Decepción y familia.

No puede creer que haya hecho esto, en cuanto salió del cuarto empezó a temblar como nunca, su alrededor empieza a congelarse, pronto el ser de nieve hace su aparición y controla la temperatura, había el riesgo de matar a Juunichirou por esto, después de todo ella jamás se vio afectada por las bajas temperaturas, al menos eso es lo que piensa debido a los experimentos a la que la sometieron en el pasado.

Suspira, revisando que tiene algunas llamadas perdidas, sabía que se trataba de Sigma, tan solo borro no tenía intención de contestar, debía seguir con su plan.

Más el celular empezó a sonar de nuevo, debió apagarlo para ya no ser molestada.

Los diez minutos fueron un infierno para ella, se quedó allí en la puerta, no escuchaba nada, cosa que no le preocupo, tan solo pensando que el pobre debe lidiar con el frío.

Pasó el tiempo y al fin abrió la puerta lentamente, el pobre Tanizaki temblaba de frío, incluso se abrazaba a si mismo al menos lo mejor que podía, ella se acercó lentamente, el frío empezó a desaparecer. -Y bien, ¿Estás listo para hablar?.-Debia mostrar confianza en si misma, nada de miedo, ella es que la que manda ahora, debe ser una persona horrible si desea rescatar a Iván.

Juunichirou no decía nada, tan solo se escucha como aún no supera el frío, apretó fuertemente sus puños no debe de sentir lástima, la única familia que tiene son ellos.

No la perderá otra vez.

Se acercó aún más, y vaya sorpresa que se llevó, Juunichirou se abalanzó contra ella, tirándola fuertemente al suelo, no sabe en qué momento consiguió un pedazo de vidrio, este mismo iba hacia su cuello. -. . .-El Tanizaki no decía nada, solo mostraba valentía.

Arrancó la ropa que cubría el cuello de Inés, en ese instante los ojos de él miraron algo sorprendente, que lo hizo parar por un instante, eso fue suficiente para que copo de nieve lo sostuviera fuertemente del cuello, y alzará, Inés recupera el aliento tratando de cubrir aquella cicatriz que quedó debido a usar siempre el collar. -Ah...-Realmente vio su muerte cerca.

Entonces se pregunta, ¿Porque no experimento miedo?, Tan solo le preocupaba no liberar a Iván, pero ella no tembló ni siquiera cuando el filo estuvo tan cerca de ella, cerró sus ojos, y después se levantó. -¿Acaso ellos te obligan a hacer esto?.-

-¿Eh?.-Levanta su mirada, notando que el Tanizaki la ve con lástima.

-No, yo quiero salvar a Iván. -

-¿Que le pasó a tu cuello?... Sabemos que esos tipos son horribles, no dudo que ellos te hayan causado eso...-La habitación se cubrió de un enorme hielo, el agarre en su cuello se hizo cada vez más fuerte.

-¡Él me salvó!... ¡No sabes nada!, El gobierno que tanto proteges me causo esto, me arrebato a mis padres y años de vida.-Grito tan llena de rabia y rencor.

Hasta el piso empezó a congelarse, la piel de Inés se torno de un celeste claro.

"Puedes tomar venganza"

De nuevo esos susurros invaden sus pensamientos. -¡Al fin era tan feliz!, Y después me quedé sola... ¡No dejaré que vuelva a pasar!, ¡Quiero a Iván de vuelta!.-Alzo su mano, y como si se tratara de un títere
Copo de nieve alzó la suya, yendo al rostro de Juunichirou, que vio aterrado a la figura que se movía para hacerle daño, no puede hacer nada este maldito collar lo tiene confinado.

En el rostro gentil de Inés se vio una aterradora sonrisa. -Si ustedes me lo arrebataron, entonces también haré lo mismo...-La sombra detrás suyo también sonríe complacida.

-Lo siento Naomi...-Fue capaz de escuchar ese murmuró lamentable, eso la iluminó un poco, tantos pensamientos horribles fueron desapareciendo, poco a poco fue capaz de reaccionar y darse cuenta de lo que haría.

Cubrió su boca, sin poder creer que ella dijo eso, no quería venganza, solo quería que nadie viva esto... Pero, en el fondo la busca.

Agachó la cabeza, hizo un ademán con la mano, y así copo de nieve lo liberó, Juunichirou miró con sorpresa y algo de miedo a la joven. -Vete...-Dijo. -Tan solo vete.-

-Si necesitas ayuda...-El Tanizaki quería acercarse pero no sabe si será seguro, Inés negó rápidamente.

-Si no quieres regresarme a Iván no quiero tu ayuda...-Chasqueo los dedos, dándole la espada, copo de nieve lo sostendría de nuevo, más este hizo una acción inesperada.

Tomo a Inés también, cubriendo con su cuerpo, y escapando, más ambos humanos no vieron nada fuera de lo ordinario. -¡Espera!.-Le pidió su habilidad que poco caso le hizo.

Entonces antes de irse al fin algo le hizo detenerse, frente a un lugar más alejado, el ser veía algo en los árboles, Inés hizo lo mismo. -¿Que pasa?.-Su querido compañero al fin la soltó.

Frente a unos metros están sus padres, aquellos que la abandonaron. -Hija, hemos venido a por ti.-La madre hablo con tanta dulzura y el padre tiene una mirada llena de arrepentimiento.

-¿Cómo dieron conmigo?.-Pregunto, daba pasos lentos hacia ellos, no había ninguna sonrisa en su rostro pero tampoco rabia o enojo.

-Supimos lo que te paso, realmente te quisimos ayudar, pero no pudimos...-Comento la madre llena de dolor y angustia. -Mi pobre niña, debiste sufrir mucho ¿No?.-Ines ya estaba tan cerca.

Podría abrazarlos, más se quedó quieta, Juunichirou solo observa la escena, pensando en que si se mueve Copo de nieve hará algo en contra suya, después de todo este ser tiene mente propia, eso dedujo.

-¿Siempre me amaron?.-Ella pregunto, los ojos de Inés muestran un poco de brillar, alzando sus manos hacia ellos, quiénes camina para así sujetarla.

-Por supuesto que sí, te entregué a Copo de nieve para que te protegiera.-La mano de su madre se alzó, tocaría su rostro, más el ser de nieve con su gran velocidad tomo a ambos padres con fuerza.

-Tu voz me da asco, tan empalagosa y falsa.-Murmuro una tranquila Inés, viendo a aquellos que la engendraron y después abandonaron. -¿Pensaste que me creería todas esas estúpidas mentiras?, Ya no soy la niña ingenua que dejaron a su suerte en el bosque.-

-¡Somos tus padres, no puedes hacernos esto!... Lo lamentamos de verdad.-

-Mi nombre...-

-¿Eh?.-Ambos mayores están confundidos, aterrados por estar atrapados.

-¿Al menos pensaron en un nombre para mí antes de venir?.-La mirada de la mujer que la parió le dijo todo.

Inés no mostró ningún sentimiento, apartó la mirada, Copo de nieve actuó.

-Ustedes no son mi familia.-Lo son Fyodor y los demás, pensó, llegando la imagen de Iván primero, aún no puede rescatarlo, se siente tan inútil. -¿Quién los contrato?.-La mano de madera de su habilidad empezaba a congelar los pies de ellos, aunque evitando que los pierdan.

-¡Nadie!... Te amamos.-Dio una mirada cómplice a Copo de nieve, de nuevo alzó una de sus manos, les haría un daño terrible si no hablaban.

-¡Detente!.-Una persona ajena se metió en la "discusión" familiar.

Era un aterrado Juunichirou. -No se que te esté pasando exactamente, si son tus padres o no, pero... ¡Tus ojos!, Tu no deberías estar con ellos, tus ojos son diferentes.-Ines quedó sin habla, su corazón latía rápido, siendo lo único que puede escuchar.

La sombra que estaba detrás suyo empezaba a irse, una luz empezaba a quemarla.

-¡Somos iguales somos familia!.-Le respondió Juunichirou, la sombra o lo que queda de ella se aferra a Inés no quiere dejarla ir, aún.

-Se que debió ser muy doloroso perderlos, no puedo entender tu dolor, pero... En cuanto hagas esto ya no habrá vuelta atrás.-El Tanizaki noto que copo de nieve estaba más tranquilo, piensa que se deba a qué Inés al fin reacciona. -Ven con nosotros.-Se acercó a ella, entonces le ofreció su mano.

Inés lo miró confundida, está indecisa, la sombra que aún la rodea se sigue aferrando, aún cuando la luz quiere acabarlo. -. . .-Con miedo fue acercando su mano, más algo ocurrió en ese mismo instante, una fuerte explosión se escuchó, ella cubrió sus oídos, un segundo de descuido le costó un roce de bala en su brazo, copo de nieve reaccionó, soltó a los padres y la protegió. -¡Eres un mentiroso!.-Grito, estaba más decepcionada que molesta, se sentía una verdadera estúpida, casi cae en ese truco barato. -¡Estabas con ellos!.-Refiriendose a sus padres, ya sospechaba de ellos, pero jamás de Juunichirou, realmente una estúpida que casi se deja engañar por un rostro amable.

-¡No soy yo, lo juro!.-Despues de todo el collar lo limitaba.

-Así es, soy yo...-Murmuro alguien detrás de copo de nieve, nada menos que Chuya, una sonrisa confiada se vio, atacaría a Inés.

Más el ser de hielo reaccionó, creando una enorme pared que los separará, gruesa, pero no iba a soportar tanto, de hecho la destruyó en cuestión de segundos, tocaría a copo de nieve, pero fue rápido para evitarlo. -Vamonos.-Conocia a la habilidad del Nakahara, además podía haber más gente con él, no se arriesgará.

Miró por última vez a Juunichirou, recordatorio que no debe de creer en nadie que no sea Fyodor.

La sombra de nuevo se quedó con Inés, abrazando desde atrás.

Así la atrapó por siempre, tan solo podrá liberarse si muere.

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¡Nuevo cap! Cada vez estamos más cerca del final ( ◜‿◝ )♡ pregunta, ¿Shippean a mi oc con un personaje en este fanfic? xDDD