A través de mi vista borrosa pude ver a Samantha. Suspiré de alivio y cerré los ojos. Cuando los volví a abrir ella estaba encima de John, colgada en su espalda mientras le daba golpes en la cabeza y lo pateaba. Si no estuviera tan golpeado y tan dolido, estuviera riendo por la escena. Pero todos mis músculos duelen y no tengo fuerzas ni para reír, ni para moverme.

Al menos tengo la esperanza de que John no seguirá golpeándome, y puedo estar tranquilo por eso. No creo que pueda soportar un golpe más.

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Narra Samantha

No me cansé de jalar su cabello y patear sus costillas. Aunque mis nudillos duelen de tantos golpes que le he propinado en la cabeza, aun puedo seguir golpeándolo. Y viendo a Marcel tirado en el piso sin energías para levantarse solo me ánima a seguir.

"MALDITO HIJO DE PUTA!! QUE LE HAS HECHO?" Grité a la vez que lo golpeaba. Ethan, Blake, Richard y Kurt están presenciando todo el espectáculo pero no me importa que se burlen de mí. Estoy agradecida de haber venido a buscar a John, jamás me imaginé que encontraría esto. Y si no hubiese venido tal vez hubiera sido muy tarde.

"Calmate, pequeña zorra. Esto no tiene nada que ver contigo." Dijo esquivando mis golpes como todo un boxeador profesional.

"NO ME LLAMES ZORRA, CABRÓN! Y si tiene mucho que ver conmigo." Le propine un golpe en el ojo y él se quejó. Los chicos comenzaron a reír sin siquiera acercarse a nosotros para separarnos, es obvio que se están divirtiendo.

"Que están mirando imbéciles? Quitenmela de encima, joder! No he terminado con el niñato." Dijo John y abrí los ojos como platos, dejando de golpearlo.

"Que no has terminado?" Pregunté, pero cuando reaccioné ya los chicos me habían separado de John y me sostenían con fuerza por ambos brazos. John se acercó a Marcel sin quitarme los ojos de encima y sonrió. "No lo hagas." Supliqué.

"Oh, si lo hará." Respondió Blake hablando muy cerca de mi oído. Comencé retorcerme para salir de su agarre, pero 4 chicos pueden más que yo.

"Dejenme ir, por favor."

"No la suelten chicos, dejemos que vea como acabo con su adorado nerd." Dijo John y frunci el ceño cuando se arrodilló a la altura de Marcel. "Ya te lo advertí. Sólo es una simple orden, peste. Mas te vale cumplirla si quieres tu libertad. Y si no lo haces, acabarás de esta manera todos los días." Le dijo antes de levantarse y patearlo en el estómago. Marcel gritó mientras se hacia bola en el piso.

John comenzó a patearlo como si de un balón de fútbol se tratara y Marcel cada vez gritaba menos fuerte, haciéndose más débil con cada patada que recibía.

Cuando pensé que no iba a golpearlo más, levantó su pierna para luego pisar a Marcel con su enorme bota de suela pesada, directo en el pecho, dejándolo sin aire. Grité al ver como lo pisaba afincando su pie con malicia. Es un maldito animal. El chico tirado en el piso perdió el color en su rostro y empalideció, de repente se puso morado, mientras John pisa más fuerte sobre él, como si fuera un insecto que quisiera aplastar. Marcel no puede respirar, cada vez su cara se vuelve más morada, y su boca se abre tratando de tomar aire, fracasando en el intento.

"BASTA!!!" Grité tratando de liberarme. "DEJALO!! Le estás haciendo daño..." John me interrumpió.

"Lo sé! De eso se trata." Todos empezaron a reír, y en eso John volvió a levantar su pierna para volver a pisar a Marcel, pero esta vez en la cara con fuerza, haciendo que golpeara su mellija derecha contra el piso, aplastando su cabeza. El corazón se me hizo pedazos cuando lo vi escupiendo sangre por la boca. Él se ve muy mal. Él está sufriendo. Debo detener esto ahora, y sé como hacerlo.

"JOOOOHN!!! Por favor John. Deja de patearlo... Por favor, lo estás matando. Te lo suplico." Las lágrimas amenazaban con salir. Mi vista se hizo borrosa, y cuando parpadee ya estaba llorando. "Es suficiente, dejalo ya... Tú no eres un asesino."

John apartó su pie fuera de la cara de Marcel y subió la vista para mirarme. Fruncio el ceño al verme llorar, volvió a mirar a Marcel con desprecio y luego dio un paso atrás.

"Vámonos chicos." Dijo mirándome.

"Le diste con todo." Lo felicitó Ethan.

"Así se hace. Le partiste la madre. No creo que vuelva a levantarse en semanas." Dijo Kurt de manera orgullosa.

"VÁMONOS!" John levantó la voz.

Los chicos me liberaron y me entregaron los anteojos de Marcel antes de irse detrás de John. Rápidamente me tiré en el piso justo frente de Marcel, todavía llorando. Soy una sensible de mierda. Puta vida.

Pero cómo no llorar viendo todo su rostro hecho mierda, con sangre saliendo de todas partes de su cara, incluso de su orejas. La imagen es horrorosa, fuera mas fea si no se tratara de Marcel. Aún con su rostro ensangrentado y visiblemente destrozado sigue pareciendo un bello ángel dormido.

Él no está inconsciente, puedo darme cuenta por sus jadeos constantes y porque aprieta los ojos de vez en cuando, frunciendo las cejas en señal de dolor.

"Marcel, lo siento." Otra mueca, sin respuesta alguna. "Estás bien?" Que pregunta tan estúpida, obvio que no está bien. Está en posición fetal, sosteniendo sus piernas fuerte contra su pecho, abrazándose. "Dime algo, por favor... Ya se fueron. No volverán a golpearte, lo prometo."

Comenzó a toser, a medida que lo hacía escupía sangre por la boca.

"Debemos ir a la enfermería." Dije colocando una mano sobre su brazo, tratando de no tocar ninguna herida para no lastimarlo.

"D-de..jame." Respondió contrayendo el vientre mientras trataba de hablar. Luego se retorció de dolor en el piso. Es obvio que no puede esforzarse.

"No te voy a dejar. Estás muy herido. Por poco te mata."

"Pu-puedo.." Lo interrumpi antes de que siguiera esforzándose para hablar. Me desespera su intento de parecer fuerte cuando realmente es débil como un bebé recién nacido.

"NO, NO PUEDES! Maldita sea. Voy a llevarte a enfermería y se acabó! Deja de ser testarudo." Intenté cargarlo pero me resultó imposible, es demasiado pesado para ser un debilucho.

"Dejame morir aquí." Logré escuchar aunque lo dijo casi en un susurro, sin energía. Eso me alarmó. Que tal si se muere en mis brazos? No, no voy a permitir eso.

"Buscaré ayuda." Comenzó a toser nuevamente, quejándose mientras se abrazaba con sus brazos. "No te dejaré morir, Marcel."

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3 chicos que conseguí en el baño de hombres, me ayudaron a cargar a Marcel hasta la enfermería. Al llegar allí los mandé a la mierda.

Montaron a Marcel en una camilla y la enfermera se acercó a él, después de revisarlo y limpiar la sangre de su rostro, ella le dio unas pastillas para disminuir el dolor de su cuerpo y él se durmió.

"Me puede explicar que le sucedió? Tengo que tomar apuntes." Me preguntó sacando su libreta.

"Él... Se cayó." Mentí. Por mas que deteste a John no puedo delatarlo.

"Se cayó?" Preguntó la enfermera nuevamente.

"Si, se cayó por las escaleras. Ya sabe, es un poco cegaton, no vio un escalón y resbaló torpemente. Debería reprenderlo y obligarlo a comprar unos anteojos nuevos y más bonitos." Dije para aligerar el ambiente.

"Esas heridas profundas y los hematomas no parecen resultado de una simple caída. Su situación es bastante alarmante." Mi corazón comenzó a latir con fuerza.

"Usted puede curarlo, no es así? Entonces deje de hablar y haga su trabajo. Joder."

"Creo que debemos trasladarlo a un hospital lo antes posible." Mi ojos se abrieron ampliamente. No, esto definitivamente no estaba en mis planes.

"Que dice? Tampoco está tan mal, no exagere. Solo necesita un poco de oxígeno y listo."

"No lo creo. Acabo de decir que su situación es alarmante. Su caída debió ser desde un quinto piso, y por la ventana. De otra manera el joven no estuviera como está, y yo no creo su historia de las escaleras." Dijo cruzándose de brazos. Soy una idiota, no se me ocurrió otra cosa que no fueran las escaleras, pude haber dicho que lo robaron y lo golpearon, pero es demasiado tarde para arreglarlo.

"Lo lamento, ya debo irme. Llamaré a sus amigos para que se encarguen de él y lo acompañen al hospital. Todos los gastos estarán en mi nombre." Dije antes de salir de la enfermería y dejar a la enfermera con la palabra en la boca.

Al finalizar la segunda clase avisé a los amigos de Marcel para que lo acompañarán al hospital y estuvieran pendiente de su estado para mantenerme al tanto de todo. Por supuesto los tuve que obligar. Todos me culparon por lo que le pasó a su amigo.

Luego de hablar con ellos, me apresure a buscar a John. Me va a tener que escuchar.

El grupo completo se encontraba en la cafetería riendo. Me acerqué a ellos y tomé a John por la chaqueta jalándolo.

"Que mierda te pasa?" Preguntó poniéndose de pie.

"Necesito hablar contigo." Caminé en dirección contraria a la cafetería y John me siguió.

Al llegar al estacionamiento me detuve y lo enfrenté.

"Que pasa Bones? Vienes a resolver los problemas de tu amigo Marcel?" Se cruzó de brazos.

"Él está mal. Su situación es crítica, está muy grave en el hospital y todo es tu culpa!" Lo empuje fuerte, golpeando su pecho, aunque estoy consciente de que no le dolió por lo musculoso que es, pero me vale verga, eso no me impide golpearlo. "Aleja tus sucias manos de Marcel. Él es un buen chico, no le hace daño a nadie. Que mierda hizo para que lo golpees de esa manera? Eres un maldito idiota. No vuelvas a tocarlo."

"Que te está pasando? Tú no eres así. Por qué te interesa tanto? Deja que se muera en el hospital. A quién le importa? Te aseguro que nadie asistiría a su funeral." La sangre me hierve de la rabia que tengo, quiero matarlo en este momento con mis propias manos a sangre fría, estampando su cabeza contra el pavimento.

"Tú deberías estar muriéndote en ese hospital, no Marcel!" Grité.

"No te entiendo. Pensé que lo odiabas. Nunca te has metido a defender a ninguna de mis víctimas, pero ahora curiosamente lo defiendes a él." Fruncio el ceño.

"No. Nunca me he metido porque no he sentido la necesidad de defender a tus víctimas. Pero resulta que te acabas de meter con un niño inocente y eso no puedo permitirlo! Él no te hizo absolutamente nada para merecer la golpiza que le diste. Casi lo matas, imbécil! Debía detenerte porque no quería presenciar un asesinato."

"Si se lo mereció." Respondió encogiéndose de hombros.

"Que te hizo? Dimelo. Porque definitivamente no creo que Marcel te haya hecho nada. Él no sería capaz.." Me interrumpió.

"Te besó." Levanté una ceja.

"Eso? Ese fue su error?"

"SI, ESO!"

"Solo porque me besó? Por eso casi lo matas?"

"Es un nerd! No tiene derecho a besarte. Debe aprender a juntarse con personas de su clase." Dijo con suficiencia.

"Acaso estás celoso, John?" Me crucé de brazos.

"Celoso de un nerd? Por favor, no me jodas. Soy mucho mejor que él."

"Lo dudo."

"Lo dudas?"

"Si. Jamás podrás estar a su altura. Eres demasiada poca cosa para compararte con él. Has visto su promedio?" Fruncio el ceño y apretó los puños.

"Afff sabes que? Ya no hablemos de eso. Mejor dime que te traes con él. Dejé de golpearlo porque empecé a creer que él no te besó a ti. Tú lo besaste a él, cierto? Sin mencionar que llorabas como magdalena."

"Si. Yo lo besé. Deberías golpearme a mi." Di un paso hacia él.

"Por qué mierda lo besaste?"

"Quién eres tú para hablarme así? No eres mi novio. Yo puedo besar a quien yo quiera."

"No te estará gustando Marcel, verdad? No pensaras salir con un nerd. O si?"

"Claro que no." No saldré con un nerd, saldré con Harry. Eso es diferente. No me da vergüenza salir con Marcel si no usa esa ropa horrible y esos anteojos. Puedo salir con él siendo Harry, no tengo problemas con eso. Me gusta Harry, o el alter ego que le he creado a Marcel.

"Otra de tus aventuras? Acaso es tu amante?" Preguntó John sacándome de mis pensamientos.

"No te interesa." Le di la espalda, pero luego me tomó del brazo y me giró dejándome frente a él.

"No te conviene seguir tus aventuras con el nerd." Dijo rozando su nariz con la mía, y su boca a pocos centímetros de la mía.

"Me estás amenazando?" Pregunté siguiendo su juego. Él se mordió el labio antes de responder.

"No lo creo. Solo te advierto que no deberías seguir con él. A menos que quieras que salga herido nuevamente. Sería un placer volver a golpearlo, pero la próxima vez será peor. Creeme, también me ha gustado escucharlo gemir, solo que yo lo hago gemir de sufrimiento y es muy reconfortante escucharlo. Por cierto, gime como niña. Es igual en la cama? Ya te lo has follado?" Sonrió mostrando todos sus dientes.

"Eres una basura!" Lo empuje fuerte lejos de mí. "DEJALO EN PAZ!" Él soltó una carcajada. "No te atrevas a tocarlo de nuevo, me oyes? Si lo haces, te juro que yo misma acabaré contigo y con tu maldita reputación."

"Wooow tranquila fiera, no quiero tener rivalidades contigo. Eres mi chica, pero ese niñato... Me incomoda."

"Y tú me incomodas a mi. Eres una escoria, un pedazo de mierda. No te quiero ver cerca de Marcel! Lo digo en serio. Se acabó. Él no volverá a ser golpeado por ti, ni por nadie, y yo me haré cargo de eso."

"Pero solo es un nerd! Por qué te importa tanto?" Preguntó confundido.

"Ese nerd no es cualquier nerd. La diferencia es que él tiene a alguien que lo defienda, y soy yo. Piensatelo muy bien antes de acercarte a Marcel nuevamente. Y dile a tu bola de seguidores ignorantes que mejor no intenten molestarlo, o también tendrán problemas."

"Esta bien, lo dejaré libre. Pero solo con una condición." Puse los ojos en blanco.

"Cuál condición?"

"Ya se lo dije a tu amante. Mejor por qué no le preguntas cuando despierte? Si su lengua funciona todavía, él será capaz de contarte." Cerré los puños con fuerza.

"Lo amenazaste?"

"Ya me conoces. Lo dejaré libre solo con esa condición."

"Muerete. Que sepas que no te tengo miedo y muy pronto me voy a vengar. Espero que disfrutes la decepción." Dije alejándome de él.

Si su condición es que me aleje de Marcel, estará muy decepcionado porque no lo haré.

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Pasaron 5 días, 5 días que no sé absolutamente nada de Marcel. Sus amigos no cumplieron su palabra de traerme noticias y mantenerme al tanto. Gracias a ellos he estado preocupada toda la semana, pero ya no aguanto la angustia. Iré personalmente a ese hospital para saber noticias de Marcel. Dios, espero que salga de ahí pronto.

Al finalizar la tarde salí de la universidad y tomé un bus directo hacia el hospital. Pude haber ido más temprano, pero tuve unos asuntos que resolver y me tomó más tiempo del necesario.

Pregunté por la doctora encargada de atender a Marcel y ella me recibió con una sonrisa en la sala de espera.

"Cómo está Marcel? Ya está mejor? Ya puede volver a casa?" Pregunté sin ocultar mi preocupación. Ella hizo una mueca extraña, lo cual me asusta.

"Tiene una hemorragia interna en la zona abdominal, una contusión en su cabeza, sin mencionar el esguince en su tobillo. La inflamación de su rostro ha bajado notablemente, pero eso no significa que su color haya regresado, su piel aun sigue bastante morada y tuvimos que anestesiar al paciente para disminuir su dolor ya que no paraba de quejarse y llorar. La desviación de su tabique fue bastante fuerte, por esa razón nos vimos obligados a llevarlo al quirófano el miércoles para realizar una operación de emergencia. Perdió mucha sangre y está muy débil todavía, ahora mismo se encuentra bajo los efectos de la morfina y eso le provoca mucho sueño, ayer durmió todo el día. El paciente tampoco ha querido comer nada desde que llegó, lo hemos mantenido con suero intravenoso para evitar su descompensación. Me temo que si sigue igual tendrá que quedarse otra semana para recuperarse completamente."

"Pobre bebé... Quiero decir, gracias por atenderlo y cuidar de él. No pensé que estuviera tan grave. Puedo verlo?" Pregunté cruzando los dedos por una respuesta positiva. Necesito verlo.

"Por supuesto, en este momento se encuentra solo en su habitación. Sus amigos han venido diariamente a verlo, incluso se han turnado para pasar la noche con él. Han sido un gran apoyo en su recuperación."

"Me alegro. Entonces ya puedo pasar? Ésta noche yo me quedaré con él." Ella sonrió.

"Eso sería excelente. Creo que ver a su novia lo entusiasmará y lo ayudará a sanar más rápido. Él ha preguntado por ti en varias ocasiones." Dijo sonriendo y abrí los ojos como platos. "Buena suerte." Se despidió.

Con pasos lentos me dirigí a la habitación 104, donde se encuentra Marcel. Abrí la puerta con mucho cuidado de no hacer ruido para no despertarlo y entré, cerrando la puerta detrás de mí con el mismo cuidado. Y entonces lo vi. Postrado en la cama, con tubos saliendo de su nariz, y otro cable conectado a su brazo y a la bolsa de suero. Un horrible parche cubriendo su nariz, y un yeso cubriendo su pierna izquierda desde la rodilla hasta su pie. Su rostro está irreconocible, sus preciosos labios están resecos y lastimados, los párpados de sus ojos están morados, y sus ojeras son terribles. Tiene unas cuantas heridas abiertas en su frente y cejas, y está un poco hinchado, por no decir mucho. Hay una máquina que muestra cada latido de su corazón y eso me tranquiliza.

Me acerqué a él y comencé a acariciar sus rulos despeinados y trazar figuras en su lastimado rostro de porcelana. Él está dormido y me decepciona bastante porque yo sólo quería verlo despierto.

"Marcel, he querido decirte algo muy importante, pero no me atrevo, sabes?"

Tomé su frágil mano sobre la mía y entrelace nuestros dedos. No sé si deba confesar esto, pero si no lo hago el nudo en mi garganta va a terminar matándome.

"Me he dado cuenta que quizás, sólo tal vez estoy comenzando a quererte, Marcel. Pero no estoy muy segura, ya que nunca he sentido esto por nadie anteriormente y no soy el tipo de persona sentimental que adora el amor y esas mierdas... Supongo que tú eres diferente, y creo que eres lo suficientemente especial como para despertar ese sentimiento en mí. Aunque por supuesto que jamás te lo diré." Suspire profundo. "Las personas a veces tienen miedo de caer, y eso es lo que me pasa contigo. Tengo miedo. Miedo de salir lastimada, miedo de lastimarte a ti, miedo de perderte, miedo de enamorarme. Porque dejame aclararte algo, que haya aceptado que te quiero es una cosa sencilla, pero aceptar que estoy enamorada es un suicidio. Olvidalo okey? Samantha Bones jamás se va a enamorar de nadie, y no intentes cambiar mi mentalidad, porque hasta ahora ya has cambiado muchos aspectos de mi personalidad. Nerd idiota." Comencé a reír. "Ahora si estoy demente hablando sola. Es como platicar con el espejo. Una pérdida de tiempo. Soy una pendeja." Volví a reír y me incline hacia Marcel para besar su frente. "Te quiero, Marcy."

Solté su mano y me alejé un poco de la cama. Se siente bien confesarse. Siento que me he quitado un peso de encima y que ya puedo vivir en paz.

"Sam..." Abrí los ojos como platos al escuchar su ronca voz. Miré en su dirección pero sus ojos aún siguen cerrados.

"Mierda." Dije por lo bajo. "Recordé que debo irme." Él abrió sus ojos lentamente y los fijó en mí.

"M-me quieres." Frunci el ceño. El pendejo se estaba haciendo el dormido todo el tiempo. Maldición, pensé que estaba sedado.

Él todavía está adormitado por la anestesia, puedo utilizar eso a mi favor para desmentir lo que acaba de escuchar. No se lo puedo confesar ahora, no estoy lista. Pensé una buena respuesta y solté una carcajada antes de hablar.

"Creo que alguien estuvo soñando. Esa anestesia te provocó alucinaciones." Marcel fruncio el ceño.

"P-pero..." Lo interrumpi.

"Marcel, me alegro que hayas soñado conmigo, eres muy dulce." Sonreí tratando de parecer inocente.

"Si. Ya desperté." Dijo esquivando mi mirada.

"Que bueno que hayas despertado, quería verte despierto antes de marcharme." Hizo una mueca.

Caminé hacia la puerta a paso rápido para salir de la habitación, muerta de vergüenza, pero antes de llegar ésta se abrió, y una enfermera con una bandeja llena de comida entró en la habitación.

"Buenas noches jóvenes, hora de la cena." Anunció.

"No tengo hambre." Respondió Marcel. "Muchas gracias." Frunci el ceño.

"Pero debe comer algo, su cuerpo necesita proteínas para una mejor recuperación." Marcel negó con la cabeza. "Pensé que su novia podría hacerlo cambiar de opinión respecto a la comida, ya que no ha comido nada en 5 días." La enfermera me guiñó un ojo y entendí su petición.

"Novia?" Preguntó Marcel. Su cara cambió de morada a roja en menos de un segundo. "P-pero ella no.... Nosotros no..." Lo interrumpi.

"Ya escuchaste a la enfermera, bebito. Tienes que comer." Tomé la bandeja en mis manos. "Muchas gracias, yo me encargaré de que el plato quede vacío y mi querido novio se coma todo." Le guiñe el ojo y la enfermera sonrió satisfecha.

"Buenas noches." Se retiró de la habitación.

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Voten amores ❤❤