvió hecho un modelo, y en realidad lo era, no muy famoso, pero al parecer Estados Unidos se enamoró del jovencito, según lo que Hyunjin nos contó, una compañera de su clase lo invitó a una sesión de fotos y en cuanto el fotógrafo lo vio le pido algunas tomas, en cuestión de semanas ya le había ofrecido modelar algunas prendas, pero debía prepararse primero, historia larga en la que no podía dejar de tomar la mano de Seungmin, él parecía muy entusiasmado con todo el drama de Hyunjin y yo solo quería la atención de mi novio de vuelta, no la obtuve por horas que parecieron años, odiaba que Hwang estuviera de vuelta, pero odiaba más mi inseguridad, Kim Seungmin está conmigo porque se enamoró de mí, trataba de creer, pero no pude, yo solo comencé a cuidarlo más, Seungmin seguía sonriendo tan hermoso como siempre, todo estaba bien, pero entonces llegó, nuestra primera pelea fuerte, la que nos separó definitivamente y todo fue culpa de Hyunjin, lo peor es que también perdí a varios de mis amigos.

Seungmin ya estaba en la universidad, desgraciadamente, Hyunjin estaba en la misma universidad que él, Seungmin estudia literatura, le encanta los libros, por ello le regalaba muchos, quiere ser escritor y realmente me sorprende cada que escribe algo, él simplemente desborda talento. Hyunjin por su parte estudia administración o algo así, en realidad no me importa, solo lo quiero lejos de mi ángel, de verdad no entiendo por qué sigue estudiando si ya tiene la vida comprada, su cara bonita le es suficiente para vivir bien, Hyunjin solo quería estar cerca de mi ángel y lo consiguió, vaya hipócrita, él me pidió que no me metiera en su relación, pero él si se metía en la mía.

Ese día era viernes, el día en el que iba por Seungmin para después ir a mi departamento y pasar el fin de semana juntos, yo esperaba con mi auto en la entrada, llegué más temprano, para ser exacto una hora y media antes solo en caso de que Seungmin saliera temprano, entonces los vi, los dos caminando juntos, se dirigieron al estacionamiento de los estudiantes, por supuesto que no me vieron, así que los seguí, y de nuevo mi corazón dolió, Hyunjin tenía su manos sobre mi novio, estaba abrazándolo con fuerza y Seungmin de aferraba a él como si fuera el final de todo, caminé llenó de furia, mis venas exaltadas, y mi boca con un sabor amargo, mis ojos goteando un poco pero lo más doloroso era el sentimiento de traición en mi pecho, no lo pensé dos veces, me fui sobre Hyunjin, lo aparté de mi novio y lo golpee con fuerza, una, dos, tres veces, perdí la cuenta, entonces los brazos de Seungmin se aferraron a mí con fuerza y deje de golpear, me sentí herido, me sentía muy dolido, me aparté de Hyunjin y miré a Seungmin.

—Hyung, por favor, —me llamó en suplica, no quise escuchar más.

—Cállate, Seungmin, no quiero escucharte, hablamos después, —fue lo que dije para irme sin mirar atrás.

Si me quiere vendrá a buscarme. Me decía todos lo días que Seungmin no volvió, Seungmin ya no regresó a mí, creí que era porque su amor por Hyunjin fue más fuerte, pero deje de pensar en ello meses después cuando supe por Minho, uno de los amigos que se quedó a mi lado después de romper con Seungmin, Hyunjin y Seungmin no regresaron, ellos no volvieron a ser novios, Minho me dijo que en realidad eran muy buenos amigos, solo me confundí más, si ellos no van a estar juntos entonces por que se abrazaban de esa forma, estoy seguro que casi pude ver que se besaron.

Mi cabeza es un lio y mi corazón duele tanto, Seungmin era mi universo y lo he perdido, necesitó respuestas, pero nadie me las dará, ahora solo le veo de lejos, a veces me paso un par de minutos por el campus de su universidad para tratar de verlo, en ocasiones puedo verlo y en otras solo regreso con el corazón más roto al verlo caminar con Hyunjin, pero no estoy dispuesto a rendirme, lo amo y lo haré siempre.

—Hyung, debería de dejar de mirarlo de lejos, parece acosador, —me dijo Jisung, seguramente está esperando a Minho.

—No puedo mirarlo de cerca, —dije.

—Claro que puede, solo debe pedirle una disculpa, —aquello pensé que era una broma, porque no tiene caso que yo le pida perdón si fue el quien me falló, pero recordé que Felix me dijo algo parecido una semana atrás.

—¿Por qué debería pedirle una disculpa? —pregunte y la expresión de Jisung me asustó.

—Hyung, no me diga que en serio no sabes cuál fue tu error, —negué sintiendo un mal sabor en mis labios cuando los relamí.

—No lo sé, ¿Cuál fue mi error?

—Hyung, el día que golpeaste a Hyunjin la madre de Seungmin fue internada en el hospital, se resbaló en su trabajo, se golpeó la cabeza y se desmayó, al final no fue nada grave, pero Seungmin estaba muy asustado y tú no estuviste en ese momento, Hyung tú solo lo culpaste de ser infiel y eso le dolió.

¿Qué? No puede ser posible, pero aquel día Hyunjin lo abrazó tan fuerte, y Seungmin a él y luego, estaban frente a su auto, no puede ser que cometí un error tan grande y tan estúpido.

—Pero... Hyunjin lo abrazó y Seungmin a él, además estaban frente al coche de Hyunjin, ¿por qué no me llamó a mí que era su novio?. —Contra ataqué.

—Hyung, no seas idiota, Seungmin estaba alterado, muy preocupado por su madre, Hyunjin estaba más cerca para poder llevarlo al hospital, por supuesto que no pensó en si era su novio o no a quien le pedía ayuda, Seungmin solo pensaba en su madre, y el abrazo me lo explicó Hyunjin directamente, tú conoces a Seungmin, cuando está preocupado se pone muy nervioso, Hyunjin también sabe eso, así que trato de tranquilizar a su amigo con un abrazó reconfortante.

Me quedé sin palabras, ahora todo era claro.

—Tú solo elegiste culparlo y no escuchar, Seungmin no tiene nada que aclarar, el no hizo nada malo. —terminó Jisung.

No pude decir más, no sabía que decir, solo me despedí de Jisung con la mano y subí a mi auto, debía pensar con claridad, ahora todo era más claro que el agua, fui tan inseguro, tan imbécil, no puedo creer que todo este tiempo estuve a una disculpa de volver a ver a mi ángel de cerca, no importa que no vuelva conmigo, solo necesito su perdón y que vuelva a sonreírme.

Tardé dos días en aclarar mis dudas, le envié un texto para citarlo en un café, cuando llegué me senté y pedí un americano, llegué temprano, pero Seungmin también lo hizo.

—Hola, —me saludó, pero no sonrió.

—Hola, Seungmin, —respondí el saludo, Seungmin se sentó e hizo su pedido.

—Necesitabas decirme algo, ¿no? —preguntó y yo solo tragué duro.

—Si, bueno yo... —suspiré, debía ser firme, —quería pedirte disculpas por lo que hice aquel día.

—¿Por qué tardaste tanto? —son voz fría me dejo frío el pensamiento.

—Yo-no, no sabía cómo acercarme. —Dije a la defensiva.

—Oh... pensé que seguías creyendo que soy un hijo de puta infiel, —palabras crudas como la realidad que me golpea, sus ojos me asustan, este no es mi ángel.

—Tienes razón, si Jisung no me hubiera aclarado todo, yo aún creería lo peor.

—Yo le pedí a Jisung que te lo dijera todo, —quise mirarlo cuando escuche eso, pero mi vergüenza era tanta que ni si quiere podía mirarlo, —no podía permitir que siguieras creyendo eso del amor de tu vida.

Ahora mis ojos por fin se elevaron y allí estaba, esa preciosa sonrisa que tanto extrañaba, esa dulce mirada, mi ángel estaba tendiendo su mano para estrecharla con la mía.

—Lo siento tanto Seungmin, lo arruiné todo, —me disculpé sosteniendo sus manos, él sonrió otra vez.

—Si, lo arruinaste, pero estás aquí, yo todavía te amo, hyung, pero tendremos que poner reglas si vamos a volver, —de inmediato asentí a la espera de sus condiciones, —primero quita tu cara fea de tristeza, la detesto, —de la nada sonreí, —segundo: jamás vuelvas a pensar siquiera que te seré infiel, y tercero: no quiero que vuelvas a sentirte inseguro, yo te amo a ti, a nadie más y si tienes algún pensamiento turbio, me lo dice y ya.

Así fue como recuperé a mi ángel, tuve que pedirle disculpas a Hyunjin y ahora perece que nos llevamos mucho mejor, mis amigos también me aceptaron de vuelta, Seungmin y yo no volvimos a separarnos, hemos peleado, pero incluso es divertido pelear, cuando me enojo, que es muy seguido, él me abraza y acaricia mi cabello, así es fácil dominarme, aún me causa problemas mi estatura, y más ahora que vivimos juntos, Seungmin suele alcanzar las cosas por mí, me hace sentir pequeño, incluso se burla de mí por ello, pero no importa por que ahora estoy seguro de que Seungmin me ama tanto como yo a él.