Miraba como el submarino avanzaba por el agua con los chicos controlando este. Law se había sentado a mi lado pero no dijo nada hasta el momento, solo cerró los ojos y se puso pensativo. Aparté la mirada hacia Kiku y Kawamatsu, que miraban por una de las ventanillas, ella notándose preocupada por Luffy y los demás.

-Si usamos a Luffytaro como carnada y le acaba ocurriendo algo...

-No tiene sentido preocuparse por ello. Esos idiotas no morirán con facilidad -responde Law interrumpiéndola.

-Confías mucho en tu amigo -comenta Kawamatsu sonriendo junto a ella pero haciendo molestar a Law.

-¡No es mi amigo! -sentencia.

-Sí, sí -le di palmadas en el sombrero haciéndolo chasquear la lengua.

-¡Es en serio! -me fulmina causándome diversión.

Volví la mirada hacia los demás mientras seguíamos avanzando. Cerré los ojos para descansar la vista unos minutos en lo que llegábamos o pasaba algo.

-Hay una corriente fuerte adelante -alerta Bepo haciéndome abrir los ojos de nuevo.

-Es un peligro, pero ¿nos lanzamos hacia ella? -pregunta Penguin.

-Sí. ¡No metan la pata! -responde Law.

-¡Entendido! ¡Avanzaremos a toda velocidad!

El submarino se mete en ducha corriente empezando a temblar por los golpes recibidos.

-¡No teman, sigan recto! -habla Law. Penguin ajusta la compresión consiguiendo que el submarino vuelva a estabilizarse- ¡Perfecto, esto va bien!

-¡Sí, capitán! -sonríen los demás.

Ellos continúan con su labor pero era inevitable sentir otro golpe más que intentó desestabilizar el barco. Escuché una llamada por un Den Den Mushi, era Nekomamushi llamando a Inuarashi. Este solo recibió el informe de lo que haríamos y no espera más para cortar.

-Tan precipitado como siempre. Espero que llegue a tiempo para el asedio.

-No vi a Neko desde que nos separamos, pero al igual que Inu seguro que ya es muy grande -comenta Kiku.

-Maldito Neko... Más le vale venir cuanto antes. Llegaremos pronto a la entrada trasera.

-No creo que llegue a tiempo. Debido a la corriente, los barcos normales solo pueden ir por el frente -comenta Law seguro de ello.

Suspiré inclinando la cabeza hacia atrás hasta reposarla contra la pared y pensar en todo lo que estaba pasando. Enfrentar a Kaido ya es algo por lo cual temer, pero al recordar que Big Mom se había aliado con él... Me hace dudar mucho sobre la supervivencia de todos. ¿Estarán bien los Akazaya cuando se enfrenten a ambos emperadores?

-¿Qué pasa? Te ves preocupada -Law vuelve a sentarse a un lado.

-No, no es nada -respondí volteando la mirada hacia él-. Solo pensaba en Luffy y los demás. Espero que no estén metiendo tanto la pata.

No responde y solo vuelve la mirada al frente al igual que yo. Suspiré de nuevo para calmar mis emociones, bajé la mirada a mis manos sobre mi regazo, ¿estaba temblando? ¿En qué momento...? No, eso no importa ahora. Apreté la mano en un puño, pero entonces abrí los ojos de par en par al sentir que me obligaban a inclinarme, hasta recostar mi cabeza en el hombro de Law. Miré mi hombro, su mano estaba apoyada en el.

-Tsk... Mientes fatal.

Lo miré aún sorprendida por unos segundos antes de sonreír de lado y aprovechar este momento. Me acomodé a su lado y él lo permitió, era algo sorprendente para mí, pero agradable a la vez.

-Eso o... me conoces muy bien -respondí haciéndolo apartar la mirada-. Creo que sí es eso.

-No eres tan difícil de descifrar.

-Quizás, pero de todas formas te tomaste el tiempo para hacerlo, ¿no? -chasqueó la lengua haciéndome reír-. Igual eres fácil de descifrar, Law... a veces.

No dijimos nada más hasta que estuvimos cerca de llegar a la puerta trasera de la fortaleza de Kaido. Nos levantamos para prepararnos pero sí se estaba complicando el camino hacia aquella zona. El submarino comenzaba a tener más desestabilidad y choques por las fuertes corrientes. Me equilibré en mi lugar pero aún así me sobresalté al sentir el brazo de Law rodear mi cintura. ¡Contrólate! ¡Contrólate! No es momento para sonrojarse.

-Se están generando unas fuertes corrientes... -comentó Law.

-Sí.

El submarino se ve atrapado por estas, nos tambaleamos bastante. Me aferré al costado de Law quien igualmente se aferra a mi cintura. A este punto no sabía si me sujetaba para buscar equilibrio o para que yo no me cayera. Quisiera creer que es la segunda opción.

-Si así está abajo, me imagino que arriba estará igual -comenté.

-Así es. Cuando emerjamos, solo habrá una oportunidad.

-¡Entendido!

-Contamos contigo, Torao.

-¡Bepo, Shachi, Penguin! ¿Están listos? -cuestiona Law.

-¡Sí, Capitán!

-¿Y tú? -me mira en ese momento. Asentí en respuesta y volví la vista al frente.

-Por supuesto.

-¡Lleguemos hasta Kaido! -se emociona Raizo.

El submarino avanza, los sistemas ya estaban listos para emerger en cualquier momento. Nos preparamos y Law da la orden de emerger, apenas salimos a la superficie corrimos afuera notando que estaba nevando. Law usa su habilidad creando un domo enorme y asiente hacia mí, lancé una cuchilla de sangre que destrozó una montaña para crear rocas por las cuales intercambiarnos hasta estar frente a la entrada trasera de la fortaleza.

-¡Estamos aquí!

-Por fin llegamos a Onigashima.

-Ya veo... Hay dos entradas. Kaido estará ahí arriba -menciona Law observando la fortaleza.

Todos estaban emocionados por esta lucha, ya querían abrir Wano para cumplir con el deseo de Oden. Pero es realmente más fácil decirlo que hacerlo.

-¿Hm? -levanté la mirada llamando la atención de algunos.

-¿Qué pasa? -pregunta Law.

-Viene alguien -avisé.

Fue cuando los demás igualmente lo pudieron sentir. Empezamos a escuchar voces hasta que dos sujetos caen del cielo, uno en pie y el otro de cabeza. Aunque faltaba el otro que vino con ellos.

-Rayos... Fue terrible.

-Gato... gigante -sonreí viendo a Nekomamushi y lo esponjado que estaba.

-¡Marco! ¿Lo trajiste tú? -escuché a Inuarashi, así que concentré mi atención en aquel hombre. Marco el Fénix, lo reconozco por ser un miembro importante de la tripulación de Barbablanca, su habilidad es impresionante y además...

-Es algo lindo... -cubrí mi boca distraída con mis pensamientos.

-Oye.

-¿Eh? -miré a Law a mi lado- ¿Lo dije en voz alta?

Me fulmina con la mirada mientras yo reía nerviosa y me disculpaba caminando hasta alejarme un poco de él. Lo escuché quejarse al chasquear la lengua de nuevo. Miré a los demás que mantenían la vista en la entrada de la fortaleza, pero entonces Law se da vuelta para empezar a caminar en dirección contraria.

-¿Eh? Capitán, ¿no lucharemos a su lado? -pregunta Bepo.

-Yo tengo mi propio objetivo. Vengan conmigo.

-Sí, capitán.

Me di vuelta hacia él y caminé hasta colocarme a su lado. Nos detuvimos cuando Raizo lo llamó.

-Gracias por todo. Te deseo buena suerte.

Law no responde y sigue caminando, pero Bepo y los demás sí les desean buena suerte antes de seguirnos. Miré a Law de reojo un momento, recordando nuestra conversación de hace un tiempo junto a Robin, sobre la D de su nombre secreto. No es posible para mí no sentir interés sobre ese tema, también quería averiguar lo que significaba.

De todas formas, seguimos al capitán hasta adentro de la fortaleza, encontrándonos con algunos samuráis y subordinados de Kaido de los que Law se encargó fácilmente para seguir avanzando, aunque de los siguientes me encargué yo lanzando lanzas de sangre hasta atravesar el pecho de cada uno y absorber toda su sangre.