Se escuchaba una alarma de alerta por todo el palacio. Doflamingo miraba el video de Luffy peleando en el Coliseo mientras que en sus Den Den Mushi sus guardias afirmaban ver a Luffy, Zoro y Kin'emon invadiendo el palacio. Sonreí de lado sintiendo alivio.

-¡¿Qué demonios está pasando?! -pregunta Doflamingo furioso, incluso pareciera que sus venas de la frente iban a explotar.

-Jm... ¿Crees que podrías detener a Luffy? -pregunté llamando la atención de Doflamingo-. No tienes ni idea. Quizás no lo parezca... pero ese chico tiene una gran vitalidad que hasta a mí me deja asombrada.

-¡¿Qué dices?! -Doflamingo aprieta los dientes mientras se acerca.

-Y no solo él. Toda su tripulación es así. Todos los que lo siguen tienen una vitalidad mucho más poderosa que cualquiera... inclusive la tuya.

-¡Cállate!

Recibí un golpe que ya me lo esperaba, me hizo caer a un lado en el suelo golpeando mi cabeza. Sonreí aún así y miré a Doflamingo a pesar de sentir la sangre cayendo por el golpe.

-Solo tengo que esperar y observar... cómo tu reino caerá y tú te volverás el rey de la nada. Ya verás... que Corazón será vengado y Law finalmente tendrá la libertad que tanto quiso para él.

Doflamingo pisa mi cabeza hasta quebrar el suelo. Escupí la sangre que molestaba en mi boca pero no dejé de sonreír y miré hacia el video donde se veía al supuesto Luffy en el Coliseo. Doflamingo se aparta de mí y yo me senté de nuevo apoyando mi cabeza en el trono y me limpié la mejilla con el hombro.

-Oye... -abrí los ojos de par en par-. No vuelvas a tocar a mi vicecapitana. Idiota.

Me di vuelta para ver a Law finalmente despierto y fulminando con la mirada a Doflamingo quien sonríe y se sienta en el asiento frente a nosotros.

-Así que despertaste... Quédate tranquilo, si cooperas conmigo no necesitaré hacerlo -volví la mirada al frente para ver a Doflamingo-. Pensé que solo querían destruir la fábrica de SMILE. ¿Por qué los Sombrero de Paja trabajan con las personas pequeñas de Green Bit? No actúan por algún capricho.

-¿Personas pequeñas? -tanto Law como yo estábamos confundidos.

-¿Cómo se metieron am subterráneo? ¿Por qué quieren atacar a Sugar? No sé porqué, pero siguen haciendo cosas que me causan mucho pesar. Si no es una coincidencia, eso significa... que saben lo que está detrás de la oscuridad de este país.

Ambos nos quedamos en silencio pero entonces me sorprende que Baby 5 se acercara como si nada a golpear la cabeza de Law.

-¡Responde! ¡El joven amo te hizo una pregunta, Law!

Solo faltó una mirada fulminante para que ella se alejara a llorarle a Buffalo.

-Ya te lo dije. Ya no tenemos nada que ver con ellos, nuestra alianza terminó. No sé de qué estás hablando -responde Law.

-¿Tratas de engañarme? ¿O es verdad que no lo sabes? -la sonrisa de Doflamingo me causó escalofríos-. Te ayudaré a refrescarte la memoria.

Abrí los ojos de par en par cuando mi cuerpo se levanta hasta dejar de tocar el suelo, unos hilos se ajustan a mí hasta dejarme sin respiración.

-¡Detente, Doflamingo!

-Te dije que si cooperabas conmigo no haría faltar volver a lastimarla, ¿no?

Apretó el agarre en los hilos haciendo que cortaran mi piel y yo soltara un grito ahogado mientras apretaba mis puños. No quería hacerlo, no quería que me usara de esta forma.

-¡Basta!

-Responde... Law. ¿Es verdad o no?

Cerré los ojos con fuerza sin poder aguantar mucho más, hasta que dejé escapar el grito que tanto estaba conteniendo mientras sentía como si mi cuerpo fuera a cortarse por completo en varios pedazos.

-¡Te dije que no lo sé! ¡Detente de una vez!

Y lo hizo.
Mi cuerpo cayó al suelo finalmente libre de los hilos, respiré con esfuerzo y aguanté el terrible ardor que sentía. Doflamingo se para frente a mí y me da una patada para lanzarme donde Law de nuevo. Me encogí en mi lugar por el dolor pero traté de calmarme.

-________...

-Estoy bien -solté suspirando-. En serio...

Miramos a Doflamingo en silencio, él nos ve a nosotros antes de suspirar con pesar.

-Si Violet estuviera con nosotros, podría decirnos lo que piensas fácilmente. O tam vez... -Doflamingo mira al hombre al otro lado-. Tú no los intigaste, ¿verdad, rey Riku? Los Tontatta te sirvieron una vez.

¿Un rey?
Lo observé detenidamente mientra este se mantenía en silencio hasta que Doflamingo recibe informes de lo que estaba ocurriendo en el palacio.
Miré a Law justo cuando el Den Den Mushi de Doflamingo empezaba sonar.

-¡Su..Sugar se...! ¡Lo siento, Doffy! -se escucha una voz llorando.

-¡No grites tanto, Trébol! -dice Buffalo.

-¿Qué le pasó a Sugar? -pregunta Doflamingo.

-Se...Se... ¡Se desmayó! ¡Se desmayó!

Me sorprendí apenas vi que la sonrisa de Doflamingo se borraba y sudaba frío. ¿Sugar? ¿Quién es? Al parecer alguien importante...

-¡¿Qué clase de broma es esta?!

-¡Los sirvientes que acumulamos durante diez años están volviendo a ser humanos! ¡La maldición de la fruta Hobby Hobby está desapareciendo!

¿Humanos?
¿Los juguetes? Entonces... ¡¿esas cosas antes eran humanos?! ¡¿Qué clase de barbaridad es esta?!

-¡Joven amo, mire el coliseo! -advierte Buffalo haciéndose que Doflamingo se levanta de inmediato a mirar.

Había mucho brillo, todos los juguetes empezaron a transformarse en humanos de nuevo. Volví a mirar a Law quien estaba visiblemente sorprendido al igual que todos.
Muchos Den De Mushi que traía uno de los hombres de Doflamingo no dejaban de sonar, todos con nuevos problemas. Sonreí incrédula por todo lo que los Sombrero de Paja pueden lograr.

-¡Joven amo!

Abrió la ventana para ver todo el desastre que se había provocado. Temblaba de enfado pero eso solo me alegraba a mí.

-¡Malditos imbéciles!

La ventana de atrás de repente se abre y entra un hombre con solo una pierna. Este sostiene su espada con fuerza y se dirige hacia Doflamingo.

-¡Tú eres... Kyros! -grita el rey Riku.

-¡Sí! ¡Lamento haberlo hecho esperar diez años! ¡Vine a salvarlo!

Ese hombre increíblemente corta la cabeza de Doflamingo de un espadazo. Todos nos vimos completamente sorprendidos. Abrí los ojos de par en par sin poder pronunciar palabra.

-¡Estuvimos sufriendo por diez años!

Todos gritan por Doflamingo.
Kyros amenaza a buffalo con su espada y con revelar los secretos de Doflamingo.

-¡Rescatemos a Torao y ______!

-¿Luffy? -miré hacia atrás sorprendida de nuevo por verlo aquí con una mujer.

-¡________! ¡Torao! ¡Vinimos a salvarlos! ¡Me alegra que sigan vivos! -Luffy saluda con una sonrisa.

-¡No tienes nada que hacer aquí, Sombrero de Paja! ¡¿Qué pasó con la fábrica?! ¡¿La destruyeron?! -pregunta Law.

Pero aquella mujer le entrega unas llaves a Luffy. Él se acerca a nosotros rápidamente ignorando a otro de la familia de Doflamingo.

-¡Esperen un momento! ¡Enseguida los rescato! -dice Luffy al estar junto a nosotros.

-Agradezco que te tomaras las molestias, pero nuestra alianza ya se acabó -responde Law- ¡Lárgate de aquí!

-Espera, espera. Primero que nos quite esto, ¿sí? Ya después haces tu esfuerzo de terminar con Luffy, cosa que no creo que pase de todos modos -comenté.

-Eso eso. Qué egoísta eres ¡Esas cosas las decido yo, tú cierra la boca! -dice Luffy haciéndome reír ampliamente aunque lo hubiera intentado contener.

-¡¿Quién es el egoísta entonces?!

-¡Rápido, abre las esposas! -dijimos la mujer que la habían llamado Violet.

-Ah, cierto.

Luffy se acerca a Law para intentar meter la llave en sus esposas aunque temblaba al hacerlo.

-Ahora que se acabó la alianza, volveremos a ser enemigos. ¡Si me liberas, te mataré...!

-¡Las amenazas para después! -solté-. Estoy empezando a marearme...

Me tiré al suelo, pues la sangre escapaba de mi cuerpo por todos lados y el golpe en mi cabeza tampoco ayudaba. Quería apresurarme en usar mi poder para curarme.

-Me cuesta abrirlas porque no puedo tocar la Roca de Mar -menciona Luffy mientras Violet lo anima y Law se molesta por ser ignorado- ¡No puedo! ¡Hazlo tú!

-¡No puedo! ¡Yo también comí Fruta del Diablo!

Abrí los ojos de par en par cuando se escuchó una risa conocida. Me senté de nuevo para observar hacia el cuerpo dr Doflamingo pero entonces algo nos golpea desde el suelo tirándonos a Law, Violet, Luffy y yo.

-¡El tipo de piedra! -advierte Luffy.

-¡Pica! -dice Violet.

-Nunca pensé que me atacarían así.

-¡Mingo está vivo!

Me intenté levantar por la advertencia de Luffy. Me di vuelta, acostándome de lado, para ver a Law tirado junto a mí y a los demás sorprendidos.

-Todo el país está sumido en el caos debido a que los juguetes fueron liberados y por alguna razón que desconozco, el Ejército Revolucionario también está aquí. Además, el palacio está en un estado desastroso.