Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 10

Desperté por el ruido de la lluvia en mi ventana y el rugido de un relámpago que iluminó el cielo gris de la mañana.

Eran las 8 a.m cuando bajé a desayunar aún estando en pillama, bajé las escaleras y pude oler el delicioso desayuno.



-Buenos días.-me saludó Austin sentado en una silla leyendo el periódico.

-Hola. -dije aún algo incómoda por nuestra cercanía de ayer.

Estuvimos en silencio hasta que Tyler entró en la habitación arrastrando los pies.

-Te vez mal.-aseguré preocupada.


Su rostro estaba amarillento, sus ojeras eran profundas y se veía débil.

-Si, gracias por mejorar mi estado de ánimo. -se quejó comiendo.

Cuando terminó de comer se levantó y se fue sin decir nada, me levanté para seguirlo pero miré como Austin tomaba mi mano.

-Se siente mal, sera mejor que lo dejes descansar. -sugirió tímido.

-Si, tal vez.-dije no tan convencida.

Subí a mi cuarto y me metí a bañar, al salir me puse unos jeans de mezclilla y una camisa de color rosa.
Me miré al espejo y cepillé muy bien mi cabello para evitar los horribles nudos.

Encontré en mis cosas una cadena de plata, era muy bonita y delgada. Entonces escuché cómo Austin entró a la habitación, al observarlo lo encontré mirándome apenado.

-¿Podemos hablar?-preguntó algo tímido.

-Claro -aseguré sonriéndole amablemente.

-Quería disculparme. -comenzó Austin entrando.-no debí incomodarte.

-Tranquilo, solo olvidemoslo, somos familia. -le sonreí levemente.

-Esta bien -me devolvió la sonrisa.

-¿Me ayudas a ponerme la cadena?-pregunté después de unos minutos en silencio.

-Claro.-aseguró un poco más alegre.



Se acercó a mi y entonces extendí mi mano para darle la cadena. Cuando la plata tocó la palma de su mano su rostro se deformó en una mueca de dolor, soltó la cadena y la dejo caer al suelo.

Llevó la mano a sus labios y lamió su herida.

-¿Qué sucede?-pregunté alarmada.

-Nada, sólo, me rasguñó -aseguró nervioso.


Retrocedió y salió por la puerta rápido, sin decir nada más.
Me quedé mirando la cadena en el suelo y la examiné buscando algún rastro de algo puntiagudo pero no había nada con lo cual rasguñarse.

Entonces recordé algo que leí  "para destruir a un vampiro, existen diversos materiales para lograr traspasarlo con éxito, como la madera en estacas, plata..."
Si esto era cierto, ahora tenía un arma contra ellos.

Me coloqué el collar y bajé para salir corriendo por la puerta trasera, me dirigí al campo y seguí el camino lleno de lodo y piedras.

Llegué a la cripta familiar Crauly; con la esperanza de que si ellos estaban muertos, su tumba estaría allí.

Bajé las escaleras y tomé una antorcha que estaba encendida a casi apagarse, me acerqué a las tumbas que no había limpiado Tyler la vez que vinimos, limpié la escritura y me arrodillé para leerlo.

" 1897.. a la memoria de Austin Crauly, un gran hijo y estudiante"

" 1897..a la memoria de Damon Crauly, un gran hijo y músico."

Noté que no estaba respirando cuando mi corazón latía fuertemente contra mi pecho. Todo lo que mi hermano había descubierto era cierto, las supersticiones, las leyendas..

Me negaba a creerlo pero, ¿cuántas más pruebas necesitaba?

Tenía que irme de allí, sacar a Tyler de esa casa.

Corrí de nuevo a la mansión y me apresuré a la habitación de mi hermano, subí casi a tropiezos los escalones, pero entonces me topé con algo duro y fuerte que casi me hace caer del impacto.

-Hey, cuidado.-se quejó Damon burlón -¿porqué tanta prisa?

-Yo...-comencé controlando mi respiración- busco a Tyler.

-Estas pálida -sonrió mirándome.-¿que sucede?

-Nada, esque estábamos jugando.-aseguré nerviosa.

-Estas algo grande para jugar a las escondidas, ¿no crees?-dijo riendo bajo- Pero suerte, niña grande.


Se fue caminando y yo rápido me dirigí al cuarto de mi hermano y cerré la puerta tras de mi.

-¡Tyler! -lo llamé - tenías razón, son vampiros.-dije buscándolo en el baño - hay que irnos de aquí.


No estaba en su habitación, así que tenía que buscarlo por todos lados. Cuando abrí la puerta de nuevo allí estaba Damon sonriendome seductoramente.

-Con que ya lo sabes.-dijo examinándome.

-¡¿Dónde esta Tyler?! -exigí saber.

-No te preocupes por él, mejor por ti.-aseguró amenazante.

-¡¿Qué le hiciste?!- le exigí furiosa.

-Él esta bien. -le restó importancia.

-¡Tyler! -grité corriendo por el pasillo -¡Tyler!

Llegué a la estancia y volví a llamarlo, cuando me giré sólo estaba Damon recargado en el sofá mirándome seriamente.

Entonces Austin apareció alarmado y miró a Damon en forma de regañó.

-¿Qué sucede?-me preguntó acercándose.

-Aléjate de mi.-pedí molesta- ¿dónde está Tyler?

-Descansando en la biblioteca, se quedó dormido. -aseguró confundido -¿porqué? ¿Qué pasa?

-Ya lo sabe. -aseguró Damon molesto.

Entonces el rostro de Austin se puso tenso, me miró cauteloso y retrocedió un paso.

-No te haremos daño -aseguró tranquilizador.

-Nos iremos de aquí, ahora.-dije corriendo a la puerta.

-Eso no podrá suceder,hermosa.-dijo Damon apareciendo para bloquearme el paso.

-¡Dejame ir!-le grité.

-No. -dijo fríamente -ahora que sabes la verdad no puedes salir de la mansión.

-¿Van a matarnos?-dije casi en susurro, en uno muy débil.

-No sería una mala idea, ¿Qué dices tu, Austin?-dijo Damon burlón.

-¡Ya déjala! -le regañó Austin molesto, se acercó a mi y me miró cauteloso.- estarás bien.

-No nos hagan nada, porfavor. -pedí débilmente.

-Ambos estarán a salvo. -me aseguró extendiendo su mano para que yo la tomará, tal vez porque creía que me desmayaría.

-¿Cómo creerte?-pregunté riendo nerviosa.

-No les hemos hecho nada.-me sonrió encogiéndose de hombros.

-Ah..y ¿Cuándo bebimos del niño?-dijo Damon sonriente.

-¡¿Le chuparon sangre a Tyler?!-dije molesta mirándolo con enojo.

-No pasará de nuevo.- aseguró Austin apenado.- Sólo es un poco, es para calmar la sed y que su sangre no nos llame tanto.- aseguró Austin tímidamente.

-¡Pues no lo vuelvas a hacer!-dije furiosa.

-Tranquila, estarán a salvo.-aseguró sincero.

-Por ahora.- dijo Damon lléndose.

-¿Cómo lo supiste?-preguntó Austin curioso.

-Por lo del collar, por las tumbas en la cripta.-dije algo ansiosa.

-Por favor.-comenzó tomando mi mano con ternura - no me temas, no te haré nada.


Lo miré a los ojos y supe que decía la verdad, enserio quería que no le tuviera miedo y no lo hacía.

-Necesito acostumbrarme, con tiempo. -aseguré encogiéndome de hombros.

-Todo el que necesites. -me sonrió-Ah y te llegó correo. -aseguró retrocediendo unos pasos -lo dejé en tu cama.

-Gracias. - le sonreí incómoda.

Pasaron las horas y subí a mi habitación, cerré la puesta con llave y fui directo a la ventana para dejar entrar la brisa de lluvia que se avecinaba.

Me senté en la cama y leí los papeles que recibí, nuestra casa en Inglaterra estaba completamente pagada, me habían mandado unas notificaciones varios bancos y ya habían llegado las pruebas de ADN; también había una carta.

"Mell, soy yo, tu padre..
Solo quiero informarte que ya se dónde están viviendo y que pronto los iré a visitar, con amor, papá"

¿Porqué regresaría ahora? Tal vez por dinero, pero no me interesaba.

Dejé los resultados en un buró al lado de mi cama, y lo demás lo guarde en un cajón.

Me acomodé entre las almohadas y tomé una la cual abracé con fuerza, escuché como la ventana se cerraba con fuerza y me levante un poco para notar como el viento con lluvia golpeaba en ella.

Regresé a mi postura pero noté que algo había cambiado, abrí mis ojos y me encontré abrasando el pecho de Damon quien estaba recostado en mi cama, cruzando los brazos tras de su cabeza.

-¿Porqué no abres el sobre?-preguntó sonriente.

Me alejé de él de un brinco y me recuperé del susto, tomando grandes inhalaciones.

-¿Tienes miedo de los resultados?-preguntó sarcástico.

-No.-le dije molesta -¿Cómo entraste?-pregunté.

-Ahora que sabes la verdad, no tengo porque ocultar las apariencias, soy vampiro y puedo hacer lo que quiera. -sonrió cerrando los ojos y acomodándose en mi cama.

Quise tomar el sobre pero me percate de que estaba sobre el estómago de Damon.

-Dame ese sobre. -pedí mirando su gran sonrisa.

-Ven, recuestate conmigo. - dijo aún sin abrir los ojos y estirándose.

Por un momento lo consideré y quise darme una bofetada por hacerlo, era grosero, petulante y por desgracia de mi familia.

-Damon, solo dame ese sobre.-dije acercándome para quitárselo.

Entonces tomó mi mano ,que ahora estaba sobre su abdomen, abrió los ojos y me examinó con una torcida sonrisa.

-Pareces incómoda.-aseguró sonriendo.

-Tu actitud no ayuda mucho.- aseguré sonrojándome al sentir su mano con la mía tocando su cuerpo.

-¿Qué? ¿Prefieres que sea como mi hermanito? -se quejó.

-No, pero tal vez un poco más amigable y cortes. -dije sarcástica.
-¿Otro Austin?- dijo haciendo una mueca.-no lo creo.


Me liberó la mano y tomé el sobre para abrirlo, venían un par de hojas en el; las estiré y comencé a leer:

"El resultado de parentesco entre Mellany Portman Ganberg y Máximus Crauly son... 99.6% negativo: ningún parentesco.

Tyler Portman Ganberg y Máximus Crauly son... 98.3% positivo: parentesco aceptable.

Los resultados de la paciente Mellany Portman Ganberg y Tyler Portman Ganberg son, 89.7% negativos: debil parentesco".

Mis piernas se debilitaron, derrepente me sentí mareada y las manos me temblaron.

Sentí como Damon se enderezaba y me observaba, pero mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, mi cabeza me llenó de recuerdos de la niñez, todos esos momentos con mi madre y tyler...

Él si era un Crauly, pero yo no.
Y al parecer no éramos hermanos.

Me derrumbé cuando mis piernas ya no soportaron más, pero sentí la mano de Damon acercarme a la cama, me sentó en su regazo y me quitó los papeles para darles una pequeña leída.



-No eres una Crauly.-comenzó sonriendo -¡lo sabia!

-¿ Cómo puedes ser así de insensible? -dije levantándome para alejarme de él.

-Te dije desde que llegaste que no eras una de nosotros.- aseguró burlón.

-¡Cállate! -le dije dándole un puñetazo al pecho el cual no le hizo nada.

Salí de allí con mis ojos desbordando lágrimas, me dirigí a la habitación de Tyler dónde él dormía y lo observé descansar; se veía tan tierno, miles de recuerdos resurgieron y no pude más que empezar a llorar a cántaros.

Salí de su habitación después de dejarle un beso en la mejilla y bajé a la cocina; no encontré a nadie en ella, me serví un poco de agua para calmar la sensación de nudos en la garganta, miré el vaso de vidrio... el enojo se apoderó de mi y arrojé el vaso contra la pared.

Miré los fragmentos y me sentí culpable por la mucama que tendría que limpiarlo. Tomé una escoba que estaba ahí y comencé a barrer los trozos de vidrio.

-¿Sabes? Ahora que te veo bien...-comenzó Damon mirándome- Tal vez si encajes en la familia, ya tienes la pinta de bruja de después de todo. -rio bajo.

-¡Eres un idiota!-dije arrojándole la escoba y saliendo de allí.


Tenía que alejarme de ese lugar, tenía que pensar y llorar tranquila. Fui a la biblioteca y tomé un papel y lápiz, le escribí una carta a Tyler:

"Lamento dejarte de esta forma, pero el dolor no me deja hacer otra cosa, estarás bien con Austin, confío en que él te ayudará.

Cuidate mucho mucho y perdoname, todo estará bien... Mell".


Dejé la carta en su habitación y lo miré por última vez antes de la ir de allí corriendo.

Crucé la entrada principal y me dirigí a la carretera sintiendo como mi ropa se mojaba cada vez más con la lluvia.

Mis lágrimas comenzaron a fluir con mayor rapidez y se confundían con las gotas en mi rostro. No me tomaría más de nueve horas en llegar al pueblo y tal vez dormir en un hotel.

Cuando llevaba no mas de quince kilómetros escuché que alguien venía tras de mi, lo reconocí por su atuendo oscuro y chaqueta negra. Su rostro comenzó a mojarse y su cabello a caer en su frente.



-¡Señorita Portman!- me llamó bajo la lluvia- vuelva no tiene que exagerar las cosas.

-¡Dejame en paz, Damon! -pedí molesta.

-Sólo regrese. -dijo siguiendome.



No le dije nada, no quería hablar con él. Seguí caminando y sollozando, sentí como me seguía pero no me importó.



-Va a enfermarse. -aseguró sarcástico.

Pero solo continúe y continúe.

-Se que la hice enojar, pero debe volver.

Sentí como se detenía a mirarme y yo seguí, no podía parar aún y cuando mi ropa se hacía más pesada y mis piernas estaban débiles, lloré más.


-¿Sólo una carta?-me gritó Damon a lo lejos - Eso es de cobardes.


Parecía molesto, pero no me importó.

Caminé y caminé, hasta que ya no pude mas, el dolor y las lágrimas me cegaron y mis piernas se derrumbaron.

Caí de rodillas en la carretera y me quedé llorando por un rato más.



Entonces vi a lo lejos una luz, una luz muy brillante la cual se acercaba rápidamente.




-Okey, levantate de ahí. -dijo Damon a lo lejos.


Pero no lo hice...

-¡Quítate de allí! -me gritaba molesto. -¿Qué no vez que es un maldito camión?




Cerré mis ojos y lloré en silencio, sentí la luz más cerca de mi, pero no podía levantarme.



-¡Aléjate de allí ahora mismo!-gruño a lo lejos.


Escuché un claxon no muy lejano, y suspiré cansada al notar que no tenía fuerzas, me arrollaría el camión.

-¡Señorita Portman! -gritó Damon furioso- ¡Mellany!

Y entonces sentí mi cuerpo suspendido en el aire..

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro