Prologo
***Narra XX***
---Cambio de escena---
~~~Fecha/Flashback/Skip Time~~~
***Narro Yo***
---Lugar: desconocido---
~~~Fecha: desconocida~~~
Se puede ver una cámara con múltiples asientos colocados en arco frente a una única silla, cada uno de ellos ocupado por alguna figura oscura, cuyos rasgos, altura, edad e incluso su género eran ocultados por la poca iluminación.
La única otra luz, además de la que iluminaba la silla, estaba sobre la que parecía ser la líder, una mujer afroamericana de al menos 30 años, cabello largo y ondulado color avellana, no parecía especialmente animada, si sus dedos golpeando contra la mesa indicaban algo, su vestimenta era un traje simple de color negro con una etiqueta que la nombraba únicamente como "Heather".
- Muy bien terminemos con esto – comenzó sacando una hoja de debajo de su mesa – que entre.
Acto seguido unas puertas se abrieron y por ellas entraron 3 personas, 2 siendo un par de hombres de complexión fornida, uniformados y armados, sin embargo, pese a que la persona que escoltaban no era ni la mitad de grande que ellos, además de llevar gruesas esposas, ambos guardias temblaban ligeramente y evitaban a toda costa la mirada de esta persona.
Finalmente llegaron al podio y los guardias, aun con nerviosismo, anclaron sus ataduras a unos arneses de la silla, ajustándolos lo más posible antes de recibir un gruñido de la figura, misma que seguía encorvada, dejando que su cabello cubriera su rostro.
- Caso No. 18479361 – leyó Heather – agente G0R1245P13.
Se le acusa de abusar de su cargo, alterar excesiva e irresponsablemente el desarrollo de una realidad nivel 3 y de revelar secretos clasificados de la organización a habitantes de dicha realidad.
¿Cómo se declara?
- ¿Yo? – preguntó la figura sin levantar la frente – solo seguía órdenes.
- ¡No te atrevas a culparnos de esto! – acuso una de las personas en los asientos – no creas que podrás librarte de lo que hiciste.
- El tejido mismo del multiverso se descontroló y todo es tu culpa – señaló otro, mostrando un holograma de lo que parecía ser un árbol.
- ¡¿Ni siquiera sé por qué estamos perdiendo el tiempo con esto?! – grito otro golpeando su escritorio – hay que cortar el problema antes de que se vuelva incontrolable, hay que eliminar a la chica...
De pronto, una presión cayó sobre la sala, varios de los presentes podían sentir como si algo les oprimiera el corazón, mientras que otros ya tenían problemas hasta para mantener el aliento.
- Orden, orden – llamó Heather tratando de mantener la compostura – agente G0R1, se le dio la oportunidad de exponer su caso para decidir qué haremos con el lio que causó.
Si no coopera o continúa agrediendo a los miembros de este concejo, será encerrado y toda la realidad que manipuló será eliminada – amenazó y entonces la presión se desvaneció.
- Lamento eso... fue... un reflejo – se disculpó.
- Si quiere llegar a un acuerdo, será mejor que se controle y nos explique porque hizo lo que hizo.
- Bien, ¿por dónde comienzo? – preguntó levantando un poco la mirada, mostrando un ojo color azul.
- Desde el principio, quiero todos los detalles – advirtió Heather.
***Narra G0R1***
~~~Hace ???~~~
---Naciones elementales, Konohagakure no sato---
La aldea de la hoja, hay tantas versiones de este lugar como arena en la playa, no es raro que uno tenga que trabajar en una de estas eventualmente, después de todo, no todos los niños de 8 años (o menos) tienen la suficiente fuerza de voluntad como para elegir seguir viviendo luego de haber sido torturados hasta la muerte, incluso si alguna entidad como un dios o un superhéroe se les aparece a decirles algo como: "eres mi reencarnación" o "te he elegido como mi heredero por tu gran corazón" o alguna estupidez como esa.
La triste realidad es que son más los que eligen abandonarlo todo y dejar de sufrir, eso fue lo que me llevó a mi asignación actual. Yo, levantándome de un charco de sangre, lo bueno era que este cuerpo parecía tener un buen factor de regeneración, hubiera sido un fastidio tener que arrastrarme nada más comenzar, además podía sentir firmas de chakra así que también tenía una habilidad sensora, las cosas empezaban bien.
Desgraciadamente esto había sido un llamado de último minuto, esta realidad en particular es un eslabón bastante importante para la estabilidad del multiverso, así que tuve que entrar rápido y no tenía muchos detalles de esta línea, por lo que mi equipo y la información aparecerían en una zona de seguridad en lugar de conmigo.
Luego de caminar un poco me encontré con las enormes puertas de Konoha, los guardias eran los mismos vagos dormilones que son la mayoría de sus versiones (Izumo y Kotetsu), sabía quién era yo, bueno, quien se suponía que era, y por los carteles y las decoraciones ya me hacía una idea de lo que le paso al pobre chico.
Sentía algo raro por dentro y a mi alrededor, creí que era la regeneración trabajando en los daños a los órganos internos, así que lo ignoré y me dirigí a la torre Hokage, dependiendo de las circunstancias podía ser una idea, o muy buena, o muy mala, pero sin mi equipo ni intel de ningún tipo, era lo mejor que podía hacer.
Me moví por las calles menos transitadas y robé una chaqueta con capucha de un tendedero para no llamar la atención, dudaba que cualquiera de esos civiles pudiera siquiera tocarme, aun con este pequeño cuerpo, pero no iba a comenzar una masacre.
Una vez dentro de la torre, me escabullí por los pasillos, fue sencillo gracias a que al parecer todos estaban buscando algo, o a alguien. Llegué hasta la oficina del Hokage, pero antes de tocar la puerta alguien me sujetó del hombro.
- ¿Qué deseabas joven? – preguntó una voz suave pero autoritaria – si vienes por una cita, tienes que sacarla primero con mi secretaria.
Por el momento te sugiero que vayas a tu casa, estoy buscando a alguien importante y no tengo tiempo para visitas.
- Vaya jiji, sé que estás algo viejo, pero me parece que ya necesitas lentes si no me reconoces – le respondí con una sonrisa a la vez que me descubría.
Era el mismísimo Hiruzen Sarutobi, 3er lord Hokage de Konohagakure no sato, o al menos el de esta versión.
- ¿Naru? – jadeo soltando un suspiro de preocupación y llevándome dentro de su oficina – anbu – llamó y un anbu con mascara de gato apareció, mirándome brevemente – llama a Tsunade, dile que apareció y que venga de inmediato.
¿Dónde estabas? ¿Qué te paso? – señalando los pantalones rotos y manchados de sangre?
- Antes de eso, ¿te importaría retirar a los anbu? – le pedí con "miedo".
El viejo se extrañó por eso, pero lo hizo de todas formas y con un ademan la sala se vació, sin embargo, todavía sentía una firma de energía detrás de un mueble, por lo que, disimuladamente tomé uno de los kunai que tenía clavados cuando desperté y se lo arrojé.
El bastardo logró esquivarlo, pero lo que no pudo esquivar fue el agarre de hierro que lo sujetó de la garganta, para mi sorpresa, el mismo Hiruzen lo había interceptado antes de que huyera, y con unas cuantas señales, lo selló en un rollo antes de guardarlo.
- (Qué tal, el viejo de esta línea todavía sabe moverse... creo que esta será una misión interesante) – pensé.
- Es el cuarto este mes, sea quien sea, o es muy estúpido o no le importan sus activos en lo más mínimo – susurró Hiruzen antes de voltearme a ver con sospecha.
- Bien Hiruzen, escucha con cuidado, porque tu mundo está a punto de retorcerse como no tienes idea y no quiero repetirme...
3ra historia nueva publicada amigos.
Todavía faltan más, pero les digo que la última será la que más he trabajado y a la que más empeño le he puesto.
Sigan sintonizados, Joak0Pie fuera, PAZ!!!
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