8
Sobre el pasado
Cuando la cena termino, SeokJin y Yoongi caminaron de regreso a la casa del pelinegro, no sin antes haberse despedido alegremente de la peculiar pareja que les acompaño aquella noche.
—Tu amigo es agradable —habló SeokJin, sonriendo al pelinegro quien levantó la mirada casi de inmediato al escuchar aquello.
—¿Te parece?
—Sí —afirmó el pelinegro con su cabeza—, es muy alegre, y su amigo, el rubio, también lo es, ¿Hace cuánto se conocen ustedes tres?
—A decir verdad —habló Yoongi—, solo Tae es mi amigo, el otro chico, bueno, es la primera vez que lo veo.
—Oh, ¿Enserio?
—Sí —afirmó el pelinegro—, tendré que hablar con Tae sobre eso, quien sabe de dónde habrá conocido al chiquillo.
—Woah, creía que los tres eran amigos.
Yoongi solo negó.
—Entonces, ¿Hace mucho que conoces a Taehyung?
—Sí —afirmó el bufón, deteniéndose en cuanto llegaron hasta el árbol frente a la casa de SeokJin—, es hora de ir a casa, pastelito —murmuró el pelinegro, intentando detener las preguntas que sabía, SeokJin quería formular.
—¿Te gustaría subir? —preguntó, intentando evitar la ida del pelinegro.
—¿Me estás invitando a tu habitación, pastelito? —preguntó Yoongi, sonriendo de lado y levantando sus cejas sugestivamente.
—¡No de ese modo! —dijo el muchacho, cubriéndose el pecho con el saco de campesino que traía encima.
—Jajaja, solo bromeaba, pastelito —respondió Yoongi, encarcaramándose al árbol a modo de respuesta.
SeokJin sonrió e imitó las acciones del pelinegro, subiendo tras de él para al fin llegar a su balcón.
—Adelante —dijo SeokJin, sosteniendo la puerta de su balcón para invitar a Yoongi a su habitación.
Sabía que aquellas acciones no eran apropiadas, sin embargo, la sarta de preguntas que se arremolinaban en su cabeza le decían que lo mejor era permitirle a Yoongi sentarse antes de iniciar su interrogatorio.
Yoongi le miró de una, sabiendo perfectamente que aquella acción se debía a las intenciones del pelinegro por saber más de su pasado, y confiando en él, Yoongi ingreso a la pequeña habitación.
Sin prestar mucha atención al decorado, el pelinegro se sentó sobre la cama, entrelazando sus manos y mirando a la alfombra, hablo.
—Pregunta —dijo sin más, manteniendo siempre su mirada baja—, responderé la mayor cantidad de preguntas posibles.
—¿Cómo...?
—Eres fácil de leer, pastelito —dijo encogiéndose de hombros.
SeokJin se sonrojo, mirando a todos lados excepto a los ojos oscuros que se alzaron para mirarle directamente.
Caminando con pasos pesados y los nervios a flor se piel ante la intensa mirada de Yoongi, SeokJin se acercó a tomar asiento a un lado del pelinegro.
—¿Te molesta que quiera preguntar sobre tu pasado?
—No —negó el bufón—, simplemente es extraño recordar todo aquello.
—Uh, perdón por incomodarte —dijo SeokJin, jugueteando con sus dedos.
—No me molesta, pastelito —dijo el pelinegro, sosteniendo las manos de SeokJin entre las suyas—, además, quiero confiarte mi pasado.
SeokJin sonrió, mirando a Yoongi antes de morder su labio y acercarse lentamente al rostro contrario, respirando el mismo aire que Yoongi, con tan solo unos pocos centímetros de separación, SeokJin se alejó abruptamente al escuchar los sigilosos pasos fuera de su habitación.
Reaccionando rápido y sin la menor contemplación, SeokJin se lanzó sobre Yoongi, sorprendiendo al contrario ante lo repentino de su acción y cubriéndolos a ambos con su enorme cobija.
—Oye, tranquilo pastel...
—Shh, es mi madre —susurró SeokJin contra su oído, abrazando el cuerpo de Yoongi para fingir ser una misma persona y que su madre no descubriera ambos bultos sobre la cama.
La mujer solo abrió un poco la puerta, observó a su hijo dormir y después, abandono de nuevo la habitación.
SeokJin se mantuvo conteniendo el aliento en todo momento, hasta que por fin, se sintió completamente seguro y se levantó de una de la cama, sonrojado y con el corazón acelerado.
—Lo siento —murmuró—, estem... —rascó su nuca con nerviosismo—, ¿En qué estábamos? —Yoongi le miró atontado, procesando lo que acababa de acontecer—. Ah, si, te pregunté, ajem —aclaró su garganta—, ¿Hace cuánto conoces a Taehyung?
—Uh, hace ya algunos años —dijo el pelinegro, evitando hablar de lo que recién había sucedido al darse cuenta del nerviosismo de SeokJin.
—¿Cómo se conocieron? —preguntó esta vez, tomando asiento nuevamente a lado del pelinegro.
Yoongi soltó un suspiro, antes de mirar al suelo en busca de palabras para explicar lo sucedido en aquel entonces.
—Digamos que... Nos salvamos mutuamente —SeokJin le miró extrañado, guardando silencio a la espera de que Yoongi pudiese hablar nuevamente—, Taehyung era un campesino normal, lo conocí un día que vagaba por el reino, ese chico —sonrió—, fue el único que se acercó a mi de manera amable. Tae siempre fue muy amigable, se convirtió en mi mejor amigo en solo días, y juntos pasamos muchas aventuras en los confines del reino, hasta qué sucedió aquello —la sonrisa en su rostro se borró, y una mirada triste la reemplazo—. La hija del rey, esa chica se obsesión conmigo, estaba empeñada en volverme su juguete personal, me quería mandar y humillar en cada oportunidad y el rey, simplemente la dejaba. Cierto día, esa chiquilla me siguió por la noche, cuando fui a reunirme con Taehyung.
—Oh, dios.
—Sí —dijo Yoongi—, es lo que te estás imaginando —murmuró abatido el pelinegro—, la niña mando matar a la familia de Tae, a él incluído, sin embargo, yo lo salve y lo lleve conmigo. Ambos escapamos de aquel lugar y desde entonces, Tae es mi fiel compañero.
—¿Él sabe lo que sucedió?
—Lo sabe —dijo Yoongi afirmando—, aunque lo niega, se que no quiere hacerme sentir culpable de aquello, pero yo sé que fue mi culpa, si tan solo no hubiese sido tan descuidado, nada de aquello habría pasado.
—Pero Yoongi... No es tu culpa.
—La es, Jin, estoy consciente de ello. Por eso, intento siempre proteger a Tae, él es como mi hermano y evito a toda costa que los reyes a los que sirvo o sus familiares sepan de él, porque no quiero ponerlo en riesgo de nuevo, yo... Se lo debo, por su familia, yo, yo debo protegerlo.
—Oh, Yoongi —murmuró SeokJin, antes de lanzarse a los brazos de aquel pelinegro que intentaba mantenerse fuerte ante sus ojos.
Sin embargo, en cuanto aquellos brazos le rodearon, Yoongi no pudo más y soltó en llanto.
Cobijado por aquellos brazos, abrigado por aquel calor y sobre todo, comprendido por aquel corazón, Yoongi dejo ir, por primera vez, aquella culpa que le taladraba el alma, pues el nunca, jamás, había llorado y su alma se sentía tranquila al, por fin, dejar salir aquellos sentimientos fuera de su pecho.
♔
¿Ustedes están llorando? Porque yo sí estoy llorando 😭
*Se limpia los mocos 🤧... Ahora sí, ya un poco más calmada, puedo decirles que, les agradezco muchísimo todo su apoyo, enserio que no tengo palabras para agradecerles y bueno, siguiendo sus consejos y ánimos, me decidí por inscribir la historia a los YoonJin Awards ❤️ claro, no sin antes persuadir a mi hermosa CrisAngelz para que se uniera conmigo 🤭❤️
Mis amores, una vez más, les agradezco por tanto amorcito que le han dado a la historia, miren que ya llegamos a los 6k de lecturas y el 1k de votos y eso es, ¡woah!, Mi pequeño corazoncito está que llora de emoción 🤧❤️
Ahora sí, me despido, les mando muchos besitos cariñositos y recuerden siempre que les amito mucho ❤️
Pd: Si tienen alguna historia YoonJin, deberían animarse a participar en el concurso, eddlys es la personita que está llevándolo a cabo, por si gustan pasar a su perfil e inscribirse.
Pd2: Perdonen nuevamente la super biblia que les escribí acá 😅❤️
✿Kim☆Palomita✿
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro