“En la región de Zwart, habita un castillo del que muy poco se ha oído mencionar. Nadie lo conoce con exactitud, los pocos que han dado con él, nunca más se les ha visto en el mundo de los vivos. 

Se cuenta que allí vivió un rey y su esposa, monarcas amados y respetados por todo su pueblo, su ingenio y su corazón los hicieron unos reyes dignos; pero la reina falleció al dar a luz a un heredero. 

El rey se volvió loco al perder a su esposa y culpó a la criatura, quiso deshacerse de ella. La criada real ocultó al niño y lo mantuvo vivo. El rey en su agonía y demencia le dio caza a la pobre mujer, pero parecía que el bosque que rodeaba al reino la protegía para que no fuera encontrada. 

Hasta que un día llegó al reino una mujer, su ropaje era blanco y sedoso y en su frente tenía una estrella, como si de un tatuaje se tratase. La mujer le dijo al rey que podía encontrar a su hijo y a la criada y para lograrlo, a cambio, debía el rey entregarle algo. El hombre sin meditarlo mucho accedió y la mujer en el acto le arrancó el corazón; metió la mano en su pecho y sacó de él el músculo palpitante. Exprimió su jugo en su boca, su ropaje cambió a un color carmín y todo Zwart se oscureció. 

Un humo negro se esparció por toda la región, consumiendo a cada habitante, hasta que no hubo rastro de nadie. La mujer, una vez que se cercioró no quedaba nadie, penetró en el bosque, a lo más profundo de él. Lo hizo sin que le ofreciera resistencia alguna. Encontró al niño en una canasta, la criada muerta a su lado producto de la mordedura de una serpiente. 

La mujer se despojó de sus prendas y cubrió al niño con ellas, con una de sus uñas largas y filosas cortó sus muñecas y dejó que la sangre se derramara sobre la criatura. A medida que el líquido rojo caía, la ropa se oscurecía y se adhería al cuerpo del niño como una segunda piel, hasta que la mujer cayó al suelo, débil, producto de la pérdida de sangre. 

Las hierbas debajo del cuerpo de ambas mujeres se convirtieron en enredaderas que las envolvían, la tierra comenzó a tragárselas hasta desaparecerlas por completo y luego…”

—¿Y luego?

—No lo sé cariño, nadie lo sabe. Muchos comentan que el niño sigue con vida, que se convirtió en un monstruo que habita en la región oscura de Zwart y que devora a todo el que se acerque a ese lugar. 

—Mamá, cuando yo sea grande, me convertiré en un gran guerrero como papá y le daré caza a ese monstruo. 

—¿Y qué harás con él?

—Mmn… lo quiero capturar vivo. 

—¿Para qué?

—Para domarlo. Una bestia domada es un excelente guardaespaldas. 

—Solo tienes cinco años Taehyung, vas a esperar bastante hasta tener la edad suficiente para ser un cazador. 

—¿Cazador?

—Sí mi lobito. Si quieres cazar a la bestia, debes convertirte en un cazador.

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Les dejo el comienzo de la historia. El resto de los capítulos serán estrenados en el 2025. Espero no se los pierdan.