Todos siguieron el rastro de huellas que dejó mama dinosaurio al llevarse a sus crías y a Sid. Las huellas los condujeron hasta una cueva subterránea de hielo. Manny echó un vistazo al interior. Sid debe de estar ahí abajo.

Crash:Bueno, está muerto.

Eddie:Que penita.

Crash:Le echaremos de menos. (Rodeó a su hermano con su brazo mientras Eddie le hacía a Sid el gesto de "paz")

Wendy: (Entrecerrando los ojos, los agarraste por el cuello, deteniéndolos) Oh no, no tan deprisa.

Manny:Ok, yo me encargo de esto. (Te mira) Wendy, llévate a Ellie, Crash y Eddie al poblado.

Ellie:Ya, que te lo has creído. (Se burló y empezó a caminar dentro de la cueva)

Manny:¿Ellie, has visto ese bicho? Es muy peligroso.

Ellie:Uy que viento hace aquí. (Dijo sarcástica)

Manny te miró. Con una leve sonrisa te encogiste de hombros antes de salir corriendo para alcanzar a Ellie.

La cueva era mucho más grande de lo que parecía. Todo estaba helado y la única vida vegetal que se podía ver eran las raíces de las otras plantas. El esqueleto de un dinosaurio gigante conectaba ambas cornisas, lo único que mantenían al esqueleto apoyado eran las enredaderas que colgaban del techo.

Manny:Oh no, no, no. Esto no me gusta nada. (Murmuró preocupado al ver el esqueleto) ¡Ellie! ¡Ellie espera! (La llamó cuando ella comenzó a cruzar mientras tú, Crash y Eddie tomaban la delantera) Mira si sientes algo, incluso si no es nada, dímelo y nos vamos de aquí.

Ellie: (Se rió de la naturaleza protectora de Manny) De acuerdo.

Manny:Y necesitaremos un código, algo que diga 'que viene el bebé'. (Dijo mientras colocaba una piedra frente a ella para que pudiera bajar)

Ellie: (Fingió pensar) ¿Qué tal '¡Aaahh que viene el bebé!'? ¿Qué te parece?

Manny: (Rechazó la idea) No, es demasiado largo. Debe ser algo corto y contundente como...Melocotón.

Ellie:¿Melocotón? (Preguntó incrédula) 

Manny:Me gusta el melocotón. Es dulce, redondo y difuso, como tú. (Explicó con dulzura)

Pusiste una pata sobre tu boca para mantener a raya tus risas mientras caminabas más adelante.

Un ruido sordo resonó en la cueva. Crash y Eddie gritaron y cada uno abrazó uno de sus brazos con miedo mientras sus orejas caían y sus ojos se abrían con aprensión. Una luz se mostraba al final de la cueva. Manny advirtió que se mantuvieran cerca, Crash y Eddie se subieron a la espalda de Ellie mientras tú te subías a la espalda de Manny. La luz se hizo más brillante a medida que se acercaban y muy pronto todos salieron de la cueva. Sin embargo, ninguno de ustedes estaba preparado para lo que había al otro lado.

Todo estaba cubierto de una exuberante vegetación verde. Árboles altos y una variedad de plantas exóticas cubrían hasta donde alcanzaba la vista. Las cascadas se elevaban a gran altura, casi hasta el techo donde debería haber estado el cielo, y derramaban agua espumosa. Pero lo que realmente los sorprendió fueron los dinosaurios. Resulta que mama dinosaurio no era la única especie extinta que andaba suelta. Otros dinosaurios deambulaban por todas partes. Sus ojos se abrieron ante tal belleza y la maravilla de su nuevo entorno.

Crash:¿Vosotros estáis soñando lo mismo que yo? (Preguntó tontamente) 

Ellie:Hemos estado viviendo encima de otro mundo y ni siquiera lo sabíamos.

El momento sereno no duró mucho. Pronto fue interrumpido por un fuerte estruendo. Todos gritaron cuando una cola gigante con una bola huesuda con púas en el extremo aterrizó a pocos centímetros de ti y de Manny. La cola pertenecía a un dinosaurio puntiagudo que rugió enojado y levanto la cola para atacar de nuevo.

Ellie:¡A correr! (Gritó y comenzó a correr)

Tú, Crash y Eddie saltaron de la espalda de Ellie y Manny para correr por sus propios pies. El dinosaurio les rugió a los tres, asustando a Crash y a Eddie para que se hicieran los muertos. 

Wendy:¡Tienen que estar bromeando! ¡Ahora no es el momento, chicos! (Gritaste aterrorizada)

El dinosaurio levantó la cola para atacar, pero justo antes de que pudiera aplastarte, agarraste a ambas zarigüellas y saltaste fuera del camino. A este paso, no lo lograrías. Viste con miedo como el dinosaurio levantaba su cola para aplastarte de nuevo. Justo cuando estaba a punto de aplastarte, un destello de piel y colmillos te arrancó a ti y a los chicos del suelo. Crash y Eddie finalmente salieron de sus estados amortiguados y corrieron detrás de Manny y Ellie. Corriste tras ellos, pero no sin antes vislumbrar a tu salvador.

Wendy:¡Diego! (Dijiste felizmente con una gran sonrisa)

Diego: (Corrió detrás de ti después de evitar otro ataque) ¡Sigue corriendo! ¡No mires atrás! (Gritó)

Manny:¿¡Diego!? ¿¡Qué haces aquí!?

Diego:¡Turismo! (Respondió sarcásticamente mientras esquivaba otro ataque) ¡Buscando a Sid, igual que vosotros!

Manny:¡Vaya que caballeroso! (Dijo sarcástico)

Wendy:¿¡Podrían dejar de pelearse por favor!? ¡Tenemos cosas más importantes de las que preocuparnos! (Gritaste, cansada de sus peleas)

Ellie:¡Wendy tiene razón, chicos! ¡Toda ayuda es bienvenida!

Pronto, el camino que tomó le condujo a un fuerte desnivel. No había adónde ir, todos estaban acorralados. Diego enfrentó al dinosaurio con un rugido, pero retrocedió cuando el dinosaurio rugió también, revelando sus filas de dientes afilados y su enorme boca. El dinosaurio se lanzó hacia ti y a los demás, pero su cola se atascó entre dos troncos de árboles, lo que afortunadamente les dio tiempo. Ellie y tú empezaron a buscar algo, cualquier cosa que ayudarlos en esa situación.

Ellie:  (Toma algunos arbustos del suelo y se los ofreció a un dinosaurio de cuello largo que estaba cerca de ellos) ¡Aquí, muchacho! ¡Vamos bonito cómelo!

Wendy: (Sonreiste cuando el dinosaurio bajó la cabeza para comerse los arbustos, creando un tobogán perfecto) ¡Bien pensado, Ellie! (Mira hacia atrás) ¡Todos suban!

Manny:¿¡Estas loca!? ¡No nos subiremos a esa cosa! 

Wendy: (Apretaste los dientes ante su terquedad) ¿¡Prefieres este dinosaurio o ese de allí!?

De repente, el dinosaurio con púas se liberó de sus ataduras y volvió a mirarlos a todos. Ellie rápidamente dio a conocer su decisión.

Ellie:¡Señora embarazada quiere vivir! (Se deslizó por el cuello del dinosaurio, Crash y Eddie saltaron antes de que pudiera llegar lejos) ¡Yabba-dabba-doo!

Wendy:¡Nos vemos! (Hiciste un saludo de dos dedos a los chicos antes de deslizarte por el cuello del dinosaurio. Cuando este levantó su cola, doblaste las piernas y pateaste) ¡Yahooo! (Gritaste de emoción salvaje mientras volabas por el aire. Aterrizaste en la cabeza de Ellie, te deslizaste por su trompa y aterrizaste a salvo en el suelo)

Crash/Eddie:Wow, has estado increíble. (Crash y Eddie te vitorearon, prácticamente alucinando por tus habilidades acrobáticas)

Wendy: (Riéndote de sus elogios, hiciste una reverencia) Gracias jeje.

De repente, los rostros de ellos y de Ellie se tornaron temerosos. Frunciendo el ceño te diste la vuelta. Fue tu turno de asustarte. Dinosaurios comenzaron a rodearlos.

Wendy:Oh no... (Retrocediste lentamente, con los ojos muy abiertos)

En ese momento, Diego y Manny se estrellaron a tu lado.

Manny:No vuelvas a decir eso nunca mas. (Dijo, aturdido. Cuando nadie contestó, ambos notaron que los dinosaurios se acercaban lentamente, mirándolos a todos con frialdad y enojo. Todos se encogieron más juntos, creando un grupo muy unido) Me siento...canijo.

Eddie:¿Cómo crees que me siento yo?

Wendy:*Necesitamos un milagro* (Pensaste, buscando desesperadamente una salida)

Casi como para responde a tu oración silenciosa, sonó un cuerno tosco. Todos, tanto mamíferos como dinosaurios, miraban hacia los árboles. Una figura diminuta estaba parada en una rama que soplaba un cuerno improvisado. Al ver que tenía la atención de todos, saltó de la rama y se balanceó de una enredadera, gritando tonterías sin sentido. Lamentablemente, la enredadera en la que iba se rompió y salió volando a varios metro de su objetivo y estrellarse contra un árbol. Hiciste una mueca ante su grito de dolor.

El grupo de mamíferos apartó la mirada del accidente y miraron a los dinosaurios. Dichos dinosaurios volvieron su atención hacia ellos, gruñendo y acercándose una vez más. Justo cuando pensaban que toda esperanza estaba perdida, de la nada, la misma figura saltó frente al grupo de mamíferos. Instantáneamente lanzó una lluvia de bombas de bayas en cada uno de los dinosaurios, golpeando a todos en la cara con una precisión asombrosa. Lo miraste de pies a cabeza solo para darte cuenta de que la figura era de tu propia especie. 

???:¡A cubierto! (Él gritó. Todos hicieron lo que les dijo, cerraron los ojos y levantaron los brazos para protegerse la cara. Mientras los dinosaurios aún estaban distraídos, mordió el vástago de su última bomba y la arrojó al suelo, envolviéndolos a todos en humo amarillo)...