Cap.28:

"Deja de mirar al niño como si lo fueras a descuartizar. ¿No ves que lo estás asustando?

Min Yoongi.

Puse las manos sobre la cintura de mi novia y la cabeza en su hombro. Sentí como se tensó momentáneamente pero poco a poco se fue relajando.

Sabri encendió el motor del vehículo de cuatro ruedas y lo puso en marcha.

Wohoo!-gritó mi cuñado al pasarnos por el lado. Hana sonreía a la par de él.

«Esos dos locos se ven tan bien juntos, que me hacen sentir eufórico.»

¡El último es la peste!-gritó Tae a lo lejos, levantando una mano para celebrar que nos llevaban algunos metros de ventaja.

Sabrina aceleró más e inclinó su cuerpo más hacia adelante, así como en las películas de motoristas. Estaba demasiado metida en el papel.

Apreté levemente su cintura, debido a que el repentino acelerón, por las leyes de la física, me hizo ir hacia atrás.

¿Estás bien?-gritó mientras subíamos por un pequeño mortículo de tierra.

Sí.-besé su mejilla.

H...Hey! ¿Qué haces?-tartamudeó.

«¡Tan linda!»

Dándote ánimos. Fighting!-canturreé y volví a besar su mejilla.

Sí sigues haciendo eso vamos a perder ante Tae y Hana. ¿Quieres perder ante ellos?-preguntó.

Poco me importa perder ante ellos, pero si crees que tu orgullo está en juego, adelante y pateales el trasero a mi hermana y a mi cuñado. Te doy permiso, demuestrales quién es Sabrina Hicks.-grité sumido por la adrenalina.

En pocos segundos le pasamos por el lado a los tórtolos y yo grité.

¿Ahora quién es la peste?-comencé a reír como descerebrado y los saludé con la mano mientras nos alejábamos.

¡Hermanito! ¡El primero se la traga!-gritó Hana y les mostré ambos dedos corazón.

Llegamos a la meta mucho antes que aquellos dos y levanté a Sabri en el aire mientras dábamos vueltas.

La comencé a bajar lentamente. Sus brazos quedaron entrelazados alrededor de mi nuca y cuando estuvo en el suelo la agarré por la cintura y la atraje hacia mí con brusquedad haciendo que ella soltara un quejido.

Enredé mis dedos en su cabello color rojo vino , la miré a los ojos y me lamí los labios. Su cara parecía un chili rojo. Ladeé mi cabeza y pegué mis labios a los de ella con rapidez, tenía la necesidad de sentir el calor y el sabor de sus besos.

Entre beso y beso habían mordidas y succiones. Cada vez que nos separábamos un poco para tomar aire le recordaba cuan especial es para mí.

El impacto de algo contra mi cabeza rompió el momento íntimo entre mi novia y yo. Ya estaba listo para decir un par de obscenidades cuando vi a un niño frente a mí.

Este...yo..Lo..lo siento mu...mucho señor. N..no fue mi intención p...pegarle.-lo miré con asco y rabia.

Sabrina apretó un poco mi brazo.

Deja de mirar al niño como si lo fueras a descuartizar. ¿No ves que lo estás asustando?-susurró y fue hasta donde el infante con voz de camello.

Se agachó hasta estar a la misma altura de ojos que el crío y removío un poco su pelo.

No te preocupes. Todo está bien. Sabemos que no fue tu intención.-le dijo con dulzura.

No puedo imaginar cuan dulce será como madre. Si a mí me gustaran los niños, hace rato hubiéramos tenido uno, porque a ella le fascinan.

Tae llegó junto a Hana. Apagó el motor y ambos se quitaron los cascos. Bajaron del vehículo y se quedaron mirando la escena.

No tengas miedo de ese hyung que ves ahí. Aunque parezca muy rudo y atemorizante muy en el fondo es un osito de felpa.-dijo tomando las manitas del pequeño entre las suyas.

Suga. Ven acá.-ordenó. Escuché a Tae y a Hana reírse por lo bajo y les lancé una de mis miradas mortales.

Suga. He dicho que vengas acá.-dijo Sabrina con lentitud, intentando no perder la paciencia.

Ya voy.-dije resignado y caminé con los hombros gachos hacia donde estaban ella y el niño.

Agáchate.-dijo mi novia y la obedecí.

Cuando se trata de niños, ella no entiende, así que tiende a sacar su lado oscuro. Lo mejor es obedecerla.

El escuincle sostenía el balón como si de ello dependiera su vida y escondía su cara detrás de él. Me tenía miedo y eso me daba algo de gracia.

Suga...-advirtió Sabri.

Oye niño, yo no muerdo. ¿Por qué tiemblas?-pregunté y le dediqué una sonrisa ladina.

Sabri me dio un codazo en las costillas y protesté. -Esa sonrisa da más miedo que tu póker face. Pareces un psicópata.-dijo Sabri.

Hana comenzó a reír, pero cuando la miré se mordió el labio para intentar reprimir la risa.

Murmuré una maldición e intenté dedicarle una sonrisa sincera, que transmitiera confianza al niño, pero lo único que me salió fue una mueca que, raramente, hizo que el chiquillo sonriera.

¿Quieres jugar a la pelota con hyung?-pregunté.

Él chico asintió e intenté acariciar su cabello. Digo intenté, porque lo que hice fue dar unas palmadas en su cabeza haciendo que esta se moviera.

Le di la mano al pitufo y fui con él a jugar. Sabrina me acompañó.

***
Yoon Hana.

Chicos. Hoy la pasé genial. Mi parte preferida fue ver a Yoongi oppa jugando al fútbol con el niño.-dije para fastidiarlo.

Suga oppa hizo una mueca de asco típica en él y gruñó hundiendo más su cabeza en el asiento del auto mientras mantenía su infalible posición de brazos cruzados a la altura del pecho.
Parecía un niño en rabieta.

Mi parte preferida fue definitivamente la de montar en mottocross.-dijo Tae.

¿A pesar de que les ganamos?-preguntó Suga oppa enarcando una ceja.

Sí. Al fin y al cabo los dejamos ganar. ¿Cierto cariño?-asentí en respuesta a su pregunta.

¿Cariño? Iugh! Cada vez se me pone más la piel de gallina.-comentó oppa mientras sobaba sus hombros de arriba a abajo, como si tuviera frío.

Deberías ver la cara de tonto que pones cuando Sabrina te habla.-comenté.

¡Eso no es cierto!-bufó.

Sí lo es.-riposté.

¡Que no lo es!-volvió a protestar.

Oppa! ¿Me puedes abrir esta botella de agua?-preguntó Sabri.

«Esta es mi oportunidad.»

Tomé el teléfono en mis manos y abrí la aplicación de la cámara.

Claro amor.-dijo. Ahí estaba de nuevo su cara de tonto épica.

El flash de la cámara impactó contra su cara.

Assa! ¡Todo listo!-exclamé.

Yah! ¡Bórrala ahora mismo!-demandó pero, como es lógico en mí, no le hice el menor caso y se la enseñé a la cuñada, luego a Tae. Los dos comenzaron a reírse.

Yah! ¡Ustedes!- nos apuntó con una papita frita que estaba comiéndose.-¿A caso están haciendo un complot contra mi persona?-chilló.

Se la enseñé luego a él.

-¿Ves? Esa es tu cara de tonto épica.-me reí en su cara.

Sorbió el exceso de saliva.-¡Tú pequeña!-hizo ademán de darme en la cabeza con su zapato, que se lo quitó a la velocidad de la luz, y me encogí por inercia.
Ambos comenzamos a reír.

-Tienes razón. Me ganaste Hana.Es cierto que me vuelvo un tonto sonriente cuando estoy cerca de esta pequeña preciosura.

Aplastó los cachetes de su novia con las palmas de sus manos bien abiertas. Ella hizo una boca de pescado muy graciosa, por la manera en que Yoongi oppa sostenía su cara.

Oppa la besó y les tomé una foto.

¡No me canso de decir que eres lo más adorable del mundo!-dijo al ver las mejillas sonrojadas de su novia y acarició su cabello.

El resto del camino fue normal.

Escuchamos música. Suga oppa se quedó dormido en el regazo de la cuñada. Yo estaba en el asiento del copiloto hablando con Tae mientras el reposaba su mano derecha en mis muslos.

Justo cuando llegamos a casa de mi madre comenzó a llover. En cuestión de segundos el viento arreció y el día se volvió más oscuro.

Hana! Hoy deberán quedarse ustedes dos en casa. No los voy a dejar irse con este clima tan malo, las carreteras se ponen muy resbalosas cuando llueve. Pueden tener un accidente de camino a casa.-dijo Yoongi oppa y sacó una sombrilla negra de su mochila.

Tengan.-dijo Sabri extendiéndonos otra sombrilla con estampados de colores.-Yoongi y yo usaremos esta para bajarnos del auto.-dijo señalando la sombrilla negra de Yoongi oppa.

1...2...3-hicieron una cuenta y luego bajaron los dos a la par y corrieron con un poco de dificultad hasta la puerta de la casa para tocar el timbre.

Creo que es nuestro turno.-dijo Tae y apagó los motores del auto.

Salió él primero y cruzó por enfrente del capó del automóvil, la sombrilla se movía de un lado al otro debido al viento y se veía que Tae tenía dificultades para sostenerla bien.

Abrió la puerta del pasajero para mí y me ayudó a bajar. Me agarró por la cintura para apegarme más a él, con el objetivo de permanecer lo más juntitos posible para no calarnos demasiado con el agua.

Una racha de viento muy fuerte sopló y el revestimiento de la sombrilla se viró al revés, causando que solo se viera el esqueleto de esta.

Taehyung intentó enderezarla pero el viento azotaba demasiado fuerte y le resultó imposible. Como resultado, terminamos calándonos con el agua helada.

Por suerte mamá nos esperaba en la puerta con toallas.

Entramos a la casa y no vimos ni rastros de Suga y Sabri. Supuse que habían subido a darse una ducha, y quién sabe a qué más. Reí de manera perversa internamente.

Aigoo mis niños. Suban a cambiarse rápidamente. Si se quedan con la ropa mojada van a pescar una gripe.-dijo mamá con preocupación.

Anda. Suban a la habitación de huéspedes. Está en el pasillo izquierdo, a mano derecha, la última puerta.-dijo.

¿Hay una habitación de huéspedes?-pregunté con asombro.

La última vez que vine no había una.
Sí. Tu hermano decidió agrandar la casa por si algún día querías venir a vivir aquí y para cuando vinieras de visita.-dijo y nos regaló una sonrisa cálida.

Tae y yo subimos y seguimos las indicaciones que nos había dado mi mamá al pie de la letra. Entramos a la habitación y nos metimos al baño.

Aigoo! Mira como se ha empapado mi bebé.-dije frotando su cabello con la toalla. Me detuve y dejé ambas manos a los costados se su cabeza. Besé el lunar que tiene en su nariz. Pude sentir lo fría que estaba.

El no tardó en acunar mi rostro entre sus manos y comenzamos a besarnos. La toalla cayó al suelo. Luego le siguió la ropa.

Entramos a la ducha sin separarnos el uno del otro.

Déjame bañarte.-susurró y su aliento cálido estrelló contra la piel de mi espalda causando que me erizara.

Tae aplicó jabón líquido sobre mi cuerpo y comenzó a frotar sus manos por todo este, enviando así, sensaciones inexplicable a lo largo de toda mi piel.

Las bajó por toda mi espalda, acarició mi trasero y luego comenzó a dejar besos húmedos en la misma hasta llegar a la espalda baja, alias: trasero.

Ahí también me besó e introdujo sus dedos en mi vagina, cuando me sintió lo suficientemente húmeda me inclinó un poco hacia delante y me sostuve de la pared. Empezó a empujar dentro de mí hasta que sintió mis espasmos indicando que ya había llegado, él tuvo su orgasmo después del mío.

Se paró frente a mí cuando salió de mi interior, me abrazó para sostenerme, ya que mis piernas temblaban, y agarré con fuerza su trasero haciendo que Tae soltara un gemido.

Luego de terminar de bañarnos salimos de la habitación y nos pusimos la ropa que ,supongo, mamá dejó sobre la cama. Solo espero que no haya sentido nuestros gemidos en el baño.

-¡Por Dios! ¡Qué vergüenza!-pusé las manos en mis mejillas.

¿Qué cosa?-preguntó Tae detrás de mí.

Mamá dejó esta ropa aquí. Aish! De seguro nos escuchó.-revolví mi cabello.

Oh No! ¡Qué pena! ¿Qué va a pensar mi suegra de mí ahora?-preguntó poniéndose las manos en las sienes.

Bejemos a comer.-dije.

De acuerdo. Mi estómago tiene hecha una cruz. Y después de perder tanta energía en...-dijo y le interumpí.

Voy a bajar primero.-dije.

***
Me desperté gracias a los sonidos metálicos provenientes de la cocina.

«Al parecer mamá se levantó temprano hoy. ¿Debería ir a ayudarla?»

Miré a Tae, quien se encontraba en el 5to sueño aún.

«Duerme como un bebé.¡Luce tan adorable!»

Levanté con delicadeza su mano, que estaba sobre mi abdomen y me levanté de la cama con cuidado de que no se despertara.

Bajé las escaleras y fui directo hacia la cocina.

Buenos días pequeña. Te levantaste temprano.-dijo y depositó un beso en mi mejilla.

Sí. Es que tengo hambre. Escucha como rugen mis tripas.-al terminar de mencionar la palabra "tripas", estas sonaron como si las estuviera invocando.

¿Qué estás haciendo?-pregunté y destapé una olla que estaba en la estufa. -Yum! Sopa de algas. Huele bien. Pero ma...¿De quién es el cumpleaños hoy, que estás cocinando sopa de algas?

Tontita.-tocó la punta de mi nariz con su dedo índice mientras mostraba una hermosa sonrisa de madre enternecida. -Hoy es tu cumpleaños. ¿Cómo pudiste olvidarlo?-preguntó.

Es que no es una fecha relevante para mí.-contesté agachando la cabeza.

🎶🎼Cumpleaños feliz. Te deseamos a ti. Muchas fe~licidades nuestra querida Hana. Felicidades Hana en tu día, que lo pases con sana alegría. Muchos años de paz y armonía. Felicidad Felicidad.🎼🎶

Eeeehhhhh!!!-gritaron Tae, que era el jefe de la manada, Suga oppa, mi cuñada Sabri y el pequeño Gongchan. -Cantaban en inglés ahora, con un pastel de nata en las manos mientras bajaban las escaleras. Sabri hizo estallar algunos confetis junto a Gongchan.

«¿En qué momento Tae había despertado? ¿En qué momento organizaron todo esto?»

Comencé a llorar, pero de felicidad. Coloqué mis manos en forma de carpa para tapar mi nariz y parte de mis ojos. Era tanta la felicidad que no creía que una persona pudiera ser más feliz. Los únicos que faltan aquí para completar mi alegría son : Hara, Gyuri, Jimin, Namjoon, Jungkook y Yerin.

Me dieron un abrazo grupal y luego me hicieron soplar las velas. Lo siguiente fue que me enterraron la cara en la nata. Mi mamá filmaba y Tae se reía de mí y con el dedo me quitaba algo de crema para probarla.

***
Después de lavar los platos, Tae y yo nos sentamos en el patio trasero, cerca del pequeño pozo a hablar mientras nos dabamos cariñito.

Tae. ¿Recuerdas aquella cita que tuve con Jimin?-pregunté.

Para que me recuerdas ese momento. Solo quiero olvidarlo.-resopló.

Ese día, antes de irme, observé que traías algo en la mano. Entonces cuando viste que de verdad me iba a ir con Jimin, lo guardaste y volviste a tu habitación.

¿Me viste?-preguntó estupefacto.

Sí. ¿Me vas a decir que era?-pregunté.

Espera. Creo que aún lo llevo conmigo. Este es el mismo pantalón que llevaba ese día.-dijo hurgando en los bolsillos de su Jean negro.

Es increíble como es que recuerdas hasta el pantalón que llevabas puesto ese día.-comenté con asombro.

Assa! ¡Ya lo encontré!-exclamó.

Sacó una pinza de lavandería y la puso en mis manos.

¿Una pinza de lavandería?-miré con decepción al objeto.

Ábrela.-ordenó y eso hice, cumplí su orden.

Cuando los extremos de la pinza se separaron, dejaron ver un pequeño papelito que ponía: "Te amo Yoon Hana. ¿Quieres ser mi novia?"

Aigoo Tae... Qué lindo eres!- dije enternecida por su gesto.

¿Por qué no bailamos?- preguntó Tae.-Tenemos que ensayar. Recuerda que pronto tenemos una presentación importante en la que puede que nos elijan para pertenecer a alguna compañía de renombre y mañana también hay ensayo.

Ya casi lo olvidaba.-dije. Vamos a bailar. Yo pongo la música.

Cuando encendí mi teléfono vi que tenía varios mensajes, así que abrí la aplicación de Kakao Talk.

¿Qué haces?-preguntó Tae.

Nada. Revisando mis mensajes.

*Mensajes*
*Go Hara*
Muchísimas felicidades para la princesa más loca y fiestera del universo. Un día como hoy naciste tú, la persona tan especial que ha iluminado mis días con felicidad. Gracias por ser mi amiga y elegir pasar los momentos más locos y los más difíciles junto a mí. No voy a tu casa porque sé que andas de parranda con tu novio el alien. Te quiero mucho enana.

Received 11:00 a.m

Ha sido un honor para mí ser tu amiga, no tienes que agradecérmelo. Recuerda que siempre estaré ahí para lo que me necesites. Qué bien me conoces! Sip. No estoy en casa. Estoy en casa de mi hermano con mamá, Gongchan, Tae, Suga oppa y mi cuñada. ¿Te conté ya que Suga oppa tiene novia? Yo también te quiero mucho bellota.
Send 11:32 a.m.

*Ratatouille*

Hola enana. Espero no haberme equivocado de día. Muchas felicidades. Hoy te pones más vieja. Jaja, ya eres oficialmente mi noona. PD: Guárdame pastel. PD2: Ah! No se te olvide ensayar para la presentación. Dentro de dos semanas es el ensayo general, pero mañana también hay. Espero verles por aquí. Fui a casa de Tae a visitarte, pero no estás. Yerin también te felicita y te manda saludos.
Received 11:05 a.m

*Yah! ¿Se puede saber a quién carajos le llamas enana, Alvin la ardilla? Y no soy tu noona. Ni se te ocurra llamarme así o te corto el pezcueso. PD 1: Ya me comí el pastel, no queda nada para ti. PD2: Mándale saludos a Yerin y dile que se recupere pronto. Ah! Tae va a su casa mañana después del ensayo. Díselo a ella. Nos vemos mañana.*
Send 11:35 a.m

*Min Gyuri*

*FELICIDADES PRECIOSA!!!! Ya tienes la mayoría de edad! ¿Cómo amaneciste? ¿Ya tomaste tu sopa de algas? Estoy frente a tu casa, te traje un poco.*

*No estoy en casa ahora pequeña Gyuri. Nos vemos mañana.* -fue mi respuesta.

*De acuerdo. Pásala bien con Tae y diviertete mucho. Te quiero mucho.*

*Yo igual te quiero.*-respondí.

*Kim Namjoon*

*Oye Hana, escuché de Hara que hoy cumples años. Muchas felicidades, que la pases bien. Te deseo lo mejor. Bye.*

¿Por qué demoras tanto leyendo mensajes?-preguntó Tae por encima de mi hombro.

Porque los estoy respondiendo.-contesté.

*Sonido de notificación.*

Uh? ¡Otro mensaje!-exclamé.

*Muchas felicidades. Espero que la estés pasando bien porque pronto todo cambiará.*

Uh?! ¿Quién es esta persona? No conozco este número.¿Por qué dice eso?-pregunté a Tae.

Parece ser una amenaza. No sé por qué me parece que es Lisa.-su voz parecía como si estuviera entre preocupado y alterado.

Ash! ¡Esa maldita! Como sea ella juro que la voy a arrastrar por las greñas para limpiar el suelo de la escuela, que falta que le hace una buena limpieza.-gruñí.

Tranquila Hana.-Tae puso una mano en mi hombro.

Vamos a bailar.-me tomó de las manos y me llevó hasta el centro del patio.

Date la vuelta.-ordenó.

¿Para qué?-pregunté.

Solo hazlo.-dijo y le hice caso resignada.

Corrió mi cabello hacia un lado y sentí el contacto metálico de algo sobre la sobre la piel pálida de mi cuello. Por acto reflejo toqué el objeto. Por la textura supe que, era una cadena.

¿Me planeas ahorcar?-pregunté.

Puede que lo haga si sigues matando los momentos románticos Yoon Hana. Este es tu regalo de cumpleaños. ¡Espero que te guste!

Me giró hasta estar frente a él de nuevo y me examinó.

Se te ve muy bonita.-dijo.

Observé el dige mientras lo tocaba.
Era una llave una con forma de "Clave de Sol"

Él sacó su cadena que, estaba metida por dentro del pulover que llevaba puesto y me la mostró. La de él eran dos delfines besándose que formaba un lindo corazón, con una cerradura en el centro. Su corazón llevaba grabadas las iniciales de mi nombre "YHN" y mi dige tenía las iniciales del nombre de "KTH"

Oh Cariño! No tenías que ser tan detallista. Yo estaba hasta contenta cuando me diste las pinzas de la lavandería.-dije.

¿Te gusta?-preguntó dando repetidos golpes de forma ansiosa sobre el pasto y rascándose la nuca con nerviosismo.

Me encanta.-me paré de puntillas y besé el lunar que tiene en la punta de su nariz.

Semanas después...

En la academia.

Hoy por fin es el ensayo general. ¿No te parece genial? Eh? Eh?
Eh?-preguntó Kook palmeando en mi hombro repetidas veces.

Ya basta Ratatouille. Eres fuerte, eso duele.-dije devolviéndole el golpe.

Ash! Eres igual de amargada que Suga hyung. No hay duda de que son hermanos.-resopló.

Yo me siento muy orgullosa de ser su hermana.-levanté la barbilla con aires de superioridad.

¡Oye Tú, pequeño roedor! ¿Qué haces coqueteando con mi novia?-gritó Taehyung mientras caminaba señalándonos a ambos.

Ash! Definitivamente no nací para conocer a personas normales.-murmuré y choqué la palma de mi mano contra mi frente.

¿Por qué todos me dicen rata? ¡Estoy tan harto de ello! Hay mucha gente por ahí que tiene los dientes más grandes que yo.-pateó el suelo.

Aigoo Kookie! Nosotros no te lo decimos para ofenderte. Es más bien de cariño.-me expliqué.

Pues a mí me ofende.-protestó.

¿Qué te parece mejor para que te digamos, galleta mutante o Alvin la ardilla?-preguntó Tae con la mano en el hombro de Kookie.

¡Que no! Llámenme por mi nombre. Para eso mi mamá me lo dio.-dijo haciendo rabieta como un niño de 3 años de edad.

Es muy incómodo decirte Jungkook, prefiero galleta mutante.-habló Tae.

Yo prefiero Alvin la ardilla. Suena más adorable. Miren estos cachetes tan rellenitos.-dije haciendo pucheros mientras pellizcaba sus mejillas con firmeza.

Agh! ¡Suéltame ya! ¡No soy un niño chiquito!-gritó y justo en ese momento entró la profesora.

Bien. Todos a sus posiciones.-comenzó a dar fuertes palmadas para que todos le prestaran atención.

Una vez estuvieron todos en sus posiciones comenzó el ensayo.

Justo cuando empezó la parte de los saltos y los giros, antes de terminar la tercera vuelta sentí un fuerte dolor de estómago y me caí.

Hana, Hana...¿Estás bien?-corrieron Tae, Jungkook, Jimin, J-Hope y Namjoon hacia mí.

Sí. Estoy bien. Solo me dio un fuerte calambre en el estómago.-murmuré, era más bien semejante a un suspiro.

No había ni hecho la mitad de la coreografía y estaba tan agitada como si hubiese corrido una maratón.

Hana...No estás bien, es obvio. Mira lo pálida que estás.-dijo Tae brindándome su botella de agua.

No Tae. He dicho que estoy bien, ya se me pasó. Solo necesito descansar un poco. Chicos, no se preocupen por mí y sigan ensayando. Este evento es muy importante. Dentro de un rato me reincorporo al baile.-dije y fui hacia una esquina para relajarme y tomar agua.

De acuerdo. Pero si te vuelves a sentir mal me avisas.-gritó Taehyung antes de volver a su posición en la parte delantera.

Todos siguieron en lo suyo y cuando me sentí mejor me levanté y me uní al baile.

***
Kim Taehyung

¿Ya te sientes mejor?-pregunté tocando su frente.

Que no tengo fiebre. De seguro fue un calambre de estómago debido a que no he comido nada. Ya estoy bien.-respondió e hizo un puchero adorable.

¿Qué no has comido nada?-grité y ella dio un respingo del susto.

Aigoo! Me has dado un susto de la hostia.-suspiró aliviada.

Hana! ¿No te dije que debías de comer algo después de...-me abrazó de repente.

Tae...Te quiero mucho. Gracias por preocuparte por mí.-dijo mirándome desde abajo con la barbilla apoyada en mi pecho.

Mi corazón se encontraba latiendo a mil por segundo, cosa que siempre me sucede con Hana.

Acaricié su cabello y la acurruqué contra mi pecho.-No vuelvas a saltarte ninguna comida otra vez. ¿De acuerdo?-asintió ,con la cabeza, aún abrazándome como un osito de felpa.-Besé su cabello y lo volví a acariciar antes de separarnos.

Vamos.-la tomé de la mano para intentar llevarla hacia el auto, pero ella se detuvo.-Yah! ¿A dónde vas? ¿No ibas a ir a ver a tu hermana Yerin hoy?-preguntó levantando una ceja más que la otra.

¿En serio crees que te voy a dejar sola sabiendo que te sientes mal? ¡Ni muerto!-dije acentuando la última frase.

Tae...Yerin también te necesita. Ella debe saber la verdad.-dijo jugando con los dedos de mi mano.

Hana...Ahora tú estás primero.Vamos, te voy a llevar a comer a un restaurante que está genial, la vista es hermosa allí.-dije.

¿Planeas que vaya contigo a una cita mientras estoy así vestida y sudada como una cerda?-preguntó un poco indignada. A los hombres no nos importa mucho eso, pero supongo que a las mujeres sí.

¿Por qué? ¿Qué tiene? Para mí estás genial.-le sonreí y ella se sonrojó.

Aigoo! Tan linda. Eres tan tierna cuando te sonrojas.-dije apretando los puños por la emoción.

Ella sonrió y me dio un leve golpe en el hombro.-Anda vamos a casa.-dijo.

¿Estás segura? ¿Por qué mejor no compramos comida y vamos a la playa a comerla?-propuse.

Estoy un poco cansada. Mejor volvamos a casa y me preparas uno de esos platillos exquisitos que tú haces, podemos jugar también el videojuego que compraste hace unos días. Sé que estás loco por jugarlo.-dijo.

De acuerdo.-hice un puchero de desánimo.-Pero prometeme que algún día tendrás una cita conmigo en las orillas de la playa o en un restaurante.

Nunca hemos ido a cenar a uno, como hacen las parejas normales.-dije.

Te lo prometo.-dijo y besó mi mejilla.

Aigoo chiquilla, ven acá. Ahora no te me escapas.-dije y comencé a correr detrás de ella para atraparla.

***
Ah! ¡Hogar, dulce hogar!-suspiró Hana quitándose los zapatos mientras mantenía los brazos abiertos a la altura de sus hombros.

¿Alguna vez lo has probado para saber que es dulce? -pregunté para fastidiarla.

Ella se rió de mi idiotez.-No seas tonto.-dijo.

Ve a darte un baño en lo que yo preparo algo de comer.-dije.

Está bien.-la observé subir las escaleras y cerrar la puerta de la habitación.

Fui hasta la cocina y comencé a sacar los ingredientes para la comida de los estantes y la nevera.

A Hana le encanta la carne de cerdo. Voy a hacerle manitas de cerdo agridulce.-musité mientras me ponía el delantal.

Cuando estaba vertiendo aceite en la sartén para hacer el sofrito para la salsa agridulce mi teléfono comenzó a sonar. Lo saqué del bolsillo trasero de mi pantalón. Deslicé el dedo por la pantalla para contestar y sostuve el móvil entre la oreja y el hombro mientras comenzaba a picar algunas verduras.

¿Quién habla?-pregunté.

Hijo mío. ¿Cómo están tú y la pequeña Hana?-preguntó mi madre.

«No han llamado en un buen tiempo. ¿Cuál será el motivo de su llamada?»

B...Bien. ¿Por qué?-detuvé lo que estaba haciendo y agarré bien el teléfono para atender de manera adecuada a la conversación.

Yoon no ha dejado de preguntar por su hija. Logramos sacar un tiempo de nuestro día para llamarles. ¡Si vieras lo lindo que es esto por aquí!-suspiró.

Lo debe de ser.-dije y me mordí los carrillos por la ansiedad.

¿Dónde está Hana? Yoon quiere hablar con ella. La extraña mucho.-mi madre parecía la mujer más feliz en el mundo. Por su tono de voz tan alto y su forma de hablar se nota que está sonriendo.

Hana está tomando un baño.-dije.

Ah! Entonces llamamos más tarde u otro día. Nos vemos pronto mi niño.-dijo y colgó.

¿Q...Qué? ¡Ma...Mamá!-grité al teléfono, pero era imposible que me escucharan del otro lado de la línea porque ya habían colgado.

Shit!-bufé y de la rabia contenida golpeé la isla de la mesa. Sentí olor a quemado y corrí a echar las verduras y las sazones en el sartén. Lo siguiente fue la salsa de tomate y algo de azúcar.

Un tiempo después...

Hana bajó los escalones con la toalla en la cabeza y un batón blanco puesto. Se veía tan...tan bien como siempre.

«Será mejor que deje la noticia del regreso de nuestros padres para otro momento. Eso la puede angustiar y no quiero que se preocupe por nada en lo que queda del día de hoy.»

¡Me siento como nueva!-exclamó estirándose.-Mhmm!!! ¡Huele delicioso!-tomó una profunda respiración indicando que le gustaba el aroma de la comida, pero luego hizo una mueca.

¿Estás bien?-pregunté.

Sí. Estoy en perfectas condiciones.-dijo.

¡Ven siéntate!-la tomé por los hombros. Quiero ver que te termines todo este plato de comida.-la senté en la silla, frente al bol con manitas de cerdo.

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Estas son algunas de mis historias en Wattpad. Por favor, si no le es mucha molestia síganme. Planeo hacer segunda temporada pero más corta.
¿Qué opinan?
Pueden enviar sms a mi # 58483786. Mi nombre es Sofía.
No me canso de decirle que les quiero.

Muax!!!💋

Jinnie Kissitos.👑

A que es lindo!!!!

Mi bias es Suga_ pero los quiero a todos.