Maratón (3/5)

~ Jimin y Yoongi 18 años ~

¿Qué ocurrió realmente con el pequeño Park Jimin?

Esa fue la pregunta que muchos medios de comunicación se hicieron, el día del accidente, pues supieron que los señores Park, grandes empresarios fallecieron en tan fatídico accidente, pero todos sabían que tenían un pequeño hijo, existían muchas preguntas.

¿El pequeño iba con ellos?

¿Murió también en el accidente?

¿Qué ocurrió con él exactamente, después del accidente?

¿Por tantas preguntas sin respuesta por parte de los medios?

Los Park, al tener una gran fortuna, empresas y ser muy reconocidos, todos se preguntaban, ¿Qué ocurrirá con aquella fortuna?

Pues ciertamente su hijo en aquel entonces solo tenía 10 años, no podía hacerse cargo de las empresas cuando ni siquiera tenía la mayoría de edad, los Park eran solo ellos, no tenían más familia, si, existía un tratamento, donde dejaba claramente que todos sus bienes quedarían en manos de su único hijo.

Sin embargo, jamás esperaron fallecer el día del cumpleaños número 10 de su pequeño, aún si Jimin estuviera vivo, no podía manejarlas y si no lo estaba, ¿Dónde quedaba toda esa fortuna?

Nadie sabía exactamente dónde, pero hasta la actualidad, todos tenían esa duda, ¿Qué sucedió con Park Jimin en aquel accidente?, ¿A nombre de quién quedó toda la fortuna?

Claro que todo era interés por parte del gobierno, los medios, quienes deseaban concler al dueño o dueña de dicha fortuna, existía un abogado que había logrado retener todo ese dinero, siempre a nombre de Jimin. Ahí es donde más surge dicha pregunta.

¿Park Jimin está vivo o muerto?

Kim Namjoon dejó de ver aquel tonto documental, el cual había ganado muchas vistas por las miles de preguntas sin respuesta que existían sobre dicha familia.

Soltó un suspiro y decidió que era momento de regresar a sus labores. Haciendo la misma mecánica rutinaria de día con día.

Observó el cuadro de aquella que una vez fue una linda, alegre y deslumbrante familia, sintió tristeza al recordar todo lo que él mismo presenció de tres personas que jamás le hicieron daño a nadie y sin en bargo, sufrieron uno de los más terribles accidentes, justo en la época de invierno, la cual, curiosamente los tres amaban.

Observó aquella mansión, la cual había cuidado durante largos años de su vida, pero dicha mansión, no tenía vida, justo hace 8 años la tuvo, un pequeño castaño corriendo de arriba abajo, riendo a carcajadas, siendo perseguido por su padre, mientras la señora Park sonreía con deslumbrante felicidad en su corazón y rostro.

Si, los Park eran felices, tenían una mansión, pero no eran amantes de los lujos, pues su propósito era darle la mejor educación con humildad a su pequeño, lo lograron, pero no estuvieron para verlo y  Namjoon tampoco pudo verlo.

Kim Namjoon había sido el mayor domo de la familia Park, desde antes del nacimiento de Jimin, fue amigo del señor Park, los respetaba, era fiel ante sus órdenes, cuidaba a Jimin como si fuera su hijo propio, cuando los Park debían viajar por asuntos de trabajo y no podían llevar a su pequeño con ellos. Namjoon siempre fue ensencial en dicha familia, por esa razón le dolió más que a nadie la perdida de tan amorosas y maravillosas personas.

- Algún día... Esta casa volverá a ver lo mismo que antes...

Dijo antes de cerrar las puertas de la mansión, subió al auto y emprendió caminó, al mismo lugar que iba todos los días, sin falta alguno. En el camino, bajo a la misma floristería de siempre, compró las flores favoritas de la señora Park, entre ellas iban rosas y girasoles amarillos.

La señora Park siempre dijo que las flores amarillas eran un símbolo de amistad, felicidad, optimismo, energía y por esa razón, siempre pensaba que si alguien estaba triste, ese era el mejor regalo que podía obtener. Un ramo de muchas flores amarillas.

Cuando terminó de pagar por dicho ramo, subió al auto y emprendió camino a su destino, donde ya se había dicho, iba día con día, sin falta y siempre cargando un nuevo ramo de rosas amarillas.

Las cuales cuidaba con su vida, pues el creía que incluso ese bello ramo, te daba todas las energías y alegría que necesitaba para seguir adelante.

- Un día más... Un día menos...

Susurró lo mismo de siempre, ante de bajar del vehículo y adentrarse al mismo lugar de siempre, a la misma hora y con el mismo ramo por octavo año consecutivo.

La época de invierno llegó, con ello las mismas ansias de Yoongi, pero con más energía, más entusiasmo, más animado y más feliz que nunca.

Había descubierto que Jimin era quien le daba toda la felicidad que necesitaba día con día, pero eso ocurría con más motivación, cada que la época de invierno, rogaba a Corea.

Salió de su casa, abrigado hasta las orejas, llevaba entre sus brazos una chamarra en color celeste felpudo, con orejitas en la capucha, muy parecido al que años anteriores le había dado a su pequeño copito, este año compro uno igual y nuevo, para darse a su pequeño.

Muy ansioso caminó hasta ya el muy conocido parque frente a su casa, sonrió entusiasmado, limpió un poco la banca que estaba casi cubierta por la nieve en su totalidad. Se sentó sobre ella y espero pasientemente la llegada de su pequeño.

Sin darse cuenta, Yoongi ya tenía ocho años de conocer a su adorado copito, aún si no era diariamente que lo veía, lo veía durante más de un mes en la época de invierno, habían creado miles de recuerdos juntos, recuerdos que jamás serían borrados de sus mentes.

Todavía recuerda el día en que lo vio, desde su ventana, cuando bajo y lo vio de frente por primera vez, aquel pequeño niño, con mejillas abultadas, cuerpo rechoncho pero tierno, su cabello castaño llegaba a casi cubrir por completo sus ojitos, sus labios abultados y rojitos, aquel niño que no tenía ni una pizca de frío cuando lo conoció. Qué con el paso de los años, fue sintiendo más y más el frío invierno, al igual que ambos fueron creciendo y cambiando tanto mental como físicamente.

Se sintió mal al recordar que lo hizo llorar más de una vez y que hasta el momento se arrepentía de haberlo ocasionado, pero qué día con día se prometía ser una mejor persona y conquistar el corazón de su adorado copito, de amarlo más de lo que ya lo hace y jamás, faltarle, pues aún si miles de chicos y chidas se ponían frente a él de manera provocadora, el siempre, los rechazaba, por qué sus ojos y corazón, pertenecia a su adorado copito.

Soltó el aire, para después ver el reloj en su muñeca, notando que aquella esclava seguía intacta en el mismo lugar, esperando verla en la muñeca de su pequeño también. Anticipo la hora, pues solo quedaban segundos para que su Minnie apareciera.

Justo a la hora indicada.... Nada ocurrió, no hubo destello de luz, no hubo brillo.

Ese año... Copito de Nieve no apareció en aquel parque.

Ese año... Yoongi sintió miedo de no volver a verlo.

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¿Qué les pareció este capítulo?

¿Creen que la aparición de Namjonnie cambié algo?

Amigos... Quise llorar a la hora de escribir este capítulo 🥺

¿Les pasa lo mismo al leerla?

¡Nos seguimos leyendo chiquillos!

Besitos ❄️

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