Crimson caminaba cabizbajo entrando al edificio universitario. Caminó pegado hacia los casilleros observando a su alrededor, seguía sin sentirse totalmente cómodo con todos los alfas estando a su alrededor.
¡Crimson!-. Miró hacia el frente observando como Raven iba corriendo hacia el. El omega se acercaba a el corriendo sin detenerse haciendo que el ojiazul quisiera salir corriendo pero antes de que pudiera hacerlo el omega efusivo se colgó a él en un abrazo fuerte.- ¡hey!¿qué tal has estado? Sabes que recordé último día -. Tomó su mano jalándolos por los pasillos sin dejar que tomara un descanso. Aunque a Crimson le agradaran los gemelos tenía una inquietante sensación desde lo sucedido con Rae la última vez, un gruñido de lobo alfa nunca significaba nada bueno.-. ¿No crees?

¿Uhmm?-. Crimson se sonrojó al notar que no había notado de que estaba hablado Raven en todo lo que habían caminado. Este rodó los ojos y negó.

Que no he conocido a tu alfa ¿crees que puedes presentármelo?-. El ojiazul lo miró sorprendido, en definitiva no había pensado en eso, pero el hecho de presentarle un omega a Alec le revolvía el estómago e incomodaba a su lobo. Sin embargo, alejó esas ideas de su mente y asintió levemente comenzando a emocionarse por la idea. Nunca había invitado a un amigo a su hogar y mucho menos ahora que estaba con Alec.

¡Grandioso!, ojala yo conociera a la mía-. Suspiró riéndose y dandole un golpe en el hombro a Crimson.

Si quieres puedes irte conmigo hoy y puedes conocer a Alec de una vez por todas-. Se apresuró, la idea no se alejaría de su mente y sabía que si esperaba mucho se iba a arrepentir de haber aceptado que se conocieran.- no creo que debas esperar mucho para conocer a la tuya... o el tuyo-. Susurró en el final no queriendo que molestara a Raven.

Me hubiese gustado que Rae hubiera venido con nosotros, pero creo que hoy prefirió ir con otro grupo que estar con su gemelo-. Gruñó hacia si mismo más que para el pelinegro-. Ha estado rara desde que te gruñó, lo siento por eso, no se que sucede con ella-. Suspiró colocando su frente sobre el casillero, a veces los sentimientos de su gemela podían afectarle a él y definitivamente no quería dejarse llevar por ellos.-

No te preocupes por eso... es, no lo sé-. Solo le había asustado, de hecho conforme a sus experiencias anteriores con alfas era como un pequeño chiste para él. Pero esta vez era diferente ya que había una pequeña amistad entre ellos.

Hablaré con ella cuando pueda-. Le abrazó por los hombros riéndose sonoramente, ganándose algunas miradas.- no quiero amargarme con eso Crimson, por qué mejor no nos alistamos para las siguiente clase ¿mh?-. El pelinegro asintió restándole y caminó hacia su casillero sacando todos su materiales. Suspirando se dirigió a la primera clase donde estaba seguro tenía que compartir con Rae.

Entró sentándose en uno de los escritorios del medio y lentamente se volteó para visualizar a Rae y darle un saludo suave. Ella lo miró por unos momentos para soltar un gruñido bajo aunque le devolvió el saludo. El pelinegro se encogió en su lugar pensando ¿qué había hecho mal? El pensamiento se alejó de su mente cuando la clase iniciaba por lo que no pudo pensar más en ello; hasta cuando salió y se cruzó con Rae en la puerta.

Yo...-. Susurró sin saber bien que decirle, al ver que esta lo ignoraba de manera olímpica decidió quitarse del camino justo cuando un grupo pasaba empujándolo por el pasillo. Se pegó a la pared parpadeando furiosamente para evitar la humedad en sus ojos y observó el grupo gruñirle mientras iban detrás de Rae.

Comenzó a sentirse sumamente nervioso al no saber que estaba pasando y podía sentir a su lobo queriendo ir con Alec en ese mismo instante. Observó a su alrededor intentando consolarse así mismo de que nadie le estaba poniendo atención, y con ese pensamiento caminó hacia su siguiente clase.
No pudo quitarse de la mente a Rae en todo lo que quedaba del día, recordaba algo que hubiera hecho que hubiese podido molestarla a ella y aparentemente al grupo de alfas que la acompaña. Mordió su labio nervioso.

Al final del día caminaba cauteloso por el área de entrada, tenía una incomodidad en el pecho y su lobo estaba inquieto, lo que nunca era nada bueno. Saltó las escaleras del complejo para dirigirse a la calle, pero a mitad de su salto sintió a alguien empujarlo con fuerza haciendo que cayera sobre sus rodillas y se raspara parte de las manos.

Oww-. Se quejó acomodándose los lentes y algunos mechones de cabello. Se dió la vuelta para ver a una chica alfa de brazos cruzados viéndolo de arriba a abajo.-. No te preocupes-. Susurró sacudiendose la ropa.

No te pedí disculpas-. Crimson dió un paso hacia atrás considerando sus palabras y miró a su alrededor preparándose para salir corriendo.

Bien-. Habló en voz baja intentando no verse tan temeroso como el último año.

¡Hey! ¡Vi eso!-. Llegó Raven corriendo, lo había observado mientras los buscaba, y puso sus manos sobre su cintura mientras fruncía el ceño-. Lo hiciste a propósito-. Culpó.

Eso es lo que se merece-. Crimson y Raven se miraron confundidos sin saber de que hablaba. Ninguno de los dos tenía la menor idea de quien era esa chica y estaban seguros que jamás la había visto.

Disculpa ¿te conozco?-. Habló suave el ojiazul escondiéndose un poco detrás de Raven y bufando al mismo tiempo.

No, pero sé lo que hiciste-. Gruñó mostrando sus dientes-. No tienes ni un poco de vergüenza-. Ambos omegas retrocedieron un poco al ver como gruñía aunque los dos se vieron con cara de locos. Esta chica estaba más que confundida pues el pelinegro jamás había hecho algo.

Creo que te estas equivocando de persona-. Crimson le dijo dándose la vuelta y llevándose a Raven también. Estaba molesto y algo temeroso, hoy más de una persona le había gruñido y esta chica le acusaba de algo que el ni siquiera había hecho o sabía.
Sintió un jalón en su cabello haciendo que se fuera hacía atrás, lo que hizó que cayera sentado sobre su trasero. A lo lejos divisó el mismo grupo que le había gruñido riéndose de él y mirándolo con miradas victoriosas. ¿Qué había hecho? Sorbió un poco de su nariz y caminó esperando que no lo molestaran más quería. Quería ir a casa ahora.

Imbécil, te reportaré-. Escuchó a Raven dar un débil gruñido hacia la chica.- pequeño grupo de idiotas.- ayudó a Crimson a levantarse y comenzaron a caminar fuera del complejo. El pelinegro iba con los nervios a flor  y los latidos de su corazón estaban erráticos.
Ambos se quedaron en silencio ante lo sucedido, ninguno sabía que demonios había pasado y se sentían un poco sobresaltados con tanto gruñido de alfas.

¿Todavía puedo conocer a tu alfa?-. Preguntó cauteloso.

Alec, se llama Alec-. Sonrió Crimson al recordarlo-. Claro, no te preocupes.

Creo que deberías contarle lo que sucedió hoy-. Habló de forma baja en forma de sugerencia, sabía como se comportaban los alfas con sus omegas.

Lo haré, gracias-. Le sonrió levemente.- ¿por qué Rae está molesta conmigo?.-
Tenía que preguntarle, si alguien sabría sería su gemelo.

No lo sé, no me ha hablado desde el día de tu cita-. Murmuró sintiéndose un poco enfermo, no le gustaba estar peleando con su gemela, jamás había llevado a algo bueno.

Si... si ella te dice podrías decírmelo, yo he pensado toda la mañana en que pude haberle hecho pero no tengo idea-. Raven lo abrazó por los hombros y asintió. No estaba seguro de lo que ocurría pero si de algo estaba seguro es que nunca había visto a Rae estar tan enojada con alguien y le hacía preguntarse lo mismo de Crimson.

Vamos, es aquí-. Tomó la llave del complejo y ambos comenzaron a caminar hacia el elevador.

¿Vives con el?-. Se sorprendió un poco.

Si-. Sonrió el pelinegro-. Es mejor así-. Se encogió de hombros sin querer hablarle de la razón exacta del por qué lo hacían.
El elevador de abrió y ambos caminaron hacia una de la puertas donde Crimson metió su llave. El aroma de comida en cocción llegó a sus narices y ambos suspiraron ante el olor.

Alec debe de haber salido antes-. Sonrió emocionado y Raven solo pudo sonreír ante su expresión.- ¡Alec!-. Le llamó y rápidamente se escucharon unos pasos acercándose. Raven los miró atentos y con asombro al ver como eran uno con el otro.

Hola amor-. Se acercó hacía Crimson dejándole un beso en su frente y tomándolo por la cintura. Se volteó hacia Raven y lo miró cuestionante.- Hola, soy Alec ¿tu eres?-. Sonrió. Crimson le sonrió asintiendo.

Soy Raven y soy amigo de Crimson, espero y ya hayas escuchado sobre mi-. Miró sospechosamente al pelinegro quien comenzó a reírse mientras se colgaba del brazo del alfa. Este lo pegó más así mismo y asintió hacia Raven.

Lo hizo-. Rió junto con el omega-. Espero que tengan hambre por que acabo de terminar de cocinar-. Tomó a Crimson por la cintura para comenzar a caminar hacia el comedor y le señaló el lugar a Raven.

Iré en un momento, solo usaré el baño-. Ambos asintieron y discretamente le mandó una mirada significativa al ojiazul, aunque esta no pasó desapercibida por el alfa. De ese modo Raven desapareció de su vista y ambos comenzaron a caminar hacia el comedor nuevamente.

¿Qué fue eso?-. Le preguntó directamente tomando las mejillas del chico y mirándolo con los ojos entrecerrados. Crimson colocó la frente en el pecho del alfa y suspiró.