— ¡Hola! Antes que nada quiero decirle unas palabras a AlexGamerUltimate, un usuario de Wattpad: Eh... ¡Hola, Alex! El extra dos fue dedicado a Smash, así que este tercero va para ti. Obviamente os quiero a los dos por igual. En esta ocasión, los felinos se van a una aventura en el espacio 😯... ¿Por qué? Porque tú me ayudaste en su momento con Starlink Battle for Atlas. No sirvió de mucho pero te lo puedo agradecer con este capítulo. Espero que llegues a ser un usuario espléndido con alguna Obra (si es que quieres escribir algo en Wattpad 😅). Eso es todo, que empiece el capítulo —

«Otro día tranquilo.... ¡Son muchos días tranquilos! Sin embargo aquella tarde...»

- ¡Liao! ¡Liao! — gritaba Shu-chi —
- ¿Qué pasa? ¿A qué vienen esos gritos?
- ¡No lo sé! ¡Tú escúchame! Esta ropa...
- ¿(...)? ¿Qué te pasa?
- Me la ha enseñado Tigre, je, je... ¿Te acuerdas de esto?
- Mmm... Oh, sí. Es el disfraz de agente espacial. Lo usé para un baile de fin de curso. Decoraron el escenario con meteoritos, alienígenas, y... Hasta el suelo era la Luna.
- ¡¿En serio?! Qué bien lo montasteis... Yan Shu-chi, el Yan Shu-chi niño hizo otro baile...
- Vosotros fuisteis el baile de... La Cenicienta.
- Ugh, qué feo... ¿Cómo sería...?
- Creo que todos los chicos iban de campesinos y algunas chicas iban de campesinas. Otro, en especial, iban de Cenicienta en sí, y los chicos de esa misma importancia iban de príncipe...
- Qué rollo, no tiene color respecto a tu baile, je, je.
- Tienes razón... Hasta me lo po...
- ¡Voy a probarmelo! ¿Puedo?
- S-Sí... Claro... (Quería probar yo antes, bueno...).

«Nos fuimos a mi habitación, aunque ya es de todos nosotros... Allí se probó Shu-chi el traje.»

— CLACK —

- ¿Por qué cierras la puerta? Sólo estamos nosotros...
- Ya lo sé... Es la costumbre ~
- Mejor salgo y...
- ¡No! Juntos aquí dentro. ¿Tienes vergüenza por ver cómo me desnudo?
- N-No es eso... Es lo que yo llamo pr-privacidad...
- No tengo nada que ocultarte a estas alturas (que yo sepa). Mi cuerpo lo conoces bien, ¿quieres verlo por...? ¿"Cuarenta y pico vez"?
- ¡Da igual las veces! (...) En fin, quítate ya la ropa.
- ¡Ahm! No me digas eso ~
- ¡Venga!
- Vooy, jefe.

«Se empezó a quitar la ropa. Siempre tiene esos boxer tan ajustados al cuerpo... No pude evitar mirar...»

- Mm-mm... ¡Ya!
- Oh... No está mal. ¿Qué te parece?
- Me queda un poco justo. No puedo creer que el cuerpo de Liao-niño me quede bien.
- Bien, pues ahora me to...
- "¡Hola!"
- ¡Liao! Hemos llegado.

«Oh, no. Algo volvió a interrumpirme. Sólo quería probarmelo y ya estaban entrando por la puerta esos dos.»

- ¡Mira Tigre! ¡Me lo he puesto!
- No está mal, no.
- "Yan Shu-chi agente espacial."
- ¿Qué traéis?
- Ah... Esto... Es una pistola de silicona.
- ¿De silicona? ¿Por qué?
- ¿No te lo ha dicho Likulau? Se ha roto el marco que cubre el espejo en el cuarto de baño...
- ¿C-Cómo...? Uff... Ahora me toca a mí arreglarlo. Dame la pistola.
- ¡E-Espera! Liao, ¿me dejas esta pistola?

«Cogió la pistola de la bolsa y rápidamente hizo el gesto de "¡te disparo!"»

- ¡Hyaa! ¿Qué sois vosotros? Bichos asquerosos...
- Gatito, déjate de tonterías... Iba a dedicarle la mañana al arreglo del marco.
- ¡Déjame! Voy a por el móvil ahora mismo.

«Se fue de allí muy rápido. Fue al salón para coger el teléfono móvil. Yo fui detrás de él, pero sin correr...»

- Oye, Senpai. ¿El traje te ha convertido en Liao-niño? ¿Por qué actúas así?
- ¿A que mola? Puedo ser actor cuando me lo propongo.
- S-Sí... Eh... Fuera de eso...
- ¿Me haces una foto? O espera, ¡los dos juntos! Así tengo a un enemigo en mi posesión... ¡Je, je! ~
- Ahg... (Lo que hay que aguantar...)

«Me puse junto a él para hacer la foto... Entonces mientras miraba a la cámara para comprobar cómo saldría el selfie...»

- ¡Ponte más cerca mía!
- Un momento... Ahora.
- ¡Sonríe!
- (...)

— CLICK —

- Ah... ¡Qué bien! Mira cómo quedó.
- Está genial, Senpai. (...)
- ¿Qué pasa? ¿Has visto un grano en tu cara o algo?
- No... Detrás de la foto... Eh...
- ¿(...)?
- Hay algo en la ventana.
- A-Ah... T-Tienes razón.

«Me di media vuelta y me acerqué a la ventana. Antes de abrirla comprobé si se veía algo tras ella.»

- No veo nada... Habrá sido un pájar... ¡¡Aahh!!
- ¡(...)! ¡Liao!

«Una cosita muy rara abrió la ventana desde fuera. ¿Q-Qué era...?»

- Por fin te encuentro, Étoile.
- ¿Étoile? — pronunció Liao, en francés —
- ¿Q-Qué...? ¡No entiendo nada! ¿Qué eres? — gritó Shu-chi —

«Tras el grito, obviamente Tigre y Likulau acudieron. También se sorprendieron. Nos quedamos un momento impactados ante esa criaturita. Tenía forma de cerdito, pelo azul y con dos piercing en las orejas.»

- Hola, terrícola, me llamo Píggou. Vengo buscando a Étoile.
- ¡¿Vas a decir quién es esa persona?!
- ¡Él! — señalando a Shu-chi —
- Píggou, explícate. ¿Qué eres? No puedes entrar en casa de nadie de esa forma. — dijo Tigre —
- Fm, no usáis la palabra "evidencia". ¿Tengo que decirlo?
- Por favor... «dije.»
- ¡Fm! Soy el enviado especial de nuestro planeta. He tardado en venir aquí... Estoy buscando a Étoile, nuestro príncipe. Se fue de aventuras con su perro y sus amigos... No dimos con rastro de él por ninguna parte en todo Bluep. ¡Eres tú! Príncipe... ¿No te acuerdas de mí? ¿Quién te ha borrado la memoria tanto a ti como a tu perro? Tendríais que saber quién soy.
- ¿Yo...? ¿Un príncipe? ¡Ja! ¡Qué va! Cerdito, nos has asustado a todos en esta casa para decirnos esa tontería. Y yo que pensaba que era un demonio o algo pareci...
- ¡Tengo la L-3019 a mano! Deberías saberlo, príncipe.

- ¡¡¿U-Uah?!! ¿No es una pistola de juguete? ¡Liao! ¡Tigre...!

«Tigre se puso delante de Shu-chi Senpai, quien estaba en el suelo intentando echarse para atrás lo máximo posible.»

«Likulau no decía nada, quizás no era gran cosa para él...»

— Con la pistola cargada —

- (Puede que...) ¡Quieto!

«Rápidamente cogí la pistola de silicona y apunté a Píggou.»

- ¡A-Ah! Una L-4019... ¿De dónde has sacado eso, perrito?
- ¿Perrito? — se preguntó Tigre —
- ¡No nos subestimes! ¡No queremos problemas!
- Fm... ¡Fm! Está bien. Puede que estéis en blanco por dentro, pero seguís siendo Étoile y Pierre.
- ¿Liao? ¿Se supone que eres mi perro?
- C-Creo que tenemos que hablar con tranquilidad, chicos. Vamos todos a mi cuarto.

«Se calmó la cosa y fuimos a mi habitación... La habitación de todos. Al cerdito no se le quitaba la cara de serio. Está claro que quería salirse con la suya.»

- Bien, ya estamos tranquilos. Píggou.
- Qué.
- No somos Étoile ni Pierre.
- Claro que SÍ sois vosotros.
- Ahhff... ¡No somos!
- Paciencia, Liao. Esto... Tienes alguna referencia, ¿Píggou?— preguntó Tigre —
- Sí. Precisamente Étoile se fue con su traje. Es igual que el que llevas... Tú... Mi príncipe.
- Soy Yan Shu-chi.
- "¿Flan Sushi?" — se preguntó Píggou —
- ¡Yan Shu-chi! ¡Y no lo repito más!
- Está bien.... Pues eso, este Flan lleva el mismo traje que mi príncipe. Además, su perro es exactamente igual a este terrícola... Tuvo que haberse transformado, ¿de verdad que no recuerdas nada?
- Ngh... — se guardó sus palabras Shu-chi —
- "¿Fotografía? Fotografía Étoile."

«Likulau, tras un rato sin decir nada, realizó su pregunta.»

- ¿Tienes alguna imagen o representación de ellos? — transcribió Liao —
- Sí. En Bluep tenemos desde luego mejor tecnología que aquí... Tengo la nave encima de este edificio. Si permitís... Seguidme.
- ¡¿Tenemos que obedecer a este cerdo?! ¡Liao haz algo! — se quejó Shu-chi —
- ¡Cállate!

— PIUM —

«En un solo disparo pudo paralizar a Senpai. No es doloroso... Simplemente se queda en el sitio, paralizado. Menos mal que Tigre pudo llevarlo en brazos.»

- ¿Eh? ¡No puedo moverme!
- ¡Fm! Por tu bien, príncipe.
- (Ay que ver...) — pensó Liao —
- "Ir a la nave de Píggou."
- Mejor vayamos, sí. — acabó Tigre —

«Sin otra opción fuimos a su nave. Subimos al ático del bloque y pudimos ver esa nave que ocupaba todo el sitio. ¿Una nave tan grande para un cerdito?»

- Oh... Qué nave tan grande... ¡Mola!
- Pierre, ahora que eres 'persona' dices muchas tonterías. Es la nave de tu amo, ¿no te acuerdas?
- No, ¡guau! «imité a un perro.»
- Esta es la nave de Étoile... — dijo Tigre —

— Una vez dentro —

- ¡Wow! Es muy chula... Tiene el tamaño de mi habitación... Parece un hotel en miniatura.
- Deja de sorprenderte. ¡Venid aquí! Esta pantalla...
- "¿En pantalla... Étoile y Pierre?" — preguntó Likulau —
- En efecto, ellos son. Idénticos, ¿verdad?
- (E-Eh... Lo del perro es discutible...) — pensó Liao —
- "Parecidos."
- Se parecen, es verdad.
- ¡¡O-Oye!! No digáis eso de mí... No soy un perro...
- "Parecido."
- Muuuy parecidos. — repitieron ambos —
- ¿Verdad? — añadió Píggou —
- ¡Definitivamente no somos ellos! Te estás equivocando. «insistí.»
- Fm...

«Píggou se acercó a la puerta de su nave y la cerró. Eso significaba que estábamos encerrados allí con él.»

- E-Eh... ¿Qué pasa? — dijo Shu-chi sin poder moverse a penas —
- Ya que estoy... El príncipe estaría muy contento conmigo, si se acordara de mí. Os voy a usar como ayuda, pensándolo mejor.
- ¡¿Ayuda?!
- ¡¿Eso significa que vamos contigo en tu nave?!
- ¡Sí!
- ¡¡No quiero!! — se quejó Shu-chi —
- Esto... Gatito... ¿Puedo hablar?
- ¡Qué! — respondió Shu-chi —
- Deberíamos ayudar a Píggou... ¿No?
- "Ir todos."
- Mmm...
- ¿Le tienes miedo al L-3019? ¿Tigre?
— preguntó Shu-chi en plan chulito —
- No. No le tengo miedo. ¿Y tú? Estás paralizado pero se te notan los nervios en tu cara y tu forma de hablar.
- N-No es cierto...
- Vamos. «dije.»
- ¡¿Qué?! Liao...
- Es por el bien de todos. Si demostramos que no somos ellos, mejor... ¡Y si encontramos a los verdaderos Étoile y Pierre seguro que Píggou dejará de molestarnos!
- Bien pensado, Liao. — dijo Tigre —
- "Excelente idea."
- Muchas gracias, chicos. ¡Fm!

«Y así... Es como empezó nuestra aventura en el espacio. Acepté la búsqueda de unas personas y su vez la  confirmación de nuestra verdadera identidad... Shu-chi Senpai no estaba de acuerdo, pero pronto se sentiría convencido de que podía unirse a nosotros.»

«Pasó unos minutos... Nos sentamos en una especie de sofá futurista. A Senpai ya casi se le pasó el efecto parálisis.»

— Susurrando... —

- Has hecho bien, Liao. Estaba pensando eso mismo. — dijo Tigre —
- Sí, es buena idea.
- "Idea buena."
- Mmm... Sí... — añadió Shu-chi tras la respuesta de Tigre y Likulau. —
- ¿Oh? ¿Ya te hemos convencido? Genial, Senpai.
- Y-Ya... Pero pensándolo mejor debo demostrar que no soy ese Étoile y que tú eres mi querido Liao.
- Sí... «dije.»
- Ahora que lo pienso... ¿A dónde vamos? — dijo Shu-chi levantando esta vez la voz —
- (...) Vamos a seguir mi radar. Esta pantalla es capaz de buscar al dueño de la nave, Étoile. Vine aquí pensando que erais vosotros dos. Estoy en que sois vosotros, pero puede que el radar marque algún dato más. — contestó Píggou —
- Ah-h... ¿Vamos al espacio?
- Sí, ¿por qué lo preguntas?
- ¡(...)! ¡Es de verdad! ¡No es de juguete!
- ¡P-Pues claro! Senpai...
- Príncipe no se asuste. Por cierto. Debéis tomar este zumito.
- ¿Qué zumito?
- El zumito que damos a los que no son de Bluep. Con esto podréis respirar tanto fuera de vuestro planeta, como en el espacio e incluso en el propio Bluep, si es que no pertenecéis al planeta...
- G-Gracias... — dijo Liao mientras daba a los demás el resto de zumitos —
- ¡Y-Ya puedo moverme! ¡Mirad!
- Un gatito energético ha vuelto. — dijo Tigre —

«Lo primero que hizo Shu-chi Senpai fue levantarase y estirarse.»

- (Ahora que lo pienso... Con esa ropa puede parecer que va a un viaje espacial... Mientras que nosotros no...)
- "Likulau va tomar siesta."
- ¿Te vas a dormir? Bueno... — dijo Liao —

«La nave ya alcanzó gran altura. Podíamos ver la Tierra desde donde estábamos. Podíamos confiar en Píggou y sus artilugios...»

«¡Comenzaba un viaje por el espacio! ¡Increíble!»

— CONTINÚA EN LA SEGUNDA PARTE DE "¡¿VIAJE POR EL ESPACIO?!" —