"No dejes que el miedo te impida hacer feliz"
Narra Bella.
—Jean.—Se dirijio a Aro a la rubia y esta lo miro.—¿Si, Aro?.—Dijo ella.—Adelante pequeña.
—Esto te dolerá un poco.—Me dijo y trate de no mirarla, pasaron 5 segundo y Aro empezó a reírse y aplaudió haciendo a la rubia dejar de mirarme.
—Admirable.—Dijo el.—Es resistente a todos nosotros, a si que ¿Que haremos contigo ahora?.—Pregunto curioso el.
—Ya sabes lo que tienes que hacer, Aro.—Dijo uno de sus hombres.
—"Sabe demasiado es un peligro".—Dijo su voz en su cabeza.—Es verdad, Félix.—Dijo y el chico a mi lado me giro viendo a otros dos detrás de mi. Edward sin pensarlo se levantó de nuevo y los encaro tomando a uno de ellos del cuello y Alice también pero ella era quien la tomaron del cuello. A Edward lo empujaron con una patada haciéndolo volar y el vampiro grandote lo tomo del cuello empujándolo haciendo romper el suelo.
Este se me asercaba pero Edward se volvió a levantar y lo empujó hasta la pared, despues de estar peleando un rato, el vampiro grande lo estampillo contra los escalones tomándolo del cuello y colocándolo de rodillas ante Aro.
—¡NO, POR FAVOR, POR FAVOR!.—Pedi ya que él vampiro grande le estaba haciendo fuerza a su cuello, Aro lo detuvo.—Mateneme a mi, no a él.—Me ofrecí, Aro bajo las escaleras llegando hasta a mí mientras que el otro vampiro sujetaba a Edward.
—¿Cuan extraordinario, renunciarias a tu vida?.—Me Pregunto el.—Por uno de nosotros.—Se señaló.—Por un vampiro.—Dijo y por mi mente pasaron todos recuerdos de mi hermana cuando éramos pequeñas y jugábamos, o cuando ella vino a Forx a estar conmigo, "Por favor, Jake cuidala".—Dijo mi voz interior.
—Un desalmado mounstro.—Dijo observando a Edward.—A... alejate de ella.—Dijo Edward como pudo.
—No sabe nada del alma.—Le dije yo.
—"Forcé deil mostró", "del uno para el otro".—Dijo Aro viendolo.—Es tan triste, si tuvieras la intención de darle la inmortalidad.—Le hablo a Edward.—Vi que se acercó a mi pero Alice lo detuvo.
—Esperen.—Dijo ella.—Bella será uno de nosotros.—Explico Alice.—Lo eh visto, yo la transformare.—Miro a Edward, el vampiro la soltó y se asercó a Aro dándole su manopara que el vea la visión de Alice.
"Vision de Aro"—Echa por Alice.
"Edward y bella ambos vestidos de blanco corriendo por el bosque".
—Imnotisante, ver lo que tú haz visto mucho antes de que pase.—Dijo y regreso con Bella.
—Tus dones son increíbles, te convertirás en una facinante inmortal.—Me dijo colocando su mano en mi megilla.—Isaabella.—Dijo mi nombre y volvió con los sullos.—Ahora ve a prepárarte.—Soltaron a Edward y se asercó a mi.
—Acabemos con esto de una buena vez.—Dijo el vampiro de cabellera negra sentado en su sillón.—Jaini, llegará con visitas.
—Les devolveremos el favor.—Dijo el rubio.—Les aconsejó que lleven acabo lo prometido ya que no damos segundas oportunidades.
—Adios mis jóvenes amigos.—Dijo Aro.
Dicho eso nos fuimos de ahí mientras Alice nos dirijia a la salida. Suspiré aliviada ya que volvía con Edward luego tendría que ir a ver cómo está mi hermana.
—Buena pesca Jaini.—Dijo el vampiro que nos guiaba se Cruzo con una morocha que atrás de ella los seguía un grupo de gente.
—Si se ven muy jugosos.—Dijo ella.
—Guardame algo.—Le susurró el vampiro.
—"Por aquí, por favor, permanezcan juntos".—Decia la morocha, observé por dónde hiban la gente, se escuchaban gritos.
—Basta, basta.—Decia y me desperté Edward estaba Ami lado, ya estábamos en casa.—Estas aquí.—Le dije viendolo y tomando su mano.
—Duerme, estaré aquí cuando despiertes, además mañana querrás ir a ver si tú hermana está bien ¿Verdad?.—Me preguntó el.—La única razón por la que me fui, fue por qué creí que te estába protegiendo.—Me explico el.
—Queria que tuvieras la oportunidad de una vida normal y tranquila.—Me dijo el.
—Fue muy fácil para ti irte.—Le dije yo.
—Dejarte fue lo más doloroso que eh echo.—Me dijo triste.—En cien años, y te juro que jamás te volveré a fallar.—Me juro, coloco su mano en mi megilla.—Lo siento mucho.—Se disculpo apenado.
—Llego Charly.—Me informo y la puerta se abrió, me senté en la cama.
—¿Como te sientes?.—Me preguntó el desde la puerta.
—No tienes que preocuparte.—Le dije yo, Edward se hizo invisible.
—La ulitma vez que dijiste eso te fuiste tres días, y tú hermana no ah dejado de llamar está muy preocupada.—Me dijo el.
—De verdad, lo siento mañana pensaba ir a verla y explicarle todo.—Me referí a mi hermana.
—Bella, no vuelvas hacerme eso, y no obligues a tu hermana a irse tampoco.—Me regaño.—Jamas, y cuando tú hermana vuelva ambas están castigadas por el resto de sus vidas.—Dijo llendose, y al cerrar la puerta Edward apareció.
—Tecnicamsnte no estamos quebrantando ninguna regla.—Dijo el.—Dijo que no podia entrar por esa puerta.—Se arrodilló del lado de mi cama.—Entre por la ventana.—Dijo riéndose, nervioso.—Creo que no va a perdonarme, y tú hermana, no lo sé será dura de conveser.—Dijo.
—Ella siempre quiso conocerte, y la obligue a estar con Jacob a si que nos odiara a los dos.—Le dije.
—¿Y tú?, Por qué no se cómo podría vivir sin ti.—Me dijo, lleve miano a su rostro y lo atrae a mi para darle un beso dándole a entender que lo perdonaba, al separarnos.
—Despues de que Alicee me transforme, no te desharas de mi.—Le dije.
—No tendrá que hacerlo, siempre ahí formas de que los Vulturis se enteren.—Me explico el.
—No, no.—Decidida llegamos a la casa de los Cullen, al bajar las escaleras todos estaban ahí.
—Todos saben lo que quiero.—Les dije a los Cullen.—Y se... Qué lo que pido es mucho. Lo único que se me ocurre para que sea justo es que boten.—Les propuse.
—No sabes de lo qué estás hablando.—Me dijo Edward.
—Silencio.—Le pedí, Alice y Jasper sonrieron.
—¿Alice?.—Me diriji a ella.—Yo ya te considero mi hermana.—Me dijo ella asercandose a mi y me abrazo.
—Si.—Dijo ella.—Gracias.—Le agradecí.
—Yo boto si.—Todos miramos a Jasper.—A si no te tendría que matar todo el tiempo.
—Lo siento.—Hablo Rosalí.—Quiero disculparme con los dos por como hablé y te agradezco la valentía que tuviste para salvar a mi hermano, pero está no es la vida que hubiera escojido para mí ojalá alguien hubiera votado "no" por mi, a si que no.—Explico Rosalí.
—Voto claro que si.—Dijo Emmet asercandose a mi y me abrazo dando un giro.
—Podemos iniciar una guerra con los Vulturis de otra manera.—Explico Emmat.
—Yo ya te considero parte de la familia.—Dijo Esme, le sonreí.—Si.—Dijo.
—¿Por qué están haciéndome esto?.—Dijo Edward, unos escalones más arriba.—Saben lo que significa.
—Escojiste no vivir sin ella.—Le dijo Carlise.—No tengo alternativa, no perderé a mi hijo.—"Por un lado sonreí victoriosa, pero por otro lado tenía los pro y los contra una no vería a mi padre y la otra me tendría que alejar de Emma pero yo creo que ella lo entenderá si le explicó, me ah apoyado mucho últimamente pero debe estar enojada ya que la deje con Jacob y no había mucha química que digamos. Hibamos en el auto de Edward.
—Esperare después de la graduación para decirles a mi hermana y a papá.—Le explique a Edward.—Creo que quiero que seas tu quien lo haga. —Al dobla en una esquina se encontraba Jake frenamos y salió corriendo al bosque.
—Quiere hablar conmigo.—Me dijo Edward.
Narra Jake.
—¿Sigues vivo?.—Le pregunte incrédulo.
—No solo yo te estoy alejando.—Me dijo el.
—Mantente lejos de mi mente.—No quería que supiera nada.
—Jacob, Se que quieres hablar conmigo.—Me dijo dando unos pasos bella se encontraba a su lado.—Pero quiero decirte algo primero si no te importa.—
—Gracias, gracias por mantener a Bella con vida.—Me dijo.
—Yo solo no fui, también su hermana ayudo, que por sierto se encuentra bien.—Esta vez me diriji a Bella.
—Lo se, se que su hermana también estuvo ayudándola.—Me dijo el chupasangre.
—No, no lo hiciste, y no fue para tu beneficio creeme.—Le dije molesto.
—Aun a si gracias, y no la voy a dejar aunque sea que ella me lo pida.—Dijo.
—Veremos.—Se estaban por ir.—Oye ahora es mi turno.
—Te recuerdo un punto clave del tratado.—Le dije.
—No, no lo eh olvidado.—Me dijo el.
—¿Que punto clave?.—Pregunto Bella.
—Si uno de ellos muerde a un humano se termina la tregua.—Ld explique.
—Pero si yo lo escojo, no tiene que ver contigo.—Me dijo ella.
—No, no te dejare, no dejaré que te conviertas en uno de ellos.—Le dije molesto, no pensaba en la gente a su alrededor.—¿Que pasará con Charly, o con tu hermana?.—Le hize acordar.
—La decisión es mía, Charly veo cuando se lo diré y Emma es inteligente lo entenderá.—Me dijo.
—Sabes lo que te haremos, no tendré alternativa.—Le explique para que entienda.
—Bella, por favor vámonos.—Le sugirio su novio.
—Espera.—Le dijo ella y se asercó a mi.
—Jake, te quiero mucho.—Me dijo.—Y dile a mi hermana que ya hablaré con ella.—Me pidió.
—Esta desesperada.—Le dije yo.
—Lo se, pero se que tú la puedes distraer y cuidar, por favor.—Me pidió.
—A si que por favor, no me obligues a escojer.—Me dijo ella.—Por que lo escojere a él, siempre a Sido el.
—A dios Jacob.—Dijo Edward y lo tome de su brazo molesto.—No tu no hablas por ella.—Le dije y me lanzó por los aires y me convertí en lobo encarandolo, pero bella se interpuso.
—Bella vete de aquí.—Le dijo.—Detente, ya basta.—Dijo Bella a los gritos.—No pueden lastimarse sin lastimarme a mi.—Se observó en mi ojo y los dejé en paz, me lastima mucho no me quería descargar con su hermana pero todavía no aceptaba el echo de que ella lo escojiera a él. Salí corriendo al bosque.
Narra Edward.
—Tiene razón, no tienes por qué convertirte en lo que soy.—Le dije a Bella.
—No puedo hacerlo sola.—Que testaruda es.
—Por favor espera.—Le propuse.—Solo dame, cinco años.—Le dije asercandome a ella.
—Es mucho.—Me dijo negando.
—Y tres.—La mire y nego de nuevo.—Que testaruda.—Le dije.
—¿Que estás esperando?.—Me preguntó sin entender.
—Tengo una condición.—Dije sonriendo nervioso.—Si quieres que yo mismo lo haga.
—¿Y cuál es la condición?.—Me preguntó.
—"Juntos para siempre".—Le dije.
—Es lo que más deseo.—Me dijo ella, sonreí ante su respuesta.
—Se mi esposa, Bella.—Le pedí, quería casarme con ella.
1845 palabras.
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