MAXINE BINNOTO

1/2.

—Para. —recrimino entre risas.

—Shh.

—Charles. —rio confuerza.

—No me dejas escuchar. —incrimina, obligándome a callar.

Estabamos en Abu Dabi, recién habíamos llegado hace un par de horas y con el inició de la última carrera de la temporada a punto de empezar, habíamos decidido descanzar un poco en el hotel antes de atender al circuito.

Ahora estabamos recostados sobre la cama. Charles con su rostro cerca de mi estomogo y su oído recargado a el. Me había obligo a tenderme y guardar el mas absoluto silencio pero con su respiracion demasiado cerca me provocaba cosquillas.

—Charles. —rio con fuerza sin poder evitarlo.

—Shh, no me dejas escuchar a mi hija. —me recrimina una vez mas en el lapso de diez minutos.

—Dudo que puedas escuchar, recién tengo dos meses. —su silencio lo tomo como respuesta.

Tener que acostumbrarme a este tipo de reacciones sobre Charles aun me resultaba un tanto extrano. Recién tenía dos meses de embarazo y ya para ambos nos resultaba una eternidad. Incluso cuando lo anunciamos a todos no muchos lo creyeron, como Carlos que cuando se lo dije el se negaba a creerme. Incriminandome mi mejor amigo diciendo que no era cierto y que mi estomago solo parecia que me hubiera comido una pizza entera yo sola. Dos días cuando le mostre unas imagenes del primer ultrazonido fue cuando por fin me creyó y se soltó a llorar.

—Ademas, ¿cómo sabes que es niña? —pregunto curiosa. Mi mirada buscando la de Charles que aun estaba muy entretenido con su oído pegado a mi estomago intentando escuchar lo minimo.

—Yo se que es niña.

—Pero puede ser niño.

—Pero si es niña tendra tu rostro.

—O el tuyo.

—Como sea, mi intuición me dice que sera niña. —reafirmó muy orgulloso, por fin reincorporandose y ahora si mirarme a los ojos. Reacomodo mi blusa al instante.

—¿Ah si? —pregunto, haciendo lo posible por no soltarme a reir en ese momento.

Aún me costaba mucho tener que acostumbrarme a esto y que, con muchas ansias, esperaba los siguientes meses.

—Si. —confirmó nuevamente. Su sonrisa agrandandose cuando, tomandolo por el cuello, lo atraigo a mi y besos sus labios. Su risita fue lo mas tierno que me pareció.

—Y de casualidad, ¿tu intuición no te dice que ya es demasiado tarde para ir al circuito? —fue inevitable no reír tras el rostro de pocos amigos que me mostro. —No querrás que el abuelo de tu hija se enfade, ¿o si? —pregunto burlesca. Su bufido me incitó a reir a carcajadas.

De la mano camino con Charles por el paddock del circuito Yas Marina. Su mano aferrandose con mas fuerza a la mía con cada vez que los fanaticos de acceso a paddock se acercaban a pedirle una fotografía o autógrafo. Había insistido ya muchas veces que soltara mi mano y que yo sola podría caminar hacia las oficinas de Ferrari, que conocía el camino a la perfección y que dudaba mucho que pudiera perderme en ese trascurso. Claramente Charles se negaba rotundamente y que prefería asesorarse de llegar a salvo y de la mano de el.

Los personas uniformados del tan pintoresco color rojo, nos reciben cordialmente una vez entramos a oficinas. Recibiendo felicitaciones para Charles por iniciar la ultima carrera de la temporada.

—Binnoto dijo que los esperaba en el garage. —anunció uno de los mecanicos al pasar por la cafetería.

Una visita rapida al camerino de Charles para que pudiera cambiar su atuendo por el mono rojo de carreras de la marca y salimos hacía donde nos habían indicado.

—¡Sorpresa! —exclamaron al recién haber entrado a garage.

La mano de Charles suelto de la sorpresa al ver a las personas reunidas allí. Papá, Carletes y la familia Leclerc estaban reunidos para darnos la bienbenida acompañados de un cartel que colgaba en la esquina que leía "Feliz aniversario, dos meses de calamarcin y ultima carrera." Leo el cartel y una carcajada logró arrebatarme, deduciendo a la perfección que quién había echo esa obra de arte se trataba de Carletes. Delatándolo ese sobrenombre que le había puesto a su futuro sobrino. Una expresión de asombro acompañada de una gran sonrisa lograron arrebatarme con el detalle.

Corro a los brazos de la primera persona que tengo frente mío. Papá, me recibe con los brazos abiertos y un fuerte apretón, seguido de Carlos que tambien me abraza con fuerza al igual que ambos hermanos Leclerc, llegando como ultimo a la madre de Charles, Pascala.

—Hola, cariño. —me saluda tan atenta y cordialmente, sus brazos calidos envolviendome. Aveces me resultaba extrano la forma tan reconfortante que me sentía de la compañía de ella e irónico de la forma en la que me recordaba tanto a mi madre. Quizas la falta de una imagen materna me hacia verla a ella de esa forma. —¿Qué tal las naucias? —me pregunta curiosa, desviando su mirada repentina veces de mis ojos hacia mi estomago que aún me hacía pasar por desapaercibida.

—Son terribles. —admito.

—¿Y los antojos?

—De esos tiene muchos. —Charles llego a un lado mío a delatarme, aprovechando también a saludar a su madre.

—¿Que tu no eres ese que compra un frasco de helado también para ti? —lo delató de regreso.

El se encoje de hombros con cierta sonrisa nerviosa. —No voy a dejar atras a mi novia, ¿o si? —tanto su madre como yo nos carcajeamos.

authors words

OKAY pero Carlitos y calamarcin siendo beffis desde el momento uno.

MHMM disfruten del pequeñito maratón. Así como también en los próximos días intentaré estar actualizando más y con suerte terminar la historia (prepárense para el final)

BTW.. ¿que opinan sobre los livery's de este año? la verdad que McLaren me dejó a deber mucho [cry] y RedBull... mhm btw Mercedes en black era again [in love] y los tifosi este es su año 🫡

AHORA SI CHAO

MENTIRA JEJE, ¿que tal San Valentín? el mío hermoso empezando a las 4 am con los tifosi y finalizando con mi única cita del día... mi sesión con el psicólogo de 2 hrs 😍

YA BAI