Yuma me seguía besando, con desesperación intentaba sacarlo de encima pero era en vano, por más que lo intentara, él era mucho más fuerte que yo, hasta el punto que mis nuñecas empezaron a doler por la constante presión. Miré a Takumi, él solo se mantenía de pie frente a la puerta, observando anonadado todo lo qur sucedía.

¡¿Qué le sucede?! El Takumi que conozco ya hubiera mandado a la mierda a Yuma. Su mirada estaba perdida, su cuerpo estaba en posición de atacar, pero no lo hacía...

— ¿Qué pasa?, ¿acaso no te importa que lo bese? —preguntó el gánster, mirando a Takumi con una sonrisa burlona.

Aproveché esa distracción para empujarlo con mis piernas y al fin sacarlo de encima, con rapidez me puse de pie y mi objetivo era ubicarme detrás de Takumi pero en medio del camino, siento como Yuma agarró mi brazo con fuerza y me empuja hacia la pared, acorralándome con su cuerpo.

—Parece que ya no te importa...¿verdad Takumi?..Entonces no importa que sea mío... —pronunció el gánster con suavidad en mi oreja, mientras dirigía su mano directamente hacia mi miembro, masajeándolo por encima de mi pantalón.

Me estremecí con su tacto, pero era toltamente diferente a cuando lo hacía Takumi, una sensación de asco comenzó a nacer desde mi interior. Miré a Takumi con desesperación, él aún estaba allí, inmóvil, como si estuviera esperando a que Yuma me terminara violando, ¿no hará nada?, ¡¿no se da cuenta que no puedo solo?!

—T-Takumi... —susurré.

— ¿Pasa algo? —preguntó el gánster, pasando su lengua por mi oreja.

— ¡TAKUMI! —grité, ya con lágrimas en mis ojos por la impotencia que sentía.

En ese momento, Takumi reaccionó, mirando con furia a Yuma. Se dirigió a él y lo golpeó en el rostro, haciéndolo caer en el suelo. Se ubicó delante de mí protegiéndome.

¡Al fin!

— ¡No se te ocurra volver a tocarlo! —gritó con furia contenida.

—Demoraste en procesar lo que pasaba... —dijo, levantándose del suelo.

—Eso ya no importa, ya estoy aquí —dijo Takumi.

Se acercó a Yuma y lo empezó a golpear. Primero en la cara, después bajó hasta el estómago. Podía ver que Yuma ya estaba sangrando.

Se lo merecía pero...creo que se está pasando.

—T-Takumi...creo que tienes que parar —dije, agarrándolo del brazo.

Takumi no me hizo caso y le siguió pegando.

— ¡Takumi! — grité, agarrándolo de la cintura, tirándolo hacia atrás.

Quedamos frente a frente. En ese momento quedé paralizado.

El lado negro de Takumi...

—Ale, no te metas, esto es entre este idiota y yo —dijo, acorralándome en la pared.

Su voz era fría y profunda, no era el mismo Takumi de siempre

—T-Takumi... —susurré, mientras sentía un escalofrío recorrer mi espina dorsal, sentía miedo.

Takumi me dio la espalda y otra vez caminó hacia a Yuma pegándole una y otra vez.

Le pegó hasta que cayó al suelo.

Nunca había visto a Takumi así...

De repente Takumi se detuvo, observó el cuerpo moreteado de Yuma, cuando creyó que era imposible que se volviera a levantar, dio media vuelta y caminó hacia a mí.

— ¡Takumi cuidado! —grité.

De inmediato noté cómo Yuma se levantó del suelo con una rapidez sosprendente dada su situación y los golpeas que le había ocasionado Takumi, dándole una patada en las piernas a Takumi para que cayera al suelo.

Esto se está saliendo de control...

Yuma le empezó a pegar en la cara, tan fuerte, que Takumi empezó a sangrar rápidamente.

Muévete...muévete...¡VAMOS MUEVÉTE! Tengo que ayudar a Takumi, pero...el miedo me controla...

Yuma le seguía pegando a Takumi pero esta vez, él no se resistía, dejaba que Yuma le pegara sin control alguno.

¿Qué le sucede?, ¡vamos, defiéndete!

Vamos Ale...muévete...muévete... ¡VAMOS NO SEAS COBARDE!

Corrí en dirección a Yuma, para después pegarle en el rostro, sacándolo de encima de Takumi. Cayó al piso, inconsciente. Agarré a Takumi y como pude lo levanté del suelo, lo tomé de su brazo y lo ubiqué detrás de mi nuca, luego lo agarré de la cintura y salimos de la habitación.

La sangre no paraba de caer, ¡mierda! Tengo que llevarlo a la enfermería, pero nos harían muchas preguntas y quizás lo expulsen...vamos Ale, piensa...

Nos dirigimos a un asiento que había.

—Ale...ya no tienes que preocuparte....desde aquí, yo puedo solo — murmuró Takumi. Su voz era apenas audible.

— ¡¿Estás loco?!, ¡no te dejaré solo!

—Entonces...¿qué piensas hacer?...no puedes hacer nada.

Tiene razón...no sé qué hacer....lo único es ir a la enfermería pero arriesgaría mucho...

—Aún así...no te dejaré

Estoy decidido, ¡vamos a la enfermería!

Lo tomé del brazo para levantarlo del asiento y nos dirigimos a la enfermería

— ¡Buenas tardes!, ¿en qué les ayudo? —preguntó la enfermera, después miró a Takumi y quedó impactada— ¿Qué le pasó? —preguntó, ayudándome para dejarlo en la camilla— ¿Una pelea?

—S-Sí...¡pero por favor!, no le avise a nadie...

—Pero...

— ¡Por favor!

—Está bien, —suspiró— ahora, tengo que curarle las heridas.

Me senté en una silla, al lado de Takumi.

Esa pelea...no sé, siento que le pegó, no solo porque me hizo eso...si no también por otra cosa...pero, ¿qué será?, no entiendo nada...lo único que sé es que se conocen, pero, ¿desde cuándo?, ¡Maldita sea! No sé nada de Takumi...realmente nada...

Miré hacia el suelo.

Me gustaría saber más...

—Estará bien, deberían irse, mañana tienen que levantarse temprano.

— ¿E-Eh?, ah...sí, gracias por todo.

—De nada, tranquilo, puedes confiar en mí.

Salimos de la enfermería.

Takumi no decía nada y tampoco me miraba.

Debería preguntarle...o mejor le pregunto mañana.

Cuando llegamos a la habitación, Yuma ya se había ido, me dirigí a la cama. Intenté dormir pero no podía.

Me di media vuelta y miré a Takumi. Estaba parado en medio de la habitación, mirando a la nada.

¿Qué le sucede?

— ¿T-Takumi? —pregunté.

No hubo respuesta.

De repente, Takumi se lanza encima mío, acorralándome en la cama.

Sentía que estaba sonrojado.

Realmente se sentía muy diferente a lo que me había hecho Yuma...

— ¿P-Pasa al... —alcancé a decir.

—No dejes que nadie más te toque... solo yo puedo...solo yo puedo hacerlo —dijo, abrazándome con fuerza, casi con desesperación.

—Idiota... —susurré— nunca dejaré que me toquen —dije, respondiéndole el abrazo.

—Creo que es momento de decirte quien es Yuma.

 — ¿Ya se conocían verdad?

—Sí...antes...antes salíamos...

¿Q-Qué?

N/A: Holi :3 si les gusto denle a la estrellita *-*

¡Hasta la próxima!

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