La joven pareja tuvo que terminar regresando a casa de los señores Jeon, Kannie por primera vez notaba a JungKook molesto y serio, ni siquiera le dirigía palabra alguna, sabía que le preocupaba lo que estaba pasando, por eso cuando llegaron no dudó en avisarle a su madre.

Luego de la muerte del señor Kim, tres cuerpos más fallecieron en tres noches, el padre de Jimin, de JaeBum y de JinYoung. JungKook estuvo furioso de que su padre intentara ocultarle aquello, siempre se enteraba era porque YuGyeom le escribía a Kannie informándole.

Todos estaban dejando correr muchos rumores y no hacían nada. La puerta de la casa se abrió por una de las mujeres de servicio y Kannie miró a su madre. De inmediato la abrazó con fuerza sintiéndose segura.

— Me dirás exagerada, pero te extrañé-escuchó una pequeña risa de parte de la mujer— ¿Dónde está papá? ¿Y YoonGi? —se separó.

— Tu padre está arreglando un asunto y tu hermano no viene a casa desde ayer—explicó—Me llamó diciendo que estaría con Hoseok.

Kannie asintió sin sorprenderse, esos dos eran amigos, pero le parecía que tenían una rara amistad que no entendía del todo.

— ¿Desde cuándo prefiere quedarse con él que ver a su hermana? —preguntó casi ofendida.

— No le dije que estabas aquí.

— ¿Por qué?

Su madre tomó su mano llevándola a la sala, se aseguró de que estaban solas y temió lo que iba a contarle.

— ¿Mamá?

— Supongo que estás al tanto de lo que ha pasado.

— Lo estoy—asintió.

— Antes de comenzar a decirte esto respóndeme algo—se sentó con ella— ¿JungKook y tú estuvieron juntos esa noche de casados?

[...]

YoonGi respiraba agitado sintiendo su cuerpo algo adolorido, tenía moretones por sus extremidades, debía asegurarse de cubrirlas como se debía y por supuesto, no podía cambiar de forma si estaba así. Su nariz había dejado de sangrar, eso era bueno. Se levantó del suelo mirándose al espejo, no tenía golpes en el rostro, pero Hoseok había cometido el error de golpearlo en la nariz con el puño, tendría que inventarle algo a sus padres cuando llegara a casa.

Desde hace cuatro días exactamente le había dado la idea al chico de desahogarse...y eso hacía.

— Mis padres acaban de salir—Hoseok apareció al abrir la puerta—Puedes irte, escuché decir a mi padre que JungKook y tu hermana habían regresado.

— ¿Qué? —levantó las cejas— ¿No es muy pronto para que regresaran? —preguntó confuso—No importa, iré a verlos.

— Ten cuidado.

YoonGi sonrió ante eso asintiendo. Salió de la casa de los Jung sintiendo un ligero dolor, pero igual se sentía mal. Su consciencia le decía que lo que hacía estaba mal pero su corazón seguía teniendo esperanzas en su lindo Hobi.

[...]

Kannie no lo creía, estaba sin creerlo, intentaba asimilar toda esa información que su madre le había dado y de inmediato pensaba en dos cosas: En ella y en su familia. Que ellos estuvieran conscientes de esa noticia y que la escondieran del resto podía ser grave, además sentía una leve alegría de saber que había más mujeres como ella, pero... ¿Una maldición? ¿Qué demonios?

— ¿Nunca deberé entregarme a mi esposo? —susurró incrédula. Le parecía absurdo—Mamá...

— No pienso a ponerlo a prueba, Kannie, soy tu madre y si algo te pasa...

— ¿Crees que JungKook es mi alma gemela? —preguntó. Ella había dicho algo al respecto y eso le llamaba la atención.

— Es posible, siempre has hablado de ese chico...

—Oh, Kannie, llegó tu madre—la señora Jeon bajaba las escaleras. Ambas mujeres se colocaron de pie—Hea, ¿Y tu esposo?

— Está algo ocupado, le decía a Kannie que nos encantaría tenerla en casa al menos esta noche, después de todo lo que ha pasado...

— Sí, quisiera pasar la noche en casa de mis padres, señora Jeon—insistió. No sabía que planeaba su madre, pero le seguiría la corriente—Prometo volver mañana por la mañana, estoy segura que JungKook y su padre arreglarán muchas cosas.

[...]

Min YoonHee abrió la puerta de su casa cuando ya era de noche, lo acompañaba su tía Youra, cuando notó a su hija menor allí en la sala con su hermano y su madre no dudó en ir a abrazarla fuertemente. Kannie correspondió con su atención en la mujer, ella olía muy diferente a los lobos que conocía.

— ¿Todo bien en el viaje?

— No creo que eso sea lo más importante ahora—miró a su padre—¿Por qué nunca me dijiste que hay más mujeres como yo? —acusó y la sonrisa del hombre desapareció.

— Supongo que tu madre ya te dijo todo.

— ¡He vivido toda mi vida creyendo que soy una abominación!

— Lo sé...

— ¡Y lo sabes! Es lo peor—bufó— ¿Qué demonios está pasando cada noche? Hay cuatro hombres muertos, cuatro padres de familia que han fallecido, ¿Quién está haciendo esto?

Youra tomó aire antes de responder.

— Nosotras mismas.

— ¿Qué? —Kannie y los demás la miraron.

— Las mujeres que son como nosotras están asesinando a los hombres—explicó. YoonGi y su madre intercambiaron una mirada—Quieren vengarse por lo que te han hecho, tu padre y yo nos reunimos con algunas amigas que conozco o creía conocer.

Kannie miró al hombre.

— Papá...

— Las mujeres en nuestra familia, Kannie, han vivido ocultando lo que son por años—tomó su mano—Están hartas de tener que vivir condenadas y saben de ti, les parece injusto como te tratan o subestiman, por esta razón no quería decir la verdad.

— YoonHee, ¿A dónde fueron?

— ¿Tienen en mente eliminar a los hombres lobos y licántropos?

— Sí—Youra respondió estando seria—Están llamando a más lobas para la causa—negó con la cabeza.

— ¿Ninguna de ellas están casadas?

— Mientras tengamos esta maldición ninguna de nosotras quiere casarse—confesó—Tú eres la única que lo ha hecho.

Kannie sentía su cabeza a punto de explotar. Lo que ella había querido tanto tiempo se estaba cumpliendo, vengarse de cada uno de los que se metieron con ella, eliminarlos a todos y....estaba pasando, pero no se sentía tan feliz como había soñado de niña.

Las cosas no se solucionarían así.

— ¿Cómo comenzó esta maldición? —exigió saber mirando a la mujer—Tiene que haber una forma de detener esto.

— Ellas no van a detenerse, Kannie.

— No pienso quedarme de brazos cruzados—habló la señora Min sorprendiendo a su familia, ella acostumbraba a ser muy sumisa.

— Mamá...

— Nada, YoonGi, no veré como a tu padre y a ti los lastiman.

— No tocarán a YoonHee ni a nadie de esta familia, por ser parte de mi sangre ustedes no saldrán heridos—Youra los miró y luego a Kannie—Algunas cosas no tienen salvación, niña.

— Pero...

El timbre de la casa sonó interrumpiendo la conversación. YoonGi fue a ver quién era y a los minutos a la sala entró Jeon JungKook paseando su mirada por todos haciendo una pequeña reverencia deteniendo sus ojos oscuros en su esposa.

"Oh, mierda, ahora tengo que explicarle esto a él...JungKook por favor no me odies"

•••

En el próximo JungKook se enterará de todo, ¿Cómo creen que lo tome? 😏