
Melissa
El centro de ayuda de la ciudad quedo incinerado pudieron Salvar a los niños, pero no a María Mercedes y a otra mujer que aún debían de identificar. En Crossville murió la directora del centro y no Esther como muchos creían.
Elena Carvajal se volvió una mujer muy molesta, hablaba de los espíritus, demonios y otras cosas. Al poco tiempo Elena empezó a llenarse de piedras y crucifijos pues según la mujer la protegería y la cuidarían de todo mal; aunque en el pueblo se pensaba que esa mujer era la responsable y las locuras que hacía eran solo una pantalla para que nadie sospechara de ella.
Esta vez la protagonista de la pesadilla seria Melissa... Pero ¿quién era aquella mujer? Nadie en el pueblo la conocía y tampoco era alguien de la ciudad... pues su nombre descansaba en una lápida en el panteón de Crossville. Nadie sabía de ella porque su tumba era una de las últimas, además estaba sucia y olvidada.
Melissa Martín
(1935 - 1954)
"gran hermana, buena hija y la mejor amiga"
Aún no lo sabían, pero ella fue la primera en morir hace 66 años cuando todo había comenzado. En Crossville se convencieron de que esa mujer era la responsable y tenían que acabar con ella.
Los intentos de Luis y del cura Salvatore por unir a los pueblerinos eran en vano pues Marcela se había encargado de difundir rumores sobre el cura, decía que confesándole los pecados a un desconocido no lograrían nada pero después de esta pesadilla todo cambiaria.
Melissa.
Juan Triana y José Fernando McCarthy fueron los primeros en verla.
Una mujer de aproximadamente 19 años vestida de blanco y con un aspecto cansado, aquella chica se acercó a ellos preguntando sobre un lugar específico.
-¿Podrían decirme donde está ubicada la tienda "mi buen pastor"?- Pregunto con voz baja. -, necesito ver a mi madre.-
Los dos quedaron atónitos porque no existía ese sitio.
-¿Dinos... quien es tu madre?-
-Samanta Bonet.-
Ambos quedaron muy confundidos pues no conocían a la dueña de aquel nombre; y entonces desapareció... Si, aquella mujer de blanco desapareció, se desvaneció como el humo; Triana y McCarthy quedaron muy asustados pues las personas no se esfuman así como así ¿verdad?.
La siguiente aparición fue en la plaza, pero solo la vieron dos personas, Esther y Johanna... Aquella mujer volvió a preguntar por Samanta Bonet, pero no obtuvo respuesta favorable.
La mujer empezó a retorcerse de una manera escalofriante, parecía que no tuviera huesos, entonces comenzó a alzarse en el aire, su rostro se desfiguró, era como si llevara muerta un par de años.
Esther y su acompañante no podían creerlo.
Su tercera aparición fue en la iglesia frente a todos... Cuando el cura Salvatore iba a comenzar a hablar, se desplomó en el suelo, algunos trataron de ayudarlo. Pero había algo que no los dejaba acercarse y así de la nada apareció Melisa, sostenía una vela en sus manos, vestía una bata larga blanca y una corona de rosas marchitas que adornaba su cabeza, su rostro apenas y se podía ver.
A lo lejos se escuchaban unas trompetas no tenían un ritmo específico, pero era molesto, la mujer alzo una de sus manos e hizo que todos los ventanales del lugar se rompieran, sopló la vela y al hacerlo se abrió una enorme grieta por todo el piso.
-Buscó a Samanta Bonet, ¿la han visto.?- pregunto una vez mas.
Todos los habitantes de Crossville negaron con su cabeza... Tenían miedo. De aquella grieta salía fuego y este empezó a expandirse por todo el sitio, algunos consiguieron huir, pero otros quedaron incinerados en la iglesia.
Melissa salió atrás de los que lograron escapar repitiendo de manera constante
-Busco a Samanta Bonet-
Empezó a señalar personas y estas caían como muñecos... Bueno se convirtieron en muñecos de trapo sin ninguna explicación.
Los únicos que quedaron en pie fueron los cuatro que pudieron verla desde el inicio; estando frente a frente, Melisa volvió a preguntar, pero esta vez se respondió a sí misma.
-¿Dónde está Samanta Bonet.?- interrogo. -Yo te diré donde está- A punto en dirección al panteón cerca a la iglesia y luego desapareció, tras de ella dejo una cortina de fuego que fulmino a los cuatro sobrevivientes.
***
Despertaron empapados en sudor y con un ardor inimaginable en uno de sus brazos parecía que se habían quemado.
La mujer muy emocionada estaba en el sótano de la vieja casa, pero su alegría duraría poco pues aquel demonio está enojado. Ella había roto una parte de su trató el cual decía que si obtenía ayuda le quedarían 6 días para terminar con todo... de lo contrario ella moriría y no obtendría lo que se le había prometido.
Ella pensaba que obtener la ayuda de Melissa no sería problema pues antes ya había utilizado la ayuda de Elizabeth y no había ocurrido nada.
En el brazo de los pueblerinos estaban marcadas las letras E L y desde ese punto comenzaron a reconstruir la historia con todas las pistas y cosas que habían visto en las anteriores pesadillas y sobre todo en la última.
Pero para el cura Salvatore eso no era una pista, aquella era la marca del diablo que venía para llevarse las almas de todos, por eso el insistió a Luis para que las confesiones se adelantarán. Así fue... no los obligarían, pero si tratarían de convencerlos de que eso sería la mejor opción, a Marcela la idea de confesar sus pecados le parecía tonta pues si lo hacían sería aceptar que morirían a manos de esa loca.
En la tarde del siguiente día tendrían una reunión en el ayuntamiento para atar cabos y encontrar a la responsable, se suponía que ya tenían el nombre solo debían encontrarla. Sin embargo, la mujer fue mas astuta, dejo pistas falsas, aunque eso no impidió que la encontraran más adelante.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro