Hipo después de ponerse las hierbas que le ayudarían a sanar sus golpes durmió las horas que aun restaban de la noche, hasta despertar en la mañana siguiente estirándose un poco y tomo fuerzas para levantarse e irse a ver a Bocón.

- ¿A dónde crees que vas? -pregunta el Furia Nocturna en su forma semi dragon y humana mirándolo fijamente- ¿No piensas irte así verdad? -se acerca preocupado a él-

- así es como quedamos, visito a Bocón por las mañanas y el resto de la tarde junto con la noche estoy contigo -le miró de reojo los Terrible Terror estaban a su lado al parecer queriendo acompañarlo- además mira ellos me cuidarán- señaló a ambos dragones pequeños que estaban a su lado-

-lo piensa detalladamente y luego suspira- esta bien, pero si te vuelven a hacer dañó los dejaré sin la posibilidad de volver a caminar otra vez en su vida -amenazó firme y enojado, a lo cual Hipo asintió para irse por el hueco seguido de los dos Terrible Terror-

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Los dos Terrible Terror al parecer tampoco confiaban en que el pequeño sea lo que sea que venía de la aldea de los Vikingos esas criaturas salvajes y bárbaras regresara por lo tanto decidieron seguirlo poniéndose en cada hombro de este y vigilar mirando a todos lados con una energía que no parecía común en otros dragones pero al parecer si en ellos.

-¿Realmente es buena idea de que lo dejemos volver? -pregunta la hembra mirando a su pareja-

-asiente el otro- él quiere ir, no se porqué pero quiere ir, tal vez sea para buscar algo de comer -pasó su lengua por su hocico y su ojo- si es así debemos cuidarlo, se ve que el no es fuerte o que tenga algún método para defenderse -le mira igual-

-¡¡HIPOOO ¿DÓNDE ESTÁS MUCHACHOOO?!! -ése gritó los alertó a ambos haciendo que por instinto y porque querían ponerse en posición de ataque-

-tranquilos ambos- escucharon la voz de ese ser, era tranquilizador y lograba de que estuvieran calmados- es solo Bocón -escucharon su ruido que provenía de lo que ellos creían como un hocico más pequeño al de ellos- no nos hará daño -sintieron que el humano siguió caminando, vieron al frente ¡Un vikingo! El ser que tenían en el centró estaba en peligro- ya ya tranquilos

-¡Hipo¡ ¡Oh gracias a Odin que estas bien chico! -le rodeó con lo que los humanos llamaban brazos, lo empezaron a olfatear y se dieron cuenta de que sacaba un aroma que significaba entre ellos alivió-

-al parecer estaba preocupado por el- miraba atentamente al vikingo, le asombraba que uno de esos salvajes pudiera sentir tales cosas-

-tal vez sea su cría- ambos miraron a los dos y negaron-

-posiblemente él lo cuide-

-si seguro, ya que no se parecen en nada y éste humano no se parece en nada a un vikingo-

-¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Te rompiste algo? ¿Se te olvidó algo? ¿Te sangra algún lado? ¿Te sientes irte de tu cuerpo? -escucharon muchos ruidos que apenas y podían conprender venir del más grande- dime y haré que esos irresponsables trabajen para mi el resto de su vida

-tranquilo Bocón, no me duele nada, no me e roto nada, tampoco se me olvidó algo, no me sale sangre como vez y aun no me quiero ir de mi cuerpo- notaron algo de nerviosismo en la voz al parecer se puso así por lo rápido de los sonidos del otro-

-vieron que saco aire y olieron de que estaba aliviado, era como ver a una cría a salvo después de ir por un momento a buscar algo de comer- ¿Y ésos Terrible Terror? -un gancho los señaló y gruñeron al ver éso-

-ellos estaban cuándo desperté al fondo de un acantilado, me dieron de comer e intentaron darme calor, ahora vienen conmigo a la aldea para cuidarme-

-fascinante- notaron al vikingo mirarlos hasta que puso una cara rara como si tuviera hambre- ¿Ese tal Furia Nocturna no digo que te cuidaría? -olieron enojó pero no exactamente dirigido hacía ellos era a alguien más-

-él si me cuidaba solo, que salí de ése claro para atender el ya sabes llamado de la naturaleza algo lejos de ese lugar y cuando terminé escuché a los chicos, corrí pero me alcanzaron, me golpearon y me tiraron, creó que hubiera muerto si no fuera por el Furia Nocturna que me atrapó unos pocos segundos antes de caer- escucharon atentamente apenas y comprendían pero si entendían, puesto ellos estuvieron hay-

-santo Thor, Hipo casi mueres- se veía entre asombrado y enojado- tranquilo que yo mismo me encargó de poner en raya a ésos chicos -le dio un pequeño golpe pero al ver que no era par lastimarlo lo dejaron pasar-

-no es necesario Bocón- vieron cómo el vikingo más grande empezó a caminar llevándolo sentado en su hombro- y tampoco era necesario esto

-estas lastimado Hipo, así que es mejor que no hagas muchos esfuerzos- ambos volaron para sentarse en lo que los vikingos llamaban casco- vaya parece que ellos quieren aprovechar mi oferta de llevar

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Unos jóvenes estaban en la herrería limpiando armas a regañadientes, insultando de vez en cuando a los gemelos ya que si no fuera por ellos se hubieran salido con la suya.

-todo esto es su culpa- dijo Patán puliendo una espada mirando enojado a los gemelos-

-si, si no fuera por sus estupideces no estaríamos aquí-

-no me culpes a mi Astrid que fue mi estúpida hermana a quién se le soltó la lengua-

-¡No hubiera sido así, si no hubieras dicho de qué tu nos salvaste del oso!

-¡Pero así lo recuerdo yo!

-¡¿Cómo lo sabes estabas desmayado?!

-¡Eso no pasó!- los paro Astrid ya arta de su discusión- ¡Sólo hagamos esto de una buena vez! Mientras más pronto terminemos más pronto volvemos a entrenar- golpeo un poco la mesa para parecer más intimidante de lo que era, estaba más enojada y de lo poco que usaba de la razón se iva, sólo podía culpar a una persona de toda su desgracia y ese era Hipo.

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La autora original de esta historia es ASL17alvarez yo solamente la continuó.

Esperó les haya gustado, miren mis otras historias si quieren y sin más hasta la próxima.