Capítulo 19
Día uno del plan un novio para Saga Pólux efectuado por el matrimonio Wyvern.
El gemelo mayor suspiro con algo de disgusto mientras se acomodaba en la habitación que le había ofrecido su hermano, realmente solo había una disponible ya que contaban con un número de personal generoso y Radamanthys tenía muchas más propiedades, por suerte había acertado en encontrarles ya que a palabras de Kanon en el pasado en sus cartas la mansión de está dirección era su favorita por los hermosos paisajes naturales y al estar tan retirada de Atenas.
Aioros se estaba duchando, el reviso en el clóset y por suerte había ropa de la talla de su gemelo, es decir...su talla, también busco una muda fresca para el castaño y la puso sobre la cama, movió el pie algo ansioso por tener que dormir con el nuevamente, se repetia a si mismo en su mente que estaba muy disgustado pero lo que realmente le molestaba es que eso no era cierto.
—Ya puedes usar la ducha ¡Wow había agua caliente!—Salio el mayor con una toalla en su cintura y sus prendas mojadas en la mano.
A Saga le dio gracia su comentario y notar que sus mejillas estaban sonrojadas por el calor, al parecer no regulo el clima de la calefacción era algo nuevo para el.
—Esta bien gracias, en la cama hay una muda de ropa para que uses ¿Por qué tus prendas gitanas están húmedas?—Pregunto curioso.
—Las lave—Las mostró con orgullo.
—Entiendo...la próxima vez usa una lavadora o lavado, si no sabes usarlo lo haré por ti—El gemelo cayó en cuenta de su comentario¿Próxima vez?
—Gracias eres realmente amable—Le sonrió tan bellamente haciéndolo sentir "disgustado nuevamente"
Se adentro rápidamente a la ducha y duro ahí un buen rato disfrutando internamente el lujo del agua caliente y la gran gama de jabones, extrañaba eso. Por más fuerte que fuera ir de un lado a otro en una excursión tipo campamento no era lo suyo. Se seco y se vistió en el baño ya que no deseaba ser observado por Aioros, era absurdo porque ambos eran hombres pero igual sentía pudor con el.
Al salir se topó con el castaño profundamente dormido en el sillón de la habitación, con pasos sigilosos se acercó y detallo su rostro con fascinación, cejas gruesas oscuras, largas pestañas y rizos castaños, una mandíbula fuerte y nariz recta, un rostro atractivo, sin poder evitarlo enredo un rizo chocolate entre sus dedos haciendo que los ojos verde aguamarina del gitano se abrieran de par en par, el gemelo se levanto de golpe.
—Siento si te desperte, te veías incómodo en ese sillón así que...—Mintio.
El castaño sonrió de lado -Ya veo, que atentó de tu parte pero no te preocupes dormiré aquí.
—¿Que, por qué?—Se dio la vuelta y lo encaro algo angustiado¿Acaso había hecho algo que le molestará? Aioros pareció leer sus pensamientos.
—No me mal entiendas Saga—Tomo sus manos haciendo que se sobresalte y su corazón lata como un loco desbocado —Me encantaría dormir contigo en una cama real pero no quiero presionarte o incomodarte de alguna manera, el día que lo haga será porque tú mismo me lo pidas.
—Como si eso fuera a suceder tonto—Los colores se le subieron al rostro y se apresuró a la cama y apagó la luz, su estupido corazón no dejaba de latir con rapidez y estaba algo enfadado y no entendía porqué...tal vez realmente quería dormir con el castaño pero jamás lo diría—¡Buenas noches!—Grito y se cubrió con la cobija dándole la espalda a Aioros.
El gitano río entre dientes y susurro lo suficientemente audible para que el despierto Pólux le escuchará —Soy optimista y espero que ese día llegué, buenas noches Saga.
De ese modo durmieron en la habitación al gemelo le costó conciliar el sueño...
Día dos del plan: el matrimonio Wyvern despertaba y ya estaban higienizados para empezar un nuevo día, Aioros ya los esperaba en el comedor con una sonrisa.
—¡Buenos días!—Saludo con entusiasmo.
—Buenos días Aioros te ves feliz —El mencionado asintió con entusiasmo —¿Dónde está mi hermano?
—Saga está en la cocina ayudando a las señoritas, le gusta cocinar es muy lindo que quiera hacer algo para nosotros.
Radamanthys alzó la ceja con extrañeza, Kanon era un asco para la cocina tal parece que su gemelo si había heredado dotes culinarios.
Las señoritas entraban al comedor con las bandejas y detrás de ellas el gemelo sostenía un bol ondo con una sonrisa, las bandejas que traían las damas era una gran variedad de frutas, huevos revueltos, tocino, waffles, panes dorados y jugo de naranja todo se veía muy apetitoso pero todos estaban a la expectativa del platillo del gemelo mayor.
—Buenos días a todos—puso el bol aún cubierto en el medio —¡Gracias por su tiempo señoritas!—Las jóvenes se Despidieron encantadas del gemelo que era tan amable y las había ayudado, aunque realmente no sabía mucho y ellas le fueron guiando.
—¡Hermano no sabía que eras bueno cocinando! Ya deseo probar tu platillo —Kanon estaba entusiasmo, Saga estaba radiante y muy feliz de poder hacer algo que le gustará y que Cain jamás hubiera aprobado.
—Muy bien—Levando la tapa y a Kanon se le deformo un poco el rostro era una avena gris que no se veía para nada buena, por supuesto que no haría sentir mal a su hermano pero ¡Que cosa era eso! Radamanthys se lo veía venir, y Aioros solo pensaba en lo lindo y amable que era Saga por ese gesto.
Todos comieron y para último dejaron la avena del terror, el gemelo mayor estaba secretamente ansiando que les gustará ya que se había esforzado mucho, los tres las probaron al mismo tiempo.
Kanon golpeo la mesa y cerro los ojos llorosos por todos los dioses jamás había probado algo tan horrible, pero ver esos ojos expectantes lo hicieron tragar —Que delicia Saga estoy sorprendido.
—Muy bueno—Dijo Radamanthys estoico comiendo, ya tenía algo de experiencia en probar el veneno Pólux.
El gemelo suspiro con alivio y dirigió su mirada a Aioros que degustaba su avena con entusiasmo y hasta se habia servido otro plato —Muchas gracias Saga ¡Eres el mejor!
—¿Que me aconsejas mejorar para la próxima vez Aioros?—Pregunto ya que el castaño era su principal comenzal.
—Mmm tal vez un poco más de leche.
—Lo tomaré en cuenta.
Kanon los miraba sorprendidos ¿Un poco más de leche? ¡Era horrible completamente! Radamanthys en su corazón le dio otro visto bueno a Aioros y a su estómago de hierro, aguantar ese veneno era lo que un verdadero hombre haría por su amado.
Después del curioso desayuno se encaminaron al establo, donde estaban los caballos. Radamanthys pidió ensillar a 4, el gemelo mayor estaba encantado tocando a las majestuosas yeguas desde que tiene uso de razón siempre a estado rodeado de ellas ya que su padre solo lo dejaba competir en carreras y entrenar, Kanon por su parte no era muy aficionado a ellas por lo impuesto que fue, su hobby iba más a los viajes y Radamanthys ahora se encargaba de darle gusto en ello, pero sabía cuánto le gustaban a su hermano.
Arreando cada uno su caballo se dirigieron a los terrenos de la mansión Wyvern que eran espaciosos, unas hermosas praderas verdes para poder montar.
—Los dejamos...tengo bastante tiempo que no hago una carrera con mi esposo ¡Come polvo Radamanthys, Jajaja!—El caballo de Kanon Salió desbocado.
—¡Kanon eso es trampa!—El rubio le siguió dejando una nube de polvo por dónde se fueron.
Saga ni siquiera noto que los dejaron solos en una pradera ya que estaba embelesado acariciando al animal, el gitano le veia con una sonrisa.
—¿Te gustan mucho cierto?—Pregunto acariciando también al suyo.
—Si, me parecen muy nobles y libres, los admiró, también agradezco que se dejen montar sin perder su autonomía.
—Que increíble suena estar sobre uno, yo realmente no se cómo montar —Confeso algo apenado, Saga era deslumbrante en todo y el solo sabía viajar.
—¿Me permites enseñarte?—Pregunto con una sonrisa calma y el castaño a pesar de su temor no se pudo negar a tan amable ofrecimiento.
Saga ayudó a Aioros a subirse al caballo y después el se sentó tras de él para brindarle estabilidad, tomo las manos del moreno entre las suyas para sostener las riendas y le fue explicando como mantenerse firme y dar la orden al caballo y que esté le obedezca, al principio el castaño estaba algo inseguro pero el menor era muy buen maestro, y le tuvo paciencia y logro enseñarle a controlar a su caballo.
—Vaya ya está aterdeciendo me enseñaste durante todo el día y aún así no lo capte muy bien—Menciono algo apenado.
—¿Bromas? ¡Ya montas solo, eres increíble Aioros! Aprendes muy rápido.
—No me des tanto crédito, es todo gracias al maestro.
El gemelo sonrió negando —Me gustaría dar un galope antes de volver ¿No te importa? O deseas venir.
—Para nada ve tranquilo, yo ya no siento mis piernas —Ambos rieron y el gemelo sabía lo dolorido que estaban sus articulaciones al ser la primera vez.
—Bien ya vuelvo—Movio las riendas.
Aioros se sentó en la colina y contempló como el gemelo cabalgaba con el arrebol de la tarde detrás de si, sus ojos aguamarinas no podían dejar de ser testigos de cada detalle, como el largo cabello azul de Saga se mecía con el viento y su sincera sonrisa con cada galope, sintió los ojos húmedos y entre el corazón oprimido pensó.
"Mamá he encontrado a quien amar con todo mi corazón"
Mientras lo observaba todas las palabras de su hermano tomaban sentido, el amor verdadero no necesitaba de adulaciones ni venia en cantidad, siempre creyó estar rodeado de romance entre sus admiradores pero esto era el verdadero amor, Saga ni siquiera le hacía cumplidos o le daba demostraciones físicas como estaba acostumbrado pero no las necesitaba, solo verlo sonreír sinceramente o pasar tiempo con el le llenaba enormemente, esa noche que durmió con el en la misma habitación no tuvo pesadillas después de tantos años, le hacía sentir paz. Verlo riendo era más bello para el que cualquier paisaje onírico que haya conocido con su etnia.
El gemelo regreso y se bajó de su caballo volviéndolo a la realidad.
—Pronto anochecera deberíamos volver...—Dejo de hablar porque Aioros lo estaba mirando con tanta profundidad que le dejo sin palabras.
Sus ojos tan claros lo descolocó, era unos pocos centímetros más alto que el, estaba inmóvil cuando esa mano morena tomo su mejilla y acaricio su cabello con añoranza, realmente jamás había sentido tal afecto de alguien hacía el...tal vez de su hermano pero esto era diferente.
—Tus ojos verdes puros me estremecen pero se que hay algo que te preocupa, quiero conocerte Saga ser tu confidente y apoyo, no voy a descansar hasta tocar tu corazón y quiero que sepas que tienes el mío entre tus manos.
El gemelo ni siquiera le podía responder, el risueño Aioros era un hombre imponente en este momento, su voz tan calante le hizo temblar las piernas, sus palabras tenían tanto sentimiento y el sabía que eran ciertas, esos ojos no mentían.
En este preciso instante su mente estaba llena de pensamientos, pensaba en dejar a su padre y tomar la mano de ese gitano contarle todo su pasado, y su verdad, también quería conocerlo, y a la vez no pensaba en algo en concreto y no sabía cómo canalizar tantos sentimientos, lo único que pudo hacer fue juntar sus labios con anhelo en aquellos prados verdes mientras el sol se ocultaba, con tanta añoranza como si esto fuera lo que necesito por tanto tiempo.
¿Así era el amor? Sentía que se quemaba pero le gustaba.
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Habían pasado varios días desde que emprendió su búsqueda por Camus, nuevamente se adentraba a terreno Heleno, en el trascurso de los últimos días en que no supo nada de él le era imposible descansar o comer apropiadamente, lo único que quería era encontrarlo y pedirle perdón de rodillas de ser necesario, no había rastro de él y lo más coherente era que había vuelto a la alcaldía con su padre.
Así que hacía allá se dirigía, subiría por su balcón como un bandido de ser necesario únicamente para que lo escuchará y poder explicarle el porque de sus actos, esta vez estaría a su lado sin importar nada, era tan inapropiado pero...
"Así debe sentirse amar..."
Iba completamente perdido en sus pensamientos la realidad lo golpeó cuando sintió un dolor insoportable en su hombro.
—¡Ahhh!—Grito con agonía, le habían disparado.
Todo a su alrededor empezó a tornarse borroso, sentía que se estaba desmayando del dolor lo único que recuerda antes de caer inconciente fueron las palabras de las personas a su alrededor.
—Gitano queda usted arrestado por el secuestro del hijo del alcalde. Debe afrontar los cargos.
Y después oscuridad completa.
Gifer1710~
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