Un ataque sin previo aviso (⚠️)
«Hace poco, leí en un periódico que en la montaña del balneario habían fantasmas. Sólo una persona lo experimentó, sin embargo no hay pruebas. Todo esto sonaba muy falso. Una persona vio un fantasma... ¿Pruebas? Ninguna.»
- "Liao."
- ¡Likulau! (...) No entres sin decir nada, ¡me asusto cuando me llamas de esa manera por detrás mía!
- "P-Perdón... Yo llevo rato estando detrás. Intentar leer esas palabras."
- ¿Las del periódico? Ah, no te esfuerces. Es sólo una noticia falsa.
- "Noticia no falsa."
- ¿Qué? ¿Por qué no? Una persona vio un fantasma o algo similar en la montaña del balneario. No hay pruebas.
- "Aquél día. Notar una fuerza. No poderosa, mucho. Pero noté."
- Notaste una fuerza extraña. ¿Crees que eso es casualidad? De verdad, no hace falta comprobarlo. Hay gente loca en el mundo.
- "Quiero comprobar."
- Ni se te ocurra ir solo. Está lejos. Además no pasa casi nadie por allí.
- "No hay problema. Soy poderoso. Acostumbrado a defender Wutai de espíritus malos."
«Con una cara muy dispuesta, da un paso atrás y tan pronto como pude, le agarré del brazo.»
- Te he dicho que no. Si vas a hacer locuras, que yo las vea, por favor.
- Os estoy escuchando, ¿sabéis? - dijo Tigre -
- ¡Estabas ahí! Pensé que te habías ido con Senpai a comprar.
- Ya volvimos hace un rato. Te vi tan concentrado leyendo que me metí sin más en mi estatua. No se puede molestar al lector... (...) Os voy a acompañar. - dijo, saliendo de la estatua -
- "No hay problema."
- Emm... No te envalentones, aborigen. Os iré siguiendo el rastro.
- Está bien. Venga, vamos Likulau.
«La cara de convencido no se la quitaba nadie. Haría cualquier cosa hasta acabarla, sea como sea.» «Fuimos a la montaña. Likulau tomó mi cuerpo para llevarme hasta allí rápidamente.»
- En el subconsciente -
- "¿Dónde?"
- Emm... Por allí.
«Señalándole el camino, llegamos a donde más o menos creen que se vio el fantasma.»
- "N-Noto una presencia."
- Oh...
«Me dijo Likulau que habían varios espíritus. Tenían una fuerza extraña. Yo no los podía ver con mis propios ojos, así que volvió a mi cuerpo. De esta manera, los espíritus sólo me verían a mí y no a Likulau por separado.»
- ¿Q-quiénes son esos? Tienen una forma indefinida, con ojos pequeños. Hay unos cuantos.
- "Yaoguai."
- ¡(...)! (Así era Sen... Gato Leopardo en sus inicios posiblemente) No...
- "¿...?"
- ¡¡No voy a tolerar que sigan creciendo comiendo a otras personas!!
- "Poder destruirlos, si quieres."
«Mi cuerpo se movía solo. Normal, estaba siendo controlado por Likulau. Había una mezcla entre mi ira y lo que estaba dispuesto a hacer Likulau.»
- Likulau disparó un fuerte rayo -
- ¡¡Ah!! ¡¡Huyen algunos!! ¡¡Corre!!
- "¡Hm!"
«Partimos varios árboles... Lo mejor es que acabamos con esos pequeñines. No podía creerme que esos bichos crecen y van comiendo otros espíritus o dioses o ¡lo que sea!»
- Jah... Jah... «Likulau salió de mí. Tenía la cara seria...»
- "Era cierto. Presencia verdadera, yaoguai."
- Tenías razón. Menos mal que puedo confiar en ti, después de todo. Siento no habérmelo creído...
- "Montaña salvada. Liao salvado." «Puso su sonrisa. La sonrisa tan perfecta que pone cuando hace algo bien hecho.»
- Me pregunto quién habrá visto a esos espíritus... O como dicen en el periódico, 'fantasma'. Seguramente, alguien como yo, de manera similar. Qué raro...
«Donde vivimos no hay yaoguai apenas. Está Senpai, otros más... Pero tampoco una ciudad entera.»
- De vuelta al apartamento -
- Ya hemos llegado... Espera, si Lin Hu vino con nosotros. ¿Y Senpai?
- Vaya. Aún no ha llegado. Estará ocupado haciendo lo que le dije.
- ¿Qué le dijiste?
- ¡N-Nada!
«Iba a ducharme. Estaba cansado. ¡Qué mejor que una ducha!»
- (Genial. Es mi momento para ducharme tranquilo)
«Me dirigí, sin decir nada, al cuarto de baño. Cerré la puerta cuando entré.»
- ¡PUM! -
- (¿A que le dí?) «Abrí la puerta y estaba Likulau en el suelo con las patas en el hocico.»
- ¡A-A-Ayy! ¡Te dí sin querer!
«Me agaché a acariciarle y le animé a levantarse.»
- ¿Querías entrar en el cuarto de baño?
- "Sí. Yo enjabonarte... Y aquí tengo la ropa de Liao."
- ¿Quieres lavarme? ¡Ah, eso, mi ropa, gracias! «intenté evitar lo que me dijo, pero aun así entró conmigo.»
¿Por qué entras? Voy a ducharme... Si puedo, claro.
- "No. Yo agradecerte mucho con una ducha. En los 'doujinshi' ocurrir."
- O-Otra vez aprendiendo de esas cosas. Voy a tener que tirarlos. (Menos mal que Senpai no los ha visto. Los tengo bien escondidos) No hace falta, de verdad...
- "Liao querer. Yan Shu-chi dice que gustas cosas así."
- ¡¿Qué?! (¿Eso le larga Senpai a Likulau? ¡Será...!)
- "No pienses. Adelante."
«No tuve más remedio. De todas formas quería agradecermelo. ¿Por qué? ¿Por qué confié en él en lo de la montaña? ¿En qué entonces?»
«Me quité la ropa. Me tapé lo más que pude las partes íntimas...»
- Voy a meterme en el pie de ducha. Allá voy...
- "Yo quitar ropa, también."
- ¡(...)! ¿Q-Qué llevas puesto?
- "Llámalo 'boxer sexy'."
- (Jo-Joder... ¿Cómo aprende cosas pervertidas? No es que me moleste... ¡Es que no lo hubiera pensado de él!)
«Encidió el grifo y me dejó caer el agua por encima. Estaba calentita. Likulau se puso detrás mía con 'eso' puesto. Cogió el jabón y me lo fue refregando por el cuerpo. En más de una ocasión me abrazó. Notaba lo de su entrepierna... Estaba de aquella manera.»
- "¿A-A Liao gustarle los abrazos?"
- ¡Me gustan! Pero así de provocativo no se abraza. ¿Me vas a tener media hora con el jabón puesto?
«Me lavó la cabeza. Notaba sus patas peludas en mi cabeza. Se sentía como en un masaje de 'spa'. Luego, acabamos secándonos. Yo sequé a Likulau con una toalla y la dejé en el suelo. Sin embargo... Él me secó con otra toalla y encima me la enrolló tanto entre las caderas que tropecé. Era muy larga la toalla.
- Estando en el suelo -
- ¡Ay! Ha dolido, uff... «Eché la mirada hacia él. Tenía un punto de mira... Emm... Idónea para lo que él quería.»
(Es enorme... ¡¿Eh?! ¿Qué digo? Tan pervertido soy de mirarle ahí...)
- "A Liao le gusta lo que ve..."
«Se dio cuenta de que le estaba mirando ahí. No pude evitarlo, caí enfrente suya, precisamente en ese plano.»
- ¡N-No es lo que crees!
«Es que entre éste y el otro, verse desnudo no es un problema. Se bajó el 'boxer' creyendo que quería ver más. ¡Para nada quería ver más! Fue un error.
- ¡(...)! He visto suficiente. ¡No veo nada, me tapé los ojos! Je, je.
- "¿Cómo te levantarás sin usar manos? Toalla enrrollada, también. Esperaré a que dejes la vergüenza."
«Tardamos un buen rato en salir del cuarto de baño. Estaba muy pesadito. No quería ayudarme a levantarme. Además estaba esperando a que perdiese esa vergüenza de verle. ¡Se cree las cosas de otra manera!»
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