Estábamos frente al club, vimos a muchas personas entrar y salir constantemente. Un lugar muy concurrido por lo visto. Algunas de las que se retiraban apenas podían sostenerse por sí mismo, y ni hablar de las otras que expulsaban todo lo que ingirieron allá dentro. Entendí con mucha razón el por qué jamás he sido fanática de este tipo de establecimiento. Gire mi rostro hacia mi amiga con una mueca de desagrado por el lugar.

- Vamos sunhee –paso su brazo por mi hombro como una forma de evitar que huyera-. No esta tan mal. Ven entremos.

- Lo diré una última vez –dije mientras nos aproximábamos a la entrada-. Desteto estos lugares.

Estando adentro no nos tomó más de diez minutos dar con hoseok. Pero mi sorpresa fue ver a yoongi sentando en la misma mesa. Él al igual que yo, no nos gustan los clubes, aunque siento que hoseok se esforzó mucho para yoongi viniera.

- ¡llegaron! –exclamó hoseok teniéndonos ya en frente. Una risita se me escapó cuando observe la cara que puso al ver a minnie. Eran tan tiernos juntos-. Minnie...h-hola.

- Hola hoseok –le dijo con tanta timidez que se me era imposible no querer abrazarla y protegerla.

- Por favor siéntense –nos dice yoongi. Hicimos caso y nos sentamos. Yo me senté al lado de él y minnie al lado de hoseok.

- Pensé que no eras de venir a estos lugares –le digo a yoongi. Este deja la bebida en la mesa y se dedica a mirarme con una ceja arqueada-. ¿Qué? ¿Por qué me miras así?

- Vine porque el tonto que está ahí –señaló a hoseok-. Me estuvo insistiendo toda la bendita noche en que viniera. Llega a ser muy exasperante cuando se lo propone.

- Y tú como buen amigo terminaste aceptando –rodó los ojos y le di un pequeño empujón con el hombro y este soltó una pequeña risa. Es adorable cuando ríe.

- Me imagino que te pasó lo mismo con minnie.

- Tienes toda la razón. Ella sabe cómo convencerme.

Era muy fácil hablar con yoongi por muy increíble que parezca. Pasaron varias horas y la conversación iba de maravilla, hasta que llegó un punto en el que mi cuerpo se tensó y los nervios florecieron. Y eso yoongi lo captó enseguida. Jimin había llegado a nuestra mesa y hoseok lo recibió con un fuerte abrazo, como si fuera un amigo de toda la vida. Minnie, yoongi y yo nos miramos entre nosotros al ver aquello. Jimin al percatarse que en realidad ellos no eran los únicos, puso la misma expresión de confusión que nosotros.

- Déjenme presentarle a mi mejor amigo – ¿¡mejores amigos!? Quería morirme ahí mismo-. Park jimin, ya sé que lo conocen porque es el encargado de la nueva escuela, pero vean esto como otra manera de conocerlo mejor –si hoseok supiera que no hace falta eso, que en realidad lo conozco muy bien. De seguro se quedaría estático en su lugar.

- Vaya suerte la tuya –escuche decir a yoongi por lo bajo.

***

Eran casi las tres de la mañana, continuaba como podía la conversación con yoongi. En cambio no paraba de mirar a jimin, quien hablaba con hoseok sin prestarle el mínimo atención a las personas a su alrededor. Eso no me molesta, para nada. Creo que es mejor así. Sólo he visto que con la única persona con las que ha intercambiado palabras de la mesa es minnie. Observándolos mejor, noté serio a hoseok, y a jimin intentar no cerrar sus parpados. Ese par estaban ebrios.

- Actúa normal –yoongi me susurró en el oído. Esa repentina acción me sobresaltó. De los chicos él era el único consciente-. El rubio no deja de mirarnos. Y pareciera que lo desvistiera con los ojos sunhee.

- Estoy actuando normal –me llevo a la botella de soju a los labios-. Y no lo estoy desvistiendo con los ojos. Tú actúa normal.

- Lo estoy haciendo –sonrió ladinamente. Tonto. Estoy segura que se burla de mi estado. Por comprobar lo que dice, volteo hacia jimin y este inmediatamente mira hacia otro lado en cuanto pongo mis ojos sobre él.

- Sunhee acompáñame al baño por favor –minnie se para de su asiento y viene hasta a mí.

- Claro nena –me dispongo hacer lo mismo-. Yo también te iba a pedir lo mismo.

- ¡sunhee! –gritó un chico frenándonos a nosotras y llamando la atención de los chicos. Forcé mi vista porque las luces neón del club no dejaban que vieran con claridad al dueño de esa voz. Basto con tan solo tenerlo a unos pequeños centímetros de mí para que una gran sonrisa apareciera en mi rostro.

- ¡jungkook! –fui hasta él y le di un abrazo. Jungkook es el chico con que tuve una relación amorosa hace tiempo atrás. Nuestra relación fue muy linda todo el tiempo que estuvimos juntos, él mismo se encargaba de que cada día fuera de esa manera. Jungkook es un chico increíble, debo agradecerle muchas cosas y sobre todo el hecho de haber comprendido que no pude enamorarme de él. Jungkook me deseo lo mejor en el momento en que le dije que no podía seguir con esa relación-. Estoy bien.

- Estas increíble –me dio vuelta teniéndome aun abrazada. Noté que estaba algo ebrio pero no me importó. Tenía tiempo sin verlo.

- Veo que también estas increíble.

- Últimamente he estado practicando boxeo. Así que ya sabes, si necesitas que alguien te proteja solo debes llamarme –me guiño el ojo. Me eché reír aunque una tos bien fingida nos hizo que giráramos a ver al causante. Si, era jimin. Pero, jungkook prefirió continuar-. ¿Qué haces por aquí?

- Vine con unos amigos –jungkook de nuevo volteo hacia la mesa y saludó por educación-. Oye espérame aquí, minnie y yo ya volvemos enseguida.

- Te esperare el resto de mi vida si es necesario –me dio un beso en la mejilla. Mire a jimin un momento y vi como sus nudillo estaban blanco de estar sujetando la botella de soju con fuerza. No le agradó para nada que jungkook hiciera eso-. Oh minnie –soltó un silbido-. No te reconocí, estás sensacional.

Minnie ríe levemente ante el comentario de jungkook, ambas empezamos a buscar el baño, tuvimos que subir unas escaleras para encontrarlo. Nos adentramos en el y minnie entró en el primer cubículo mientras que la esperaba afuera. Me miré en el espejo, y agradecí estar aún presentable, nada más retoqué la pintura en mis labios y aproveche de acomodar mi cabello.

- Me cae bien –minnie salió del cubículo y vino hasta el lavamanos y abrió la llave-. Es un buen chico.

- Sí que lo es –la vi bostezar y eso me contagió. Está cansada, y yo también-. Creo que es mejor despedirnos de los chicos e irnos.

- Concuerdo totalmente. Oye, hace tiempo que no veíamos a jungkook.

- Creo que no lo vemos hace cuatro años –formo una "o" con mis labios después de sacar la cuenta-. Es mucho tiempo. Aun así me alegro verlo.

- A mí también –asintió-. Bien, ya es hora de ir casa.

Salimos del baño y bajamos la escalera, las personas a nuestro alrededor parecían estar agitadas, en realidad todos estaban agitados. Muchos iban corriendo a un lugar específico del club. Parecía suceder algo.

- ¿Qué estará pasando? –Minnie me toma del brazo y nos apresuramos a bajar rápidamente las escaleras cuando notamos a la multitud cerca de nuestra mesa-. Vamos rápido sunhee, no me gusta lo que está sucediendo.

Pasamos como pudimos entre todas esas personas y llegamos a la mesa. Minnie se llevó una mano a la boca y mi corazón se aceleró por presenciar aquello. Los chicos se estaban peleando. Jimin con jungkook, hoseok y yoongi con otro par de chicos que no conocíamos. Hubieron muchos tratando de separarlos pero sin éxito. Ellos no se detenían por ningún motivo. Y todo empeoró en cuanto la policía llegó al club y se los llevaron.