-¿Por qué me trajiste aquí?-

Se supone que íbamos a un paseo y luego al parque, creí que íbamos por el camino correcto hasta que ella comenzó a conducirme a otro lugar. Llegamos a un lugar, frente a un edificio con bastante pronombre reconocido, una empresa cuyo nombre había recordado debido a que ella me lo había mencionado antes, pero yo nunca la escuché. Me llevó ahí a base de mentiras. Excelente.

-Buscan compositores, te conseguí una reunión especial con Namjoon, ¿trajiste tu cuadernillo, verdad?-

-Dijiste que querías leer más.-

-Quiero que cumplas tu sueño.- replicó. –Namjoon te dará la oportunidad, solo tienes que demostrar lo que puedes hacer.-

-Esto no es así, Doyeon.-

-Hazlo por mí, ¿sí?-

¿Cómo fue que ella se metió en todo eso? Era absurdo. Fui rechazado en varias ocasiones, comencé a creer que mi música era basura y me resigné a los malos comentarios, pero esto... ¿era una puerta fácil? No iba a aceptar una oportunidad así por parte de mi novia.

Pero ella dijo "hazlo por mí".

Yo dije que haría lo que fuera por ella.

Nunca estuve convencido del todo, incluso cuando Namjoon salió del edificio, él esperaba por mí.

-Lo harás bien.- ella me sonrió. No estaba nervioso como ella creía, solo... no confiaba.

-Lo haré por ti.- más que claro.

Entré yendo a la par de ese chico que yo todavía desconocía. Solo sabía que era amigo del hermano molesto, pero también sabía que gozaba de un gran privilegio al ser uno de los miembros más destacados en esa empresa. Era una empresa pequeña pero con un gran historial de música exitosa, gracias a ese chico.
Lo seguí en un leve recorrido por las instalaciones, vi oficinas, salas de ensayos, estudios de grabación y más oficinas mientras el tipo me daba una leve introducción.

-Mira, no te prometo nada.- dijo. –La pequeña dice que tú música es buena pero no podemos contar con ese criterio ahora, ¿no? Así que te daré una oportunidad antes de hacer la muestra.-

-¿A qué te refieres?- me detuve, y por consiguiente él también.

-Que necesitas un producto que mostrar al PD, tú sabes, el jefe de jefes.- no dije nada. –Chico, aquí "fabricamos música", y exitosa, entiendes lo que digo. Lo que buscamos aquí es que nuestros artistas compartan nuestra música, ¿o no? Y tenemos que saber qué clase de música estamos trabajando.- me encogí de hombros. –Dame el cuaderno.-

Estiró la mano hacia mí, maldita sea, así estábamos en ese plan.
Le fulminé con la mirada como por cinco segundos, él sonreía y esperaba pacientemente a que cumpliera su petición.

-¿En qué rayos me metí?- gruñí por lo bajo mientras buscaba mi cuadernillo. Era el de mi música, yo nunca dejaba que nadie más lo tocara excepto Doyeon.

El tipo lo tomó sin pena y le dio un ligero vistazo. –Hm, esto es bueno.- dijo. -¿En serio esto es tuyo?- asentí aún con esa mirada de desprecio. –Me gusta esta, tiene buen ambiente por lo que leo. ¿Es rap, verdad? Eso es aún mejor. Acompáñame.-

Bien, seguimos con el recorrido, pero él se quedó con mi cuadernillo. Sentía tantas ganas de arrebatárselo con el plus de un buen golpe para desquitarme.

-Reconozco que es buena.- continuó diciendo. –El significado es... interesante. Un piano. ¿Te gustan los pianos?-

-¿A dónde vamos?-

-Al estudio de Hoseok, él sabrá qué hacer.-

Maldita sea.

Y cada vez esto me resultaba una idea aún más peor.
Sí, entramos a un verdadero estudio de grabación, mi primera vez en uno de verdad. Fue genial solo que con un ligero detalle que quisiera omitir pero ni modo.

-¿Es en serio esto?-

-¿Qué? Tengo el permiso de Bang PD. Todo esto es legal.-

Ya daba por hecho que Hoseok y yo jamás nos llevaríamos bien, pero lo toleré debido a que tenía un trabajo para mí. Él leyó mi canción, frente a mí, mirándome de vez en cuando para estudiarme a mí y luego la letra.

-¿Esto es tuyo? ¿En serio?-

No le respondí. Ni siquiera me moví.

-El tema es bueno.- Namjoon le dijo. -¿Crees que podamos hacer algo?-

-La pista no está mal pero la partitura es un asco.-

-La haremos en limpio y grabaremos.-

"Grabaremos", mentiría si dijera que no sentí cosquillas. ¿Nervios? Maldita sea.

-¿Quién grabará?- salí de mi silencio para preguntar aquello.

-Tú lo harás, es tú canción.-

-No tengo experiencia.- respondí de vuelta.

-Todos comenzamos sin experiencia, amigo.- Namjoon se acercó a mí y posó su mano en mi hombro. –Hoseok trabajará con la pista, tú solo entrarás ahí y harás lo tuyo. ¿Simple, no?- sonrió. –Los dejaré solos.-

Como decía, cada vez esto se ponía peor. Namjoon salió del estudio, obviamente dejó que aquella incomodidad brotara y que se extendiera como la humedad. Odiaba a ese chico. "El hermano de mi novia", ni siquiera me daba la gana de llamarlo por su nombre... aunque poco después tuve que acostumbrarme.

Yo me quedé de pie mientras el imbécil "hermano de mi novia" seguía en su silla hojeando mi trabajo. Estudiándolo como si fuese un libro.
Sí, era mí libro de vida.

-Esto...- el tipo pensaba. –Es... demasiado profundo.-

Solo se me ocurrió un "vete a la mierda" pero igual no dije nada.

-¿Cuál es tú inspiración?- me miró. Solo me encogí de hombros dando por hecho que no me daba la gana hablar con él. –Eres muy bueno.-

Esas palabras le dolieron, lo aposté, pero... fue un halago. Él halagó mi música.

-Estarás a prueba, Min Yoon Gi. Tienes talento, pero hay que ver si esto rendirá algún día. Te veré mañana.- dijo y se puso de pie. –Y yo me quedaré con esto. Haré la pista.-

Él también salió del estudio. No supe qué había sido todo eso, me sentí tan extraño. Me quedé solo en el estudio.

Miré ese lugar... y me sentí tan bien. Incluso toqué algunos botones del tablero, era un verdadero estudio de grabación. Yo quise estar ahí.

-¡Yoongi! ¿Qué te dijeron?-

-Les gustó.- supongo.

-¿En serio? ¡Claro que sí! Yo te dije que les gustaría.-

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