Te echo de menos más de lo que puedo soportar.
Narra Jake.
Estábamos en la camioneta de bella ya que la llevaba a su casa. —Estoy a 42' grados.—Le dije y se asercó a mi.
—Mis manos están congeladas.—Dijo temblando.—Debe ser grato nunca sentir frío.
—Es cosa de lobos.—Dije orgulloso.
—No lo es, es cosa de Jacob.—Dijo ella.—Eres cálido, es como estar en el sol.—Dijo y en un rato llegamos estacionamos frente a su casa.
—¿Te sientes mejor, ahora que sabes todo sobre mi?.—Le pregunte.
—Pero...
—Vieron lo que le pasó a Emily, Sam se descontroló, se enfureció por un momento y ella estaba Serca de el ya no podrá regresar el tiempo, ¿Y si me enojo con alguna de las dos?.—Pregunte a Bella.
—Yo a veces, siento que voy a desaparecer.
—Se que no necesitas que te diga algo como esto pero siempre lo hare, no vas a perderte.—Me dijo Bella muy Serca de mi.—No dejaré que eso pase.
—¿Cómo?.—Pregunte.—Te diré todo el tiempo, lo especial que eres.—Me aserque a ella para besarla pero me separé la imagen de la hermana de bella se me vino a la cabeza.
—Gracias por todo.—Agradecio, se dió vuelta para salir pero cerré de golpe la puerta.
—Hay un vampiro.—Dije y me miró.
—¿Cómo sabes?.—Me pregunto.—Estoy oliendo.—Dije arrancando la camioneta.
—Es el auto de Carlice.—Dijo Bella mirando hacia atrás, las luces de su casa estaban encendidas.—Debe ser el.—Dijo saliendo rápido de la camioneta y entrando a la cocina.
—Bella es una trampa espera, ven conmigo.—Dije llegando a ella y tomando su brazo está me miró furiosa.
—No van a lastimarme.—Dijo segura de sus palabras.
—Si un Cullen volvió aquí, es su territorio.—Le explique.—Segun el tratado puedo defenderlas solo en mis tierras.—Le dije.—No puedo protegerte aquí.
—Okey, está bien no lo hagas.—Dijo ella, no pensaba en su hermana.
—Estas por cruzar la línea.—Le dije.
—Entonces no la marqués.—Me respondió entrando a su casa, me di la vuelta furioso caminandohacia la camioneta y la cerré de un portazo.
Narra Bella.
Al entrar a la casa me diriji a la cocina, se encontraba mi hermana con una taza de café y con Alice hablando muy animadamente.
—¿Alice?.—Pregunte feliz de verla y me aserque a abrazarla.
—Tu amiga fue muy amable.—Me dijo Alice.
—Soy su hermana.—Respondio ella rei.
—¿Quieres explicarme cómo estás viva?.—Me preguntó.
—¿A qué se refiere?.—Pregunto mi hermana.
—Tuve una visión tuya saltaste de un precipicio.—Dijo Alice toda alterada.
—¿Que?.—Mi hermana se aserco a nosotras, también alterada.
—¿Por qué rayos estás tratando de matarte?.—Me volvió a preguntar, observé a mi hermana me miraba incrédula.—¿Que pasaría con Charly, o tu hermana?.—Me dijo a los gritos.
—No estaba tratando de matarme Alice, era un clavado solo eso.—Le respondi.—Fue divertido.—Dijo y ambas suspiraron incrédulas, luego de eso nos sentamos en el sofá.
—Jamas eh conocido a alguien tan propenso poner en riesgo su vida.
—Tu le dijiste.—Le pregunte.
—No.—Me dijo ella.—El solo llama debes en cuando dice que quiere estar solo.—¿Bella, que es ese asqueroso olor a perro mojado?.—Dijo, bella olió su campera.
—Aamm, es probable que sea yo.—Dije parándome.—Oh Jake, Jacob es un hombre lobo.—Le explique a ambas.
—¿Estuviste con Jake?.—Me pregunta mi hermana.
—Oh bella los hombres lobos no son una buena compañía.—Le dijo Alice molesta, y Jake entro mi hermana se aserco a el.
—Habla por ti misma.—Le dijo el molesto, Alice se levantó.
—Queria ver qué estuvieran a salvó.—Dijo mirándome y luego a mi hermana.
—Es agradable.—Le dijo ella sobre Alice.
—¿Creí que no podrías protegernos aquí?.—Le dije.
—No me importo.—Me dijo el.
—Yo no las voy a lastimar.—Dijo Alice defendiendose.
—Lo se eres una inofenciba Cullen.—Le dijo.
—Hablo de la otra chupasangre que trato de matar a Bella por culpa de ustedes.—Dijo enojado.
—¿Victoria?.—Pregunto Alice sorprendida.—Si ella a estado por aquí.—Le respondi.
—Yo no la vi, a si como tampoco ví quien te sacaba del agua.—Explico Alice.—No pude verla por ti, y tus malditos perros.—Se dirijio Jake.
—No me provoques.—Me levanté colocándome al lado de Alice, Emma se puso en frente de Jake.
—Oigan, esperen ya basta.—Dije yo.
—Te daré un minuto.—Me dijo Alice y se fue, luego mire a mi hermana, y está entendío y se fue a la cocina.
—Oye, no hiras a ningún lado, ¿O si?.—Le pregunte a Alice.
—Si en cuanto tu calmes al can.—Dijo ella y se fue.
—El...—Jacob suspiro.—¿Cuantos Cullen volvieron y cuántos se quedarán?.—Me pregunto.
—No solo Alice.—Le dije, tome la copa de vaso de agua y la lleve a la cocina el me siguió.—¿Y los otros van a venir?.—Me preguntó.
—No, no que yo sepa.—Le respondí, mi hermana solo nos observaba.—¿Algo más?.
—Es todo.—Me dijo el.
—Bueno entonces si es todo, deberías volver corriendo con Sam.—Le dijo mi hermana asercandose a él.
—Lo hize otra vez, sigo rompiendo mi promesa.—Dijo el.
—No tenemos por que hacernos esto.—Le dije yo.
—Es inevitable.—Me dijo el y se asercó estábamos a punto de besarnos cuando en eso sonó el teléfono de la cocina y escuchamos a mi hermana contestarlo.
Narra Jake.
—¿Hola?, Con la familia Swan, ¿Quien habla?.—Llegue a ella y le saque el teléfono me miró para protestar pero le hice una señal de silencio y lo hizo.
—No está aquí ahora.—Le dije era el.—Esta coordinando un funeral.—Sentia la mirada de Emma y de Bella.
P. O. V.
Entro lado ya de noche un hombre hablando desde su teléfono recibió la noticia y se dió vuelta rompiendo su teléfono con su mano.
Narra Bella.
—¿Quien era?.—Pregunte.—Jake.
—Siempre estorbando.—Dijo el molesto.
—¿Quien era?.—Volvi a insistir mientras que el retrocedia.
—Bella apartate.—Me ordenó.
—Bella, el es Edward.—Dijo entrando Alice.—Piensa que estás muerta, Rosalí le dijo por qué vine.
—¿Por qué, por que no me dejaste hablar con el?.—Le pregunte enojada.
—No preguntó por ti.—Me dijo el.—No me importa.
—Bella, Fue con los Vulturis, también quiere morir.—Me dijo, la mire horrorizada.
—Te dejo bella, ¿Lo olvidas?, ¿Ya no te quería?.—Decia Jacob detrás de mi.
—No dejaré que se mate por sentirse culpable.—Le respondí, me subí al auto de Alice y cerré la puerta el se coloco en la ventana de ella.
—¿Y qué ahí de tu papá?.—Me dijo.
—Tengo 18 años soy libre de Irme, le dejé una nota.—Me sente al lado de Alice.
—¿Y tú hermana?.—Me Pregunto y lo mire.
—Quiero que la cuides por favor, sácala de aquí.—Le pedí, y Alice Aceleró por la autopista.
Narra Jake.
Mire la casa y decidí entrar, ahí se encontraba sentada en el sofá nerviosa moviendo su pierna al verme se levantó y se asercó.
—Si quieres me se cuidar sola.—Me dijo, la mire incrédulo.—Papá me enseñó a usar... Un arma.—Dijo insegura de sus palabras.
—Si claro, cuando tú buscas con la mirada algún objeto, ellos ya te mataron.—Le dije estando Serca de ella.—Vendras conmigo, estarás en lo de Emily a si por lo menos se hacen compañía ambas.—La mire.
—De acuerdo tomaré mi saco y voy.—Dijo la Vi subir escalera arriba, agarro sus cosas y luego la Vi bajar.
—Vamos.—Dijo apagando todo y cerró la puerta, se subió a la camioneta y yo la encendí para manejar en la autopista. La noche estaba tranquila, la observé de reojo no dejaba de mover su pierna, estaba muy nerviosa, mi instinto fue llevar mi mano a su pierna y está se asusto y observó mi movimiento y luego a mi.
—Solo, estoy nerviosa por Bella, espero y no le pase nada.—Me dijo, la tome de su brazo y la aserque a mi con su ayuda.
—No le va a pasar nada tu tranquila.—Le dije, se acurruco entre mi cuello.
—Eres calentito.—Comento y rei.
—Duerme, te aviso cuando lleguemos.—Pude sentir que asintió, su fragancia llegó a mis fosas nasales y me controle para no volverme loco.
Luego de un largo viaje llegamos, la baje upa entre mis brazos Emily me ayudó abrir la puerta.
—Se quedará aquí por unos días, no la molesten.—Me diriji a mis compañeros, estos levantaron sus manos en son de paz, me diriji a mi habitación y la acoste en mi cama, se removió y se despertó.
—Debes dormir.—Le susurré arrodillado a su lado me sonrió.
—¿Duermes conmigo?.—Me pregunto.—Es que hace frío.—Dijo corriendose a un lado, suspiré y me acosté con ella, coloque mi brazo debajo de ella y la acurruque a mi lado.
—Espero y que a ningúno le pase nada, Alice me cayó bien.—Me contó.—Me gustaría conocer a mi cuñado.—Rei por sus ocurrencias.
—Ya vamos a dormir.—Dije apagando la lámpara de la mesita de luz.
—Buenas noches Jake.—Me dijo.
—Buenas noches.—Le respondi y sentí que se durmió.
1541 palabras.
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