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Capítulo #3: Rescate imprevisto.

Anteriormente...

—... STU nunca me dijo cómo activar el gancho— dijo la chica la darse cuenta de ese mínimo pero muy importante detalle.

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Angela se fue del lugar no si antes decirle a STU por su transmisor que guardara las coordenadas para volver, si esos aliens pulpos estaban tramando algo pues sería ella quien los detendría a aquellos extraños seres mitad humanoides mitad pulpo.

Pero lo dejo un tanto de lado porque se dedicó a realizar un par de labores en su base mientras que la IA se encargaba de los sistemas rotos y desgastados por el paso del tiempo, lo primero que hizo fue liberar de la maleza a otras armas de la base como varios cañones Boom, Lanzamisiles e inclusive un par de armas de nombre Conmocionador.

—STU— le llama Angela.

—¿Si? Angela.

—¿Por qué carajos una pequeña instalación tiene tantos prototipos y armas asi de grandes?— le preguntó con curiosidad— no me quejo pero se me hace raro.

—E-E-Es po-porque esta instalación es-s-sta destinada a preservar múltiples alimentos, plantas para el futuro de-de la so-so-sociedad— responde la IA— además de que va-va-varios humanos fueron preservados cuan-dOoO la inundación fu-fue evidente.

—Ya veo... ¿Hay semillas y herramientas para la cultivarlas?— pregunta la chica ya habiendo terminado de limpiar todas las armas de la base.

—Afi-fi-firmativo en la habitación frente a la sala de armas— responde la IA.

Así los proximos dias Angela se la pasó de granjera sembrando todo tipos de plantas, obviamente esto requería paciencia y mucho tiempo pero por suerte la tierra cercana a la base es fértil para las plantas que ella cultivaba.

Así se le fue el día mientras que STU reparaba múltiples robot llamados Seekers de los cuales Angela sabía muy poco, lo unico es que la ayudarían con lo que fuera y por ende al cabo de unos ideas los robots se volvieron los encargados de vigilar los cultivos y también de ayudar a Angela a crear el invernadero encima del mismo cultivo.

Mientras Angela exploraba mejor la base donde estaba, viendo múltiples experimentos, armas, químicos entre múltiples cosas como una consola y múltiples juegos pero por mucho que la chica quisiese pasar horas perdiendo su tiempo aun habia algo rondando en su mente, una cosa que no la dejaba estar tranquila.

—¿Qué estarán haciendo esos aliens pulpos en ese lugar?— preguntó al aire mientras subía a la superficie para revisar sus cultivos.

Así pasaron múltiples días en los cuales Angela se preparaba tanto física como mentalmente para ir nuevamente a esas instalaciones donde vio a aquellos seres tan extraños para ella, claro que en ese tiempo aprendió a cómo usar el gancho de su guante y el teaser, sumando al hecho que con ayuda de STU empezó a remodelar un poco el exterior de la base.

Quitando maleza, árboles y colocando bonitas flores que ella misma sembró por lo que se dedicó a cuidarlas lo más posible hasta que estas brotarán, por lo que tras una semana de haber salido de la criogenización Angela ya se encontraba bastante estable como para no preocuparse por la comida.

Pero ahora ella se encargaría de aquellas alienígenas de una vez por todas por lo que se alistó con lo mismo que tenía antes de ir a aquel lugar que habia marcado.

—¿No quie-e-eres que algunos Seeke-e-ers te acompañen? Angela— le preguntó STU.

—No STU, yo sola estaré bien y estas cuantas granadas me ayudaran bastante— le dice la chica antes de partir hacia su objetivo.

—Bu-Bu-Bueno yo estareEe vigilando tus cultivos— le dice la IA por el comunicador.

—Ok, si me tardo mucho envías a los Seekers— le dice esta.

—Entendido.

Sin más Angela se dirigió a donde vio a aquellas niñas pulpos, fue bastante largo el viaje pero tras una hora por fin llego al mismo punto donde quedó hace una semana, en frente de aquella fortaleza deteriorada pero para su sorpresa vio como unos tentáculos con ojos, boca y patas patrullaba la zona en una especie de vehículo.

—... ¿Son tentáculos con patas?— exclamó al aire completamente confundida— sin dudas voy a tirar este lugar abajo y deshacerme de estos aliens.

Sin más uso su gancho con cuerda para llegar a un lugar alto de aquel edificio sin ser detectada por nada, y una vez estuvo ahí se puso a examinar  qué estaba haciendo o planeando, claro que tuvo que ser una completa espia para que esos tentáculos mutantes o las niñas pulpo la vieran.

Entre las salas que entró pues noto una con múltiples armas que tanque de alguna clase de sustancia, ella sinceramente no entendía que onda con esas armas pero seguramente lanzaban alguna clase acido.

—Tener cuidado con esa gente— se dijo para si antes de ver a las chicas pulpo pasar hacia otra habitación.

Y cuando fue a ver que habia en esa se encontró con lo que parecía ser una prisión y dentro de esta se encontraba una niña encadenada, muy malherida y con múltiples marcas de moretones entre otras cosas, una escena que impactó a Angela ¿qué demonios le estaba haciendo?

Pero pese al impacto noto que aquella niña al igual que sus raptoras tenia tentáculos pero siendo estos muchos más largos similares a los de un calamar, pero pesé a eso no iba a permitir que secuestraran a alguien que lucia inocente.

Por lo que luego de ver como la golpeaban, pateaban entre otras horribles cosas pues Angela empezó  ejecutar su plan y las granadas que trajo servían como una buena distracción.

—Ok solo tengo que hacer salir a todos con las de fragmentación, de paso matar uno que otro bicho y con bombas de humo me piro con lo que sea que sea esa niña— se dijo para si antes de tomar un granada— ok, solo tengo que lanzarla lo más lejos posible.

Tras quitarle el gatillo a una pues no tardó en lanzarla con todas sus fuerzas hacia un lado opuesto a edificio, al cabo de unos segundos una explosión retumbó en el lugar haciendo que tanto octarianos como octoamazonas salieran con sus armas a ver que paso.

Seguido de eso pues iba a lanzar otra para matar a la mayoría de alienígenas pero un sonido hizo que se resbalara la granada sin gatillo, por lo que asustada la pateó la granada hacia quien sabe donde y pues esta explotó con lo que sea que allá provocado aquel ruido.

—Se me lia este rescate imprevisto— pensó la chica antes de tomar varias granadas de humo—paso 2.



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