Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

4.

—Jihoonie, no encontré helado de chocolate, Vernon dice que el proveedor llegará mañana — Suspiró cansado, subiendo las escaleras de la casa para encontrar al blanquecino — Pasé a otras tiendas como me dijiste, pero no hay.

Su cuerpo se tambaleaba de un lado a otro por caminar más de lo que su cuerpo podía soportar, abrió la puerta casi sin energías y cuando quiso tirarse sobre la cama, una pequeña caja se lo impidió.

La tomó entre sus manos y miró alrededor para buscar a su esposo, pero no lo encontró. Miró el objeto con la palabra ábreme. Curioso obedeció y su alma dejó y volvió a su cuerpo en el momento que leyó la frase en la parte interna de la caja.

—Vamos a ser papás — Repitió. Con manos temblorosas dejó la caja sobre la cama, sosteniendo el pequeño gorro de lana con orejitas y los pequeños zapatitos que entraban en una sola mano. Con cuidado de no dañarlos, los metió de vuelta y tomó la pequeña nota.

"Papá, tendrás que cumplir mis antojos de ahora en adelante y por siempre."

En ese momento un miedo inundó su cuerpo, quería llamar a Jihoon pero las palabras no brotaron y de sus ojos una lágrima surgió empapando aquella nota que sabía que su esposo había escrito con sus propias manos.

—De ahora en adelante

Al escuchar esa voz, el mayor se volvió y cuando visualizó al blanquecino acariciando su vientre plano, supo porque no quería que lo abrazara.

—Por siempre — Culminó Seungcheol.

Y como si sostuviera el objeto más frágil del mundo, tomó a Jihoon en sus brazos y llenó de besos las mejillas húmedas del blanquecino. Sentía miedo, no podía mentir, pensamientos buenos y algunos malos perturbaban su mente, pero al tener el pequeño cuerpo en sus brazos, ese que llegó en un día frío de invierno y lo salvó de sus rutinas aburridas. Pudo sentirse el hombre más feliz y poderoso del planeta.

—¿Volviste a ir solo con el médico? no me llevaste Lee Jihoon — protestó el mayor sentando correctamente a su esposo sobre sus piernas, aferrándose a él.

—En mi defensa — Se detuvo un momento analizando si era correcto decirle las molestias que había tenido. Negó internamente — Solo iba a una cita de rutina.

—No me dijiste nada sobre una cita de rutina.

—Debí olvidarlo.

—¿Por eso no te encontré en la tienda? — Jihoon asintió.

De pronto el cuerpo del blanquecino se encontró sobre la cama y ya no en las piernas del mayor, tardó unos segundos en incorporarse y percatarse de lo que ocurría — ¿A dónde vas?

—A cumplir lo que acabo de prometer. Mi bebé no debe quedarse con el antojo — Apretó la mejilla del blanquecino, regalándole una sonrisa.

—Puedo esperar hasta mañana Cheolie, ya es tarde.

— ¡Claro que no! no puedo hacer esperar a mis bebés — se Inclinó levemente, quedando a la altura perfecta para depositar un beso en los labios ajenos, después reposó su frente en la de Jihoon, cerrando los ojos al tocar el vientre plano del bajito — No tardo.

Jihoon asintió. Pero antes de que Seungcheol se separara, tomó su mano una vez más; no quería dejarlo ir. — Con cuidado

—Lo tendré, te amo Jihoonie.

—Te amo Cheolie

El tiempo transcurría. Jihoon trataba de mantenerse despierto para esperar a Seungcheol. De vez en cuando observaba la pantalla de su celular, su cabeza se tambaleaba de un lado a otro obligándolo a tomar la almohada del mayor, abrazarla y aspirar su aroma. Sin notar que cada segundo que pasaba, se sentía más cómodo, cerrando sus ojos por completo.

Quedándose dormido.

"Necesita ser operado de emergencia, necesito que contacten a sus familiares ¡ahora!"

Como si le hubiesen dado un pellizco, Jihoon se levantó de golpe y con su respiración agitada, miró a su costado y Seungcheol no estaba. Realizó unos ejercicios de respiración para guardar la compostura y tratar de controlar su corazón. Observó la caja que había preparado para darle la noticia a su esposo, seguía encima de la cama, la tomó y la dejó sobre el cajón de a lado.

Se sentía extraño. Sentía miedo por alguna razón desconocida. Buscó a Seungcheol en el baño, sintiéndose un poco culpable por haberse quedado dormido cuando su esposo estaba fuera de casa. Al no encontrar al mayor, bajó las escaleras — ¡Cheolie! — Gritó y esperó por una respuesta, pero no hubo ninguna.

El blanquecino continuó hasta la cocina, esperando ver a Seungcheol con un lindo mandil y preparando un rico desayuno, pero no fue así. Regresó a la habitación y tomó el celular para llamarlo. Sus ojos se abrieron a tope cuando se encontró con la hora en la pantalla, era muy tarde. Una idea cruzó por su mente, de seguro Seungcheol no lo despertó para ir a trabajar, tratando de consentirlo.

Quería creer eso por un momento.

Mientras corría de un lado a otro para poder alistarse y salir al trabajo. Intentó llamar a su esposo para reclamarle, sin embargo la voz que respondió no era la de Seungcheol, era la fría voz predeterminada del buzón de voz.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro