"¡Feliz cumpleaños, hijo!"
Desperté de un susto cuando escuché aquel grito fuerte cerca de mi oído.
Abrí mis ojos rápidamente por el susto, y me encontré a mis dos padres frente a mi cara, ambos con unas sonrisas que yo diría espeluznante.
Entonces recordé... ¡Es mi cumpleaños!
Casi lo olvidaba.
¡Ay, wey! ¡Será el mejor día de todos!
"¡Mi bebé ya es un niño grande!", habló mi papá Town, con esa típica voz que pone cuando me trata de chavo bien pendejo.
"Un niño grande necesita un regalo grande, ¿no, amado esposo?", esta vez, habló mi padre Eak, sin dejar esa escalofriante sonrisa...
¿Es mi idea o están actuando muy raro?
"¿De qué webada están hablando?", pregunté confundido, pues realmente no era algo que esperaba de ellos.
Menos hoy.
Siempre en mi cumpleaños, papá Town intenta hacerme menos mimos de los que acostumbra... Yo se lo pedí.
Y papá Eak... No suele variar en su comportamiento.
Por lo que no podía evitar preguntarme, ¿qué pendejada pasaba aquí?
"¿Quieres saber cuál es tu regalo de cumpleaños?", preguntaron ambos a la vez, lo que me causó escalofríos.
Esto realmente me choca.
"¿Sí...?", respondí dudoso.
¿Realmente quería saberlo?
Entonces, mi padre más bajo me dio unas llaves, con un pequeño aparatito colgado de ellos.
Quería negarme lo primero que vino a mi mente, pero al ver a mis padres con una increíblemente tenebrosa sonrisa, como la que ponían cuando en Navidad esperaban que abriera los regalos que me traían los Reyes Magos, supe que tal vez no era un chiste.
Presioné con miedo uno de los botones del aparatito que colgaba de las llaves, y una alarma sonó.
¡No me lo podía creer!
Me levanté de mi cama casi de un salto mortal y me estrellé contra la ventana para poder hacia el patio delantero de la casa.
¿Ahí estaba mi regalo de cumpleaños?
¡Era un bellísimo auto! ¡El auto de mis sueños!
¡Por favor que alguien me pellizque!
¿Y era solo mío?
"Es tuyo hijo", volvieron a decir mis viejos al mismo tiempo... Que miedo.
"¡¿La neta?!"
"Le neta, pendejo", rió mi padre Eak... En serio, esto da mucho miedo.
"¡Feliz cumpleaños, Jacob!", ni siquiera me había dado cuenta que mis tíos estaban junto a mis padres... ¿O no lo estaban?
"Tenemos un regalo para ti", dijo sonriente mi tío Freddy, dándole una seña a mi tío Golden, a lo que él sacó de su bolsillo algo que parecía un... ¡¿CHEQUE?!
"¡¿Q-Qué?!", exclamé incrédulo apenas vi la cifra en ese papel, "¡No puedo aceptarlo! ¡Es mucho dinero, wey!"
"Por favor, Jacob", rió mi tío Golden, abrazando a mi tío Freddy a lo que él sonrió tan sobrio como mis viejos, "¡Somos millonarios! Nuestra fortuna es tu fortuna..."
"Espera, ¿estás admitiendo que eres rico y que tienes una inmensa fortuna?", no podía creer las palabras de mi tío Golden, ya que suele ser muy humilde. Jamás desde que lo conozco ha admitido ser millonario, creo que no le gusta admitirlo... No sé porqué.
"Bueno sí", siguió sonriendo tenebrosamente mi tío Freddy, "Es lo que somos, como tu dices, reyes que viven en un palacio lleno de lujos y que tenemos todo fácil... ¡Millonarios!"
¿Él dijo eso?, "Espera... ¿Qu-"
"Feliz cumpleaños, mi lobito..."
¡A la bestia! Detrás mío, reconocía esa voz como la que hace un tiempo me mandó a la puta madre, pero que de todas formas me hacia sentir vivo.
Me volteé y vi al chavo de mis sueños allí, frente a la puerta de mi habitación, parado con una actitud que en él jamás había visto... ¿Coqueto?
¡Ay wey, vestía de negro!
Con chaqueta de cuero negra, pantalones negras, camiseta negra... Que sexy se ve de negro.
"¿T-Teddy?"
"Hola, lindura", sonrió ese pendejo, maldita sea, no puedo con esto, "¿Listo para tu regalo de cumpleaños?"
"¿Y a ti que te pasa, cabrón?", le pregunté confundido, "¿No que tu estabas molesto conmigo?"
"Pero hoy es un día especial", él actuaba demasiado extraño, igual que todos... ¡Pero no me quejaba! Ese coqueteo me estaba matando por dentro.
¡Y ni siquiera le importaba que sus padres estuvieran allí!
"Principito..."
"¿No quieres jugar conmigo?", pasó sus brazos por alrededor de mi cuello, y frotó su cuerpo contra el mío... ¡Chingada Madre, esto me superaba!
Ni con chochos podía evitar excitarme con esta actitud de parte de Teddy.
"¿Esta noche cenas pancho, Lobito?", nuevamente se movió contra mí, con esa sonrisa coqueta. ¡Agh, no pude evitar dejar escapar un gemido por esto!
¡Este es el mejor cumpleaños del mundo!
"¡Feliz cumpleaños, hijo!"
TownTrap y Eak despertaron a su hijo, recibiéndolo con una alegre sonrisa y un pequeño pedazo de pastel con una vela encendida para su bebé.
Jacob se despertó sobresaltado, y bastante agitado. Se asustó aún más cuando vio a sus verdaderos padres recibiéndolo como suelen hacer realmente para sus cumpleaños.
No hace falta decir que todo fue un sueño...
"Hijo...", TownTrap observó perplejo, "¿Estabas teniendo un sueño húme-"
"¡Papá!", se quejó el adolescente, tratando de esconder el pequeño gran problemita que tenía en su parte baja.
"¡No manches, Jacob! ¿En serio-"
"¡PAPAAAAAÁ!"
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¡Recién ya es 24, pero bueno!
¡Feliz cumpleaños a Jacob!
Como había dicho antes, estos bebos estarán de cumpleaños en fechas importantes para mi, por lo que el 23 de Abril está de cumpleaños mi querida prima;
¡Feliz cumpleaños, Cousin!
(Un pequeño dibujo improvisado... No soy buena improvisando)
¡Nos leemos, chicos!
Bye
-Natta
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