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Final

Namjoon iba de aquí para allá corriendo mientras arrullaba a su pequeña cachorra de seis meses, la bebé era hermosa pues era idéntica a su padre alfa.

—Yeonjun podrías ayudarme con tus hermanos por favor, dile a los gemelos que deben vestirse, para su fiesta de cumpleaños— decía el Omega mientras terminaba de acomodar todas las cosas para que sus pequeños de cinco años festejarán su cumpleaños.

—Papi Yeonjun no está, recuerda que salió a una cita con la hija de Soobin— respondió el pequeño castaño de 8 años, su pequeño Seokjun era idéntico a Seokjin, no había sacado nada de él, incluso era más parecido que Junjin y Yuni.

—Pero mi cachorro aún es muy pequeño para andar en citas, debiste escuchar mal.

—Tiene 14 años papá ya es un lobo grande y estoy seguro que será un gran alfa— faltaban aún dos años para saber la casta de su hijo mayor pero todo apuntaba a que sería un alfa como Jungkook pues su aroma era muy fuerte a diferencia de Seokjun que su aroma era más dulzón.

—Pues mientras viva en esta casa sigue siendo mi cachorro, así que mejor ve a llamarlo y también le dices a Junjin y Yuni que vengan para acá, vamos arreglar todo para la fiesta.

Pasaron algunos minutos hasta que sus ya no tan pequeños gemelos aparecieron, Yuni cada vez era más parecida a Taehyung teniendo su delicado cuerpo y rostro dulce, ella tenía un aroma más empalagoso lo que hacía pensar que sería una maravillosa Omega, mientras su hermano era más tosco teniendo aquel cuerpo definido de un gran alfa, ambos ayudaron a Nam para que arreglara todo y vistieron a los pequeños cumpleañeros.

Habían pasado tres horas y todos convivían en aquella hermosa cabaña del Omega, donde pudieron comer y disfrutar de los postres que Nam había preparado.

—Namie todo quedó delicioso muchas felicidades, saben que la próxima semana también es el cumpleaños de mi cachorro Agus— decía Jimin mientras acariciaba la cabecita de su hijo menor— así que ahí los esperamos ya le había dicho a Jungkook así que espero te haya avisado a ti también.— el alfa giró sus ojos pues su padre seguía regañándolo incluso ya de adulto.

—Claro Jimin ahí estaremos, no me  perdería la fiesta de mi sobrino —Yoongi y Jimin habían tenido ya solo un cachorro más después de Nongi, pues el alfa quería consentir a su pareja y hacerle ver que lo amaba con o sin cachorros, mientras que las cosas entre Nam y Jimin también mejoraron pues ahora ambos eran amigos y familia.

Al Omega mayor le había costado más tiempo aceptar a Nam, pues sus celos de padre se lo impedían, más después de ir a terapia y hablar de su verdadero origen con Jungkook fue que todo cambio, incluso el alfa se alejó de su abuelo pues no entendía como este había permitido que su padre fuera lastimado de esa manera y él no hubiera intervenido correctamente.

Hoseok y Jackson también estaban ahí, los Wang habían tenido dos cachorros más, así que en total tenían dos mujeres y dos hombres, siendo los mayores probablemente omegas, cosa que a ninguno de los dos les molestaba.

Cuando la noche llegó y Nam por fin despidio a sus invitados fue que entró a su habitación sorprendiéndose al ver a Jungkook cargando a su pequeña cachorra.

—Veo que está pequeña traviesa aún no quiere dormir — decía mientras se acercaba, el aroma de su bebé lo tranquilizaba, este último embarazo había sido más difícil que los anteriores.

—Asi es Omega creo que quiere estar en mis brazos.

—Por favor no la mal acostumbres, después yo soy quien batalla para dormirla.

—No puedo evitar hacerlo, la pequeña me ama y yo a ella, incluso creo que me prefiere— decía burlón ganándose un golpe en su cabeza.

—No digas eso, ella siempre va a preferir a su papi Nam.— decía mientras tomaba a su hija en brazos, sin poder evitarlo el alfa llevó su mirada hasta el cuello del Omega donde una hermosa marca yacía, desde hace ya 7 años.

....

La habitación por extraño que sonara se sentía más pequeña y caliente, Namjoon besaba a su alfa mientras estaba sentado a horcajadas de este.

Había terminado de alimentar a su pequeño Seokjun de tres meses de edad, todo estaba tranquilo quería dormir pero al entrar al cuarto y ver el delicioso cuerpo del alfa que volvía después de bañarse, algo dentro de él se encendió, desde que su pequeño había nacido no habían tenido intimidad pues el alfa quería cuidarlo.

Después de un rato las prendas comenzaron a estorbarles, ambos tenían la necesidad de tocar al otro, así que con algo de habilidad Nam quitó aquella ropa que le impedía acariciar y probar el cuerpo de su amado.

—Me vuelves loco omega— decía entre gemidos mientras llevaba sus manos a los glúteos de este y los masajeaba con fuerza, haciendo que el Omega jadeara aún más fuerte — quiero hacerte mío, no tienes idea de cuanto lo deseo, desde que regresé es en lo único que pensaba mi pequeño, ¿Me dejarías hacerte el amor?— sus labios comenzaron a viajar por el cuello de su amado, Nam sentía como aquellos belfos dejarían marcas, pues su alfa estaba siendo muy pasional.

—Hazme tuyo por favor — al oír aquello el alfa mandó todo su autocontrol a la basura, deseaba a Nam y quería que todos supieran que era suyo que le pertenecía, que era a él a quien había elegido.

Con nada de delicadeza el alfa quitó toda la ropa a su amado, quería verlo desnudo — Es que me encantas Namjoon, eres tan hermoso, y eres totalmente mío — decía mientras besaba y chupaba cada rincón de aquel acanelado cuerpo.

El alfa estaba en ropa interior sin embargo el Omega sentía aquella dureza, su entrada estaba lubricando demasiado pues se estaba preparando para recibir a su compañero.

El alfa al captar su aroma gruño, era tan delicioso y adictivo, sin nada de delicadeza tomó al Omega de las piernas para girarlo, haciendo que se pusiera de rodillas mientras su pecho se pegaba a la cama — voy a probarte Omega, quiero sentir tu sabor en mi boca, me encantas — y sin pena se hundió, haciendo que el Omega gritara de placer, cada lamida era mejor que la anterior, por lo que en pocos minutos de vino, manchando el colchón y su pecho.

—Alfaaaa— su cuerpo temblaba el orgasmo había sido tan intenso que incluso sus piernas no mantenían equilibrio, aún así se giro y comenzó a besar a su alfa, el beso era sucio y demandante, sus lenguas chocaban, sus dientes y colmillos habían salido pues sus lobos también querían participar en esa unión, que sabían significaba algo más que solo tener intimidad.

Nam con algo de valor comenzó a llevar al alfa hasta la orilla de la cama, cuando esté por fin estuvo sentado, el Omega aprovecho para arrodillarse en el piso y estar a la altura de aquel miembro que lo llamaba para ser probado, cuando el alfa sintió que esté haría eso lo detuvo —dejame probarte alfa, deseo que mi boca tenga tu sabor— y sin dejar que esté contestara lo tomó en su boca, comenzando a chupar con desespero.

La cabeza del Omega subía y bajaba mientras el alfa era un mar de gemidos, aquella pequeña boca lo estaba volviendo loco, así que dejándose llevar tomó la cabellera de Nam y empezó a dirigir sus movimientos, el Omega al sentir aquel control se excito aún más, sin embargo después de unos minutos comenzó a sentir como se ahogaba pues su alfa no era nada pequeño.

—Me vuelves loco Namjoon, quiero que lo tragues— el Omega estaba más que excitado al oír a su compañero y claro que lo probaría anhelaba aquello, así que cuando sintió como este estaba cerca, comenzó a chupar con más fuerza, el alfa apesar de lo caliente que estaba no quería venirse en la boca del Omega, sabía que a muchos no les agradaba, pero cuando quiso separarse fue imposible, pues Nam se lo impedía, así que dejándose llevar sintió como se corría en aquella linda boca mientras su Omega tragaba toda su esencia.

— Sabes delicioso alfa — decía mientras limpiaba con ímpetu aquel esquisto miembro con su lengua.

El alfa al verlo se puso duro enseguida, quería tomarlo, marcarlo, hacerlo complemente suyo.

—Es hora de que recibas tu premio por ser un excelente Omega mi amor— al oír aquello Nam sintió como su entrada lubricaba más.

Recostandose nuevamente el alfa llevó uno de sus dígitos hasta aquella apretada entrada, la cual lo recibió muy bien, ingresando con demasiada facilidad —Veo que estás tan caliente pequeño, ansias mi miembro dentro, cierto— el Omega solo afirmaba con la cabeza mientras sentía como el alfa llevaba tres dedos en total para prepararlo, más este estaba más que listo, quería sentirlo.

—Tambien quiero estar dentro de ti omega— y sin más se introdujo, ambos soltaron un gran gemido, el alfa no espero a que Nam estuviera listo, sabía que ya lo estaba por lo que comenzó a moverse, las embestidas eran fuertes, ambos absortos en el placer que producían la unión de sus cuerpos.

Los sonidos que producían sus cuerpos era algo sucio pero que hacía ver lo excitados que ambos estaban, sin perder tiempo Namjoon se giro pues ahora el quería montar a su alfa, sentir que tenía el dominio lo excitaba y que decir del alfa que gemia y se movía con más fuerza mientras su amado Omega saltaba encima suyo, autopenetrandose.

Todo era maravilloso Namjoon sentía como su alfa tocaba aquel pequeño botón que lo hacía sentir tanto placer, así que después de algunos movimientos más se vino en un estruendoso orgasmo, apoyando su cuerpo en el pecho del alfa.

—Mi pequeño voy a girarte — con algo de cuidado lo tomó de las caderas para ahora estar encima suyo, sus penetraciones eran intensas, el alfa sabía que estaba a nada de venirse, debido aquellos movimientos Nam sintió como otro orgasmo estaba cerca, sus ojos estaban bañados en lágrimas por el inmenso placer que sentía, así que cuando esté al fin llegó no pudo evitar gritar mientras su lado sumiso ladeaba su cuello, su lobo añoraba una marca, la marca de su verdadero alfa de su ser amado.

Marcame alfa por favor — el lado racional del alfa le decía que no debía aprovecharse pero al ver la sinceridad en los ojos del Omega fue que se acercó a su cuello y comenzó a lamerlo, estaba preparándolo para la marca.

—¿Estás seguro Omega?— preguntaba cerca de su oído mientras chupaba su lóbulo y cuello, las embestidas seguían igual de intensas.

—Es lo que más deseo alfa, quiero ser tuyo y que tu seas mio, mi lobo y yo lo necesitamos — al terminar de decir eso sintió como su cuello ardía, su alfa lo había mordido, por fin eran uno mismo, el lazo fue perfecto, ambos sentían lo que el otro, de pronto todo fue placer pues alcanzaron el mejor orgasmo de su vida, Nam sentía como el nudo de su alfa crecía completando la unión y mientras este bajaba todo fue calma, Namjoon jamás se había sentido así se feliz, amaba a su alfa y sabía que de ahora en adelante solo le perteneceria a él.

....

—Debes cargarla tomando su cabecita, si Nam ve que lo haces mal se molestará.

—Yo se cargarla bien, además ella ama que lo haga así — decía mientras acurrucaba a la pequeña en su cuello.

—Nara es una cahorra que le gusta que todos la carguen no te sientas especial Seokjin — decía Jungkook mientras veía como el alfa mayor se acomodaba mejor el pequeño cuerpecito de la bebé.

—Pues aunque lo dudes ella prefiere mis brazos— ambos alfa se veían con algo de reto en sus ojos, hasta que cierto Omega apareció, quitándole su pequeña a Jin para alimentarla y despues fue que habló.

—La comida está lista, por favor ambos bajen y comportense, kookie podrías ayudarle a Yeonjun a poner la mesa y tú Jinnie dile a Seokjun que juntos preparen el agua en lo que alimento a está pequeña lobita que debe estar muy hambrienta.

Después de que su pequeña y gordita cachorra estuviera satisfecha fue que bajó, Nam amaba la combinación de los olores de todos sus cachorros, esos pequeños infantes y adolescentes que eran su adoración, recordaba sus tiempos en que era un joven solitario y sin esperanzas de formar una familia, sin embargo ahora tenía un atractivo alfa y muchos hijos a los cuales consentir.

—Todo estuvo muy rico Nam, pero es momento de que me vaya, debo viajar  y me es imposible quedarme más tiempo en cuanto tenga oportunidad volveré, por favor cuida a mis pequeños — el Omega salió para despedir al alfa.

—Me hubiera gustado que te quedarás más tiempo, se que ya han pasado largos años pero aún me siento mal que por mi culpa te fueras, este también es tu hogar.— su voz era suave y tierna.

—No es tu culpa Nam, es más bien de mi tonto lobo, debe aceptar que lo elegiste a él y se que te hace feliz, asi como a mis lindos cachorros, cuídate mucho por favor omega— decía mientras lo tomaba en sus brazos.

Ambos aspiraban el aroma del otro aunque claro que para el Omega era un olor de un ser querido, especial y  familiar.

— Creo que ya se abrazaron demaciado — decía cierto alfa que había salido a su encuentro.

Nam al escucharlo se separó de este, poniéndose algo tímido.

—No seas celoso, es tuyo.

—No soy celoso, solo cuido mis cosas — al decir aquello ambos alfas comenzaron a reír, Nam amaba que estos ya se llevarán mejor, pues aunque no fue nada fácil ahora podrían considerarse una familia.

—Ve ya por favor, tu Omega debe estar esperándote, por cierto ¿Cuándo nacen tus cachorros?—  preguntó Nam con algo de duda.

—En dos meses tendré a mis pequeños en brazos, aún no puedo creer que seré nuevamente papá y de gemelos, tengo excelente punteria— decía mientras se alababa a si mismo.

Después de que la pareja despidiera al alfa, entraron a su cabaña y comenzaron a arreglarla, todos ayudaban en la limpieza excepto la lobezna pequeña y los gemelos menores pues estos habían caído rendidos y dormían plácidamente.

—¿Estás listo para la ceremonia de mañana? Por fin nos presentaremos con la nueva integrante de la manada mi lindo.

—Estoy algo nervioso alfa, Nara es muy pequeñita y tus gemelos se portan muy mal, habla con ellos para que se comporten — el alfa no pudo evitar reír pues era verdad sus pequeños eran muy inquietos y hacían muchas travesuras.

La mañana llegó más pronto de lo que quisieran, ambos se pusieron a limpiar y desayunar y cuando la tarde llegó alfa y Omega vestían a todos sus hijos excepto a los mayores para que estuvieran lindos, todos llevaban ropas blancas pues era la presentación de los nuevos integrantes de la manada.

Cuando llegaron Namjoon diviso a su hermano el cual tenía abrazado a su lindo Omega mientras este cuidaba a sus hijos, Yoongi era ahora el líder pues su padre le había dejado ese puesto al sentirlo ya listo para tal responsabilidad

Todo lucía hermoso había grandes fogatas y antorchas que adornaban el lugar, la manada se veía feliz conviviendo entre ellos, también grandes flores sobresalían y cuando la ceremonia dio inicio el Omega se sentía feliz al ver a su pequeñita recibiendo la marca de pertenecer a su manada, aquel camino de flores se sentía ahora muy diferente pues era acompañado de sus siete cachorros y su alfa.

Sabía que algunos no estaban del todo de acuerdo con ellos más al enterarse de la relación que tuvo con los alfas, pero era algo que ya no le importaba, solo quería estar en paz con su hermosa familia.

.....

Todo pasó tan rápido Namjoon veía como su cachorra mayor corría con fuerzas para esconderse, el mismo le había ayudado a Yuni hacer su corona, ahora la lobezna tenía ya 19 años y era su tercer ceremonia de las flores, Junjin y Yeonjun también se habían tranformado para ir en busca de su Omega.

Nadie esperaría que al regresar los gemelos volverían acompañados de su pareja de vida, pero lo que más les sorprendió fue ver a Yeonjun tomando de la mano a Christopher el hijo mayor de Hoseok y Jackson, Nam tenía sus sospechas entre esos dos jóvenes, pero su hijo insistía en que le gustaba la hija de Soobin y que Chris era solo un lindo amigo.

—Por lo que veo seremos familia — dijo Hoseok muy alegre mientras abrazaba a su querido amigo Namjoon.

—Asi es amor me alegra que mi cachorro esté en buenas manos — está vez era Jackson quien veía como su hijo era abrazado protectoramente por el joven alfa.

Yoongi y Jimin también veían aquella escena, siendo el Omega quien recordaba como su hijo había llegado a esa manada justo en la edad que ahora tenía su nieto, amaba a ese pequeño y daba gracias a Nam por permitirle tener una bonita relación con el joven alfa.

Cuando la ceremonia terminó todos se fueron a sus cabañas, pues sabía que este era el momento en que los nuevos omegas llevaban a sus alfas para alimentarlos.

Durante el camino Nam sintió que su alfa iba muy serio y sabía muy bien la razón pues estaba celoso.

Cuando entraron a la cabaña ambos padres recostaron a sus pequeños y después de alimentar a la bebé fue que decidieron ir a dormir, pero el Omega tenía otros planes.

—Alfa podrías darme un masaje— decía de lo más inocente mientras se recostaba en aquella cama y se quitaba la pieza de arriba para dejar su espalda desnuda.

—¿Qué pretendes Omega?— preguntó con algo de duda pues su dulce compañero estaba comportándose mucho más sumiso.

—Solo quiero un masaje de mi sexy alfa, que acaso es mucho pedir — sus ojos estaban muy brillantes, a pesar de los años Nam seguía viendo lo atractivo que era su alfa, pues los años no pasaban por este y al contrario su madurez lo hacía mucho más sensual y atrayente.

—Se lo que pretendes Nam, pero no te preocupes estoy bien y tranquilo.

—Lo se alfa pero me gustaría ayudarte a quitar esa tensión que tienes, déjame ayudarte— el Omega se puso a horcajadas del alfa mientras lo besaba del cuello.— tengamos nuestra propia ceremonia de las flores justo ahora alfa, te necesito.

Ambos se entregaron a la pasión pues sus cuerpos eran adictivos al otro.

Cuando la mañana llegó Namjoon fue el primero en despertar llendo directo por su cachorra para vestirla al igual que a los gemelos y Seokjun, amaba a sus pequeños, aquellos que fueron fruto del inmenso amor que le tenía a su alfa.

Finalmente todos fueron hasta la cabaña de Christopher y Yeonjun pues debían hacer el desayuno de presentación, ahí también fueron los gemelos Junjin y Yuni pues sus padres también estarían en ese lugar.

Todo estaba saliendo perfecto las parejas de sus hijos eran muy lindos, Yoongi y Jimin también habían ido, esperando el momento en que su cachorra también consiguiera un alfa digno de ella.

Namjoon al ver como todos convivían y comían,  solo podía pensar en lo dichoso que era, tenía una hermosa familia, un alfa que lo amaba con todo su corazón y ahora que veía a sus hijos mayores emprender su propio destino lo llenaba de ilusión, sabía que todos aquellos obstáculos que tuvo en el camino sirvieron para tener el hermoso presente que hoy veia y esperaba su futuro fuera aún mejor.

Con ayuda de su alfa ambos se ofrecieron a lavar los platos, la tarea estaba siendo bien emprendida, hasta que Nam sintió unos suaves labios besar su marca y unos brazos rodearlo por la espalda, así que girandose comenzó a besar los deliciosos labios de su alfa.

Todo era perfecto ambos sentía el calor que desprendía su cuerpo, la chispa aún estaba ahí y les encantaba.

—Cuando dejarán de esconderse para besuquearse— preguntaba indignado Yoongi al sorprender a su hermano y alfa —Ya no son unos adolescentes hormonales para que se anden besando por los rincones.

La pareja se sonrojo al ser descubiertos y disculpándose volvieron a su labor, justo cuando iban a ingresar a dónde todos estaban Nam se quedó quieto viendo por la puerta, la imagen era hermosa para el Omega, todos sus cachorros estaban ahí sonriendo y riendo a carcajadas, su Yeonjun y Christopher tenían a la bebé mientras le cantaban, los más pequeños peleaban y gritaban entre ellos, mientras los gemelos abrazaban a sus parejas.

—¿Por qué no entras Omega?— decía el alfa mientras lo tomaba por la cintura y apoyaba su pecho en la espalda de Nam y su cabeza en su cuello, aspirando su delicioso aroma y besando aquella linda marca.

— Es que me pareció todo tan hermoso alfa, míralos nuestros cachorros están creciendo, muchas gracias por la hermosa familia que me diste, siempre te estaré agradecido por cruzarte en mi camino, eres lo mejor que me pudo pasar alfa.

—Gracias a ti mi amor por darme la oportunidad de ser tu alfa, por dejarme entrar a tu corazón y permitirme quedarme ahí por tantos años, te amo mucho Namjoon y agradezco a la diosa luna por haberme permitido coincidir contigo, por haber dejado que mediante aquel ritual de cortejo te conociera y aunque no estábamos destinado para estar juntos en ese momento, nuestros corazones si lo hicieron.

La pareja se veía ahora a los ojos pues recordaban todos aquellos dolosoros momentos que tuvieron que pasar para ahora estar juntos, amándose.

—Siempre tendrás mi corazón, eres mi mundo, tu y mis cachorros son mi todo, gracias por dejarme ser parte de tu vida..... Te amo mucho alfa....te amo Kim Seokjin.

La pareja se fundió en un hermoso beso que demostraba lo mucho que se amaban, mientras sus hijos al verlos se lanzaron a sus brazos para rodearlos, amaban la forma tan bonita en que sus padres se demostraban su amor, un amor que superó todo..... incluso un lazo destinado.

Fin

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