—¡Doctora! —por un misterioso llamado, SuYeon se detiene en medio del pasillo y gira hacía la persona que la llamó. El mismo Interno que la última vez da grandes saltos en su dirección, le sonríe, parecía alegre de verla— Buenas tardes, Doctora Im.

—Buenas tardes, Jung. —le sonríe, parecía muy amable y energético— ¿Necesitas algo?

—Ah, yo... en realidad, me preguntaba si podía ayudarme con un pequeño tema. Es sobre un paciente que me pudieron analizar, es nuevo para mi y me ayudaría en las practicas. Pero si no tiene tiempo entenderé.

Hasta el momento, en sus años de carrera, SuYeon nunca recibió un pedido de ese estilo de algún Interno. Debido a que era mayormente alguien callada e inerte en su peioio mundo, la gente solía creer que era amargada. Ahora, su corazón se siente cálido ante la solicitud. Sonríe, encantada.

—¡Claro! Búscame dentro de una hora para mi descanso en la cafetería.

—Muchas gracias, Doctora Im.

SolHung le había alegrado el día, sin siquiera notarlo.