-en un planeta, era el mismísimo infierno, el cielo estaba teñido de sangre, las.nuves no paraban de soltar gritos de agonía, las montañas eran de fuego, las formas de vida se mataban unos a otros con tal de sobrevivir, en un campo inerte de asufre y sufrimiento, se encontraban 3 monstruos, un gigantesco, mucho más grande que los otros dos juntos, el cual tenía un cuello muy largo, no tenía piel, por lo que su carne roja, purulenta y sangrante estaba expuesta, un horrible rostro parecido a una máscara tribal aterradora sacada del infierno, 4 grandes brazos con garras tan afiladas que cortan cualquier piel, una cola muy larga que terminaba en una punta tan peligrosa que atravesaría el alma, 2 enormes y musculosas piernas que aplastaría hasta el robot más grande, resistente y fuerte, un aliento de azufre, calor y muerte salía de su boca sin dientes, y sus ojos brillaban con las flamas del infierno y venganza, enfrente de el estaban 2 monstruos más qñoequelos que el, pero eso no quitaba de lado el que eran gigantes comparados a los edificios más grandes de las ciudades, uno era un gran humanoide monstruoso de color púrpura azulado, con ojos rojos, dientes afilados, alas de murciélago y garras de pájaro en las piernas, el cual, un brillo rojo osalia de sus ojos, junto con un vapor o humo pirpura salía de sus fauces, el otro era un humanoide dorado, con un casco de caballero mutado porncabeza, 3 picos en forma de estrella en la espalda, sus brazos estaban convertidos en espadas que cortarian la más densa oscuridad, su cuerpo soltaba un leve brillo dorado, indicando que una cantidad concentrada de energía recorría cada célula de su cuerpo, estos monstruos eran Red, la Vestía Infernal, Solomon, el Traidor, y Acacius, la Luz Dorada, estos últimos dos estaban por enfrentarse nuevamente a su mayor enemigo, que no sabían cómo fue que lo revivieron, pero sabían que ahora era más poderoso, pero el no era el único que se hizo más fuerte, rodeando a estos 3, se encontraban cadáveres de muchos monstruos, algunos viejos enemigos que siguieron al lado del desgraciado de Red, otros viejos enemigos ahora aliados que querían acabar con la vida de Red de forma definitiva, otros eran aliados que se unieron a ellos en esta pelea sangrienta aún sabiendo el riesgo de esto, todos muertos, los únicos que seguían vivos, eran viejos amigos, Godzilla, el rey de los monstruos, Mothra, la reina de los monstruos, y otros amigos y aliados de estos, los cuales ya no tenían fuerza para seguir peleando, la habían gastado toda para derrotar a los más fuertes de sus enemigos revividos, ahora muertos nuevamente, estos veían como los 2 más poderosos de entre ellos estaban encarando al monstruo tiránico más despiadado de todos, la tensión en el aire se podía cortar con un cuchillo, no fue hasta que el monstruo infernal se preparó para lanzar su Soul Burn, cosa que hizo reaccionar a los 2 monstruos, que rápidamente lanzaron sus rayos en contra de monstruo, para así evitar que lanzará el ataque, y así, los 3 monstruos se prepararon para el combate inminente-

-de la nada, el sueño se cortó, Solomon en su forma humana, se levantó de golpe de su cama, estaba sudando frío, respirando de forma agitada, este se seco el sudor de la frente con su mano, pensando en el sueño que acababa de tener, sin duda alguna, era un sueño premonitorio, pero, como? Se supone que Acacius asesino a Red, sesiones que el no debería ser capas de regresar, a no ser, que un ser más poderoso lo reviviera y convirtiera en su sirviente o heraldo, pensamiento que le enfrió la sangre, debía de hacerse más fuerte, pero no sabía cómo, vio por la ventana de su habitación, todavía era de noche, viendo la hermosa luna llena en el cielo, decidió dejar eso para la mañana, y intentar regresar a dormir, debería d ehanlar sobre este sueño con los otros lo más rápido posible, pero n oserviris de nada el molestarlos tan temprano, por lo que iría con ellos cuando ya estubieran despiertos y con más energía, así acostándose nuevamente su cama, sin duda alguna, su futuro le deparaba otra guerra sangrienta como en la que murió por primera vez en contra de ese maldito, pero esta vez no permitiría que sus amigos y aliados mueran, no se permitiría morir denuevo, está vez, igualaria a Acacius, y lo ayudaría a destruir permanentemente a ese horrible ser, al punto que ni los fragmentos de su oscura y sucia alma quedarán, y lo único que quedará de el, serán ecos y polvo de lo que una vez fue, y nunca más volverá a ser-