Sentía que el frío calaba mis huesos, un frío inundaba mi alma. Aquellas palabras que estaba escuchando me tenían al borde de un colapso.

Él mantenía la conversación con su amigo no se habían dado cuenta de que yo estaba parado escuchando.

Su amigo le preguntaba; qué si estaba en una relación a lo que él le respondió que nada serio.

¿Qué podía decir a eso? Pues la verdad era así, no había nada serio simplemente unas semanas saliendo con alguien que no quería una relación seria.

Seguía escuchando la conversación yo sé que es malo hacerlo, pero cuando iba a interrumpir algo se escuchó que me dejó sin hablar.

—Te pregunto por qué me encontré a tu ex y el quiere volver contigo dime, ¿qué vas a hacer?

—¿Mi ex? —interroga Mew algo sorprendido—. Llevamos meses separados por ende no sé qué responder a eso.

—Pero si tú tienes otra persona o estás conociendo a otra persona que yo sé que es Gulf yo creo que debería ser sincero no puede estar engañando a la otra persona si todavía tiene sentimientos por tu ex.

—Max, no es que tenga sentimiento por mi ex, pero esta otra persona me hace feliz, si es Gulf y no sé si podría partirle su corazón porque sé que me quiere y yo también se lo he dicho yo, lo quiero.

Cuando escuché aquellas palabras mi corazón saltaba de felicidad, realmente no sabía qué hacer o qué decir, pero cuando nuevamente iba a interrumpir nuevamente emprendieron la conversación.

—Mew, dime una cosa, con tantos años con tu ex, ¿serías capaz de volver con el?

—Max, no te puedo negar que aun mi corazón late por el, pero no sé si sería capaz de volver.

—¿Vez? Si estás dudando no deberías estar jugando con la otra persona, menos diciendo que lo quieres.

—Pero lo quiero, pero sí, supongo que debo de ser sincero y terminar con esto hasta que mi corazón y mi cabeza se aclaren. Yo sé que le partiré su corazón, pero tienes razón no puedo ser así.

Sentí que mi corazón se quebraba en mil pedazos, aquellas palabras que van saliendo de su boca me perforaban. Pero no puedo juzgarlo y tratar de ponerme celoso ni enojarme, pues nosotros ya habíamos establecido las reglas que no íbamos a tener nada simplemente algo liberal yo fui el tonto que se enamoró y que simplemente ahora tengo que asumir las consecuencias de mi corazón herido.

Cuando me iba a ir unas lágrimas me traicionaron me di la vuelta para irme, pero su voz me detuvo.

—Hola vecino —me saludó Mew.

Me dice y yo quedo helado.

Como pude limpié mis lágrimas y me di vuelta para sonreír, esa sonrisa tan falsa que muchas veces he tenido que dar cuando mi corazón ya está herido, pero simplemente hay que aprender a sonreír para que otros no noten tu dolor.

—Hola vecino Mew, ¿cómo estás?

Le hablaba y le respondía como si fuese desconocido, bueno supongo que en un tiempo más lo vamos a hacer.

—¿Qué te ocurre cariño? —me pregunta.

—Nada, estoy bien, solamente un poco cansado no dormí muy bien.

—Tú me estás mintiendo dime; ¿qué ocurre?, ¿por qué estás así?, ¿estuviste llorando?

Quería gritarle que; Sí. Quería gritarle que había escuchado toda la conversación que estaba sosteniendo con su amigo, pero eso no lo podía hacer, era como si fuese un chico celoso o un chico que iba a tomar posición de lo que era suyo, pero en este caso él no era mío.

—No, no estaba llorando, simplemente son lágrimas de sueño muchas veces nos pasa cuando bostezamos, ¿me puedes vender unas cosas?

—Claro que sí.

Hoy me preguntó, ¿qué iba a querer? Y yo le respondía después compré unos postres porque realmente necesitaba endulzar mi vida ante lo nuevo que iba a ocurrir seguramente a la tarde cuando él saliera de trabajar.

Cuando le pagué guardé el vuelto y él solamente me miró, ya conocí esa mirada que es cuando me quiere abrazar y dar un beso, simplemente lo hice partiendo mi corazón en dos.

—Tus labios están fríos, debes ir a abrigarte.

Si supiera que mi corazón está frío por ende mis labios ya no tienen calidez. Eso duele tanto. Ahora sé que simplemente llego guardar mi corazón en un cofre cerrarlo y tirar la llave para que nadie vuelva a entrar en él.

Trató de besarme nuevamente, pero una persona nos hizo separarnos, simplemente me di la vuelta sin siquiera querer mirarlo realmente me sentía tan herido tan dolido, pero como digo no entiendo por qué si jamás tuvimos nada serio, simplemente era yo quien estaba confundido.

Llegué a mi casa sin decir nada, subí a mi habitación diciendo que iba a ordenar, pero puse música y mis lágrimas empezaron nuevamente a brotar, un mensaje de él llegó, pero simplemente lo mire en notificaciones, siquiera lo quise abrir simplemente su mensaje era para preguntándome; “si estaba realmente bien”

No, no estoy bien para nada estoy bien, pero yo no voy a hacer al que dejen, mejor coordinarnos e ir a hablar a su casa porque estoy seguro de que aquí no podría hacerlo porque estarían todos preguntando ¿Qué pasó?

Le envío un mensaje y le digo; “Que si puedo ir a su casa más tarde con él” A lo que él me responde:—Que sí, que encantado y feliz.

Mi día era un desastre, más que tenía que pasar y verlo, siempre me sonreía me saludaba, pero pasaba de largo sonriendo falsamente nuevamente solo quería que llegara la tarde y poder ir con él y aclarar tantas cosas.

—Sé que escuchaste la conversación.

Cuando volteo era su amigo el que iba saliendo de trabajar por qué su turno termino antes y solamente lo quedo mirando y bajo la cabeza no quería responder a nada.

—Yo sé que te está doliendo y no te puedo dar palabras y consuelo, pero tienes que entender que lo que ellos tuvieron fue muy largo y tú no vas a poder cambiarlo tan rápidamente ahora si tú lo quieres lucha por él y demuéstrale que tú puedes cambiar su vida, pero si no te sientes fuerte simplemente déjalo —me dice Max caminando a mi lado.

—Yo no tengo nada que demostrar ni decir, lo nuestro fue simplemente un acuerdo de que no íbamos a tener nada serio, solamente algo abierto. Por ende no tengo nada que reclamarle ahora si él está confundido y todavía lo ama yo simplemente me haré a un lado aunque realmente me duela.

—Pensé que podías ser más fuerte, pero veo que no.

—No me puedes juzgar, soy fuerte, pero me está doliendo, tú no sabes cómo está doliendo, fueron muchos años los que estuve solo y ahora encontrar una persona había cambiado mi mundo, pero tu conversación con él me hizo pensar que yo creo que yo ya no tengo derecho a amar.

—Un chico tan hermoso como tú tiene todos los derechos de amar y que ser amado, simplemente quiero que mi amigo sea feliz y lo veo sonreír contigo, sonríe como bobo cuando mira el celular y estoy seguro de que esos mensajes son tuyos se ríe y está más contento que jamás, déjame decirte jamás lo había visto de esa forma y yo lo conozco por muchos, muchos años.

—Lo sé, él ya me contó la historia de cómo son amigos, pero creo que deberías dejarme solucionar este tema a mí no me des consejos por favor porque en estos momentos estoy apretando los dientes para no llorar.

—Si lo suyo hubiera sido mutuo acuerdo solamente para pasarlas bien no estarías así, tú estás enamorado de él por eso estás actuando así.

—¿¡Y de qué me sirve estar enamorado si él de mí no lo está?! ¡Está enamorado de su ex, tú mismo lo escuchaste todo, como él todavía tiene dudas en su corazón y yo no quiero ser la otra o no quiero estar en una relación pensando si está haciendo el amor conmigo o con el! Perdón, perdí mis estribos. No debí haberte gritado ni dicho estas cosas.

—No te preocupes todo está bien simplemente te puedo decir que haga las cosas bien, pero sé fuerte y lucha, pero como te digo mi amigo está embobado y estoy seguro de que puede ser una mejor persona gracias a ti estoy seguro de que mi amigo también te está amando puedo verlo en sus ojos y a mí jamás me va a poder engañar.

Después de aquella conversación ya no dijimos nada de nada, yo seguí emprendiendo mi camino y él el suyo me volví a sacar las lágrimas y simplemente empecé mi día como debía ser, normal.

Por la tarde.

—Todo el camino no dijiste nada, estás muy callado Gulf, ¿qué te ocurre?

—Te mentiría si te dijera nada, pero estoy seguro de que ya lo sabes.

—Sí, ya lo sé. Mi amigo me lo contó, yo sé por qué estás así y créeme que me duele verte de esa forma porque no tienes esa linda sonrisa que siempre me regalas.

—Prefiero no regalarte una sonrisa de ironía porque esa no es mi forma de ser.

Bajamos del el auto y lo cerró, entramos a la casa dejé mi bolso a un lado. Él me miraba como tratando de entender o descifrar que lo que iba a hacer o que iba a decir, me levanté del living y fui a servir la once. Él se fue a su habitación se fue a duchar y salió mientras yo ya estaba terminando de hacer todo sirviendo las cosas.

—No me gusta que estés tan serio, lamento mucho si te estoy haciendo daño.

No quise responder nada a eso, pues nuevamente apretabas mis dientes tratándote no llorar tratando de guardar mis lágrimas porque nunca he sido débil y no quiero demostrarme débil ante él y ante nadie.

—Siéntate y come, seguramente tienes hambre después de comer vamos a hablar tranquilamente.

Rompí un poco el ambiente tenso y puse a hablarle un poco de mi día le pregunté sobre su día estuvimos hablando como si fuésemos dos amigos trataba de olvidar las palabras que había escuchado y trataba de sonreír.

Después de comer me senté en el living y él me miró y se sentó frente a mí tomó mis manos y trataba de explicarme lo que había escuchado, pero yo simplemente posé mi dedo índice sobre sus labios y lo hice callar.

—Cuando nosotros empezamos fuiste siempre muy claro me dijiste que no querías nada serio, pero sí podían existir los besos, claramente existieron los besos y existió más que eso entre nosotros. Si tú ahora me dices que no estás claro con tu cabeza y no puedes seguir conmigo de esta forma simplemente nos separamos, separémonos como dos personas civilizadas, dos personas que simplemente la pasaron bien porque más allá de todo esto no existe un mayor compromiso.

—Lo siento, no es mi intención herirte, pero realmente te quiero y te quiero mucho. Me duele mucho sentir que nos estamos separando, que nos estamos distanciando.

—Pero creo que es lo mejor, créeme que es mejor que aclares tu cabeza y si en algún momento tú entiendes que me necesitas realmente yo voy a volver a tu lado, pero si tú no me necesitas simplemente seremos conocidos y nada más.

—Por favor no me dejes, la verdad es que no puedo estar sin ti en estos momentos.

—No te voy a dejar, simplemente lo que ahora nosotros tenemos va a pasar a ser una amistad, donde ya no existirán los besos ni las caricias nada de eso, simplemente si tú me necesitas para hablar o quieres salir yo allí estaré para ti.

Él mordió su labio inferior como si estuviese a punto de llorar no dijo nada más y simplemente se fue a la habitación yo quité mis zapatos envolví mi cabeza con mi rodilla la verdad me estaba partiendo el alma estaba en un colapso emocional.

No sé en qué momento me quedé dormido, pero al despertar ya no estaba en el Living, estaba acostado a su lado y él solamente me miraba fijamente. Volteo mi cabeza para no verlo y al tratar de levantarme él me detiene.

—Ya es de día. Lo estaba pensando y no me quiero separar de tu lado. Una vez me dijiste; “El corazón no es de quien lo daño, si no de quien lo está reparando” Por lo que mi corazón es tuyo. Si digo el nombre de el ya me di cuenta de que no tiene ningún significado. Me di cuenta de que si digo tu nombre mi corazón se acelera y sé que en pocos meses eres tú el dueño

—Dame un respiro, necesito estar solo ahora yo y pensar.

Me levanté de la cama y fui al Living a poner mis zapatos, tome mi bolso y me fui. En vez de volver a casa me fui a caminar por la playa, tenía un lío en mi cabeza, me enamoré y jamás pensé sentir este sentimiento. Es un sentimiento que arde por sentir que yo no lo quiero perder.

Caminé una larga distancia, el mar mojaba mis pies, tontamente sonreía porque recordaba como lo conocí y las tantas locuras que hemos hablado en estos meses. Sin darme cuenta llegué a la playa donde conversamos por primera vez y “Lo nuestro comenzó”. Cuando levante la vista él estaba allí mirándome desde su auto.

Lo vi que cerró el auto y camino a donde yo estaba, me volteo y trato de no escuchar a mi corazón que estaba latiendo como loco.

—¿Por qué me seguiste? Quería estar solo.

—Sabes perfectamente que eso no será así, no podemos ser como dos adolescentes escapando de lo que está pasando ahora. Quiero que hablemos y todo se aclare.

—Dame unos días, aún no estoy preparado —respondo evitando su mirada.

—Te quiero mucho y sé que tú también me quieres, ya no perdamos el tiempo, ya te dije que el nombre de el no significa nada en mis labios, pero el tuyo en cambio, acelera mi corazón, ven siéntelo —dice Mew llevando mi mano a su pecho—. ¿Vez? ¿Puedes sentirlo? Es por ti.

—Mi corazón está herido —respondo quitando mi mano.

—Y no te culpo, pero un corazón herido se puede reparar y tú mismo me dijiste “El corazón no es de quien lo rompió, si no de quien lo repara” Por ende mi corazón es tuyo y te prometo que jamás volverá a estar herido, desde hoy en adelante solo te daré felicidad y tanto amor que te dará diabetes.

—Qué romántico, ¿prometes realmente que no me dañaras nuevamente mi corazón?

—¡Lo prometo! Prometo que nunca más tu corazón estará herido.

Sonreí y creo que la vida es muy corta para vivir con las dudas, que nuestra relación dure lo que tenga que durar. Me colgué en su cuello y lo empecé a besar.

—Te quiero Mew.

—Te quiero Gulf.

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