A lo Mad Max

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Me sorprendió el estado calamitoso en el que se encuentra el mundo.

Esto no se ve en la película pero sí en el libro. El protagonista debe viajar a otra ciudad y toma un bus que más parece un tren blindado ya que viajar por las carreteras interestatales implica el riesgo de ser asaltado por motoristas salidos de una película de Mad Max.

Blindajes varios, guardias armados y (lo que no falta en este libro) una conexión al OASIS se encuentra disponible para los que pueden pagar el boleto.

Lo anterior implica que Norteamérica se convirtió en un estado fallido ya que solo hay ley y orden (relativos) en las grandes ciudades, siendo el área rural tierra de nadie.

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