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            -Corazón dulce alma amarga-
                            Autor 김석준
             
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Si eres menor de edad te recomiendo no leer este tipo de escritura. No quiero problemas.
También pido no resubir este contenido escrito a otro lado sin mi consentimiento.
Gracias y mucha suerte
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• No Hay vuelta atrás :)
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• Disfrútalo 7u7
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Narra Rusia 🇷🇺

Note su larga cabellera que podía asegurar que podía cubrir sus lindos y finos ojos. Sin apartar nuestras miradas del uno al otro, era un momento silencioso... Pero romántico, no eran necesarias las palabras... Solo nuestras respiraciones y palpitaciones que nuestros corazones daba gracias a las acciones del otro. Con mucho cuidado tome su cintura atrayendolo un poco más. México no puso resistencia, era más que obvio que ambos necesitábamos de este acercamiento tan lindo.

— pareces estar tranquilo... —Con mis largos dedos se enterraron en su cabello e hice un corto masaje en este mismo lugar, su cabello achocolatado me tenía completamente inoptizado... Era brilloso... Y tan suave...—

México.- estoy tranquilo gracias a ti... Mi hermoso novio me hace sentirme tranquilo—Mi corazón empezó a palpitar desenfrenadamente. El sabía que esas palabras tan hermosas llegaban a tocarme completamente. Pego su oído en mi pecho y solo escuché un largo suspiro— tu corazón suena muy bien... Cómo la música. Bum bum bum

Rei por tal ocurrencia de mi pareja. El era tan inteligente y imaginativo, siempre me sorprendió por su destreza. Y ahora que lo tengo aquí... En mi lado... Siento que México es alguien tan maravilloso... Y asta puedo afirmarlo, el es completamente perfecto y nadie puede reprocharme nada.

México.- ¿Que te parece la playa? Es lindo ¿Cierto? —Sonrei, tome su mano y la entrelace— Rusia. . . ¿Estás bien?

Mire sus ojitos, parecía el mismísimo cielo estrelló, mis mejillas se coloraron con más rapidez. Tome sus mejillas con cuidado y con mucho cuidado roce nuestros labios con mucho cuidado. . . Notando como su nerviosismo creció y la ansiedad de besarnos incrementó su tamaño.

México.- Quiero hacerlo. . . Quiero hacerlo contigo, estamos en el lugar perfecto, en dónde siempre quise hacerlo contigo. . .

— ¿Co-conmigo? —Mis mejillas se coloraron con mucha intensidad, mi novio. . . ¿Siempre espero por mi?— Y-yo. . . También espere por ti~

México.- oh Rusia. . . Esto es tan lindo~ —Tomo mis mejillas y sin más delitacion pego nuestros labios casi como dos pedazos de rompecabezas perfectamente conectadas. Ambos metidos en nuestros mundo compartido.

No pude evitarlo más y empece a meter mi lengua a su boca adentrandolo con mucho cuidado asta encontrarme contra la de el y sin miedo empezamos a pelear y rozar nuestras lenguitas.

Nuestras respiraciones se agitaron con cada movimiento de nuestras lenguas. Esto me estaba calentando demasiado pues sentía leves palpitaciones en la punta de la cabeza. Tome su cintura con cuidado y lo pegue un poco más. Nuestra baba se nos acumulaba entre la lengua que se mezclaban mutuamente, los chasquidos de nuestra saliva era poco notables pues las pequeñas olas chocaban entre si.

Mis manos también empezaron a juguetear con los bordes de su pequeña camisa de flores como los de Hawaii. Con lentitud desabotone esta misma ropa, dejando en descubierto su pecho y torso. Hubo un corto momento que ambos necesitábamos una bocanada de aire, sin poder evitarlo nos separamos lentamente pero aún estando conectados gracias a un fino y largo hilo de saliba, que solo duró unos segundos antes de que se cortará.

— Tu cuerpo es tan lindo. . . —Lami mis pulgares mojandolos de saliba y con lentitud di un pequeño rozamiento entre sus pezones, notando como estos mismos se ponían de un color rosita como el durazno y levemente erectos. . . Era interesante ver la anatomía completa de México— ngh~

Los suspiros y jadeos entrecortados de México parecían ser una clase de intento para no gemir en alto.

— ¿Estás bien? ¿Estás cómodo? —México me miró por unos segundos y asintió mientras cubría una pequeña parte de su rostro con sus brazos— cariño ¿Que haces? .

México.- estoy... Nervioso y-yo... —Vi como su garganta pasaba la saliba con mucha difícultad—

— Puedes decírmelo pequeño. . . —Sonrei aún más intentando le transmitir tranquilidad— ¿Que sucede?

México lentamente se destapó el rostro y note como lentamente tocaba mi pecho, bajando lentamente deteniéndose en algunas ocasiones para tocar mi torso casi por completo. Asta toparse con la cinta de mis shorts.

Mis mejillas rápidamente se calentaron pues sus acciones parecían muy desesperadas al querer abrirme el short.

México.- p-puedo chupartela? —Susurro mientras veía como se levantaba con cuidado de la arena. Y antes de que digan Rusia y México son unos sucios por acercó en la arena en dónde pasan cientos de niños y eso, quiero comentarles que nos están rentando una casa con vista al mar. Es un lugar privado obviamente no creo que un niño se vaya a trepar a una palma para querernos ver.— Rusia, ¿En qué estás pensando? Ponme atención tonto~

Sonreí y le di un corto beso en los labios.

— lo siento, estaba pensando si hacerte el amor en el mar o en la piscina. —Tome con mucho cuidado su cintura pegandolo a mi cuerpo. México tomo la iniciativa de quitarse su camisita acto cortar el beso y empujarme para acostarme en la toalla que me protegía de la arena.— ¿Q-que estás ha-hacien-... Ah~

Dejé caer mi cabeza al sentir la lengua de México mojar y rozarse con mi miembro el cual ya estaba palpitando, pidiendo por una atención inmediata. México sin temor, adentro una pequeña parte del tronco a su boca dejando escuchar la saliba anularse en sus mejillas, en un intento de querer introducir todo, el lo adentro de golpe. Parecía que lo había conseguido pero rápidamente se descarto la idea pues se separó mientras tosia repetidas veces.

— Tranquilo cariño, no es necesario que lo metas todo —Susurre mientras acariciaba sus mejillas esponjosas, México sonrió y asintió tranquilo.—

México.- está muy largo y ancho. . . Precinto que me matará si entra eso por dónde no me da la luz —El sabía que yo no entendía algunas de sus frases. Ushhh, tengo que adaptarme si quiero saber lo que me trata de decir— muy bien sigamos cariño.

Volvió a introducir el miembro a su boca, pero está vez solo se quedó en dónde su poquita pequeña lo dejaba. Mientras que con la otra pitad lo ayudaban sus manos. Aún así seguía siendo la mismísima gloria en todos los aspectos.

— oh Mexico~ —Cerre mis ojos mientras intentaba no mover mi pelvis pero ya se me estaba complicando demasiado pues la excitación y la calentura se me estaban subiendo a la cabeza— Ah! México muevete más rápido porfavor ~

El accedió y se movió más rápido, ocultando así sus dientes para no hacerme daño absoluto. Con cada mirada que me daba, hacia que me pusiera más erecto, en parte era malo ya que se me haría más complicado conseguir el climax pero también es bueno ya que tendría excusa para hacerlo cientos de veces con México. Talvez asta que lo deje sin caminar un mes.

Con mucho cuidado enterré mis dedos en su cabello y lo ayude a moverse más rápido mientras que yo moría de excitación.Asta que sentí como su lengua se enrollaba a mi miembro cosa que obviamente me sorprendió pues yo lo sabía cómo hizo para hacer semejante cosa.

— México... Mgh~ —No pude evitarlo más y lo separe para así tomarlo con cuidado y acostarlo. Rápido me levanté y con una fuerza casi subliminal rompí su ropa dejandolo expuesto.— Ah, México~

Mordí mis labios. Su piel se veía suave siendo seguído por su hermosa anatomía... Me hacía delirar de emoción al saber que mi mas grande sueño era estar con México.

México.- o-oye deja de acerté pendejo y hazlo~ —Su voz parecía desesperada y como no si abrazo sus piernas asta su pecho dejando ver su entrada palpitante— Vamos Rusia, Quiero hacerlo ya~

Su lloriqueo incrementó en gran escala mi calentura. Tenía que calmarme si no lo quería matar de una penetración. Respire hondo y Suspiré. Hacia esto mismo repetidas veces.

Dejé caer un gran hilo de saliba de mi boca sobre el tronco para usarlo como un lubricante. Me acomode entre sus piernas y con mucho cuidado empece a meter solo la punta con mucho cuidado viendo cada expresión de mi bebé. Parecía de dolor, cosa que obviamente me asusté y seguido de eso me dió un pánico que me daban ganas de salir y de mimarlo demasiado como disculpa.

— ¿Te duele? —Pregunte con más nerviosismo, el asintió, iba a sacarlo pero el lo impidió completamente abrazándome con sus piernas— México...

México.- mete más... —Susurro tembloroso mientras que cerraba sus ojitos los cuales ya estaban acumulando lágrimas, me estaba asustando.— Rusia... Besame...

Asentí y lo besé lentamente. Asta que sentí como sus piernas me pegaban más a él haciendo que mi miembro entrara casi por completo. Me separe del beso cuando sentí está precion

México.- AH!! —Gimio alto mientras tenía pequeños y cortos espasmos que le impedían estar quieto— m-mete más... Porfavor, mete más~

Sus súplicas claro que fueron escuchadas y atendidas ya que me adentro aún más asta sentír mi pelvis y su trasero. México ya parecía delirar de placer.

— México e-estas... Bien? —Cuando su mirada se poso sobre mi sentía que me quería comer y morderme el cuello para reclamarme como suyo.— me empezaré a mover. ¿Vale?

El asintió, empece a moverme lento y con cuidado teniendo mucho cuidado de su entrada la cual se volvía más caliente, apretada y mojada a cada movimiento que daba.

México.- muevete mas~

— e-estas seguro? —Susurre sorprendido ¿Cómo es que llegó a adaptarse tan rápido?. Obviamente por la desesperación el me acostó de nuevo subiéndose sobre mi posó sus manos sobre mis hombros y preparo sus piernas para lo que iba a suceder ahora.

Empezó a brincar un poco rápido mientras ambos gemiamos casi al mismo tiempo siendo cubiertos por las cortas olas junto con la música de los vecinos quienes parecía haberle atinado a una que basicamente a nosotros nos prendía más ya que la canción era perfecta para este tipo de situaciones tan... Deliciosas y únicas.

México: te g-gusta haci? —Susurro en mi oído mientras sentía como se aferraba aún más a mis hombros— o-o-oh~

Asentí pues se sentía mi cuerpo tocar las nubes con mis dedos. No pude evitarlo más, con ambas manos tome su pequeña cadera y empece a embestirlo con demasiada rapidez que podía escuchar los choques de pieles al igual de lo mojado que se sentía adentro.

México.- a-a-a-ah!! Rusia!! —Grito, enterrando sus uñitas en mi piel haciendo rasguños grandes en mi espalda u hombros, cosa que no me molestó es más... Me alegro pues era como saber que el estaba muriendo de placer igual que yo.— Eso es Ruru, más fuerte~

— s-si — Me moví con mucho más fuerza haciendo que el choque de pieles se escuchará como nalgadas fuertes y consisas, podría decirse que se escuchaban como las cachetadas— AH! México~

Hice mi cabeza hacia atrás, asta que sentí como México gemia aún más salto, regrese mi mirada hacia el y pude ver esa expresión tan. . . Wow. . .

Sus ojitos estaban levemente cerrados, podría decirse que estaba luchando para no cerrarlos cómo si quiera verme a mi todo el tiempo, junto con pequeñas perlas pasaban por su frente en dónde ya se dejaba mostrar su cabello alborotado y revuelto gracias a mi ya que anterior mente tome su cabello. Sus labios parecían estar inchados, talvez por los besos fogosos que tuvimos.

México.- Ru-Rusia~ — hablo con mucha dificultad, así que intento hablar rápido para que yo pudiera entenderle— es-t-tas...

Asentí mientras sentía mi pelvis ormigear, cada vez más y más. Era raro, también sentí un gran crecimiento y ancha miento en mi miembro, cosa que pareció gustarle a México.

Sentí un golpeteo en la cabeza de mi pene, le di más fuerte y escuché un gemido de México. Parecía que le había dado a algo. Me asusté de nuevo pero ví como su pene salía el semen casi de golpe que asta me lo imaginé como una manguera.

México.- l-lo encontraste~ —Susurro, aún parecía perdido.— Sigue bebe, correte dentro de mi~

Me sonroje al verlo acostarse en mi pecho dispuesto a seguir recibiendo más de mis penetraciones para así buscar mi climax en el.

Apreté mis dedos a su cadera y me seguí moviendo con rapidez escuchando a México lloriquear, mientras que sus manos abría sus nalgas. Tragué duro y como una manguera mi pene dejo salir grandes chorros en la entrada de México, lo pude notar que ya un poco se desbordaba de este mismo.

México.- KYAAAAA!!~ —Me sonroje aún más por su gemido, fue tan adorable~. — A-ah

Ahora había un gran cambio en nuestras respiraciones, ambas estaban más alteradas de antes. También nuestros cuerpos parecían estar bañados en sudor. Además que nuestros cuerpos se sentía temblorosos e inquietos.

México.- R-Recuerdame traer lubricante l-la proxima vez~ —Susurro mientras se dejaba caer sobre mi pecho— y t-tambien un crucifijo.

— ¿Un crucifijo? —El asintió lentamente— ¿Para que bebé?

México.- para que se te quite el demonio que tienes entre las piernas~ — Rei por tal ocurrencia y lo abrace con mucho cuidado.— ay... Ay aiuda, mi pareja me dejó parapléjico~

Rei y besé sus mejillas.

— si sigues así tú pareja te desinflara las nalgas de una nalgada de mano —México me miró asustado con ojos abiertos.—

México.- ay mi Ruru tan dramático, era bromis mi vida —Hablo mientras acariciaba mi cabello. me levanté con cuidado y cargue a México con mucho cuidado.— a dónde iremos?

— adentro, para darte tus nalgadas. — Rei.

México: uy, rico. Digo! Ay ay aiuda~ —Reimos en un unisolo y pegamos nuestras frentes— Te amo mis poste de luz fundido.

— y yo a ti taquito con descuento de cinco por veinte. —Nos besamos con delicadeza y amor. Mucho amor.
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