Él no era un
monstruo
como decían...

Él vivía entre
los verdaderos
monstruos.

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Años atrás, cuando la familia Minamoto recién se desarrollaba, en la provincia de Kanto, había ocurrido un nacimiento, que nadie creyó posible hasta ese día.

—Jomei dono... Narumi-sama, ha dado a luz a un niño

Fueron las palabras de la doncella al hombre, quien dejo sus escritos por ir a ver a su hijo, el primer hijo que tendría con aquella mujer, por la que haría cualquier cosa.

Sin duda fue la noticia mejor recibida de todas, pues incluso esa misma noche, en la provincia, toda la gente comenzó a celebrar en honor al niño. Las fiestas duraron toda una semana, cuando fue el anuncio oficial donde se reunió toda la familia, la demás gente que habitaba el lugar, estuvo presente y hacían llegar regalos y buenos deseos a la familia.

[ .... ]

El niño creció en gracia y belleza, todos en el lugar al verlo se enamoraban inmediatamente de él y por si fuera poco, el pequeño a temprana edad, comenzó a mostrarse como un ser comprensible, bondadoso, piadoso y amable. Sin embargo, eso no le ayudaría para el cruel destino que le deparaba el futuro.

Fue a la edad de 4 años, cuando ocurrió lo que nadie creyó que fuera posible y con eso, inicio su sentencia de muerte.
En una habitación, la madre del pequeño le entregaba una caja de madera fina, celebraba sus 4 primaveras; el menor al destapar la caja, se encontro con un diario, todas sus hojas estaban en blanco, sus ojos se iluminaron de felicidad por aquel regalo, sin dudarlo, se levantó de su lugar para ir a abrazar a su madre, pero...

El niño cayó derepente sobre sus rodillas, la mujer se altero y se acercó a este preocupada, más no logro creer lo que veía, su pequeño hijo estaba tosiendo estrepitosamente y de su boca escupía plumas, plumas de ave color pardas. Al ver este fenómeno, la mayor salió de la habitación asustada, gritando por ayuda, todos en el lugar se alteraron y corrieron a ver.

Mientras eso ocurría en el "exterior", el menor había perdido la noción, pues en su malestar, había percibido una extraña energía, esta, era cálida y reconfortante, el panorama frente a él ya no era su habitación, todo era oscuridad, en el centro de su visión había un árbol, un gran árbol donde en una de sus ramas había una especie de ave. Como si algo lo llamara, se levanto y empezó a caminar en la densa oscuridad, la cual se sentía como si caminara en el agua y cuando llego hasta donde estaba el árbol, aquella ave bajó con gracia hasta sus manos.

—Masaru, en tu familia hay miembros que quieren saciarse de poder y terminar con la relación espíritu-humano, muy pronto los espíritus y yokai de este lugar moriran, no volveran a existir, incluso, hay otra familia que corre peligro...

Masaru: ¿Peligro?

—tu destino es un camino lleno de espinas y mentiras, pero tu corazón alberga una fuerza de voluntad que busca la justicia y libertad

El menor guardo silencio por las palabras de aquella ave, esa ave era un espíritu. El animal, al ver que el niño no reaccionaría, habló.

—Masaru, soy el Halcón y he estado contigo desde que naciste, sin embargo me he mantenido oculto hasta ahora... Yo represento la fuerza de voluntad ante las adversidades, mi poder te ayudara a Crear y Destruir, firma el contrato conmigo y prometo protegerte a ti y tus aliados en este camino

El pequeño miro al suelo, de sus ojos caían pequeñas lágrimas.

Masaru: no puedo... Yo no soy capas de proteger, soy débil... Además, odio los conflictos y más si incluyen el lastimar a otros...

—Pero tu misma fa-...

Masaru:—le interrumpe— sin embargo, yo... Yo no puedo dejar que lastimen a los espíritus, ellos son nuestros amigos, mi ancestro Yorimitsu y Yusuhiro lo dijeron... Además... Si hay más personas en peligro.... Halcón, prometo entregarte mi vida a cambio de tu fuerza para protegerlos

El ave asintió, cambio su forma a una esfera de energía, se posó en las manos del menor y este la llevó a su boca, de forma que al ingerirlo nuevamente sintió aquella energía del inicio, pero más fuerte.

[ .... ]

En un pequeño santuario una kitsuné dormía tranquilamente hasta que sintió una fuerte energía que la hizo despertar.

Kitsuné: ¿Uh? ¿Tomoki? ¡¿Qué es eso?!

Un hombre de cabello azabache entraba al santuario y se acercaba a la zorro.

Tomoki: ¿Lo sentiste?

Kitsuné:—asiente—.

Tomoki: es... Es una energía muy fuerte, pero no se como puede estar en el templo...

En el lugar se escucho un grito, ambos salieron corriendo a ver, la zorro se subió al hombro del azabache y se oculto para observar que pasaba.

[ .... ]

En los pasillos se podía ver a varias doncellas asustadas, se escuchaba la desesperación y llanto en una mujer, el hombre con cuidado se acercó, al observar el interior de la habitación, se congelo.

En el centro, estaba el niño con una apariencia totalmente diferente, una parte de su mejilla derecha se estaba cubriendo por plumas de halcón y sus ojos eran afilados como un animal, el tono rojizo que tenían ahora estaba de color dorado, la mujer veía con asco al menor.

—¡No lo aceptare! ¡No lo haré! ¡Esa cosa no será mi hijo!

La mujer en desesperación tomo la jarra de la mesa dispuesta a estrellarla en el rostro del más pequeño, pero su mano fue detenida por la del hombre azabache.

—¡¿Cómo te atreves a detenerme?! ¡Te ordeno que me sueltes! ¡Apartate!

Tomoki:—suelta su mano— no me movere... La pregunta aquí es, ¿Cómo te atreves tu, a lastimar a un espíritu animal?

La mujer apreto los dientes por el coraje, el esposo de este hizo presencia para detener el alboroto.

Tomoki: Jomei dono, su esposa trato de lastimar a un espíritu animal y no solo eso, ese espíritu es su hijo

El hombre se apartó y mostro al niño, este, a pesar de su "asquerosa" apariencia, como la describió su propia madre, podía dejar ver su cálido corazón y su aura bondadosa. El padre del niño, solo nego.

Jomei: ese no es mi hijo

Estas palabras destrozaron al menor, sin embargo, fue razón para entender quienes eran los verdaderos monstruos. La mujer entre gruñidos habló.

—ese aborrecio, no es hijo mio y tampoco pretendendo aceptarlo, Jomei dono, dejo en ti la desición... ¿Yo o esa cosa?

La tensión entre los presentes fue muy bien percibida, la mujer al ver que no había respuesta se retiro y antes de salir...

—firmare los documentos de divorcio, no pedire nada a cambio, solo que alejes a ese fenómeno de mi vista...

Esas palabras fueron las ultimas que hubo en aquella sala, sin duda, fue una decisión muy precipitada, pero no iba a haber forma de que cambiara de opinión.

[ .... ]

El lugar se lleno de un gran silencio los siguientes días, desde aquel momento el menor no había tenido contacto con nadie, el padre de este, lo culpaba del divorcio que tuvo, incluso, ordenó que lo separaran de la Casa Principal, llevándolo a vivir a una casa apartada del lugar, aquella casa era muy grande y solitaria, todos los cuartos estaban vaciós, a excepción del tercer piso, donde el menor se establecio.

Sumido en la soledad del lugar, el niño acepto, que ese era su destino, vivir solo y sufrir las cosecuencias, pero... Esta bien ¿No? Él sabía que su sacrificio no sería en vano, aun cuando su propia familia y la eterna soledad lo hacían decaer.

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#Y aquí la explicación del primer miembro en tener un espíritu animal.

mariajosegloria