Dos días y una noche, tan solo dos días y una noche habían pasado desde aquello.

Y Jimin se seguía preguntando Por que?

Por qué su jefe lo había besado?

Por qué el no se resistió?

Por que le gustó cuando probó de su propia sangre?

Por que últimamente estaba pensando en ser besado nuevamente por su jefe?

Había perdido la cabeza acaso?

Jimin creía que si, que había perdido la cabeza completamente.

Aparte de que su jefe lo estaba olímpicamente ignorando.

Actuando como si nada había pasado entre ellos.

Y eso solo lo confundía más.

Fue sólo un "error" justo como había dicho Yoongi aquel día?

De sólo pensar en aquello hacia que su corazon inexplicablemente doliese.

Estaba aburrido en aquella enorme mansión.

Yoongi había salido aquel día tan temprano que sólo una noto le daba la poca información necesaria a saber.

"He salido por un imprevisto, llegaré tarde o quizás en la noche, dile a Mina que solo prepare tu cena"

Habia suspirado derrotado ante aquello, y tampoco es como que tuviera mucho apetito.

Últimamente la sed estaba más sobre las comidas sólidas.

Su teléfono vibró, algún mensaje de su madre o de su hermano.

Cogió su teléfono, más no era un mensaje de kakao ni de tampoco sus conocidos.

Aquel número era coreano, pero para Jimin era desconocido.

Quien era?.

Abrió el mensaje y su celular casi cae de sus manos ante aquello.

Que diablos?

Jimin sentía su corazón acelerado, porque lo vería.

Su madre les había dicho que él había muerto una vez que ambos, Taehyung y él la bombardearon con preguntas un día de esos, al recordar como de la nada habían ambos preguntado por su otra figura paterna. Se habia hecho la idea de que si, de que realmente su padre había muerto.

Pero no era así, su padre estaba vivo y... Quería verlo.

Tomo una hoja de papel y escribio algo rápido un pequeño mensaje para ya sea Mina o Yoongi.

Lo dejo encima de la cama y busco entre sus cosas algo cálido porque seoul estaba que calaba los huesos de lo helada que estaba.

Salió de la casa y tal y como le había pedido su padre, le dio la dirección al taxista quien al verla sólo había fruncido el ceño para luego ponerse en marcha.

Obtendría respuestas.

Al fin, después de años y años obtendría las respuestas que necesitaba.

Yoongi llevo cansado a la mansión, viendo la enorme casa iluminada más ni una tan sola bulla en ella.

Le gustaba el silencio que le brindaba.

Aflojo un poco su corbata y camino hacia el despacho/oficina y se encerró en ella.

Bufo exasperado y se dejó caer sobre aquel enorme sofá de cuero negro.

Colocó su antebrazo sobre sus ojos, cubriéndolos completamente.

Se extraño de no haber visto rondando por ahí al humano de sangre deliciosa, más no le prestó la mas mínima atención.

Que cojones había hecho?

Estaba tan frustrado consigo mismo que el problema que habían tenido en la empresa sólo lo había estresado aún más que había mandado todo a la mierda.

Realmente no tenía cabeza para aquello.

Se incorporo del sofá y camino hacia el estante donde había una pila de libros, tomo dos de sus costados y estos se arrecostaron hacia afuera abriendo un espacio en etro lugar.

Camino lentamente hacia aquel pequeño lugar abierto entre sus libros y tomó en sus manos el único libro que estaba ahí.

Por este libro en personal es que también había tenido que viajar rápidamente a Corea.

Lo sacudió un poco, despejando el polvo de este y viendo aquel círculo en el centro con un pentagrama dibujado en el centro y lo abrió.

Por aquel maldito libro muchos de los de ellos habían muerto.

Todos lo querían.

Todos querían el poder que ese libro les otorgaba.

Pero los pocos que lo habían conseguido habían muerto al no poder soportas las estelas de poder.

Así que al final él lo había obtenido y seguía siendo de su posesión desde hace mas de cien años.

Ojeo las hojas con escritos en el idioma original y se sentó en la silla enorme de su despacho, leyendo aquellas palabras.

"Que el amor se lleve lo que la sangre otorga"

Jamás nunca podía entender aquello.

La sangre les otorgaba el poder, entonces por qué el amor debía llevarse ese poder?

Era algo sin sentido para él.

Su nariz se movió graciosamente el sentir la precensia de Jimin cerca, no en la casa pero sabía que estaba por entrar en ella.

Así que el humano había salido?

Interesante.

Cuando Jimin entro se topó con la sonrisa de Mina quien limpiaba la sala.

— Buenas noches joven Park —saludo ella amablemente—. Ha llegado temprano.

— Oh si, b-bueno es que... —No podía decirle a donde fue, no porque no confiara si no porque su padre había pedido total discreción.

— No se preocupe joven Park, no me debe explicación alguna, encontré su nota así que tranquilo —dijo ella.

— Él señol Min? —ella río bajito y Jimin se sonrojo, bien hecho Jimin, bien hecho.

— llegó hace unos minutos, está en su despacho —informo ella—. Puedes llevarle está botella de vino por favor, se veía estresado así que algo de alcohol lo ayudara.

Aunque no es alcohol. Pensó ella mientras sacaba de uno de los estantes una botella negra y la dejaba sobre una bandeja.

— ok, yo s-se la da-ale —Jimin tomo la bandeja y se encaminó hacia el despacho/oficina de su jefe.

Lo veria.

Después de dos días y una noche lo vería.

Su corazón se aceleró en cuestión de segundos, y respirando profundamente abrió el despacho.

Yoongi alzó una ceja y se sacó los lentes de lectura para dejarlo sobre el libro.

Observando como Jimin entraba con una botella en la bandeja, supuso que Mina le había enviado.

— La S-seloña Mina-sshi me pidió que y-yo le tla-tajela vino —Jimin dejo el botella en el escritorio.

No había alzado la vista en ningún minuto de lo que llevaba ahí, sentía que si lo hacía sus piernas fallarían y se desmayaría.

Yoongi sonrió ladino ante aquello, viendo como el humano evitaba verlo y se sonrojaba.

Se levantó de la enorme silla y rodeo el escritorio para posarse frente a su asistencia.

Lo tomo de la barbilla, Jimin tenía las mejillas rojas y sus ojos levemente dilatados.

— Me estás evitando? —pregunto el vampiro.

Jimin evito verlo y sólo nego— Y-yo no lo he ev-evitado señol Min —mordio su labio inferior ante aquel fallo en su vocabulario.

A Yoongi aquello le pareció...

Tierno?

— Oh ya veo —Yoongi se acercó más al rostro de Jimin, sintiendo la respiración irregular del humano y viendo como la yugular palpitaba en nerviosismo.

Altas ganas de clavar sus colmillos sobre ella y beber de ella.

Yoongi soltó el rostro de Jimin se apartó.

Debia controlarse.

Jimin se quedó un poco tieso y quizás ¿decepcionado?

Yoongi tomó la botella y  bebió directamente de ella sin usar copa alguna.

Le dio una ojeada al humano y antes de que realmente cometería una locura hecho a Jimin fuera.

— Sal, estoy ocupado —sonando tajante se volvió a sentar sobre la silla esperando que Jimin le dejara sólo.

Entre desconcertado y un poco triste Jimin salió del despacho de su jefe.

Una vez afuera de ella llevo su mano hacia su corazón que bombeaba como loco y estrujó la camisa.

Que diablos es lo que había esperado que sucediera ahí adentro?

Que lo volviera a besar?

Estaba loco, definitivamente se estaba volviendo loco.

Él no se podía enamorar de su jefe, no podía.

Su padre se lo había pedido, Taehyung también y su madre igual. Todos le habían pedido que no se enamorara de él.

Pero que podía hacer él? Si el corazón se manda solo.

Estaba en un gran conflicto consigo mismo y con los cambios que estaba teniendo recientemente.

No quiere pensar en nada, no quería hablar con nadie.

Querría estar solo.

Tal ves si estaba solo y dejaba de pensar, lo que sea que sintiese iba a desaparecer. Jimin esperaba que si.

Hiiii long time no talk with your~

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Gracias por su apoyo y por seguir aquí, espero seguirlas siempre leyendo✨🤧

Los lovea~

MinMin💮💕