Yoongi caminaba de regreso a casa junto a su mejor amigo, Jung Hoseok, un omega al igual que él y que además era su compañero de clases.

Yoongi estudiaba enfermería a diferencia de su hermano que estudiaba diseño de modas, ambos eran identicos pero a la vez muy diferentes, no solo en gustos si no también en personalidad.

Por otro lado se encontraba Yoonjin que regresaba junto a su mejor amigo Choi Soobin que también era un omega.

Ambos hermanos regresaban a casa pero por caminos diferentes, sin embargo, terminaron encontrándose debido a una situación.

―Soobin― Llamó Yoonjin a su mejor amigo.

―¿Qué sucede YoonYoon?― Preguntó Soobin mirándolo.

―¿Me acompañas a comprar ropa? Porfisss― Preguntó haciendo un puchero, con lo cual sabia que nadie se podia negar a cumplirle sus caprichos.

―Esta bien, vamos― Aceptó Sanha, pues le era imposible negarse a lo que su mejor amigo le pedía, además de que él también queria comprar ropa.

―Siii― Celebró Yoonjin dando leves saltitos.

Ambos iban caminando cuando se toparon con un par de alfas, los cuales se podía notar que estaban ebrios.

―Soobin... tengo miedo― Habló bajito, solo para que el contrario lo escuchara.

―Tranquilo Yoonjin, calmate ¿si?― Pidió a lo que el mencionado asintió intentando calmarse.

―Oh, pero miren nada más que tenemos aqui― Habló uno de los Alfas que parecía ser el líder de aquel grupo.

―Si son dos lindos omegas ¿no les gustaria acompañarnos?― Preguntó su compañero.

―No gracias― Respondió Soobin sin dejar de caminar.

―¡¡No te muevas cuando te hablo!!― El alfa estaba usando su voz de mando para doblegar a ambos omegas logrando que ambos bajen la cabeza en muestra de sumisión y se acerquen a él, pero antes de que llegaran hasta el Alfa, la voz de alguién más se hizo presente.

―¡¿Quién te crees que eres para usar tu estupida voz de Alfa en mi hermano?!― La voz de Yoongi se hizo presente, haciendo que todos voltearan a verlo.

―¿Soy yo o hay dos omegas iguales?― Preguntó el alfa más grande tambaleandose hacia adelante mirando a Yoonjin y a Yoongi quién se habia posicionado a su lado.

―¡Yoongi!― Yoonjin se abrazo a su hermano, se había asustado mucho.

―Hoseok, llevalos a casa― Pidió Yoongi a su mejor amigo.

―Claro― Hoseok se acercó a ambos amigos para llevárselos de ahí pero antes miró a Yoongi. ―¿Tú no vendrás con nosotros?

―Estoy imbéciles merecen una lección― Respondió. ―Y yo con mucho gusto se los voy a dar.

―Ten cuidado, ¿si?― Pidió a lo que Yoongi asintió.

Una hora después, todos se encontraban en casa, Félix les preparó el almuerzo a sus hijos y a sus amigos algo que estos con mucho gusto.

En ese momento, Changbin ingresó a la casa sonriendo al ver la imagen de su familia reunida en la mesa, porque sí, Félix y él consideraban a Hoseok y Soobin parte de su familia.

―Buenas tardes amor― Félix se levantó de sus asiento para acercarse a su Alfa el cual estaba recargado en el marco de la puerta con una sonrisa.

―Buenas tardes, cielo― Changbin dejó un beso en los labios de su omega antes de dirigirse a sus hijos. ―Mis pequeños, ¿cómo están?¿qué tal les fue hoy día?

―Muy bien, papá― Respondió Yoongi recibiendo un asentimiento por parte de su hermano. ―Excepto por un pequeño problema pero aparte de eso todo bien.

―Me alegro, ¿y ustedes?― Miró a Hoseok y a Soobin.

―Muy bien, papá Changbin― Respondieron ambos menores al mismo tiempo provocando que el Alfa riera.

―Me alegra escuchar eso.

En otra parte de la Ciudad, un avión aterrizaba, dejando bajar a un Alfa pelinegro quién sonrió al ver a sus padres esperándolo.

JiMin pasó su mano por si cabello haciéndolo hacia atrás provocando que los mechones de su cabello volvieran a su lugar de manera rebelde sacándole algunos suspiros a los omegas que estaban en el avión y a otros que estaban esperando por sus familiares. El Alfa sonrió complacido por sus reacciones y caminó hasta donde estaban sus padres dejandose abrazar por ambos.

―Bienvenido a casa, hijo mío― Su padre Alfa lo abrazo con una sonrisa en el rostro.

―Minnie, mi bebé, por fin estás en Corea otra vez― Su padre Omega lloraba de alegría abrazándolo con fuerza.

―También me da gusto verlos de nuevo― Respondió JiMin correspondiendo el abrazo.

―Ven, vamos a casa― Baekhyun se separó de él quitándose las lágrimas de sus ojos y jalando a su hijo hasta el auto.

―Claro― Respondió dejándose jalar por su padre omega. ―Muero por probar tu comida otra vez.

La familia Park se dirigió hasta el auto del Alfa mayor quién manejó rumbo a su casa donde ayudo a su hijo a bajar sus maletas y meterlas en su habitación.

―Tu comida ya está servida cariño― Informó Baekhyun desde el comedor a su hijo que se encontraba en la sala.

―Voy ahora mismo, pa'― Respondió JiMin guardando su celular en el bolsillo de su pantalón para luego dirigirse al comedor. ―Huele delicioso― Dijo cuando olor de la comida llegó a sus fosas nasales.

Baekhyun sonrió orgulloso al escuchar las palabras de su hijo mientrás que Chanyeol aprovecho aquello para abrazar a su esposo por la cintura observando a su hijo devorar su plato de comida.

Estaban felices de tener a su hijo de regreso en casa pero tampoco olvidaban todos los problemas que JiMin había causado estando en el extranjero.

Definitivamente, su hijo necesitaba un buen regaño así como también un omega que lo haga sentar cabeza y ellos ya tenían a alguién en mente.

―Changbin, amigo mío― Chanyeol llamó a su mejor amigo.

―Chanyeol― Respondió el Alfa desde el otro lado de la línea. ―¿A que debo tu llamada?

―¿Recuerdas aquella promesa que hicimos?

―¿Cual de todas? Hemos hecho varias.

―Aquella de que si teníamos hijos y llegaban a ser Alfa y Omega, entonces los comprometeríamos, ¿la recuerdas?

―Ah, esa, si la recuerdo, ¿por qué?

―Bueno, JiMin, mi hijo, se presento como un Alfa, y si mal no recuerdo, tu hijo Yoonjin se presento como un omega, ¿verdad?

―Si, así es.

―Entonces, ¿aún estás dispuesto a cumplir con aquella promesa?― Preguntó. ―¿Comprometer a mi hijo con tu hijo?

―No lo se, tendría que consultarlo con mi esposo― Respondió no muy seguro. Su esposo y sus hijos eran lo más valioso que tenía, razón por la cual, era muy sobreprotector y celoso con ellos.

―Entonces, consulta con tu esposo y luego me dices la respuesta, ¿te parece?

―De acuerdo― Aceptó.

―Esperare tu respuesta entonces― Dijo Chanyeol con una sonrisa. ―Hablamos luego.

―Lo mismo digo, Park― Y la llamada fue cortada.

―¿Qué te dijo?― Preguntó Baekhyun que estaba detrás suyo provocando que diera un pequeño brinco, pues no lo había notado.

―Dijo que iba a hablarlo con Félix y que pronto nos daría una respuesta.

―Ojalá que acepten, Yoonjin es un chico lindo y amable, es lo que nuestro hijo necesita para sentar cabeza.

―Te agrado mucho, ¿verdad?

―Sí, sobre todo después de que me ayudo a elegir un hermoso traje para nuestro aniversario.

―¿De qué tanto hablan ustedes dos?― La voz de JiMin se escuchó a sus espaldas asustándolos.

―¡Diosa Luna, hijo!― Exclamó Baekhyun. ―Que susto nos has dado.