Amaneció de una manera diferente,estaba el cielo de un color gris que a la vez reflejaba la tristeza del futuro santo de acuario;quien apenas era un niño.

Este se cambió y su rostro estaba tan apagado como el día. Era deprimente verlo de esa manera. Bajó a la cocina y nuevamente aioros estaba allí.

-Buenos días..camus-saludó sabiendo la importancia de ese día.

-Buenos días,maestro aioros.-respondió sentandose en la mesa sin elevar la mirada,esto acataba la atención del mayor.

-estas listo pequeño? Ya es hora de..

-lo estoy.-interrumpió de manera cortante.

-Bien. Quieres desayunar algo en especial?,no lo se..quizas el yogurt griego que preparé ayer en la mañana.

-esta bien..

El pequeño le respondía tan secamente..que tal parecía se hacía daño así mismo. Su caracter era alejado,y lejano del entendimiento de los demás. Incluso para aioros ver a travez de su mirada no era sencillo.

Esa mañana en los aposentos del gran patriarca. Aioros se ofreció a llevar al pequeño al funeral de sus padres, el patriarca conociendo a su santo mas fiel le otorgó aquella petición sin dudarlo.

El peliverde y el castaño bajaron templos abajo,muchos sabían el obvio sufrimiento del futuro santo de acuario y le daban su pesame, no sabían que por cada abrazo que le brindaban,camus se destruía mas por dentro y aquel nudo en la garganta dolía mucho peor.
Una limosina de la fundación kido los esperaban,no querían lujos para ir a un entierro. Solo para ver a unos seres que ya no estaban mas con él.

El señor Mitsumasa kido se encontraba sentado en el copiloto y vió por primera vez a camus. Aioros saludó respetuoso pero el pequeño se quedó mudo,traía la mirada gacha y su corto fleco le cubría permitiendo camuflar sus pequeños ojos cristalizados.. Estaba aguantando con toda la fuerza posible el no estallar a gritos y quebrantos. No sabía que,pero algo le permitía soportar.

En unos cuantos minutos que parecían eternos por fín la limosina negra se detuvo. A lo lejos se veían demasiadas personas alrededor de flores blancas. Camus giró su mirada a los ataudes que cuatro hombres llevaban en hombros hasta bajarlos al suelo.
Eso no lo soportó,sus ojos se abrieron a la par y una vez sacado el seguro de la puerta corrió hacia donde sus padres iban a ser enterrados.
Lloraba y sus lagrimas caían por la presion del viento en su rostro..estaba frío y olvidó que no debía acercarse demasiado..lo olvidó por completo pero tampoco quería tomar atención a las demás personas.

Aioros quien se encontraba vestido con un traje negro y botines de igual color,se le acercó a pasos anchos hasta alcanzarlo. Lo comprendía aunque él nunca perdió a sus padres de esa forma..era terrible.
Las personas lloraban. Se escuchaban alaridos,gemidos que hacían estremecer el cuerpo de cualquiera presente. Al castaño se le estrujó el corazón al ver tal escena. Camus miraba estatico por entre las personas alrededor.
El cura hizo lo que debía,les dió un entierro digno y se retiró..la gente se fue llendo de poco en poco.
Aioros lo tenía alejado unos cuantos metros..lo suficiente para que nadie lo reconociera una vez que todos se empezaban a retirar.
Cuando ya no hubo nadie mas que las flores blancas quienes daban intensidad al momento. El peliverde explotó,liberó su rabia,su dolor por medio de gritos y lagrimas,se ahogaba repetidas veces por no poder respirar,el pecho le dolía y los ojos le ardían..aioros apartó la mirada entendiendo lo triste que estaba.
Ver llorar a un niño dolía,contagiaba el sufrimiento,por que ese niño podría estar necesitando de atención,de cariño, de amor..de sus padres.
El mayor se arrodillo a su lado y lo abrazó,camus aceptó el abrazo pero al momento se apartó para tirarse de rodillas sobre la tierra humeda.
En su puño tomó un puñado de tierra y la lanzo con todas sus fuerzas al aire..

-¡¡¡PAPAA!!!MAMÁ!!!..porque...¡porque!-gritaba desconsolado,que incluso a aioros se le hizo un nudo en la garganta.

-camus..yo..

-NO! No me diga que lo siente,No me lo diga! Por que yo estoy pasando por esto y no usted! ¡YO PERDÍ A MIS PADRES!..Me duele más a mí que a los demás..!-se levanta con los ojos hinchados y los labios temblorosos hacia las cruces.-¡padre..madre!,es solo el destino quien hizo esto..pero..como me lo decían cada día. ¡Estoy seguro de que me acompañarán aunque no esten frente a mí con vida..pero todos vamos a morir algun día...!-gritó liberandose de la presion que lo carcomía..pero no era suficiente.

-camus..la vida es cruel con todos en todo ambito, nadie se salva de sufrir en esta vida,pero tú camus,Tú junto con las personas que quieras,puedes ser quien cambie esto. Ustedes son la generación futura...-Le limpia las lagrimas en toda su cara y aparta su cabello mojado.-Eres inteligente,y tienes el valor para seguir..no caigas tan bajo como muchos lo han hecho..

-mis padres..ellos..-se limpia sus ojos llorosos con sus mangas y coloca nuevamente su semblante serio y decidido de antes.- está bien...-se levanta mirando a ambas tumbas.-he comprendido aunque soy tan solo un niño,que sufrir es normal,que llorar es deshaogarse,que lamentarse no me va a ayudar.. quiero irme.

Aioros notó la decisión de camus y sabía que hablaría nuevamente,pero no con la voz entrecortada.

-que quieres decirme..

-quiero que me prometa algo..

-que cosa?..-dijo sorprendido por su reacción valerosa.

-si es que alguien llega a ser en algún momento alguien importante en mi vida,quiero que la protejas aunque yo no esté vivo..

-pero si todavía te falta mucho por vivir..aun eres un niño camus.

-no me importa,me lo promete?

-no hace falta que prometa algo como eso camus..

-solo digamelo como un verdadero caballero que es,se que pronto seré caballero de mi respectivo signo,pero eso no significa que tendré una vida perfecta..

-lo prometo..-dijo soltando un suspiro.

-Gracias..-se da la vuelta mirandolo a los ojos y regresa a la limosina a paso lento.

-no me agradescas nada pequeño,soy yo quien debe agradecerte por las cosas que me estas enseñando apenas siendo un niño.

Regresaron al santuario y todo seguía tranquilo. La hora del almuerzo se aproximaba y aioros dejaba el almuerzo para camus ya preparado.

Luego de las una de la tarde tenian que entrenar y camus se adelantó al coliséo.
Llegó temprano pues sus demás compañeros aún no llegaban. Vió un árbol grueso mas allá de la arena y lo estudió por unos momentos.

-eres perfecto para mí..-especuló golpeando a la corteza despacio.-desde ahora practicaré contigo en casos especiales..no deseo hacer amigos..no tiene mucha importancia.

Empezó a golpear con ambos puños el tronco hasta que alguien lo empujó haciendolo caer de espaldas.

-hey!-se quejó una niña con mascara.-no hagas eso!

-y por que no?..

-es un árbol!,tiene vida y tambien un alma,ellos tambien sienten dolor.

-como te llamas?

-no me cambies el tema!,pero de todos modos te lo diré,soy..

-Marin! Marin ven a entrenar,estas en el sector de caballeros varones!

-Ya voy!..bueno niño,ya escuchaste a mi maestra y no hace falta que lo repita,por cierto..saluda a aioria de mi parte..

Camus se levantó sacudiendose su ropa de entrenamiento miestras veía a la niña irse,y recordó que aioros habló que tenia un hermano llamado aioria.
Caminó al centro de la arena y vio al rubio quien caminaba directamente hacia él.

-entrenamos? Ah..y lo siento por lo de tus padres..me acabo de enterar.

-no importa,el ayer es historia aunque deja cocatrices casi imposibles de borrar..ahora continuemos.

-como digas creo que lees mucho para decir algo asi...ahora atácame y yo bloqueo y viceverza. Sorprendeme fideos verdes.

Camus atacó directo al rostro pero milo puso su antebrazo para bloquear el golpe y usó su mano libre para golpearlo en los lados.

-Te mueves rapido..-dijo el rubio estirandose a un lado para evitar un rodillazo.

-tu no lo haces mal..-respondió agachandose apunto de recibir una patada.

-ademas eres veloz..

-solo..son reflejos.. nada mas.

Mientras estos entrenaban aioros los observaba atento,lo hacían muy bien a su parecer,camus alcanzaba la capacidad de milo siendo apenas un principiante y eso dejaba muchas cosas de que hablar.

-Estos chicos,tienen un futuro..-habló seguro de lo que decía.

....
El cabello de camus es verde aguamarina. Pero como es muy larga la palabra lo coloco peliverde..
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