Parte 56
Llegó el día de esa tan esperada boda. Namjoon y yo compartimos un cuarto en el hotel donde sería la ceremonia. Me ayudó con el moño mientras yo me perdía en mis pensamientos. Fue tan notable mi distracción.
-¿Nervioso?- me preguntó.
-¿Hm? ¿Por qué?-
Al fin terminó el nudo en mi cuello. –Verás a Doyeon en un par de horas, después de un largo tiempo.-
-Estoy ansioso.- dije solo por decir.
La verdad es que no estaba del todo feliz por volverme a encontrar con ella. No después de haber recordado tantas cosas sobre nosotros en el pasado. No después de reencontrar ese rencor en mi corazón. Ya me sentía vacío.
Pero me aferré en convencerme a mí mismo de lo contrario.
Tuve la idea de pedirle que fuera mi esposa. Solo porque quería comprobar lo tan vacío que podía estar.
Hm, pero me di cuenta que no lo estuve del todo cuando le dije mis votos improvisados. Me rompí en el interior cuando me dijo los suyos.
Todo eso fue diferente. No fue como el beso que anhelé darle ese día que nos encontramos al fin frente a frente, el abrazo que moría por recibir de ella, fue cientos de veces peor. Odié sus palabras de amor. Odié las mías. Porque las mías parecían un vómito de mentiras radioactivas. Mentiras que ella y yo creímos.
Toda la ceremonia mantuve mis ojos en ella. Ese estúpido vestido azul me trajo tantos recuerdos sobre ella en el instituto. Le sonreí a pesar de que por dentro me sentía tan quebrado.
-Jung Do Yeon. Pasé muchas cosas debido a ti. Sentí muchas cosas debido a ti. Y sentí... lo que es ser amado.-
-Min Yoon Gi. Todo comenzó por una simple curiosidad, ¿recuerdas? Pero entonces te convertiste en mi amor de instituto.-
-Eres... la niña que amo.-
-Yo te amo, Min Yoon Gi.-
-De verdad... abandonaría todo por ti.-
-Te quiero en mi vida.-
Le di la sortija que mi padre le dio a mi madre al momento de comprometerse. Nos comprometimos al mismo tiempo de nombrarnos marido y mujer. Mi pequeña mujer.
La siguiente parte de mi plan fue hacer que ella se entregara completamente a mí.
No era un plan hasta que me di cuenta que, por algo en mi interior, quise fastidiar a Hoseok con todo esto.
-¿Estás loco? ¿Qué... qué es esto?- el inepto me atacó en cuanto Suran delató la sortija en la mano de Doyeon.
-Le pedí que fuera mi esposa y ella dijo que sí. Pero en parte ya estamos juntos.-
-¿Qué?- rio algo escéptico. -¿Crees que esto es un juego? Doyeon es demasiado inocente para saber lo que un matrimonio de verdad implica, y tú demasiado ignorante, Min Yoon Gi.-
-Lo que digas.-
-No creas que no me he dado cuenta de lo que pasa contigo, Min Yoon Gi.- eso me sorprendió un poco. –Has cambiado tanto y eso me aterra. De verdad nunca esperé el día en que Doyeon te diera una segunda oportunidad. En serio quiero que te apartes de ella ahora, sobre todo ahora que hiciste esta locura.-
No me inmuté para nada. -Tal vez no soy lo más apropiado para ella, pero no puedes simplemente obligarme a sacarla de mi vida. ¿No has intentado suficiente ya, Jung?-
-Ella es demasiado joven para casarse.-
-Creo que ya tiene la edad suficiente, Jung. Hace año y medio que expiró tu excusa de nuestra edad.-
-Tú y yo sabemos perfectamente que esto nunca se trató de su edad.- me señaló. Admito que me congelé por un segundo.
Nunca lo había pensado de esa manera hasta ese momento que Hoseok reveló una de las razones más relevantes sobre su total desaprobación hacia mí.
Es verdad, nunca se trató sobre su edad, o nuestra corta diferencia de edad. Hoseok lo dijo antes y todo tiene que ver con Doyeon y su pura manera de ver el mundo. De verme a mí.
"En el momento en que nuestra atención se volvió irregular..."
Rodé los ojos para desviar el punto. –Tiene 19.-
-¡Mide 1,50! ¡Al diablo su edad, sigue siendo pequeña!-
...
En fin, después de eso Doyeon pudo sacarme de esa discusión. La convencí de salir temprano de esa fiesta para ir a mi departamento y ver a Holly. Extrañó demasiado a su cachorro que lo menos que pude hacer fue llevarla con él. Bueno, en parte fue para poder estar los dos a solas.
"En el momento que todo se volvió peligroso..."
-¿Cuándo compraste este auto?- puntos de estrategia extra. Conseguí un auto gracias a Namjoon, quién buscaba vender el suyo. –Voy a decir que lo robaste porque se parece mucho al de Namjoon.-
-¿Quieres escuchar música?-
-No tienes la música que me gusta.-
Oh, sí, eso fue totalmente fuera de lo planeado.
En ese corto viaje de camino a mi edificio, aproveché para mostrarle, al fin, maldita sea, la canción que tantos problemas y dolores de cabeza nos provocó.
Mi canción dedicada a ella "Butterfly", mis sentimientos más profundos por ella, y una y que otra preocupación. Sonreí porque le gustó, pero... todavía dudo si fue el mejor momento para mostrársela.
-Te amo, Min Yoon Gi.-
Tal vez nunca debí hacerlo.
Porque ahí mis sentimientos no eran los mismos con los que la compuse.
-También te amo, Jung Do Yeon.-
"Esas dos palabras se convirtieron en nuestro fin."
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
-¡Juro que los voy a hacer pagar! ¿Siempre creen que tengo la culpa de todo, no? Pero soy cruel debido a ustedes. Ustedes me hicieron quien soy, pero esto...-
-Cállate y sube al auto.-
-¡Esta vez no fue mi culpa! Hyung, no tuve nada que ver en esto, díselo.-
-La carta tiene tu nombre, Yoongi. Solo te harán preguntas, estarás bien.-
...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro