DODGING BULLETS

Shitzuki aplaudió con una enorme sonrisa cuando la canción terminó, Yoongi chocó puños luego de haber tocado el piano con la voz de Jungkook. El menor se acercó a la chica que sonreía enorme.

- Tienen muchas sorpresas

- Debimos llamarnos Chicos Pandora o Caja Pandora - la castaña río negando ante lo extraño que sonó aquellos nombres.

- Bangtan Soyeondan está bien - el chico hizo un puchero cuando Shitzu siguió riendo y se detuvo cuando volvió a observar a Yoongi tocando un par de melodías entre risas - Yoongi-ssi tocando el piano...- murmuró ante la admiración que tuvo hacia el chico.

- ¿Te... gustó? ¿El piano o...? - Shitzuki llevó su mirada rápidamente hacia los ojos de Jungkook

- ¿Yoongi-ssi? No no... Yo... - rio nerviosa, ¿Como le decía que todos eran atractivos pero que su estómago solo cosquilleaba con una persona? ¿Y que era la persona que estaba al frente suyo en este momento? - Tengo cierta debilidad con el piano... ¿Sabes? Mi sueño frustrado siempre fue el piano, sin embargo, soy guitarrista porque mis padres aman la guitarra.

- ¿Pero...? -

- Amamos mucho a nuestros padres Jungkook, Kyung y yo lo teníamos muy claro y por un momento fue muy obsesivo; hacer todo lo que nuestros padres amen para que estén orgullosos de nosotros, con ello vino el sueño de tocar guitarra por y para ellos- Jungkook lanzó un suspiro

- Los papás... así los ames y sean lo mejor de la vida, siempre serán la parte negativa en alguna parte de nuestro corazón y vida. Quizá sea inevitable, pero... Me propuse no ser un padre así, quisiera ser diferente - NamJoon observó cómo los ojos de la menor de todos, no perdía ni un segundo de observar a Jungkook, le prestaba tanta atención al chico que creyó que le estaba hipnotizando o algo similar.

- También quisiera ser una madre diferente, pero creo que ya lo seré si sigo en la vida de la música - Jungkook asintió

- ¿Puedo hacerte una pregunta? – la chica asintió - ¿Amas lo que haces? - la joven le sonrió, pero su voz se estancó al presenciar nuevamente los momentos que se habían vuelto negros por el dolor, aquellos que tanto disfrutaba cuando era trainee.

- Lo... A este punto... – se detuvo - Jungkook... Creo que... Lo amaba - la menor bajó su mirada a sus pies con duda y temor. ¿Desde cuándo aquella pregunta le aturdía tanto?

¿Si hubiera estado en una entrevista? ¿Qué hubiera dicho?

- Yo me sentía igual - murmuró el pelinegro viendo a sus compañeros - Me sentía ofuscado cada día que amanecía y lo primero que pensaba era en llegar a la cafetería y cantar, pero... Cuando la noche llegaba y me sentaba a cantar, me sentía vivo y fue ahí que me di cuenta que nunca odiaras lo que siempre soñaste sino, odias tu alrededor y quien está contigo, o incluso, tu mente misma. Yo amo a los chicos, son mis hermanos - rio tímido - pero a veces mi mente me traiciona diciendo que ellos son mejores que yo y que simplemente no hago nada más que cantar.

Shitzuki quiso llorar, definitivamente ella no odiaba cantar, odiaba su alrededor tan tóxico

- Jeon Jungkook, eres... - calló al verlo abrir sus ojos - Te conozco dos días y me haces reír pero también replantearme mi existencia. ¿Serías mi colaboración de una canción con toda tu mente algún día? - Jeon rio alborotando su cabello mirando a sus lados tratando de evitar la mirada brillosa de la chica.

- No soy famoso...-

- ¿Y? No debes ser famoso para que me interese en ti – Shitzu habló tan rápido que solo bastó para observar las mejillas rojas de Jungkook para caer en cuenta lo que ha dicho – Quiero decir... Uh... Yo... Uh...

Su rostro se volvió rojo al igual que sus manos comenzaron a pellizcarse entre si, lastimando sus dedos.

Jungkook iba a colapsar, ha recibido cumplidos de su familia todos los días, pero recibirlos de una chica. No. De LA chica, hizo que su corazón y estómago cosquillearan, se sentía como un niño.

La chica miró una última vez a Jungkook antes de llevar su mirada a Yoongi que hacía tranquilamente cafés.

-A-ayudaré a... A Yoongi-ssi... - murmuró señalando al chico sin mirar a Jungkook que se encontraba igual o más tímido que Shitzu

La tarde y noche transcurrió con rapidez, cada día más personas llegaban al café y salían encantados por sus sabores y por las grandiosas voces que disfrutaban en su estadía. Eran jóvenes por supuesto, su energía y buen ánimo salía hasta de las paredes, eran unos jovencillos tan encantadores.

Y no hablar de Shitzuki que ya descubrieron que trabaja en ese lugar por lo que chicos y adolescentes iban en busca de alguna foto, pero decidían guardar su privacidad y no ofuscarla ante lo último que sucedió en el concierto.

Jungkook cantaba cada vez con más emoción y sentimiento, porque cada vez que lo hacía, la chica sonreía y podía verlo a través de la mascarilla al ver como sus mejillas se levantaban al igual que también sabía que cantaba bajo porque movía su cabeza al ritmo.

Namjoon agradeció sus presencias, su buen ánimo de trabajar y se despidió de todos con un pequeño abrazo, cerró la puerta de la cafetería asegurándose que esté segura.

- Shitzu ¿Dónde vives? - preguntó Taehyung con curiosidad, también cómplice de Jungkook

- Justo ahí - señaló una pequeña casa. Jimin junto a Hoseok comenzaron a pellizcar los brazos de Jungkook, pero este se quejó separándose - Nos vemos mañana chicos - alzó su mano y los chicos se despidieron igualmente con sonrisas, excepto Jungkook que trataba de hablar, pero su voz no salía.

- Adiós Shitzuki - murmuró finalmente, la chica se despidió nuevamente con una sonrisa y comenzó a caminar rápidamente, agradeciendo que los chicos no se iban hasta que pueda estar segura en su casa.

- ¿Eres lento o qué? - habló Jimin enojado - No tienes su número ni la acompañaste a su casa

- Entiendan, es su primer amor - dijo Jin llevando sus brazos alrededor de sus hombros. El menor lo miró confundido

- ¿Primer amor?

- ¿Acaso no te gusta?

- ¡No!... Digo...

- Te gusta - concluyó Taehyung golpeando su pecho

- Tu no hables Kim, que estás en las mismas - el castaño se sonrojó al recordar a la dulce chica que conoció en el vecindario.

Y con las palabras de su mayor rondando en su cabeza, caminó hacia su casa.

¿G-gustarme?