Solo era un alma inocente...

Un niño castaño jugaba como de costumbre con su primo, habían salido más temprano de la escuela, por lo tanto, querían divertirse y pasar un buen rato.

En cuanto habían salido, corrieron por las calles empedradas de aquel lugar de fantasía, ellos vivían en una provincia que aún conservaba su historia antigua, tenía ese toque de pueblo mágico, el lugar era pequeño y normalmente no había alteraciones en la sociedad, era fácil el disfrutar andar solo, los niños podían andar en las calles sin ser asustados, la gente se conocía a la perfección y había confianza entre todos los habitantes.

Los menores cruzaron corriendo un puente, se detuvieron a observar el pequeño río que había, no era para nada profundo e incluso algunas mujeres iban ahí a lavar la ropa, los niños podían jugar y sobre todo en tiempo de calor.

Luego de haber hecho esa pausa, corrieron de nueva cuenta, esta vez, cruzando un bosque, adoraban ese ambiente, era como estar en aquellas historias de fantasía que leeían, se podía percibir el aura a magia del bosque, podían vivir grandes aventuras ahí, excepto por un pequeño detalle, no hacercarse a la casa de Mary.

En la provincia se contaba que Mary era una joven bruja, la cual, vivía alejada de los demás, en las noches se escuchaba como torturaba a todos aquellos que entraban a su bosque o los perdidos. Murió siendo quemada por los habitantes.

Era tan grande la curiosidad de ambos niños, que en muchas ocasiones, les encantaba ir a esa casa, aun que sea a ver de lejos, pues ninguno se atrevía a acercarse, hasta ese día.

Ambos se encontraban muy cerca del lugar, normalmente veían aquella casa unos cinco metros alejados, pero ese día, se encontraban frente a la puerta negra de la cabaña, el lugar tenía rastros de haber sido quemada hace tiempo atrás. Empujaron con cuidado la puerta y se asomaron a ver.

-es de terror

-asiente-.

-me pregunto si realmente vivía una bruja aquí

-yo no creo en eso

-¿Por qué no?

-mira lo que somos, seríamos más extraños que una bruja, me extraña que no haya rumores de nosotros en la provincia

-¿Te da miedo a que se enteren de lo que somos?

El menor se adentro más al lugar seguído del otro niño.

-me da más miedo no ser aceptado...

...

-ese también era mi miedo...

Esa voz tercera los hizo asustarse, no esperaban que realmente existiera aun aquella bruja que todo el mundo le temía, sin embargo, hubo algo que los hizo no moverse y no era el miedo.

-eras una bruja, ¿Por qué tener miedo si tenías poder?

-por que yo no era una bruja

Ambos niños se voltearon a ver, encontrandose con una joven mujer castaña, de gran belleza, les recordaba a las ninfas del bosque, sin duda era una mujer de ensueños, pero había algo que los hacía temblar un poco y era su pies despegados del suelo, era un fantasma.

-¿No eras una bruja?

-niega-.

-¿Entonces?

-yo solo quería enseñarle a las niñas a leer, ¿Por qué solo los niños podían leer? Además... La gente creía que era una bruja por hacer experimentos a base la química y la alquimía

-¿Alquimía? ¿Eres una alquimista? ¿Cómo te llamas?-preguntó emocionado-.

-Soy Mary Engel, yo era una chica que estudiaba la alquimia, mi padre me dejo muchos libros y conocimientos con respecto a la materia... Sin embargo, ellos creyeron que yo era una bruja que quería maldecirlos...

-si eres una Engel... Significa que tu y yo somos familia

El otro castaño lo miro fijamente, era cierto, aquella chica y su primo eran algo parecidos, no se le hacía extraño que ella fuera su familiar y haya muerto muy joven, pues todos los alquimistas de la familia, solían ser confundidos con brujas, miembros de sectas satánicas y más. Ahora entendía por que su primo siempre tenía miedo.

-¿Cómo moriste?

-suspira- me encontraba haciendo uno de mis experimentos, cuando vi luces a mi al rededor, era la gente del pueblo que venía a mi casa, cerraron la puerta y me quemaron adentro...

-vaya... ¿Por qué no fuiste a la mansión de la familia? Hubieras estado más segura

-no lo sé... ¿Cómo se llaman ustedes?

-yo soy Rigel y él Joseph Engel... Somos primos

La joven los miro alegre, sin duda, ella había notado muchas veces la presencia de esos niñoa cerca de su casa, nunca supo como atraerlos a ella y que ellos mismos tomaran la iniciativa de investigar por su cuenta, le alegraron el día.

-toma las mejillas de Rigel- tu aura es muy diferente a la de Joseph, dime, ¿Eres una criatura del bosque? ¿Tienes una maldición?

-niega- soy un espíritu, por parte de mi madre...-ríe- sus manos son frías

-perdón...-las aparta y toma a Joseph- veo que tu eres descendiente de un alquimista... Espero ser de ayuda para ti y no dudes en buscarme cuando tengas problemas

-para mi será un honor trabajar a su lado señorita Mary

La chica fantasma sonrió muy contenta por el trato de ambos menores, nunca se había sentido tan aceptada como ese día, derramó unas cuantas lágrimas.

-gracias por hacerme sonreír... Cuídense pequeños, no duden que estaré con ustedes...

Dicho esto, la chica desapareció y aquella cabaña que estaba hecha un desastre, fue arreglandose, de forma que se viera solo como una casa abandonada y cubierta por vegetación.

Los niños sonrieron satisfechos y salieron del lugar de vuelta a casa.

[ .... ]

Se dice que ese día, en la Casa de Alemania, apareció un cuadro en la habitación donde se guardaban objetos valiosos de la familia. Aquel cuadro era nada más y nada menos, que el retrato de la jóven Mary, había regresado a su hogar a cumplir su ciclo de guardiana.

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Nombre: Mary Owen

Apellido: Engel

Apodo: La Ninfa del Bosque o La bruja del Bosque.

Edad: 27 años al morir.

Resumen:

Mary Owen Engel Winter, hija única de Markus Engel y Raina Winter. Se dice que ella era una joven muy apasionada por la educación, ya que sus padres, al ser de una fmilia noble, le brindaron toda la educación posible. Cuando su madre murió por hipotermia, se mudó con su padre a una provincia, donde construyeron una cabaña alejada de la población para evitar problemas al ser nuevos en el lugar. Ahí comenzó sus estudios de Alquimia, pero sobre todo en Química y Medicina, pues la muerte de su madre la motivio a buscar una forma de ayudar a los enfermos.

Se dice que Markus Engel, construyó una parte de la Casa Alemana para la protección de las personas "distintas" y para su hija, pero fue asesinado tras acusarse de conspirar con brujas, la construcción quedó a medias.

Mary jamás salió de esa cabaña y se dice que tenía un discípulo que la ayudaba con las compras en el pueblo y otras cosas, no se sabe que ocurrió con él.
Murió una noche mientras preparaba una medicina que ayudara a combatir con las enfermedades respiratorias que había en el pueblo, la misma gente la mató.