Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 13.

Al llegar a la mansión sus ojos se agradaron y observó la sala principal con adoración.

Recorrió con la mirada cada centímetro de la habitación, le sonreí y lo dejé que siguiera conociendo los rincones de todo ese cuarto.

Sentí un leve apretón en mi mano y como me daban un jalón. Era Austin que se encontraba sonriéndome con una ternura que derretía sus hermosos ojos verdes.

-Te extrañé.- susurró antes de besarme.

-Y yo a ti. -aseguré sonriéndole, pero mi mente rápido vagó a Tyler- ¿no hay nada nuevo?

-No, lo siento.-dijo y se separó de mi para encarar a Alex que se nos acercaba.-Hola.

-¿Damon? -dijo Alex a Austin.

-No. -sonrió él.

-Tu eres el novio de mi hermana-aseguró Alex sonriéndonos.

Austin asintió y le sonrió extendiendo su mano.

-Es un gusto Alexandro. -saludó mi novio.

-Igual.-dijo Alex

Encontramos un cuarto para él, no muy lejos del mio. Desempacamos y Austin lo llevó a pasear por el prado, yo me recosté un poco en el sofá, cansada de pensar en Tyler y en la próxima muerte de mi hermano.

Escuché entonces una música en la parte de arriba, al momento en que me acerqué supe que era en el cuarto de Damon.

Abrí la puerta y me topé con tres chicas bailando y tomando del whisky de Damon, entré y las observé ebrias a más no poder.

-¿Dónde esta Damon? -pregunté a una chica de pelo castaño.

-Está con Britney -dijo señalando al balcón.

Me dirigí a ese lugar y me topé con el verdadero vampiro que jamás creí que vería.

-¡Damon! -regañé al verlo beber del cuello de una chica rubia que besaba el hombro de él.

Ambos se separaron y él le sonrió en modo de disculpa, ella caminó hasta unirse a las otras chicas que seguían bailando.

-Ahora voy, hermosa.- le dijo Damon.

Miró a la chica y después a mi, parecía molesto, no podía descifrar porque pero enserio parecía enojado.

-¿Qué?-se quejó Damon molesto.

-¿Qué rayos haces?-dije mirando como un rastro de sangre recorría su labio inferior.-¿De dónde salieron ellas?

-Su coche se averió no muy lejos.- aseguró sonriendo.-bueno... no fue por accidente.

-Eso no está bien.-dije regañándolo -¿y saben lo que eres?

-Las hipnotice.- aseguró restándole importancia -me olvidarán en cuanto las deje ir.

Su mirada se ensanchó al verme examinarlo, su ropa estaba arrugada y llena de labial. Su camisa tenía los primeros botones desabrochados dejando ver su pecho al desnudo y su cabello alborotado caía por su frente.

-¿Sólo te diviertes con ellas?-dije curiosa mirándolo con enojo.

-Austin lo hace contigo, ¿Porqué  yo no?-dijo Damon burlón.

Mi furia se encendió y cerré mis puños, le tiré un golpe a la cara pero él lo detuvo.

-¡Eres un idiota!-dije lléndome.

-Soy el malo Mell, que no se te olvide.-dijo cuando yo me iba.

Cuando entré en mi habitación allí estaba Alex observando una foto que tenía con Tyler.

-Espero que algún día me llegues a querer como a él.-dijo sin mirarme.

-Ya lo hago.-aseguré sonriéndole. -te amo, eres mi hermano.

-Me alegra tanto haberte conocido. -dijo mirándome a los ojos.

Se acercó a mi y me abrazó con fuerza, meciéndome con ternura. Entonces Austin apareció y nos miró en silencio sonriendo.

-Su cena está lista.- aseguró Austin tímidamente.

-Me muero por comida que no sea de hospital. -dijo Alex saliendo de la habitación.

-¿Qué tienes?-preguntó Austin curioso.

-Tu hermano, es imposible.-me quejé.

-Dimelo a mi, llevo toda la vida con él.-sonrió sarcástico.

-¿Tu también bebes de personas? -pregunté cautelosa.

-Sólo de animales, no soy muy fuerte por eso, no puedo hipnotizar ni correr tan rápido como él. -se encogió de hombros.

-Te quiero tal y como eres.-aseguré sonriéndole -no eres un monstruo.- afirmé.

-Vuelve a decir eso.-pidió feliz pegándome a él.

-No eres un monstruo -dije cautelosa.

-No, el que me quieres. -dijo sonriéndome.

-Ven aquí. -dije sonriente besándolo.

Ya en la noche, me recosté en mi cama con mi pillama; Austin estaba a mi lado acariciándome y me dejé sumergir en las pesadillas que siempre me amenazaban después de que Tyler se fuera.

Desperté con un cuerpo inmóvil junto a mi, su hermoso rostro parecía tallado en piedra.

-Austin. -lo llamé moviéndolo.-despierta.

No tenia camisa, su cabello negro le caía por la frente tapando su ojo izquierdo; su barbilla descansaba en mi hombro, acerqué mi boca a la suya y lo besé corto en los labios.

-Despierta dormilón.-dije moviéndolo un poco.

-¿Porqué tanto cariño?-se quejó Damon sonriendo.

Abrió los ojos y me di cuenta de su color azul, rápido me alejé de él y lo miré con enojo.

-¿Qué haces en mi cama? ¿Y Austin?- pregunté curiosa.

-Se fue a media noche. -aseguró tallándose los ojos -no soporta el olor de tu sangre.

-¿Y tu que rayos haces aquí? -me quejé.

-Quería disculparme- aseguró Damon molesto- lo siento.

-Largo de aquí.- regañé.

-Auch -dijo ofendido.

-Disculpa denegada.-aseguré sacándolo de mi cuarto.

-Mell. - comenzó recargado en la puerta

-¿Qué?-dije resoplando.

-Te vez adorable cuando despiertas de malas. -se burló.

Cerré la puerta en su cara y me metí a dar una ducha, bajé a desayunar y me topé con Alex tosiendo mientras comía unos huevos y tocino.

Me preocupaba la salud de Alex, cada vez lo veía peor.

Cuando terminó, mi novio lo llevó a conocer la casa, yo por mi parte necesitaba aire fresco y estar sola.

Caminé por el prado y llegué a los establos, quería subirme en un caballo, para estudiar los alrededores y tal vez buscar a Tyler.

Cuando me topé con ellos encontré a Luz y Luna; Black estaba en otro corral comiendo un poco.

Le coloqué al caballo negro la silla de montar y me dispuse a subir en él. Cuando escuché a alguien detrás de mi, era Damon que me miraba burlón.

-¿Qué crees que haces?-dijo sonriéndome.

-Iré a pasear. -dije encogiéndome de hombros, mirando como Damon se recargaba en el corral.

-Sólo lograrás matarte.-me regañó.

-Mejor para ti, ¿no?-dije saltando al lomo de Black.

Conseguí aferrarme a la silla y me acomodé sobre el caballo, le di un leve golpe duro en los costados y éste comenzó a caminar.

Damon apareció frente al caballo y lo miró directo a los ojos, pareció hipnotizar al caballo porque éste regresaba a su lugar.

Entonces Damon me sujetó de la cadera y me bajó del caballo para ponerme en pie, me miró molesto.

-No saldrás de la mansión sin Austin o sin mi. -aseguró mirándome directo a los ojos.

-¡No me hipnotices!-regañé.

-¿Entonces obedecerás?-dijo Damon seriamente.

-No me dirás que hacer.-reclamé.

Lo dejé allí y regresé a la mansión, fui a la sala y me recosté en el sofá. Austin apareció con un tazón de frutas y me sonrió amablemente.

-¿Tienes hambre?-dijo curioso.

-No, gracias- dije besándole la mejilla.-no soporto la actitud de Damon.

-No siempre fue así, él antes siempre sonreía, tocaba el piano, jugaba con los vecinos de otras mansiones...-comenzó Austin - hasta que ella apareció.

-¿Sofi? -dije cautelosa.

-Si, ¿te hablo de ella?-me preguntó y yo asentí- Ella le destrozó el corazón, pero no habla mucho de eso.

-Me imagino. - dije pensando en cuanto debió haberla amado.

-Oye, Alex se fue a dormir.- dijo preocupado.

-¿Empeoró? -dije tratando de controlar mi tono de voz.

-Un poco. - dijo tímido.

-No se que voy a hacer. - dije levantándome para taparme los ojos, sentí como frotaba mi espalda y como suspiraba tiernamente.

Él sabía la condición en la que se encontraba mi hermano.

Esa noche fui a la habitación de Alex, se encontraba recostado tosiendo y secando su sudor con una camisa, al verme sonrió y se sentó para verme mejor.

-Hola, ¿qué haces?-dijo controlando su tos, parecía un fumador en fase terminal.

-¿Cómo te sientes? -lo evadí.

-Bien, mañana ya estaré mejor.- mintió.-ve a descansar.

Tras unos momentos estuve con él, hasta que se quedó completamente dormido.

Regresaba a mi habitación cuando decidí ir por respuestas, entré en el cuarto de Damon, todo estaba oscuro y no había nadie.

Había una cama enorme con sábanas de seda color negras, todo el cuarto parecía inhabitado, recorrí con un dedo la sábana mientras caminaba observando la habitación. Hasta que una risa me sacó de mis pensamientos...

-¿Qué haces aquí? -dijo Damon sonriente.-¿vienes a disculparte?

-No. -comencé molesta -sólo por curiosidad.

-¿Curiosidad sobre mi? -se burló.

-¿Qué pasó con Sofi? -dije cautelosa.

-¿Porqué quieres saber de ella?-preguntó curioso.

-¿Es por ella que ahora eres así!?- me quejé- Austin dice que no lo eras.

-No hablemos de ella, ¿quieres?-me dijo sentándose en su cama.

-Necesitas desahogarte- aseguré.

-No necesito terapia, muchas gracias -dijo riéndose.-llevo décadas con esto y estoy bien.

-Ya lo creo.- dije sarcástica.

-¿Porqué tanto interés? -dijo Damon seductoramente.

-Eres el hermano de mi novio y somos amigos- comencé algo nerviosa.

-¿Amigos? -repitió sonriente.

-Me haz ayudado y te lo agradezco, tal vez pueda devolverte el favor si te ayudo a estar mejor contigo mismo.-aseguré examinando su sonrisa.

-Okey -sonrió Damon pícaramente.- somos amigos.

-Cuentame de Sofi -pedí.

-Ahora no.-comenzó en voz baja.-esperaras hasta que mi hermano vaya de caza.

-¿Porqué?-pregunté curiosa.

-Sólo así hablaré contigo.-me aseguró Damon encogiéndose de hombros.

-Okey -acepté.

-Ahora ve y continúa siendo la niña más neurótica y preocupona que conozco.- susurró sacándome de su habitación no sin antes regalarme una sonrisa picara y divertida por mi enfado.-nos vemos más tarde.

Vaya que era molesto y ahora era mi amigo, ¿Qué acababa de hacer?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro