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Capítulo 20- Despedida

Tres días habían pasado Yoongi ya no soportaba más estar en la ciudad, veía como todos lo miraban raro como si fuera un bicho fuera de lugar, pero lo que más le molestaba era el trato que tenían todos aquellos estúpidos alfas con Jimin, lo veían como si fuera un simple objeto, algunos incluso se atrevían hacerle proposiciones indecentes en su presencia, pero lo que más le afectaba era lo sumiso que su Omega se volvía, aceptando aquel trato sin rechistar. La ciudad era un maldito infierno y no sólo para él.

-Yoongi se que esto es difícil, el médico me dijo que todos los estudios salieron bien, así que si tú aceptas en una semana será la operación.- decía con ilusión el Omega, mientras esperaban a que pequeña saliera de vestirse, la clínica era tan grande y elegante.

-Claro que acepto Jimin, es mi pequeña a quien deseo ayudar y proteger.....y no sólo a ella, ¿Por qué sigues aquí Jimin? Con estas personas de mierda que te tratan a ti como si lo fueras, son unos idiotas.

-Ya estoy acostumbrado Yoongi no te preocupes.

-¿Acostumbrado? Vamos Jimin creí que eras más inteligente, tu no mereces esto, eres una persona como cualquiera que merece respeto, vamos Omega, sabes que en mi manada jamás te tratarían así.

—Pero yo no soy de tu manada Yoongi, se que es difícil para ti ver está situación pero así son las cosas en la ciudad, además aquí pertenezco.— su voz era suave tratando de no alterarse.

—Tu podrías ser de mi manada Jimin, porque seamos honestos, ambos sentimos algo por el otro, tanto yo como mi lobo queremos reclamarte como nuestro, eres mi pequeño Omega.— Jimin abrió sus ojos en grande sorprendido por aquellas palabras.

—Ahora no puedo pensar en otra cosa que no se Nongi, por favor esperemos a su operación y entonces te tendré una respuesta, te lo prometo alfa.

....

Dos semanas después habían pasado Yoongi y Jimin continuaban en la ciudad pues la operación de su pequeña cachorra fue más complicada de lo que esperaban, afortunadamente ya estaba en recuperación al igual que el alfa pero aún durarían otros días para checar que su pequeña estuviera cien porciento bien.

Por otra parte en la manada las cosas no estaban del todo bien, habían comenzado diversos conflictos con manadas vecinas que querían conquistar el territorio y sobre todo quedarse con sus omegas.

Los ancianos y consejeros habían citado a todos los alfas fuertes de Cuhzar pues en la ausencia de Taeyang y Yoongi debían buscar un nuevo líder que los guiara y protegiera en lo que regresaban.

—Propongo al joven Siwon— dijo uno de los consejeros mayores— ha demostrado ser muy fuerte y además estoy seguro que nos sabrá guiar de forma adecuada.

Varios de los presentes estaban de acuerdo pero muchos más no querían aquello pues sabían la ambición que esté tenía.

—El joven Siwon es muy fuerte es verdad, pero no me parece adecuado que el nos guíe, sabemos de los roces que ha tenido con el líder debido a su hijo Namjoon, así que darle tal poder podría poner en riesgo el liderazgo de Taeyang.

—¿Entonces a quién proponen?— dijo otro anciano un tanto exasperado pues llevaban algunas horas discutiendo.

—Yo creo que la mejor opción es que nos guíe un alfa mayor y conocedor, algunos de los cazadores son expertos ya en estas tierras, la conocen y sabrán sobrevivir, mi mejor opción es el alfa Seokjin, ha demostrado lealtad hacia nuestra manada y es uno de los más preparados debido a su gran tamaño y fuerza.

—Él no puede ser, tiene poco tiempo en la manada y además dos cachorros que dependen de su cuidado, no aceptará.

—Entonces está decidido al no tener más opciones el líder será Siwon, él guiara a la manada, no dejaremos que aquellos crueles criminales se apoderen de nuestras tierras y omegas.

.....

—¿Falta mucho?— era la quinta vez que lo preguntaba.

— Solo unos metros más pequeño.

—Pero ya me cansé Jin— decía mientras su boca formaba un adorable puchero.

—Omega te encantará en cuanto lleguemos, así que date prisa, algún dia cuando nuestros hijos crezcan podremos traerlos con nosotros.

Después de caminar unos 20 minutos más fue que llegaron, el lugar era hermoso y muy verde, había un gran río y cascada que Nam jamás había visto, la vegetación era sorprendente, plantas de diferentes colores.

—Es hermoso Jin.— el Omega estaba sorprendido y maravillado, todo era tan bonito, esperaba algún día regresar ahí.

—Sabia que te gustaría, cuando nuestros hijos tengan más edad los traeremos, ahora son muy pequeños y les aburrirá y cansará el camino.

—Me encantaría venir aquí de nuevo, es hermoso, sabes creo que también a Jungkook le gustaría, cuando regrese ¿Podrías traernos aquí?— preguntó con ilusión esperando que el alfa frente a él contestara con una afirmación.

Seokjin por su parte se había quedado muy serio, escuchar aquel nombre lo hacía sentir extraño, sabía que Nam seguía amando al alfa, pero no podía evitar sentir una gran molestia en su pecho, el Omega no tenía porque seguir ilusionado cuando el tonto de su amigo tenía 4 años que no había regresado.

Su lobo estaba igualmente molesto, es que acaso Namjoon no se daba cuenta que podía conseguir un alfa mejor, él era tan dulce y delicado, tan atento que cualquier alfa podría estar a sus pies y hacer todo lo que quisiera—Claro que si Nam, cuando Jungkook regresé yo los traeré aquí.

—Gracias Jin— dijo con una linda sonrisa que mostraba sus hermoso hoyuelos, Seokjin estaba hipnotizado viéndolo, tenía exactamente un año donde quizás miraba un poco más de lo normal a su amigo, unos largos meses donde sentía su corazón latir con fuerza cada vez  que veía a Nam ya fuera sonriendo, haciendo caras graciosas o incluso cuando marcaba su quijada si estaba molesto, donde su instinto de protección salía a relucir si veía al joven en problemas, incluso llevaba ya mucho tiempo deseando que esté se diera cuenta de como su cuerpo reaccionaba al suyo.

Para Nam tampoco era tan desconocido aquello pues incluso él sin darse cuenta amaba más de lo normal pasar tiempo con su amigo Seokjin, aprovechaba cada ocasión para prepararle su comida favorita pues amaba cuando esté lo alagaba.

—Vamos a sentarnos a descansar Omega y si quieres después podemos ir a nadar.

—Me encantaría.— la tarde fue muy amena sin embargo Nam no queria seguir separado de sus cachorros por lo que le pidió a Jin regresar, cuando estaban a pocos minutos el Omega notó como Jin ya no hablaba sino más bien iba muy pensativo.

—¿Pasa algo alfa?— su voz era suave queriendo transmitirle tranquilidad.

Seokjin no podía seguir ocultando aquello, por más que se negara sabía que sus sentimientos por Nam habían cambiado, no se dio cuenta en qué momento se enamoró de su amigo, quizás fue por su gran apoyo durante todos estos años, quizás aquella vez que se ayudaron con sus aromas en sus celos, pero no quería ocultarlo más, Namjoon le gustaba y mucho.

—No pasa nada Nam— dijo de forma cortante pues sabía que no sería correspondido.

—Vamos Jin somos amigos debemos tenernos confianza — al escuchar la palabra amigos fue que su pecho dolió, no quería seguir siendo solo eso, él quería al Omega, lo amaba y deseaba porque no podía engañarse su cuerpo también sentía esa necesidad de hacerlo suyo, muchas noches incluso se había tocado pensado en su lindo "amigo".

—No es nada Namjoon, así que sigamos— más cuando quiso avanzar el Omega lo detuvo al tomarlo de la mano.

—Habla por favor— aquellos ojos que lo miraban con ternura fueron los que lo impulsaron para hablar, sabía que debia ser delicado pues sería algo sorpresivo para el Omega, temia al rechazo pero no quería ocultarlo más.

—Esta bien Omega, quiero que sepas que esto que dire no tiene porque afectar nuestra amistad, tampoco estás obligado a aceptar somos maduros y...... Por favor no te enojes mi lindo omega— Nam se sonrojo sin poder evitarlo pues le encantaban los cumplidos que el alfa hacia con él.

—Namjoon tu....es vergonzoso pero tú.....estoy enamorado de ti Namjoon.

Al escuchar aquello los ojos del Omega se abrieron en grande, no esperaba aquella confesión, Seokjin era su amigo , más específico su mejor amigo, tenía que hablar con él decirle que no podía corresponderle porque no sentía lo mismo, pero entonces no entendía porque su corazón estaba latiendo con fuerza y su lobo movía la cola contento al escuchar que gustaban del guapo alfa, debía hablar y ser lo más maduro posible.

—-Omega deja de correr por favor y escúchame, lo que hacemos no está mal.- gritaba mientras perseguía al adorable Omega que corría con sus ojos muy abiertos tratando de huir del alfa.

.....

—¿Entonces que piensas hacer Nam? Sabes se que es difícil para ti, pero no crees que lo mejor es que aceptes de nuevo de Jungkook, al final es tu destinado y quieras o no tienen un lazo que los unirá por siempre — decía Hoseok.

Nam había ido a su encuentro pues después de despedirse de Jungkook necesitaba hablar con alguien, quería un consejo más ahora que Kook ya sabía sobre su relación con Jin y el cachorro que esperaba, así que después de dos semanas se atrevió a contarle todo a su amigo.

—No se que hacer, mi corazón lo llama, pero tengo miedo, no quiero lastimar a Jin— las lágrimas bajaban por aquellos brillantes ojos.

—Seokjin tiene que comprender Nam, tu siempre estarás enlazado a Jungkook por más que quieran sus lobos querrán estar juntos y es cruel que los separen.

— Pero es que es extraño Hobi, mi lobo también quiere a Jin, no como lo hace con Kook pero lo quiere, además también está la cuestión de mi cachorro.

—Esto sonara muy cruel Nam, pero ambos sabemos que el cachorro no sobrevivirá, en cuenta Jungkook te marque tu instinto hará que lo pierdas.

—Yo quiero tener al cachorro es mi hijo.

—Y podrás tener más Nam, mira piénsalo bien, amas a Jungkook, ya tienen un hijo en común, así que porque no te decides y lo eliges, deja de complicarte, mereces ser feliz y este es tu momento, no pienses más en Seokjin porque eso solo hace que te confundas y no te engañes Namjoon lo que sientes por Jin es agradecimiento más no amor, así que  no hagas sufrir más a tu lobo, ambos aman a Jungkook y merecen estar al fin juntos.

Nam sabía que su amigo tenía razón pero le dolía tener que dejar así a Jin, más cuando esté había sido tan bueno con él.

—Es cierto Hobi, sigo amando con todas mis fuerzas a Jungkook, hablaré con Seokjin para aclarar todo, lamento mucho lastimarlo así pues le estoy muy agradecido por todo.

Ambos estaban absortos en su conversación que no se dieron cuánta cuando cierto alfa había escuchado todo aquello, saliendo furioso y herido al saber que sería desechado y más al darse cuenta que su cachorro no lograria vivir.

Jackson al darse cuenta de su enojo salió tras el, hasta que llegaron a la cabaña del alfa donde al entrar vieron como los tres cachorros jugaban animadamente.

—Yuni y Junjin por favor vayan a su cuarto y junten algo de ropa su favorita y la ponen en la cama, Yeonjun puedes ayudarlos por favor cachorro — los tres pequeños entraron alegres pues pensaron que se irían de viajes de exploración como muchas veces lo hicieron.

—¿Qué planeas hacer Seokjin?— preguntó Jackson con duda al verlo actuar así

—Lo que debi haber echo hace mucho, más específico en cuanto Jungkook regreso, irme de este lugar.

El alfa buscaba algunas de sus ropas para meterlas en aquella maleta que había traido cuando llegó a Cuhzar.

—No puedes hacer eso Jin, debes hablar con Nam primero.

—¿Para qué? Es que acaso no escuchaste va dejarme, le importa más ese inmaduro alfa, incluso está dispuesto a perder a nuestro cachorro— cuando dijo aquello las lágrimas comenzaron a bajar, Jackson estaba asombrado pues ese detalle le era desconocido— desde el principio sabía que esto pasaría Jackson, pero sabes fui un iluso, creí que mi amor podía vencer un lazo, pero descubrí que no y eso me duele, mi corazón late con fuerza por Nam, pero se que también puede detenerse si no lo siento mío, me engañé creyendo que podría estar como si nada aunque Nam estuviera con Kook pero no, me duele, siento que mi pecho arde, lo amo con todas mis fuerzas, pero debo irme no creo que mi lobo ni yo soportemos perder a otro Omega.

—Se que es difícil para ti amigo, pero no te vayas habla primero con él.

—Lo he decidido Jackson, mañana mismo me iré, no quiero ver a nadie y menos a Nam, por favor cuida de él.

Jackson salió en busca de su Omega debía hablar con Hobi y Namjoon, sin embargo cuando iba para su cabaña comenzó a oír mucho alboroto.

—Nos están atacando, deben buscar refugio— al oír aquello corrió con todas sus fuerzas, debía proteger a su familia.

Seokjin seguía guardando todo cuando su puerta fue tocada, no quería abrir pero al escuchar la insistencia fue que se acercó.

—Alfa Seokjin que bueno que lo encontramos necesitamos su ayuda, nos están atacando, traiga a sus hijos los omegas los cuidaran.

Sin pensarlo dos veces tomó a los tres cachorros y los llevo junto a Isa pues la Omega ya los conocía y sabía que los podría proteger, de pronto su mundo se detuvo pues sabía que Namjoon estaba más alejado cuando corrió a su encuentro pudo divisar como este era tomado con cariño por Jungkook pues este lo estaba protegiendo, a pesar de sus sentimientos se alegró pues al menos el Omega estaría bien cuidado.

Cuando Nam lo diviso corrió a su lado pues quería asegurarse que Jin estuviera bien y al saber dónde estaban los tres cachorros corrió a su lado para cuidarlos.

—Manada por favor calmense ya algunos alfas fueron enviados para cuidar las tierras pero, es inevitable vienen más hasta nosotros, así que les pediré a todos los alfas que vengan con nosotros y nos ayuden a proteger a Cuhzar, los betas se quedarán aquí cuidando a los omegas niños y ancianos, este lugar es seguro.

Todos estaban llorando pues tenían miedo.

—Alfa Siwon y alfa Seokjin — ambos giraron al ser llamados— ustedes al ser los más fuertes nos guiarán, dependemos de su liderazgo para proteger Cuhzar.

Ambos afirmaron con sus cabezas no muy seguros pues tenían miedo, los enfrentamientos siempre acababan mal y con muchas vidas.

—Alfa Seokjin despidase de sus cachorros, usted será el primero en ser enviado junto con 50 alfas más.

Namjoon al escuchar aquello sintió su pecho doler, no podía respirar bien, su alfa sería enviado atacar a otras manadas, eso era muy riesgoso pues incluso podría morir.

Sin perder de vista al alfa vio como este iba directo con aquella joven omega, la cual lloraba y veía a Seokjin como si fuera suyo, después de unos minutos de hablar se dio cuenta de como la Omega tomaba a los gemelos y los abrazaba, era muy claro el mensaje pues Jin le había encargado a sus pequeños a esa mujer y no a él.

Justo cuando iba de salida sus ojos se toparon, Nam sintió un horrible nudo en su estómago al ver los ojos rojos y tristes de su alfa, sabía que esté tenía algo y no era la lucha lo que le ocasionaba esa tristeza, cuando Seokjin se iba acercar para despedirse, Namjoon sintió como era jalado por la cintura y unos brazos protectores lo cubrieron.

—Omega debemos irnos al refugio, los ancianos no me permitieron luchar debido al problema con mi pierna, pero podré cuidarlos aquí junto con los betas, así que no tengas miedo, yo lo cuido.— Kook le hablaba con tanto amor para tratar de calmarlo pues sabía que en el estado en que estaba Nam no debía alterarse.

—Si Jungkook, solo necesito despedirme de Jin — al decir aquel nombre sintió el agarre más fuerte en su cintura.

Al girar vio como Seokjin hablaba con Hoseok y Jackson, este último también se despedia de su Omega pues iría acompañandolo.

Sin importarle la fuerza de Jungkook, Nam se soltó y fue directo a ver a Seokjin, cuando esté pudo olfatearlo giró de inmediato a su encuentro, el alfa quería abrazarlo con fuerza, besarlo y bañarlo con su aroma pues Nam olía a que estaba muy asustado, pero ahora ese era trabajo de su alfa.

—Los dejaremos un momento solos, Seokjin no tardes nos quedan cinco minutos para partir.— Jackson y Hoseok se alejaron, dejandolos en un silencio muy incómodo.

—¿No pensabas despedirte acaso?— el Omega se oía dolido.

—No quería molestar a tu alfa Nam, Jungkook siempre ha sido más posesivo, incluso desde aquí puedo sentir su aura, está algo molesto.

—¿Es todo lo que dirás?— preguntó exsaltado.

—Es lo que preguntaste Namjoon— ambos se veían con tristeza, fue ahí que Nam entendió que Seokjin estaba molesto quizás conocía sus intensiones de iniciar todo de nuevo con Jungkook, así que sin evitarlo su aroma comenzó a ser más fuerte al estar triste.

—Disculpame pequeño, no debí hablarte así, Nam escúchame, yo me iré para proteger a la manada, por favor cuídate mucho, alimentate bien, revisa que el pequeño Yeonjun se coma sus verduras ya vez que es muy tramposo y las esconde — al decir eso ambos rieron pues era verdad el pequeño siempre escondía lo que no le gustaba.

—Se cuidarme y te prometo cuidar también a los gemelos jin.— el alfa comenzó a negar con la cabeza.

—Namie— al decir aquel nombre el alfa miró hasta alfrente y al ver qué nadie les prestaba atención por estarse despidiendo fue que lo tomó de la mano para llevarlo a un lugar más privado donde nadie pudiera verlos.

—Escuchame bien Namjoon, si algo llegará a pasarme por favor lleva mis hijos con sus abuelos, los papás de Tae los cuidaran, en caso de que se nieguen hablaré con Jackson para que mis hijos le sean entregados a Jimin, se que es un gran amigo también podrá hacerse cargo de ellos.—Nam estaba algo ofendido pues él también podría cuidarlos.

—¿Y qué hay que de mi Jin? Ya no confías en que puedo cuidarlos — preguntó triste.

—Mi amor tu eres la persona en quien más confío, se que mis hijos estarían seguros contigo pero.....Nam ahora no estás solo, tu alfa regresó y se lo difícil que es para un alfa criar hijos ajenos, además ustedes apenas se están reencontrando, querrán vivir y experimentar su amor por todos estos años en que estuvieron alejados y se que mis hijos no les permitirían eso por la responsabilidad que conlleva su cuidado, así que por el gran amor que te tengo, no pienso dejarte ese gran paquete Namie.

—Hablas como si te estuvieras despidiendo Jin, escuchame bien nada te pasará y regresaras con tus hijos y en caso de que no, sabes que siempre los cuidaria sin importar nada nisiquiera Jungkook, ellos también son mis cachorros Seokjin, son míos desde que cumplieron dos meses y no pienso alejarlos.

Ambos lloraban Nam no quería que Seokjin se fuera era peligroso y no estaba dispuesto a perderlo.

—Tengo que irme Nam, cuídate mucho y por favor si algo llegará a pasarme haz lo que te dije con mis cachorros, se que eres bueno pero no quiero meterte en problemas con tu alfa, se feliz mi pequeño y lindo Omega— sus ojos viajaron hasta ese plano vientre.— aún recuerdo lo bonito que te veías con tu pancita Omega, espero en un futuro que tengas más cachorros te sigas viendo igual de hermoso, disfruta de esta nueva oportunidad que tienes para amar Namie, que no te importe lo que los demás digan, como siempre te lo he repetido, escucha a tu corazón, este siempre tiene la razón.

—Jin....

—Te amo Namjoon y por ese gran amor que te tengo hoy te digo que eres libre, libre de amar, libre de formar tu nueva familia, disfruta de esta oportunidad que la diosa luna te dio....mi amor se feliz— Seokjin tomaba a Nam con sus dos manos en las mejillas del Omega, quería besarlo quizas un último beso, no le haría daño a nadie, sin pensarlo comenzó acercarse, sus alientos se rozaban, Nam estaba tan sumiso que también quería fundirse en aquellos labios, lo deseaba.

—Besame alfa por favor— Jin abrió sus ojos al oír aquello así que sin más se acercó para acortar la distancia más sus labios no llegaron a tocarse.

—Ya es hora Seokjin — aquella voz había cortado el momento, ambos salieron de su burbuja, Jungkook se oía molesto al hablarles, no le había gustado que Jin estuviera cerca de su Omega, menos cuando conocía su pasado.

La desilusión en los ojos del Omega no pasó desapercibida ambos alfas se dieron cuenta de como Nam añoraba besar a Seokjin, quería fundirse en él, abrazarlo y no soltarlo.

—Me voy Nam, pero no olvides lo que te dije, disfruta todo lo bueno lo mereces.

Después de despedirse de sus cachorros y sus amigos, Seokjin emprendió camino, debía cuidar a su manada, así que sin más comenzaron aquella larga travesía, mientras sentía como su pecho dolía, era extraño pues una tristeza y nerviosismo lo invadía, pero por raro que fuera sabía que esos sentimientos y emociones no eran suyos.

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