El peli negro se encontraba encerrado en su habitación, Taehyung ni siquiera bajo a cenar, por lo visto mientras el siguiera en aquella casa el castaño lo estará evitando, su cabeza era un caos total, por una parte quería ganarle la apuesta a Jisoo, y por otra no quería lastimar los sentimientos de Taehyung, se dio cuenta que él de verdad le importaba, con el se sentía diferente, lo hacia sentirse libre, podía reir sin avergonzarse, podía ser él mismo, se olvidaba de su familia, sus problemas, sus complejos, de toda esa mierda de la que toda su vida estuvo rodeado, era como si su niño interior emergiera...ese lado suyo que creyó que jamás conocería, pero porque le costaba tanto aceptar que algo asi de puro y bello llegara a su vida, ¿porque no podía permitirse algo así?, ¿acaso su maldito orgullo valia mas que todo eso, ¿valia mas que ser feliz al lado de Taehyung? el sabia perfectamente que Taehyung era demasiado perfecto para él, ni siquiera podía soñar con estar con él, es una buena persona, es tierno, inocente, su corazón es tan puro que el no se sentía digno siquiera de poder ocupar si quiera un pequeño espacio en este, le dolía, le carcomía en el alma, pero él lo queria, se sentía encaprichado y si el tenia que manipular a Taehyung entonces lo haría, con tal de tenerlo en alma y cuerpo, se sentía la peor basura de este mundo pero ya lo había decidido

No pudo mas con sus pensamientos y se dirigió a la habitación de Taehyung, al estar frente a su puerta dudo en tocar, pero al final lo hizo

Taehyung se encontraba sentado frente a su tocador ya se había puesto su pijama y se estaba cepillando el cabello, escucho un par de golpes sobre su puerta

-pase- a través del espejo pudo ver que se trataba de Jungkook, ingresando a la habitación

-hola- saludo el castaño de forma indiferente

-solo vine a despedirme- contesto Jungkook aun parado sobre el filo de la puerta

-¿a donde iras?- preguntó un poco confundido el castaño.

-de regreso a casa o tal vez al sur de Francia a pasar el resto del verano- respondió el peli negro con voz cansina

-no puedo seguir con tus jueguitos Taehyung-

-¿Qué? ¿de que hablas?-

-agh por favor, no te hagas el inocente, primero eres cálido y al siguiente minuto eres frio como el hielo, me haces sentir como un idiota y me confundes-

-bien, si te hago sentir asi eres libre de irte, es lo mejor- la templanza que mantenía Taehyung al responder irritaba aun mas al peli negro y estaba terminando de hartarlo...

-bien por ti- el peli negro se giro y estaba por salir de la habitación pero el castaño lo detuvo...

-Junkook no quiero que quedemos en malos términos-

-yo no veo otra opción querido, eres un hipócrita y no sabes cuanto me molestan los hipócritas- el castaño no podía creer lo que escuchaba, quería romperle la cara pero aun asi quería seguir escuchando los argumentos de Jungkook

-bien, dime por que soy hipócrita- pregunto cruzándose de brazos, esperando a que el odioso peli negro siguiera con su teatrito

-no me jodas Taehyung, te la pasas predicando a los cuatro vientos que hay que esperar el amor y bien ¡aquí esta! ¿¡Que carajo esperas!? Esta frente a ti y lo dejaras ir... esto se acabo incluso antes de empezar- aquello último lo dijo con la voz rota, le resultaba increíble que el se estaba creyendo sus propias mentiras o tal vez por primera vez en su vida estaba siendo sincero, y estaba aterrado no podía creer lo que había dicho

-me voy, solo, olvida lo que dije- estaba por salir pero antes de que tomara el pomo de la puerta Taehyung se apresuro y la cerró y paso el seguro de esta.

Se miraron por unos instantes sin decir nada más, Taehyung estaba aterrado, pero todo dejo de importarle cundo Jungkook lo besó, empezó por un toque cálido, luego otro, y otro más, cada vez mas húmedo, mas necesitado, su cálida lengua se aventuraba a rozar la suya, podía jurar que jamás había sentido algo asi con un simple beso, el cual se comenzaba a tornar mas sucio, mas morboso, el choque de sus labios resonaba por la habitación acompañado de jadeos y respiraciones herraticas, Taehyung había comenzado a desabrochar los pantalones de Jungkook y ambos se dirigian hacia la cama, el castaño se sentó sobre esta y comenzó a desabotonarse la camisa de su pijama dejando al descubierto la piel acaramelada de su pecho y abdomen, su pecho subia y bajaba ya que su respiración aun seguía demasiado acelerada, Jungkook admiraba aquella imagen con deseo, pero hizo una pausa, su semblante cambio a uno que denotaba demasiada culpa, se sintió como la peor escoria de este mundo, el ya había lastimado y había arruinado vidas, pero no la de Taehyung... no él... no cuando le habia ofrecido su amistad, su cariño, amor puro, sin dobles intenciones, sin trampas, Taehyung no merecía esto, merecía a alguien mejor, y el no se interpondría en su camino, tal vez ya era demasiado tarde para él, pero no para ese precioso angel de piel acaramelada...

-lo siento Taehyung, no puedo hacer esto- sin mas el azabache salió de la habitación pensando en que era lo mejor para Taehyung, el seguiría conservando intacta su imagen y su inocencia, pero para el castaño fue una dura y cruel muestra de rechazo, que le dejo el corazón roto y el autoestima por los suelos...

"como iba a estar contigo cuando ha tenido a mejores que tu... eres un iluso" se repetía a si mismo mientras observaba la puerta cerrándose...

Jungkook se dirigió a su habitación y se encerro, caminaba en círculos, miles de sentimientos lo abrumaban, "es lo mejor para Tae"... "el no merece esto"... "maldición Jungkook eres un imbécil"... "ya lo tenías... era tuyo, ¿porque mierda no lo tomaste?"... Jungkook estaba confundido, por primera vez en su vida sentía culpa y remordimiento, ¿asi se sentía hacer las cosas bien? creyó que se sentiría bien, entonces ¿porque se sentia terrible? ¿acaso lo amaba?... Se preguntaba mientras jalaba su cabello con desesperación sentía una opresión en su pecho, su cuerpo pesaba y no podía respirar, se detuvo frente al espejo y se miro a si mismo, era como mirar a un niño asustado, teniéndolo todo pero a la vez nada, se sentía patético, miraba su reflejo diciéndose a si mismo que era una vergüenza y un maldito cobarde, estaba cansado de ello física y emocionalmente, decidió ir al baño y darse una ducha para después irse a dormir y olvidarse un poco de todo este absurdo juego, tal vez las cosas mejorarían a la mañana siguiente y podría hablar con Taehyung y confesarle sus sentimientos y disculparse ya que lamentaba haberse comportado como un idiota con él, y que intentaría hacer las cosas bien, ser una mejor persona y el novio que el merece tener, solo quería darle descanso a su mente y a su corazón, todos esos extraños y nuevos sentimientos lo agotaban en demasía.

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Apenas comenzaba a amanecer, el cielo comenzaba a aclararse, y el peli negro ya había despertado -mierda, porque despiertas a esta hora, son vacaciones- tallaba sus ojos y bostezaba, aún se sentía demasiado agobiado pero el dormir lo había ayudado a aclarar sus ideas, volteo hacia la mesita de noche y vio su diario sobre ella, pensó en que tal vez ya era tiempo de darle punto final, y sepultarlo en lo mas profundo de algún lugar donde nadie lo encontrara, comenzo a hojearlo, y comenzó a leer su mas reciente hazaña con Park Jimin, donde ya había puesto una de sus fotografías, su encuentro con aquel doncel había sido interesante cautivador y ese chico lo había llevado al mejor climax de su vida, pero un asi el no le pertenecia, sus sentimientos eran para Namjoon y eso hacia que aquellas noches solo fueran eso... solo sexo, no sabían igual si su corazón seguía frio, y el se sintiera vacio, claro aquellos días estaban cambiando porque Taehyung los llenaba de luz con esa hermosa sonrisa que le regalaba observar sus ojos color avellana enormes y cálidos, llenos de vida y le regalaban todo el amor del mundo con tan solo mirarlo... era tan puro y tan bello que su corazón latía fuerte tanto que juraba que se le saldría del pecho y el hecho de que lo hacia sonreir, lo ayudaba a liberarse unos instantes de su obscuro y mundano pasado, para él Taehyung era como una cura para su alma, estaba quedándose dormido ya que el solo hecho de pensar en el castaño lo hizo relajarse y sentirse en paz, hasta que por fin cayo en sueño profundo, con su diario abierto sobre su regazo...

El sol brillaba con intensidad y se colaba por las ventanas, hacia mas calor y estaban por dar las 11 de la mañana, Jungkook seguía dormido, la puerta fue abierta de manera sigilosa, ni siquiera dio el mas mínimo rechinido, una delgada figura se acercaba a él y unas manos se posaban sobre aquel diario, intentando hurtarlo por unos instantes y descubrir los grandes secretos que guardaba, pero aquella presencia no esperaba que Jungkook fuera de sueño tan ligero que de inmediato de aferro a aquel cuaderno sorprendiendo a quien ahora se había convertido en la peor de sus molestias

-que es lo que quieres Jisoo- Jungkook tomo su diario y lo cerro para evitar que su hermanastra lo intentara verlo, su presencia le había quitado la poca paz y tranquilidad que había logrado sentir.

-¿y bien? ¿Cómo te fue anoche?- la peli negra se sentó sobre su regazo preguntando sobre su nueva hazaña.

-¿de qué hablas?-

- mmmhh dijiste que me darias todos los pormenores... si supieras que Jimin me dio cada detalle de todo lo que le hiciste maldito depravado, lo tienes a tu merced, sin duda te luciste con él, pero bueno, Jimin ya es material desechable, lo mas importante de esto, es ¿como te fue con Taehyung?- Jisoo al hacer aquella pregunta se acercó aún más al rostro del peli negro, estaba ansiosa por saber hasta dónde podía llegar su hermanastro, Jungkook bien podía mentir, y librarse de su molesta hermanastra, dar por terminado todo pero estaba cansado de mentir y manchar la imagen de otros a costa de sus propios intereses, él iba a cambiar, odiaba que ella estuviera siempre inmiscuida en su vida privada, sentía que lo asfixiaba pero decidio hacer bien las cosas y decirle la verdad...

-si quieres saber si me follé a Taehyung no... no lo hice-

-¿Por qué?- preguntaba como si fuera algo nuevo para ella, con ese rostro inocente que detrás de éste no había mas que una criatura tan peligrosa como una mamba negra lista para atacar.

-Jungkook, por primera vez en su vida estaba siendo alguien con principios y valor moral, aunque eso venia sobrando con Jisoo ya que ella carecia de valores, sentido de empatía y cualquier tipo de buenos sentimientos, era una sociópata, una mala persona hasta el tuétano, Jungkook se sobó el puente de su nariz intentando mantener la cordura y mantener su postura firme y salir ileso de cualquier palabra filosa que le diría Jisoo...

-¿él te rechazo?- preguntó la peli negra aún sorprendida por el nuevo giro en todo su estúpido juego

-no... fue todo lo contrario, el estaba ahí, sobre la cama, desabotonándose la camisa dejándome ver su piel expuesta, y yo lo detuve-

-¿por que?- la peli negra seguía desconcertada, ella juraba que su hermano habia tomado lo que le pertenecia igual que siempre, pero el verlo lleno de culpa, confundido y con ese rostro lleno de bruma le habia parecido aun mas interesante, era nuevo en el, y ella escudriñaria en lo mas profundo de su mente para saber que habia detrás de todo ello...

-solo sentí que no estaba bien, ¿entiendes?- ella sonrió ladina, y estaba lista para herir su orgullo, era algo que amaba hacer...

-significa que perdiste la oportunidad de follartelo y la desperdiciaste, eres un imbécil-

Jungkook termino por perder los estribos y la quito con brusquedad de su regazo, tomando su diario con el dirigiéndose al vestidor para escoger su ropa e ir a buscar a Taehyung

-oh por cierto si vas a buscarlo a su habitación, el ya no esta- hablo la peli negra tranquilamente

-¿donde esta?- pregunto hastiado y con ganas de matar a alguien en ese momento, como fue que las cosas se habían escapado tan fácil de las manos.

-¿no lo sabes?, se fue hace media hora, se disculpo con la tia Young-ok y se fué a casa de unos amigos, o al menos eso fue lo que me platicaron las empleadas... metiste la pata Jungkook, ese chico recobro la cordura, se dio cuenta de la clase de persona que eres, y ten por seguro que no se te volverá a acercar- sonrió con sorna, tal parece que ya estaba saboreando su victoria y no solo eso, su hermanastro sufría en demasia..

Jungook se vistió con lo primero que encontró y salio como alma que lleva el diablo de la casa de su tía manejndo a toda velocidad en su Jaguar, trato de pensar en como localizar a Taehyung y recordo que él le contaba todo a Jackson, y no dudo en contactarlo, él le daría la información que necesita ya que aun tenia amarrado de las pelotas a ese idiota.

Jackson se encontraba en su habitación mirando videos de Girls generation en su teléfono cuando de repente entro una llamada, al parecer era ni mas ni menos que de Jungkook, tenia que atenderla por su propio bien.

-¿que ocurre?-

-¡dime dónde esta!- pregunto el peli negro con desesperación y Jackson sabia perfectamente de quien hablaba, rodó los ojos, estaba cansado de ser el peor amigo del mundo, y decidió hacer como que no sabia nada...

-¿donde esta quien?-

-sabes perfectamente de quien hablo imbécil, sabes muy bien que puedo arruinarte con una simple llamada Jackson, ahora dime ¡donde se metió Taehyung!-

-amigo ya déjalo en paz, él no se merece esto, lo lastimaste-

-lo sé, y quiero enmendarlo, se que él es una buena persona y no quiero quedar en malos términos con él, ahora dime donde diablos está - el peli plata masajeó su cien rogando porque las cosas no empeoraran para su mejor amigo rogando que ese pedazo de idiota de verdad estuviese diciendo la verdad y termino por soltar todo...

-se dirige a la estación 405 Hangang-daero, tomara el tren de las 12 se irá con unos amigos de sus padres que viven al este, en Yongsan-gu, te mandaré la ubicación por mensaje, su amigo se llama Park Seojoon ahí lo encontrarás.

-gracias- respondió Jungkook aún con los nervios alterados pero un poco más aliviado de saber por fin en dónde podría encontrar a Taehyung...

Fin de la llamada