- Liao ~ «Como siempre, sale de la nada cuando me despierto.»
- Hmm... Senpai, es temprano, ¿qué quieres?
- ¿Te acuerdas de qué día es hoy? ~
- No lo sé, tampoco sé qué día del mes es hoy...
- Tsk... Pensé que te acordarías. Tal día como hoy, entramos al Club de Baile.
- Ah... Genial, ¿cómo sabías eso?
- Lo tenía apuntado en una agenda.
- ¿Y tan temprano para ésto? (A parte de desconocer su pregunta)
- No ~ Pasará algo bonito hoy, Liao ~
- No quiero imaginarmelo.
«Se quitó de encima mía y se desperezó en frente.»
- Anda, Liao, levántate. Tu plan no es dormir hasta las 11:00.
- (Mi-Mira quién habla...) Bueno...
«Nos pusimos a desayunar y nos arreglamos un poco, yo por lo menos. Él se puso el conjunto ese que llevó una vez, rojo y amarillo con su gorra. ¿Y ésto para qué? Para intentar averiguar qué sorpresa me tenía. ¿Tendrá que ver con 'baile'?»
- Senpai, decidí averiguar qué estás tramando para este día.
- No va a ser fácil, te lo digo.
«Por probar, fui con él a la Sala de Espejos.»
- A ver... — entrando en la sala —
- Hm — aguantando la risa —
- Pe-Pensé que había algo aquí en la Sala de los Espejos. Miraré si hay mensajes ocultos en las paredes o algo...
«Miré alrededor de los pilares, y nada de nada.» «¿Me estaba tomando el pelo? No creo, siendo Senpai, sus picardías no van a ese nivel.»
- Con que aquí no hay nada...
- Podrías darme una pista, si te parece.
- Ah, ¿quieres pista? Es que como querías descubrirlo totalmente por tu cuenta...
- Sí, por favor. Tardaré el día entero si no.
- Vale. Pista: "No es algo que se busque".
- "No es algo que se busque"... Eso quiere decir que la sorpresa saldrá de por sí sola.
- Puede ~
- Buscar no sirve de nada, entonces. Daré vueltas por lugares que conocemos a ver si cuela.
«A Senpai se le ocurrió bailar conmigo un poquito antes de irnos de allí. Está ya, prácticamente, mal visto irse de la Sala de Espejos sin bailar un poco aunque sea. Me enseñó un paso que no me salía a la primera, estupendo.» «De allí intenté probar suerte en el parque donde también bailamos de vez en cuando.»
- (No hay que buscar, no hay que buscar...) Este parque nunca cambia, ¿eh? Aquí he sudado muchas veces la gota gorda practicando bailes. Casualmente estaba Leopardo Nublado cerca, mirándome.
- Ya veo, has elegido este lugar también pensando en 'baile'. Curioso. Si te digo que tampoco es aquí... ~
- ¡Senpai!
- Je, je, je ~ "¡Inténtalo de nuevo!" «Hablando como si fuese un robot.»
- (Mmm, iré a la biblioteca).
«De allí fuimos a la biblioteca. ¿Estará la sorpresa de una vez ahí?»
- (Cuánto silencio... Además no hay mucha gente. Me haría falta relajarme un poco leyendo algo, estoy ansioso por saber qué pasará).
- Shh, Liao, ¿te ocurre algo? — susurrándole —
- No es nada, pensando. «Di unas vueltas por las estanterías y me pareció ver una cola, como la de un tigre. Sería mi imaginación.»
- Liao, aquí no hay nada de nada. ~
- ¿Otra vez esa cara? Estás tramando algo. Definitivamente no es una sorpresa buena con la que pueda emocionarme sino con una con la que yo cabrearme.
- No, no, no, ¡no! En absoluto... Sólo que ya llegará.
- Uff. ¿Qué hora es ya?
- A ver... «Encendió su móvil para ver la hora de la pantalla de bloqueo.» ¡¡Las ocho y treinta dos!!
- ¿T-Tanto te sorprende?
- (Je, je ~ Es mi momento) Liao... Hay un sitio que no has visto.
- ¿Cuál? «Era imposible. Me faltaba el balneario y la universidad.» (Imposible, como no sea el balneario o la universidad, a ver qué diantres será).
- Emm es que no me acuerdo.
- ¿No te acuerdas? ¿De qué, del nombre del lugar, del sitio concreto?
- No... A ver, tengo una ligera imagen en mi cabeza pero no sé.
- En fin, si es sólo un único sitio más, allá vamos. «Decidí hacerle caso.»
«Nos fuimos a una calle que no había visto en mi vida. Encima de nuestra vista frontal, un cielo de atardecer precioso con estrellas preciosas.»

«Nos paramos a ver ese momento exacto, que tan poco dura. Senpai tenía intención de ir hacia delante pero le agarré de la mano... Me miró. Ahí ya se paró y miramos juntos el cielo en un instante. Hacía un ligero viento que generaba un movimiento en las nubes de una manera agradable.»
- Perdón, quería pararme a verlo un segundito. No veo cosas así todos los días.
- S-Sí... Sabes, este cielo me ha hecho pensar mucho en ti.
- ¿En serio? (...) Bueno, me alegro. Cada cierto momento también pienso en ti aunque no lo diga.
- ¡(...)! «Se puso nervioso de una manera impresionante. La adrenalina al cien por ciento. Rápidamente, sin dejar de soltarme la mano, me dirigió a un lugar de la misma calle, al final. Era...»
- Senpai, ¿q-qué es este lugar?
- Por fin se hizo de noche... ¡Un restaurante!
- ¡Buah! «Me estaba entrando hambre del día tan largo que llevábamos dando vueltas para nada.» Me encanta.
- Hum, hum ~ Entremos.
— Entrando en el restaurante —
- Sean bienvenidos. ¿Tenían alguna reserva?
- N... - ¡Sí! ~ — interrumpió Shu-chi — - ¡¿Qué?! «Reservó una mesa.» ¿Reservaste una mesa? ¿Cuándo?
- De acuerdo, por aquí.
«El camarero bigotudo nos guío hasta una escalera. No me podía creer lo que estaba pasando. Estaba estupefacto.»
- (...) «Era una terraza a solas. Una mesa en medio de una linda terraza, amplia con decoración bonita como varias plantas, luces elegantes y una guirnalda que pasaba por encima de la mesa. Con todas mis fuerzas logro recordar esa rosa que había en medio de la mesa. Yo la recuerdo en un estado positivo a pesar de la mala impresión que me daba. Típico.»

- Os iré trayendo la comida en un rato.
— Se fue el camarero —
- (¡Bien!) Liao ~ ¿Qué tal? ¿Te lo esperabas?
- La verdad es que no. ¡Y a qué viene esta cena romántica! Tuvo que ser romántica...
- Pues claro. Es celebrando nuestro aniversario entrando en el Club de Baile. Aproveché en que estamos juntos y planeé ésto ~
- Sí... Algo que puede celebrarse en una hamburguesería, por un acontecimiento normal, como entrar en el Club de Baile por primera vez... ¡Un cambio repentino a una cena romántica!
- Seguro que estás pensando en voz alta. Venga, siéntate. Yo sé que a ti te gusta. Las impresiones no son lo tuyo.
- (Es eso, debo tranquilizarme y disfrutar este detalle por parte de Senpai) Ya, ya... Voy a sentarme.
«Uno sentado en frente de otro. Puede que hable la mayoría de las veces cara a cara con él. Es que una rosa en medio y el ambiente de alrededor me flipaba mucho.»
— Con una sonrisa de oreja a oreja —
- ¿Y bien? ¿Ya entraste en calma?
- No, dentro de lo que cabe. Encima mira qué pintas traigo, de deporte.
- Ya... Bueno, si te hubiese dicho que te arreglases más, extrañarías.
- En fin, da igual, nadie nos ve.
- Eso, nadie nos ve ~
«Vinieron los platos de una manera en la que no podía tragar siquiera. ¡Qué locura, de verdad! Ensaladilla rara, panecillos para untar de cosas exquisitas, filetes de pollo buenísimos y bien cortados a su punto. Senpai comía que daba gusto.»
- (Ahora que lo pienso... Senpai se ve lindo y feliz comiendo, estando conmigo y yo llevándolo a todos lados... Un sentimiento cálido, sin duda) ¿Estás comiendo bien?
- "Puesh clagro, Liao. Se eshtá quedando una buenah nogche".
- Espera, traga, no tengas prisa.
- ¡Glup! (...) Pues eso, je, je ~
- Has tenido... Una buena idea, de verdad. Gracias.
— Aparece por delante el camarero —
- Ya pueden ir subiendo arriba.
- ¿Arriba?
- Sí, Liao, arriba.
- Pero si arriba no hay nada más.
«Nos levantó de la mesa y nos llevó a la última planta. Era el ático.»
- Pasen el último momento aquí, espero que les sea de agrado.
— Dio media vuelta y se fue por donde vino —
- Uuh ~ Venga, vamos a ese banco.
«Se situaba un banco simple en el ático en dirección a la preciosa luna que iluminaba esa especial noche. No había nada de decoración, sería algo súper-súper explosivo de y para Senpai de parte del restaurante.»
- Ahmm... Muy normal todo.
- Han dejado unos zumitos que son rarísimos de encontrar. Tienen frutas que no conocía ni yo. Coge uno... Siéntate.
- S-Sí...
«Iba a ser ya el remate del día. Estaba muy nervioso, ¡normal!»
«Se sentó a mi derecha, y con su mano izquierda, la colocó en mi brazo, cerca del hombro y me apretó cariñosamente... Para más, apoyó su cabeza en mi hombro, igualmente. ¿Puede que no supiese lo que era "quiero aire fresco"?» «Estaba tan nervioso que no decía ni 'mu' hasta que él rompió el silencio de alguna manera.»
- Liao ~ — con voz nerviosa — Sa-Sabes... «Dejó de abrazarme y, yo que tenía la mano apoyada al banco de lo tanto que se había pegado,  puso su mano en la mía, giró su cuerpo, mirándome nervioso y siguió hablando.» Quiero que te quede claro que estaré siempre a tu lado... Pase lo que pase... Y que... Me gustas mucho. Nunca te olvidaré. (...)
- (¿Q-Qué digo? ... Estaba como para llorar de emoción) Yo... También, tenlo por seguro, Senpai. «¿Iba a decir algo más? No actúo tan bien como él...» «Miré al cielo, de las muchas veces que lo miré. En aquel momento sentí algo... No lo olvidaré nunca. Mientras miraba el cielo, él me dio un beso en la mejilla...»
- ¡(...)!
- ¿Mmm?
«Sinceramente, ahora lo que no recuerdo mucho es lo que pasó después. ¿Me desmayé? Creo. Mezcla entre nervios y eso... Encima me puse rojo como un tomate. ¿Y si me estaban viendo los vecinos de la décima planta de al lado? ¡Qué 'boom'! De verdad, de lo que pasó tal día, me quedo con muchos recuerdos.»