POV de Maléfica

Me despertaron bruscamente las luces brillantes que cruzaban por mis ojos y me acompañaron música a todo volumen combinada con risas poco características. Inmediatamente me levanté y fui a investigar. Nadie en la isla debería ser tan alegre, especialmente mientras yo sea el gobernante o la isla.

Miro hacia abajo desde el balcón y veo cómo las luces estroboscópicas bailan alrededor de un pequeño porche frente a mi castillo que estaba lleno hasta los topes con los residentes de la isla. 'Una fiesta.' Mi conciencia me lo dijo. 'Una fiesta perversamente buena a la que no fui invitado'.

Me apresuré a bajar las escaleras hacia la entrada de la fiesta, de inmediato vi el centro de atención que aparentemente estaba celebrando su sexto cumpleaños.

Mi corazón se detuvo ante eso. Mal también cumpliría seis años en unos pocos meses, lo que significa que han pasado casi 5 años desde que Hades desapareció y se la llevó con él. He intentado innumerables veces encontrarlos, pero todos los esfuerzos han fallado, incluido el envío de mis hombres más competentes para encontrarlos.

La envidia y la ira corren por mis venas. Sin embargo, el primero es más fuerte, ya que la madre de la pequeña princesa de los arándanos todavía tiene que entrenar a su hija en los caminos del mal, mientras que yo no tengo heredero. Todavía estoy lleno de ira ante la idea de no ser invitado. ¿Alguien ha aprendido su lección al no invitar a Maléfica?

Me subo a la fiesta y me dirijo a donde está sonando la música, y hago vibrar a toda la isla. Tiré del cordón, deteniendo efectivamente la música y toda charla para cesar.

"¿Bueno, bueno, bueno, qué tenemos aquí?" Mientras hablaba, noté todos los cuerpos temblorosos, especialmente los de los hijos de los villanos de la isla, con la excepción de Mal. Sin embargo, la princesa de los arándanos intentó mantener la compostura y se acercó tímidamente a mí. Reina malvada inútil. ¿No ha pensado que su hija no debe encogerse ante el miedo? Pero, de nuevo, ¿cómo podría ella no? Soy yo.

"Estamos teniendo mi fiesta de cumpleaños". Su voz tiembla mientras habla, pero trata de mantener una postura firme. Le sonrío y saqué rápidamente un caramelo de sus manitas sucias.

"Oh enserio." Me lo metí en la boca antes de sacarlo y escupirlo. "¿Y no habías pensado invitarme?" Hablé en un tono repugnantemente dulce que solo empeoró la necesidad de vomitar del asqueroso caramelo. Lo puse debajo de mi axila por un hechizo antes de volver a colocarlo en sus brazos.

"Bueno, somos villanos, así que pensé-" la callé abruptamente porque cómo se atrevía a hablarle a un adulto de esa manera. ¿No le han parecido modales? Me doy la vuelta para mirar a todos los invitados antes de decidir qué hacer.

"Por no invitarme a tu fiesta" me burlé y escupí antes de continuar. "Por la presente se te prohíbe quedarte en esta parte de la isla. Tú y tu madre son desterrados al bosque prohibido donde tienes que buscar comida y agua, así como evitar a las bestias del bosque". Los vi tragar con satisfacción en mi rostro.

"¡Ahora!" Grité y se apresuraron a empacar sus cosas mientras otros se apartaban de su camino, no queriendo encender aún más mi ira. Luego me volví para enfrentar al resto de ellos.

Aplaudí para llamar su atención. "En cuanto al resto de ustedes, SCRAM!" Recogieron sus cosas y corrieron, aunque no antes de robar un artículo o dos, lo que me alegró al ver que sus pertenencias se las llevaban los llamados "amigos". Me reí por última vez mientras corrían para juntar sus cosas y salieron rápidamente del edificio. Luego dejé las instalaciones y 4 de regreso a mi casa, riéndome de su desgracia todo el tiempo, pero por alguna razón, ninguna cantidad de venganza es capaz de quitarle el dolor y el dolor de no tener un heredero malvado.

POV de Mal

Jay llega un poco tarde hoy porque se quedó despierto hasta tarde anoche para ir a una fiesta. Realmente desearía haber podido unirme a él, pero papá dice que aún no es seguro porque mamá todavía podría estar buscándome. No recuerdo mucho de mamá, pero sé que es mala y que no me quiere como papá, así que escucho a papá y me quedo aquí. Sin embargo, a veces desearía poder explorar la isla, pero los árboles del bosque aquí son mis amigos y podría pasar todo el día trepando a los árboles y jugando en sus ramas, a pesar de que papá no me permite hacerlo si estoy por mi mismo. Honestamente, papá es demasiado sobreprotector, pero lo amo porque es mi papá.

Mientras me siento en una rama particularmente alta, veo a Jay cerca del bosque con algo en sus manos, así que miro rápidamente a mi alrededor para asegurarme de que papá no esté cerca antes de saltar del árbol y hacer un par de vueltas, lo que haría Le he dado un ataque al corazón, y finalmente aterrizo en el suelo de puntillas.

Corro hacia el borde del bosque, donde es lo suficientemente denso como para que nadie me vea, pero lo suficientemente cerca del borde para poder ver figuras en movimiento. Espero a que Jay se acerque antes de saltar sobre su espalda y asustarlo, haciendo que sus brazos suelten lo que sea que sostenga para asegurarse de que no me caiga de la espalda. Me dio la vuelta por un momento antes de comenzar a castigarme por asustarlo así, diciendo que si no reconociera mi voz y todo, a estas alturas ya me habría dado una paliza.

Yo lo desafío. "Dudo seriamente que Jay Jay. Ambos sabemos de nosotros dos, que soy el más fuerte".

Se burla de eso y lo empujo al suelo, haciéndolo terminar con una cara llena de suciedad. "Muy bien, te enrollas esta ronda". Él admite la derrota y lo animo antes de levantarme de su espalda y ayudarlo a levantarse. "Pero honestamente, la razón por la que lo hiciste es porque no quiero enfrentar la ira de tu padre si te traigo a casa con rasguños y contusiones en todo el cuerpo". Ante sus palabras, resoplo porque su sobreprotección a veces me hace ganar cosas, como batallas injustamente con Jay porque tiene miedo de lo que mi padre le haría si alguna vez me lastimara.

Creo seriamente que Jay también se castigaría por eso porque a veces todavía lo veo asegurarse de que no me rasquen las cosas más pequeñas. Sinceramente, es molesto porque no lo admite y creo que lo está haciendo solo porque es mayor a los nueve meses.

Una vez que ambos estamos de pie, Jay recuerda lo que trajo consigo y lo recoge. Miro por encima de su hombro para encontrar un gatito con ojos rojos brillantes y pelaje dorado. "Se llama Jacques". Dijo mientras acariciaba el pelaje y me entregó el gatito. "Evie nos dio a cada uno de nosotros un animal familiar como un favor de fiesta". Me sentí celoso de no poder conseguir uno, pero sabía que era lo mejor.

"Hola Jacques". Lo saludo mientras lo sostenía en mis brazos como lo hizo Jay antes. De repente me doy cuenta de que mis brazos comienzan a picar y mi nariz se está volviendo muy líquida. Dejo que el gato se rasque pero Jay se apresura a atraparlo y lo sostiene con fuerza frente a él.

Mis brazos comienzan a ponerse rojos por todos los rasguños y Jay decide que tenemos que ir a ver a papá. Gimo porque aún no es la hora del almuerzo y no pudimos jugar, pero Jay puso su cara realmente seria, así que tuve que escuchar.

Cuando llegamos a mi casa, no podía dejar de estornudar y rascarme. Toda la mucosidad en mi garganta también me dificultaba la respiración. Supongo que no me di cuenta de lo mal que estaba hasta que Jay tuvo que llamar a papá en lugar de ir a él. Sin embargo, tan pronto como me vio, corrió hacia nosotros y rápidamente me hizo un chequeo general, tachando las posibilidades en su lista mental hasta que no quedó ninguna.

Sin embargo, al darse cuenta de que estaba empezando a tambalearme, me puso en el sofá con Jay a mi lado unos segundos después. Tan pronto como se acercó, los estornudos empeoraron y me resultó más difícil respirar. En ese momento, papá tuvo una repentina mirada de comprensión y le pidió a Jay que se alejara por un momento. Una vez que lo hizo, sentí menos picazón y pude respirar mejor. Papá finalmente entendió lo que estaba mal y le dijo a Jay que se quedara donde estaba.

Luego explicó lo que estaba sucediendo. "Mal, princesa". Se arrodilló y comenzó suavemente, tratando de darme la noticia suavemente. "Creo que eres alérgico al gato de Jay". Simplemente dice y sacudo la cabeza.

"No papi". Intento decirle convincentemente, pero un estornudo arruina su efecto. "¿Qué es alérgico?"

Papi solo se sienta en el sofá y me tira de su regazo mientras le dice a un triste Jay que se quede allí por un rato. "Bueno, princesa, la alergia significa que tu pequeño cuerpo reacciona mal a ciertas cosas a las que la mayoría de las personas no reaccionarían". Las ruedas en mi cabeza giran y de repente me golpea con un pensamiento triste.

"¿Eso significa que soy raro?" Le pregunto a él y papá se ve sorprendido de que incluso haya tenido ese pensamiento.

"Por supuesto que no princesa. Solo significa que eres única". Me ayuda a sonarme la nariz con un pañuelo. "Pero ser alérgico significa que no puedes jugar con el gato de Jay o te enfermarías". Hago un puchero a eso y Jay también.

"Pero quiero jugar con ese gato". Papi me mira directamente a los ojos con una mirada triste en su rostro.

"Sé que lo haces. Pero no es seguro para ti". Frunzo el ceño y miro hacia abajo. "Jay", dice papá de repente, haciendo que él levante la vista pero no se acerque más. "Ustedes todavía pueden jugar excepto sin el gato. Y díganme si ven a otros gatos por aquí porque no queremos que Mal se enferme y no puedan jugar con ustedes, ¿verdad?"

Jay asiente y papá le dice que se vaya a casa a pesar de nuestras protestas. "Pequeña señorita, necesitas descansar para mejorar". Resoplo y cruzo los brazos. "Ve a tomar un baño y descansar un poco, ¿vale? Solo necesito aclarar algo y luego estaré allí con tu almuerzo. Tú y Jay pueden jugar mañana, ¿de acuerdo?"

Renuncio a la discusión y bajé los brazos con un suave "Ok". Papá me da un beso en la sien y me despide. No me doy cuenta de lo cansada que estoy hasta después de acostarme y salir como una luz.

POV de Hades

Odio tener que acortar su tiempo de juego por hoy, pero realmente no quería que Mal tuviera una reacción alérgica peor solo por estar cerca del gato. Si solo estuviéramos en Auradon, donde tienen medicamentos para estas cosas, Mal al menos podría jugar con el gato por un corto tiempo.

POV de Mal

Me levanto brillante y temprano a la mañana siguiente, ya que dormí tanto tiempo la noche anterior. Me apresuro a prepararme y desayunar antes de darle un beso a papá en la mejilla y salir corriendo por la puerta al bosque para esperar a Jay.

Mientras camino y disfruto de todos los árboles a mi alrededor, escucho llorar, lo cual es extraño, ya que no debería haber nadie más aparte de papá y yo, y ocasionalmente de Jay. Sigo el sonido del llanto y veo a una chica con el pelo azul arándano sentada en un tronco caído mientras llora con todo su corazón.

Paso silenciosamente hacia ella y me siento a su lado. "¿Por qué estás llorando?" Ella salta y respira hondo antes de responder.

"Mami y yo hemos sido expulsados ​​de la parte principal de la isla solo por tener una fiesta y no invitar a Maléfica". Al oír el nombre de mamá, casi me quedo sin aliento, pero lo contuve. "Así que ahora tenemos que vivir en un pequeño castillo en este bosque sin comida, agua ni amigos".

Una vez que ella menciona vivir en el bosque, mis oídos se animan. "¿Vives aquí ahora?" Pregunté y ella asintió. "Yo también. Así que ya no tenemos que estar solos". Ella comienza a quitarse las lágrimas de los ojos, dejando manchas.

"¿De Verdad?" Ella me mira maravillada y no puedo evitar asentir emocionada. "¡Yay! Vamos a ser mejores amigos. No puedo esperar para hacer cambios de imagen, hacer fiestas de té y disfrazarme". Me da vueltas la cabeza al pensar en todas estas nuevas actividades, pero me alegro de haber hecho un nuevo amigo.

Hablando de amigos, me di cuenta de que no había ido a ver a Jay como solía hacerlo. Probablemente incluso me haya alejado del camino habitual, lo que significa que es posible que no pueda encontrarme. Estoy a punto de tirar de mi nuevo amigo para que podamos ir a buscar a Jay cuando de repente aparece detrás de mí, con ira y miedo en todo su rostro.

"Gracias a Dios que estás aquí Mal. Cuando no te vi, casi le digo a tu papá". Hice una mueca al escuchar eso, pero antes de que pudiera decir algo, Jay comenzó a hablar con mi nuevo amigo.

"Evie ¿verdad?" Ella asiente y hace eco de su propia pregunta.

"¿Arrendajo?" Él asiente, estrechándole las manos. Espero hasta que su interacción se complete antes de intervenir.

"Soy Mal". Le digo con una sonrisa y ella nos abraza a los tres.

"Todos seremos mejores amigos". Ella dice antes de liberarnos a todos y comenzamos a jugar.