Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 58.

Sólo compramos dos pantalones en esa tienda punk, y después entramos en otra tienda donde pensé que toda la ropa era una broma de mal gusto.

"Bien Marcel, aquí puedes escoger la ropa que te guste, yo la aprobaré si es apropiada para ti, si no lo es entonces no la llevaremos."

"Nada me gusta aquí." Respondí cortante.

"¿Bromeas? La ropa de aquí es hermosa y con estilo." Fruncí el ceño.

"No quiero ser como Ethan, no me gusta esta ropa, no compraré nada y es mi última palabra." Me crucé de brazos.

"Cariño, aquí tu palabra importa una mierda, la única palabra que importa es la de John, y si él quiere que uses esta ropa, entonces la usarás. ¿Quedó claro?" Tragué saliva ante su tono amenazante.

"Si."

"Excelente, comienza a elegir, no tengo todo el tiempo, ya me has hecho enojar suficiente. Date prisa, escoge algo decente y al mismo tiempo atrevido para la fiesta de mañana."

"¿Decente y atrevido? No lo entiendo, algo atrevido nunca podrá ser decente." Ella puso los ojos en blanco.

"Sólo metete en el maldito probador y te llevaré la ropa que yo elija porque me tienes cansada con tu actitud de nerd mojigato. Serás la causa de mi muerte, literalmente." Asentí con la cabeza mientras caminaba hacia el probador.

_

Narra Niall

Después de tomar una ducha juntos, Liam y yo volvimos a la habitación para comenzar con las tareas que tenemos pendientes para la próxima semana.

"¿Que crees que haya sido eso?" Preguntó Liam después de colocarse sus calzoncillos.

"¿Que cosa?" Pregunté.

"¡Eso! Marcel con el grupo de Samantha, sin Samantha. El sábado pasó de sentarse con nosotros en el comedor y esta mañana volvió a hacer lo mismo... ¿No te huele mal?" Olfatee mis dos axilas antes de responder.

"No fui yo, acabo de tomar una ducha contigo." Liam puso los ojos en blanco.

"No hablo de ti, hablo de la situación de Marcel, creo que algo malo se avecina, y cuando yo creo que algo malo se avecina es porque algo muy malo se avecina."

"No sé de que hablas."

"Atolondrado. Marcel en el grupo de Samantha, esa no es una buena combinación, va a terminar en tragedia. No me gusta decir esto, pero tenemos que intervenir." Dijo con seguridad. Entrecerré los ojos.

"Liam... Eres cobarde como la mierda. Cuando hablas de intervenir, sé que quieres que yo me encargue de todo." Él sonrió de una manera muy tierna.

"Lo admito, tú eres el único valiente en esta relación, y es por esa razón que quiero que tú ayudes a Marcel. Ya te has enfrentado a John muchas veces para defendernos, confío en que lo harás bien." Hice una mueca.

"¿Y si Marcel no quiere nuestra ayuda?"

"Por supuesto que quiere nuestra ayuda, Marcel odia a ese grupo, le han hecho tanto daño... Él no querría estar solo con ellos, tal vez lo están amenazando, o algo peor."

"No lo sé, Liam, deberíamos hablar antes con él, antes de intervenir." Asintió con la cabeza.

'Tienes razón, tenemos que hablar con él... Por cierto, ten." Entonces me aventó el desodorante.

"¡No me jodas!" Me quejé atrapando el desodorante en mis manos, Liam comenzó a reír.

"Deberías usarlo cuatro veces al día." Fruncí el ceño, ofendido.

"Te odio, Liam. No habrá más abrazos con estos brazos sudorosos para ti." Me crucé de brazos.

"Sólo estaba bromeando." Siguió riendo.

"Eres un pedazo de mierda, no me gustan esas bromas." Le di la espalda para comenzar a vestirme. "Y no te dejaré aplicarme loción de cuerpo nunca más."

"¡Oh vamos, Ni! Odio cuando te pones en fase de diva." Lo observé desconcertado.

"Entonces búscate a otro hombre que no sea diva, que no tenga mal sudor, y que te permita follarlo cuantas veces quieras. Anda, no te voy a detener." Hablé realmente enojado.

"¡POR DIOS, FUE UNA BROMA!" Lo ignoré y continué vistiéndome, pero entonces Liam comenzó a jalar mi ropa, evitando que pudiera vestirme.

"¡Liam, basta!" Y atacó mi cuello con sus labios. "No puedes hacer eso cuando estoy enojado." Me retorcí.

"¿Todavia estás dolorido?"

"Si, Liam. Alejate de mí." Lo empujé con fuerza.

"¿Puedo aplicarte loción?" Preguntó con un puchero. Me encogí de hombros. "Voy a consentirte." Dijo dándome la espalda para tomar la loción de la peinadora. Sonreí para mí mismo porque sé que no puede verme, pero es jodidamente tierno, es imposible enojarse con él.

_

Narra Paola

Entramos a la habitación de Louis, luego de correr por todos los pasillos con las maletas para ver quién corría más rápido, por supuesto que él ganó, yo nunca fui amante de los deportes.

"¿Qué estás pensando?" Pregunté al verlo tan pensativo. Él levantó la mirada para verme.

"No puedo creer que tú vayas a mudarte conmigo, si me lo hubieran dicho hace dos meses no lo hubiera creído jamás."

"Pues créelo, aquí estoy." Sonreí.

"Es que eres- has sido la chica de mis sueños desde que comencé la universidad. Sé que sueno ridículo, pero ya sabes, te veías tan inalcanzable para mí, tan inalcanzable como las estrellas. No quiero decir que ahora te haya alcanzado, pero..." Lo interrumpí.

"Deja de divagar, ya me alcanzaste, Louis, me tienes en tus manos ahora. ¿Que harás conmigo?" Levantó una ceja.

"¿Que harías tú si alcanzaras una estrella?" Lo dudé por un segundo. "Yo la pondría en bandeja de oro, claro si tuviera oro..."

"Eres oro, Louis. Esa estrella sería muy afortunada si se dejara alcanzar por ti. Pero adivina qué, ella sola ha bajado y se ha puesto en la bandeja para ti." Él sonrió ampliamente, entrecerrando los ojos.

"Entonces soy muy afortunado, el hombre más afortunado de todos porque esa estrella me eligió."

"Así es." Asentí.

"Algo no me queda claro... La estrella eres tú, ¿cierto? Porque siento que estamos hablando con metáforas..." Puse los ojos en blanco.

"Oh cállate. Claro que yo soy la estrella, y te elegí a ti, Louis, deja de ser tan inseguro y bésame." Lo tomé del cuello de su camisa y lo atraje hacia mí, besando sus labios con fuerza. Sus manos se posaron en mi cintura descubierta, y el contacto de su piel con la mía me hizo estremecer.

Él gruñó contra mi boca cuando desplacé mis manos hacia su cabello y comencé tirar de él lentamente, antes de insertar mi lengua en su boca con suavidad, acariciando la suya.

Esta sensación me gusta, me gusta como sus labios bailan con los míos, me gusta como las yemas de sus dedos acarician la piel de mi cintura circularmente sin ser muy atrevido, me gusta como todo su cuerpo está tenso porque sé que mi cercanía lo pone nervioso, y me gusta él. Definitivamente me siento afortunada de haberlo conocido.

De pronto cuando todo comenzaba a ponerse caliente, él se apartó bruscamente, dándome la espalda.

"¿Que pasa, Louis?" Pregunté dando un paso hacia él.

"Nada. Debemos desempacar tus maletas." Dijo sin mirarme.

"Louis..." Él se giró hacia mí, su expresión torturada no me pasó desapercibida.

"Simplemente no puedo hacer esto, Paola. No quiero que pienses que yo quiero tener sexo contigo únicamente, eso no me importa en absoluto, no es lo que quiero, no soy como ellos. Si me das la oportunidad de iniciar una relación contigo, yo lo aprovecharé al máximo, y te prometo que no habrá sexo de por medio. Y no, no soy virgen, tampoco le tengo miedo al sexo, pero no es mi prioridad." Quedé atónita.

"Bien. Entonces te daré la oportunidad de iniciar una relación, pero no me voy a enojar si hay sexo de por medio, en serio Louis." Él asintió con la cabeza.

"Por favor, vayamos despacio, esto es muy difícil para mí. Este tema..." Bufó.

"Está bien, no hablaré más del tema si es lo que te preocupa." Negó con la cabeza.

"Es algo más."

"Confiaré en que algún día vas a contarme todos los secretos que escondes, Louis. Me estoy empezando a preocupar de una manera extrema. Necesito saber lo que te incomoda, necesito saber todo lo que sientes, si vamos a comenzar una relación no puede haber secretos entre nosotros."

"Lo sé. Sólo dame tiempo, no estoy preparado aún." Su mirada es sincera, y sé que no está preparado para abrirse completamente.

"Está bien, te daré todo el tiempo que necesites, ya te he dicho que no te voy a presionar para que me lo cuentes."

"No, no p-puedo." Su voz se quebró, y bajó la cabeza soltando un débil sollozo.

"Hey, no pasa nada." Lo envolví en un abrazo, sintiendo como su cuerpo comenzaba a temblar. "Todo está bien. Lamento haber iniciado esta conversación... Si no puedes contarme entonces no lo hagas, no quiero ser la causante de tu depresión. Lo siento mucho, olvida todo lo que dije."

Con mis palabras sus sollozos sólo se incrementaron, me sentí fatal, desearía poder ayudarlo mucho más de lo que ya lo estoy haciendo. No creo que mudarme a su habitación sea suficiente ayuda para él.

"Louis, creo que necesitas ayuda profesional. Hay un psicólogo en enfermería, puedo pedir una cita para ti, no te preocupes por los gastos." Louis sacudió la cabeza en negación. "Por favor, tu situación puede ser crítica, no quiero que algo malo te suceda." Se apartó de mi abrazo para mirarme fijamente.

"Estoy bien, te prometo que no voy a acabar con mi vida, no te preocupes por mí. No llegaré a esos extremos de locura." Se limpió las lágrimas con su antebrazo.

"Bien." Hice una mueca, no muy segura de sus palabras.

"Gracias." Dijo con sinceridad. Me encogí de hombros y luego comencé a desempacar mis cosas, sin dejar de pensar en Louis. No puedo dejar de preocuparme por más que lo intente. Ya quiero que deje de sufrir.

_

Narra Marcel

Abrí la puerta de la habitación, cargando siete bolsas grandes en mis manos y hombros. Una música ruidosa me recibió, y luché para no cubrirme los oídos.

"¿Que hay de nuevo, Marcel?" Preguntó Zayn desde su cama.

"Muchas cosas." Respondí señalando las bolsas.

"Oh sí, ¿cómo te fue con Vicky?" Tiré las bolsas sobre mi cama antes de sentarme.

"Fue un poco exigente y malhumorada." Respondí alto, casi gritando por encima de la música para que pudiera escucharme.

"Si, ella es bastante malhumorada cuando se lo propone. Tal vez le hace falta un poco de sexo." Puse los ojos en blanco.

Después de guardar la ropa nueva dentro mi parte del closet, saqué mis libros y cuadernos para comenzar a realizar mis tareas y estudiar para el próximo examen de literatura. Pero la música ruidosa del otro lado de la habitación me dificultaba todo. Traté de ignorar la música, pero cada vez el volumen aumentaba más, y mis tímpanos amenazaban con estallar.

"¿Zayn?" Lo observé, pero él parece no estar escuchándome. "¡ZAYN!" Grité más fuerte esta vez.

"DIME." Gritó de vuelta.

"¿PODRÍAS BAJAR EL VOLUMEN? ESTOY TRATANDO DE ESTUDIAR PARA UN EXAMEN." Me cubrí los oídos.

"¿QUÉ?" Fruncí el ceño y me puse de pie para caminar hacia él.

"¡NO PUEDO ESTUDIAR CON TU MÚSICA A TODO VOLUMEN! ¿PODRÍAS APAGARLO?" Pedí una vez más. Una sonrisa se asomó en sus labios antes de tomar su teléfono y pausar la música.

"Lo siento, no puedo soportar el silencio." Se encogió de hombros.

"Yo no puedo soportar el ruido." Protesté. "Tengo un examen el viernes, y realmente necesito estudiar."

"¿Y empiezas a estudiar desde hoy? No me jodas, para eso existe una biblioteca, puedes tomar tus libros y dirigirte hacia allá cuando tengas deseos de estudiar." Fruncí el ceño.

"No es justo, compartimos habitación, debemos poner reglas." Zayn soltó una carcajada.

"Es mi habitación, tú sólo eres un invitado de honor. Yo pongo las reglas, y definitivamente no puedes estudiar dentro de mi habitación. Lo siento mucho." Lo miré perplejo, y luego su música comenzó a sonar de nuevo.

"Bien, creo que ya lo entendí, gracias." Dije con el ceño fruncido, aunque dudo mucho que él me haya escuchado con ese volumen.

Tomé el teléfono debajo de mi almohada, y lo encendí para encontrarme con 12 llamadas perdidas de Samantha. Demonios, olvidé llamarla.

"Entonces estaré en la biblioteca." Anuncié, sin importarme que él escuchara o no. Tomé mi bolso metiendo todos mis cuadernos y salí de la habitación.

No puedo creer lo odioso que ha sido conmigo, pensé que podríamos conocernos y llevarnos bien, pero ya veo que Zayn no es una persona amistosa. No pasa nada, soy fuerte, puedo soportarlo, él no me hará cambiar de opinión.

Al entrar en la biblioteca sólo conseguí a un par de estudiantes, lo bueno de la biblioteca es que casi siempre está vacía, y el silencio es admirable. Suspiré de alivio mientras me sentaba en una mesa apartada y un poco alejada de la entrada para poder enfocarme en mis estudios.

El teléfono comenzó a sonar en mi bolsillo con una muy ruidosa canción de rock, al principio no supe como callarlo, pero luego presioné el botón verde y comencé a hablarle a la pantalla.

"¿Diga?"

"Marcel, ¿que parte de mantenernos en contacto no entendiste?" La voz de Samantha se escuchó del otro lado. Traté de localizar la bocina por donde salía su voz hasta que vi unos pequeños agujeros por la parte de abajo.

"Uhmm, si."

"¿Que estás haciendo en este momento? Suenas distraído."

"Estoy tratando de encontrar la bocina de este teléfono. Y también estoy en la biblioteca porque mi compañero de cuarto es un idiota."

"¿Zayn? Por supuesto que es un idiota. Espera un momento, estaré en la biblioteca en un segundo." Asentí con la cabeza y luego recordé que ella no puede verme.

"Si, está bien." Hablé rápido.

"Eres un bebé." Fruncí el ceño, pero ella colgó la llamada dejándome con la palabra en la boca.

Guardé el teléfono nuevamente en mi bolsillo y puse todos mis cuadernos encima de la mesa. No pasaron ni 5 minutos cuando alguien me habló en el oído.

"Hola, bebé." Besó mi mejilla antes de sentarse frente a mí en la mesa.

"No me digas bebé." Me quejé. Ella se encogió de hombros.

"Eres un bebé, no puedes negarlo."

"Sólo soy dos años menor que tú." Sonrió.

"A eso me refiero, bebé."

"¡Basta!" Levanté la voz, ella soltó una carcajada.

"¿Que estás estudiando?"

"Literatura, tengo examen el viernes, y Zayn no me dejó estudiar en la habitación así que tuve que venir a estudiar aquí."

"Odio decir esto, pero Louis es mejor compañero que Zayn, deberías volver a tu antigua habitación, todavía no has visto nada, apenas es tu primer día compartiendo con él."

"No me daré por vencido el primer día, Sam."

"Eres testarudo como la mierda. Ya no hablemos de eso, mejor dime qué hiciste en la tarde, y por qué no contestaste mis llamadas." Comencé a pasar páginas de mi cuaderno.

"No te enojes, estuve con Vicky, fuimos al centro comercial..." Ella golpeó la mesa.

"Maldita perra, si ella intenta ponerte una mano encima juro que la tiraré desde el quinto piso de la torre más alta."

"Ella lo ha intentado, pero no te preocupes, sé como negarme." Volvió a golpear la mesa con más fuerza.

"¡JODER! ¿Qué te ha hecho? ¿Hasta dónde ha llegado?" Ignoró mis palabras anteriores.

"Sam, olvidalo. John planeó esa salida, y creo que él planea emparejarme con Vicky." Esta vez sostuve su mano antes de que intentara golpear la mesa.

"Maldito hijo de puta. Él lo único que quiere es verme sufrir." Negué con la cabeza.

"No lo logrará, no caeré en su juego. Soy tuyo, ¿si? No te preocupes por eso, siempre seré tuyo." Ella apretó mi mano.

"Eso lo dudo. Dime que otra cosa te han dicho." Lo pensé por un momento, tratando de recordar todo lo que me han dicho.

"Ah sí, harán una fiesta mañana en mi honor, en una de las fraternidades más cercanas." Samantha abrió los ojos como platos.

"No vayas, inventa cualquier excusa para no ir." Me mordí el labio.

"¿Por qué no puedo ir?" Pregunté confuso.

"Porque es una trampa, Marcel." Fruncí el ceño.

"No lo creo."

"Está bien, haz lo que quieras." Ella apartó su mano de la mía.

"Sam..."

"¿QUÉ?" Sonreí al verla tan enojada.

"Tu bebé te ama." Ella trató de ocultar su sonrisa pero no pudo.

"No hablas en serio." Y comenzó a reír. "Eres un idiota."

"Tu idiota." Respondí sin dejar de sonreír. Entonces ella se subió a la mesa encima de mis cuadernos para llegar hasta mí y sentarse en mi regazo.

"Me gusta como suena eso. Deberíamos terminar lo que empezamos el otro día." Dijo entre besos.

"Uhmm sí, prefiero hacerlo en una habitación." Volvió a atrapar mis labios entre sus dientes antes de hablar.

"¿Que esperamos entonces?"

"¿Sam?"

"Uhmm."

"Quiero hacerte el amor." Y por esa simple frase, saltó fuera de mi regazo y me observó boquiabierta. "¿Por qué actúas así? No dije nada malo."

"Si, tú ya sabes lo que pienso de eso." Me puse de pie para quedar frente a ella.

"Déjame hacerte el amor, Sam. Déjame demostrarte que el amor no es tan malo cuando estás con la persona correcta. Déjame quererte, por favor. Te prometo que será especial, confía en mí, sólo déjame quererte a mi manera." Se mordió el labio inferior antes de asentir levemente. Sonreí acercándome mucho más para acariciar su mejilla.

"Entonces hazlo."

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

Copyright © yafanfiction

Hola bebés. Ahre ❤

Este capítulo está dedicado a:

@Amai-Chokoreto1D

¿Que opinan de todo esto? Quiero saber que piensan mis lectores. Comenten, voten bye xx

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro