En la lejana ciudad de Hong Kong vivió un hombre que apagó la llama de su existencia antes de tomar un vuelo vacacional con su familia conformada por su señora y sus dos hijos pequeños.
Todo comenzó una tarde antes de que las vacaciones de verano comenzaran, Rui Fung, un hombre de 35 años de edad, proveniente de una familia muy unida, fue interceptado por la mafia la cual le infligió una misión de vida o muerte; Al otro lado del mundo, unos espías norteamericanos pronto llegarían a la ciudad prohibida en Pekin y robarían las reliquias más preciadas de la región y no podían permitir que la competencia se le adelantara a su plan.
Fue así como forzaron al licenciado en electromecánica a llevar unos explosivos en el cuerpo y arruinar la llegada de los rivales.
Este hombre asustado tuvo que fingir frente a su familia o sino la mafia los mataría a todos, llevándose también los bienes materiales de su hogar. Fung tuvo que convencer a su familia de viajar a América del Norte a fin de disfrutar de unas vacaciones inolvidables.
Ya en el aeropuerto, la familia del hombre pasó por todos los sistemas de seguridad, excepto el ultimo donde descubrieron las bombas aferradas a su cuerpo. En ese momento, el padre de familia tuvo que tomar una dura decisión; sacrificarse por el bien de sus seres queridos o que la mafia le quite todo lo que a él le importaba.
Antes de que la policía lo rodease, Rui corrió hacia la pista de aterrizaje, observó a todos las personas que lo veían en sus últimos momentos de vida, miró con lágrimas en los ojos a su amada familia y al oprimir el botón sus extremidades volaron en pedazos.
Todavía no encontramos a las personas responsables por el suicidio forzado de Rui Fung, La Mafia China está conformada por muchas personas y han estado en muchos conflictos con las fuerzas armadas, pero esto, esto ya llegó demasiado lejos.