Ese mal presentimiento que tenia en el pecho crecía a cada segundo y no sabia porqué o que lo causaba. Fue a ver a su abuelo era día Sabado y Milo dormía todo desparramado como siempre. Esa sensación no la provocaba él, por un lado se tranquilizó pero por el otro la preocupacion aumento al pensar que ese pequeño francesito fuera la causa.

Regreso a su habitación, debía llamar a Aurora sino no estaría tranquilo el resto de día. Cuando iba a marcar su numero fue la propia mujer quién lo llamó.

- ¡Kardia! - la preocupación en su voz no le gusto, y esa sensación del demonio aumento.

- ¿Que paso?

- ¡Camus! Le dije que debíamos volver a Francia por asuntos de mi familia, me dijo que queria quedarse contigo y salio corriendo, ¡Lo perdí no sé donde está!

Estaba desesperada se notaba, Camus no conocía muy el camino a su casa aunque estaba relativamente cerca, trato de calmarla lo mejor que pudo le ayudaría a buscarlo porque si algo le pasaba a ese niño no se lo perdonaría.

- ¡Abuelo, despierta!- se le tiro encima como cuando era un niño.

- ¡Kardia es sábado dejame dormir!- pataleo para tirarlo lejos.

- ¡El enano se perdió!- volvió a moverlo, no lo iba a dejar dormir tenía que ayudarlo.

- ¿Que enano?

- ¿¡Que otro enano!?

En un segundo se levanto, era un niño muy pequeño para estar perdido en las calles. Iban a salir los dos, pero decidieron que uno se quedaría en la casa por si lograba llegar a ese lugar, mientras Kardia lo buscaba por los alrededores.

Le rogaba a los Dioses que nada malo le pasara, no podia perderlo de nuevo, no lo soportaría. Le preguntaba a las personas si lo habían visto, esos cabellitos aguamarinas eran muy llamativos y difíciles de olvidar, pero con ninguno tenia suerte, hasta que una señora le dijo que lo vio correr con dirección al parque.

- ¡Cam, ¿Donde estas!?

Conocía ese lugar de memoria, en él jugaba con Dégel de niños, tenian hasta una base secreta en el interior de un árbol hueco, el que aún estaba por ahí.

- Ese árbol ¡Hay debe estar!

Corrió lo más que le daban sus piernas hasta ese lugar medio abandonado, no muchas personas iba a ese lado del parque. Llego a su destino lo más rapido que pudo y apenas lo hizo escucho unos sollozos de un niño cerca.

- ¡Camus, aquí estas me asustaste mucho!

- ¡Kardia!

Apenas lo vio salio de su base secreta llorando a mares para abrazarse al mayor con fuerza, diciendole una y otra vez que no quería volver, que quería quedarse con él.

- Ya tranquilo, esta bien llora si quieres pero no lo vuelvas a hacer.- dejo un beso en su cabecita.

Habrán pasado unos veinte minutos hasta que se calmo y pudo llamar a su madre para decirle que lo había encontrado.

- Cam, no vuelvas a hacer eso eres muy pequeño para estar solo en la calle.- Milo le dio un pequeño zape.

Los tuvo a todos de los nervios por casi un hora, la que fue la más larga de sus vidas. Aurora llego corriendo solo para abrazarse a su hijo con fuerza.

- Kardia, gracias por encontrarlo.

- No se preocuope, pero ¿Es cierto que tiene que regresar a Francia?

Camus se apego más al cuerpo de su madre.

- Si, mi madre enfermo y mis hermanos son unos cretinos, ninguno "puede" hacerse cargo de ella, debo volver por que ella no quiere venir a Grecia.

- Quiere morir donde nació, si padre era igual.

Milo la entendía, su padre era igual de testarudo, pero él tuvo la suerte de que sus hermanos mayores se hicieron cargo.

- ¿Cuando vuelven?

- el 06 de este mes. Lo siento sé que querías pasar su cumpleaños con él.

-No se preocupe.

Esa misma tarde fue a la joyeria de Lugonis a pedirle el favor de hacer antes de esa fecha el collar que le había pedido, algo que el pelirrojo no le negó, supuso que era algo importante por la cantidad de detalles que tenia. En menos de tres días ya lo tenia en sus manos.

~•~

Los días pasaron más rápido de lo que hubiera querido, era cinco de febrero se adelanto dos días pero no era lo importante. Llego a la casa de su pequeño amigo notando que solo se llevarían lo más importante.

- Mira lo que te traje Cam.- saco de atrás de su espalda el oso gigante que era del mismo tamaño del niño.

Le brillaron los ojitos se abrazo al peluche con fuerza, al hacerlo se pincho con algo que colgaba del cuello del animal. Era un collar con forma de copito de nieve. Hecho de un cristal medio celeste y plata. Era delicado, precioso tal y como lo fue Dégel y lo era ahora Camus. Tenia algo escrito pero no sabia leer aún.

- ¡Lo encontraste!

- No, pero es uno muy similar al que tenias. Lo mande a hacer porque sé cuanto te dolió cuando se perdió el otro.

Lo abrazo con fuerza esa chico de cabellos azules se merecía el cielo para él solo.

Aurora los veía desde lejos, no quería separarlos, conocía su historia y le dolía alejarlos pero no tenia opción. Maldecía a sus hermanos en este momento.

El día siguiente fue el tercero más doloroso de su vida, despedirse de ese niño que le había traido su felicidad de vuelta fue muy triste para todos. Aunque le prometiera que seguirían en contacto por el celular. Cuando el avion se fue sintió que en él se llevaba una parte suya.

~•~

Los primeros días fuero difíciles extrañaba las travesuras que hizo con Camus a escondidas de su abuelo y de Aurora. Las videollamadas se le hacían muy cortas y conforme pasaban los días se daba cuenta de que se comenzaba a olvidar de su anterior vida, como pequeños detalles se le escapaban cada vez más.

Todo empeoro cuando un día Milo vio en las noticias un enorme incendio en Francia, cerca de donde sabian Camus y su mamá vivían. Kardia no tardo en llamarla para confirmar que estuvieran bien.

-¡No contesta!

- No te preocupes tienen que estar bien.- quería darle ánimos a su nieto de alguna forma y no sabia como.- espera... ¡Kardia mira!

El alma le volvio al cuerpo, el periodista entrevistaba a un hombre y el en fondo se podía ver claramente a Aurora tratando de calmar a su hijo, el que se aferraba al oso que le había dado Kardia.

- Están bien...

Estaban sanos y a salvo. Lo malo habían perdido todo medio de comunicación.

No volvió a saber nada más de ellos en años.

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¡Ahh! Muchas cosas en un solo capitulo, se me juntaron muchas ideas. ¡Y la mayoría tristes por la cresta!

Despidanse de mini-Camus desde el próximo capitulo sera el cubito sexy que conocemos 😉

ScorpioNoMilo 💕