En la vida de ellas yo fui así; Breve y Fugaz…

De muchas me fui sin despedirme y sin decir adiós, a todas ellas les tengo que
decir…

Gracias por conocerlas, por transitar por mi vida, por habitar dentro de mi (un
breve o largo tiempo), por desordenar mi mundo, por enseñarme a ver otro,
por abrir la ventana oxidada, por hacerme soñar, por revivir un sentimiento,
por existir y cruzarse conmigo. Aunque no estuvieran destinadas a ser el amor
que se quedaría por siempre sujeto de mi mano.

No tengo nada que reclamarles porque me hicieron feliz en su momento y dejaron una cicatriz dentro de mi que llevo con orgullo. Anden por el mundo haciendo sus cosas
y llévenme en su memoria.